Diario de Sesiones 11, de fecha 14/11/2007
Punto 22

'· 7L/C-0115 Comparecencia del Gobierno, instada por el Grupo Parlamentario Socialista Canario, sobre la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud.'

'La señora vicepresidenta primera (Tavío Ascanio): Pasamos al siguiente punto del orden del día, que es la solicitud de comparecencia, instada por el Grupo Socialista Canario, sobre la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud.'

'Tiene la palabra, en nombre del grupo solicitante, del Grupo de los Socialistas Canarios, la señora Darias.'

'La señora Darias San Sebastián: Muchas gracias, señora presidenta. Señorías, consejera. Buenas tardes-noches, ya casi por la hora en la que nos encontramos.'

'El pasado 26 de octubre, en toda la prensa canaria, aparecía confirmada la noticia de la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud, don Ignacio Abásolo Alessón. Y digo aparecía confirmada, porque en los días previos a esa confirmación los rumores sobre el particular circulaban -hay que decirlo- no solo por los despachos oficiales de su departamento sino también por la mayoría de las gerencias y las áreas de salud, incluso me atrevería a decir que por algunos pasillos de nuestros hospitales.'

'La dimisión del señor Abásolo, número 2 de su consejería, y sin duda alguna uno de los viceconsejeros, si no el más, uno de los más importantes, a tenor del volumen de recursos que maneja el centro que dirigía, es un hecho de suma gravedad que motiva la solicitud del Grupo Parlamentario Socialista para que comparezca la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias y nos explique aquí, en sede parlamentaria, los verdaderos motivos de la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud. Consejera, tiene ahora la posibilidad, por una vez, y ojalá que sirva de precedente, de decir la verdad en esta Cámara, de decir lo que ya se sabe, pero que usted no ha querido decir (Abandona su lugar en la Mesa la señora vicepresidenta primera, Tavío Ascanio. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente segundo, Alemán Santana).'

'Señora Roldós, en el ámbito sanitario la dimisión del señor Abásolo era un secreto a voces, que usted intentó aplacar o frenar, pero que finalmente terminó por estallar, y estalló porque las diferencias resultaron insalvables. En efecto, era a todas luces evidente que las discrepancias entre ustedes se agrandaban día a día. Cuando no era por el modelo de gestión sanitaria, lo era por su modelo beligerante de entender la sanidad como un arma electoral permanente; o por sus imposiciones en los nombramientos de los diferentes equipos directivos sanitarios; o por su exigencia, señora consejera -sí, por su exigencia- de carné como requisito previo para acceder al cargo. También por sus desautorizaciones constantes, por sus ninguneos y, sobre todo, por el incremento espectacular de los conciertos con la sanidad privada.'

'Señora Roldós, resulta significativo que, al cumplir los primeros 100 días de Gobierno, el balance de su gestión consista en un panorama ciertamente desolador. Alguno de los cuales tengo que decir que no son solo méritos suyos sino también méritos heredados, esto es, 24.000 personas en listas de espera quirúrgica; 21.000 en Especializada; pruebas diagnósticas, sin cuantificación actualizada; listas de espera incluso en Atención Primaria; servicios de urgencia colapsados y cerrados los fines de semana, sin previo aviso a los usuarios; pacientes impacientes que, hartos de tanta espera y de tanta deficiencia, deciden salir a la calle para protestar contra este desgobierno. Y para remate de la situación, señora consejera, tenemos una conflictividad laboral de todos los funcionarios sanitarios y no sanitarios nunca visto -hay que decirlo- en Canarias.'

'Por si todo esto resultaba insuficiente o poco, a esta situación crítica de la sanidad en Canarias se une la dimisión del segundo de a bordo de la consejería, abriendo una crisis de imprevisibles consecuencias en el seno del departamento autonómico. Crisis que viene a acrecentar la falta de liderazgo para orientar el sistema sanitario que padecemos los canarios y las canarias desde hace ya más de 12 años.'

'Señorías, ante tanta incertidumbre tengo que decirles que algo sí ha sido, ha resultado ser cierto: si no es por esta comparecencia solicitada por mi grupo parlamentario, la consejera de Sanidad no tenía ninguna voluntad política de tratar en sede parlamentaria la crisis abierta en la consejería y en el Gobierno de Canarias por la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud.'

'Consejera, le corresponde ahora a usted explicar ante esta Cámara las verdaderas razones de la dimisión del señor Abásolo. Esperamos y confiamos en que usted nos dé una versión de lo ocurrido. Esperamos las explicaciones que nos permitan conocer supuestamente el alcance o la dimensión de esta crisis. Le escuchamos, no sin ciertas dudas, pero la escuchamos, señora consejera.'

'El señor vicepresidente segundo (Alemán Santana): Gracias, señora Darias.'

'Por el Gobierno, tiene la palabra la señora consejera.'

'(Ocupa un escaño en la sala la señora vicepresidenta primera, Tavío Ascanio.)'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): Muchísimas gracias, señor presidente. Buenas noches, señoras y señores diputados.'

'Señora portavoz del Gobierno socialista, contestando a su solicitud de comparecencia acerca de la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud, tengo que comunicarle que dicha dimisión se produjo a petición propia, de manera irrevocable y por razones personales, con fecha 23 de octubre de 2007, siendo aceptada por el Consejo de Gobierno inmediatamente siguiente, que fue el del día 30 de octubre, en el que se procedió, en ese mismo día, en ese mismo Consejo, al nombramiento del nuevo director.'

'Muchísimas gracias.'

'El señor vicepresidente segundo (Alemán Santana): Gracias, señora consejera.'

'Por el Grupo Parlamentario Popular, la señora Tavío.'

'La señora Tavío Ascanio: Gracias, señor presidente. Señorías. Señora consejera.'

'Estamos ante un hecho, un hecho natural, la dimisión voluntaria, por motivos personales, de un gran profesional. Un gran profesional que decide abandonar lo que podía pensar que podía haber sido una carrera política y elige su brillante carrera académica.'

'Se produce, desde luego, una distinta inter­pretación de estos hechos. Creo, después intervendrá, pero me da la impresión de que, por parte de Coalición Canaria, se produce un profundo respeto hacia esta decisión personal. Por parte del grupo que represento, desde luego, todo el respeto y por supuesto, puesto que la consejera es mi compañera, se produce la sustitución inmediata, con absoluta transparencia. Y una tercera interpretación, señora consejera, una interpretación fiel al nuevo estilo socialista gamberrista (Se reincorpora a su lugar en la Mesa la señora secretaria segunda, Luego Orol).Y me voy a explicar, y me voy a explicar, señora consejera, porque yo no sé si usted conoce este estilo, y este estilo significa que, ante este hecho, que puede ser normal, cuestionable, pero personal y voluntario, resulta que, bueno, quienes representan hoy la Oposición minoritaria en Canarias ven intrigas, ven sospechas, ven embrollos, ven enredos, ven líos y, ¡claro!, porque "los verdaderos motivos, las verdaderas razones, que si esto ha sido porque usted quiere incrementar...". Miren, yo, de verdad... Que si hay una crisis, que si hay una falta de liderazgo, pero ¿cómo se puede pensar que hay falta de liderazgo en Sanidad viéndola a usted y escuchándola todos los días en este Parlamento?'

'Yo quiero, señora consejera, en nombre del Grupo Parlamentario Popular, decirle que estamos todavía, que solo han pasado cuatro meses desde que usted y de que este nuevo Gobierno han asumido las riendas, que todavía estamos gastándonos los Presupuestos de la Comunidad Autónoma que apoyó el Partido Socialista y ni tan siquiera eso lo respetan. Y a mí me da la impresión que algunos quieren hacer ruido, quieren hacer ruido, porque este Gobierno, el Gobierno de Coalición Canaria y del Partido Popular, han acertado con los dos grandes problemas que han tenido en esta Comunidad y han priorizado en los Presupuestos el resolver estos problemas: uno es la educación y el otro es la sanidad.'

'Yo quiero animarla de corazón, señora consejera, y desde luego desde aquí, ya le digo, no vamos a permitir que ese ruido la desmotive a usted para hacer su trabajo en beneficio de todos los canarios.'

'Muchas gracias.'

'El señor vicepresidente segundo (Alemán Santana): Muchas gracias, señora Tavío.'

'Por el Grupo Parlamentario de Coalición Canaria, don José Izquierdo.'

'El señor Izquierdo Botella: Muchas gracias, señor presidente.'

'Bien. Nos encontramos aquí con una com­parecencia, solicitada por el Grupo Socialista, para explicar la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud. Una persona que fue nombrada al inicio de la legislatura y que tres meses después es cesado por la Junta de Gobierno, a propuesta de la señora consejera, en aplicación del artículo 52 de la Ley de Ordenación Sanitaria, que establece la fórmula. Y, bueno, pues, la verdad es que esto podría ser muy bien una razón para pedir una comparecencia, si esto, pues, hubiera venido acompañado de unos grandes escándalos, de algo muy gordo, pero, bueno, por lo que sabemos, ha sido una solicitud libre, una solicitud responsable, de una persona que voluntariamente decide presentar su renuncia por razones de índole personal y, como no podía ser de otra manera, la consejera tiene que cesarlo, y veo que en el cese se hace mención precisamente a esa petición propia.'

'Entendemos que todo el mundo tiene derecho a tomar las decisiones que estime oportunas en su vida privada y sus decisiones personales son absolutamente libres, amparadas hasta por la propia Constitución, y ni este Parlamento ni nadie puede interferir en esas decisiones de índole personal, puesto que entendemos que esto es algo irrenunciable y sagrado para cualquier persona. Todos tenemos derecho a decidir nuestro futuro libremente. Por eso ni siquiera hemos entrado a considerar las razones por las que esta persona ha tomado esta decisión. Nosotros las aceptamos sean cuales sean sus motivos y, bueno, solo nos queda, pues, desearle lo mejor en su nueva vida profesional fuera del Servicio Canario de la Salud y, por supuesto, desearle toda la suerte del mundo al nuevo director del Servicio Canario de la Salud que, por cierto, fue nombrado el mismo día en que fue cesado el anterior. Por lo tanto, no entendemos que haya habido ninguna crisis de poder, puesto que en todo momento el Servicio Canario de la Salud ha tenido un director.'

'Nosotros entendemos que no es aquí el sitio donde tenemos que tomar ni analizar situaciones particulares de nadie, pero sí lamentamos que el Grupo Socialista de nuevo utilice cualquier excusa para, de una forma abrasiva y contaminante, cas­carle a la sanidad canaria, porque viene siendo ya algo habitual.'

'Por lo tanto, nosotros no tenemos nada más que decir sino respetar profundamente la voluntad de las personas que, voluntariamente, optan por decidir su futuro.'

'Muchas gracias.'

'El señor vicepresidente segundo (Alemán Santana): Muchas gracias, señor Izquierdo.'

'Para consumir su segundo turno, por el Grupo Parlamentario Socialista doña Carolina Darias.'

'(Se reincorpora a su lugar en la Mesa el señor presidente.)'

'La señora Darias San Sebastián: Señor presidente. Señorías. Consejera.'

'Seguramente, la habrá traicionado el sub­consciente, porque en su intervención ha dicho: "la portavoz del Gobierno socialista". Creo que ha sido un lapsus, un error que ha tenido, que, bueno, que evidentemente es normal y lógico que se pueda tener.'

'Señora Tavío, antes de comenzar a contestarle a la consejera, usted me ha acusado de "política gamberrista" y de "hacer ruido". Usted ha pasado de hablar de los centros de salud como tanatorios -y ahí están las cintas grabadas en este Parlamento- a decir lo que acaba de decir, cosa que me parece impropia de una representante política, cuando lo que viene a hacer esta diputada, en nombre de mi Grupo Socialista, es que en esta Cámara se den las explicaciones que tengan que ser oportunas.'

'En cualquier caso, señoría, consejera, yo la he escuchado y, claro, con su contestación tan escueta es evidente que poco se puede hacer y, como usted no lo ha hecho, pues, lo voy a intentar hacer yo. Y comienzo por el principio, señora consejera.'

'Mire, mediante Decreto 220 de 17 de julio de este año, en este caso don Ignacio Abásolo Alessón fue nombrado director del Servicio Canario de la Salud. Durante el acto de toma de posesión, señora consejera, el pasado 20 de julio, usted anuncia que una de las prioridades de actuación de su departamento era la implantación de nuevas fórmulas de gestión y la reforma del Servicio Canario de la Salud y para ello recurre al nombramiento de un profesional de reconocido prestigio, como el señor Abásolo, como premisa previa para obtener de los recursos sanitarios un mayor rendimiento y al mismo tiempo la mejora de la calidad de la sanidad. Son palabras suyas, señora consejera.'

'Usted, evidentemente, al elegir al máximo responsable del Servicio Canario de la Salud, tenía dos opciones: una, designar como venía siendo habitual a alguien con carné militante o, por el contrario, depositar esa responsabilidad en un profesional de prestigio. Usted prefirió la segunda opción y nombró, en este caso, a un doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de La Laguna, máster en Economía de la Salud por la Universidad de York. Y tengo que decirle, consejera -si me escucha-, tengo que decirle, sin que se sorprenda, que acertó. Pero ese acierto inicial suyo he de manifestarle que le ha costado una crisis severa en el seno de su departamento, que se fue fraguando en los primeros momentos de la toma de posesión del nuevo equipo. Así, a principios de agosto comienzan las primeras diferencias a cuenta del escándalo en el Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria. La consejera, haciendo gala de lo que es su estilo habitual, le propuso al entonces gerente, el doctor Afonso, su continuidad en el cargo, eso sí, no sin antes imponerle el nombramiento de su director médico. Esta situación provocó la dimisión en cascada del propio gerente, de la directora de Enfermería, de la directora de Gestión y de tres subdirectores.'

'Comienza, señorías, la primera crisis y el primer pulso entre la consejera y el viceconsejero, comienza el divorcio entre las intenciones manifestadas por la consejera de apostar por la profesionalización del Servicio Canario de la Salud y las verdaderas maneras de actuar de la consejera, pretendiendo imposiciones políticas. El ex gerente era y es ante todo un profesional de la medicina, pero principalmente una persona con convicciones y con una enorme coherencia, con la que usted, señora Roldós, no contaba. Decía en su carta de despedida el ex gerente a los trabajadores del hospital: "algunas veces a uno sólo le queda la coherencia personal entre sus palabras y sus actos y es por eso que determinadas situaciones que pretenden imponerse -que pretenden imponerse- son incompatibles con esa coherencia". Es evidente que para un profesional como el señor Abásolo -no me cabe ninguna duda- este paso atrás en la profesionalización de la gestión del Servicio Canario de la Salud constituyó una primera advertencia de lo que se le venía encima y una peligrosa tendencia que imposibilitaba, cuando menos dificultaba, la necesaria reforma en el sistema sanitario. En palabras del propio Abásolo en un rotativo local, decía: "más financiación sin cambios organizativos no van a dar el fruto requerido; por eso es fundamental contar con los profesionales del sector, a los que queremos incluir en su diseño". Justo lo contrario de lo que pasó en La Candelaria.'

'Pero esto, señorías, no fue la única fricción en la configuración de los equipos directivos sanitarios, si bien -hay que decirlo- no tuvo la repercusión mediática que el de La Candelaria. Así, tuvimos imposiciones en la Gerencia en El Hierro, en Lanzarote y en Fuerteventura; relevos controvertidos en los cargos de las áreas de salud y en las gerencias hospitalarias. En todos los casos el motivo era el mismo: la exigencia de carné militante o cualquier otro motivo se imponía al criterio de la profesionalidad para el desempeño de las responsabilidades. De esta manera también tengo que decir que hubo ninguneo, como en la Gerencia del Complejo Hospitalario Doctor Negrín, donde el viceconsejero no solo mantuvo al gerente sino que había ratificado al equipo directivo tres semanas antes del cese, y eso a pesar de que todo el mundo menos él, y los despachos de la Gerencia, conocían de su cambio a instancias suya, consejera.'

'Todas estas circunstancias, unidas a la im­posibilidad de tomar decisiones, han creado y están creando muy mal ambiente en las áreas de salud y en las gerencias. Nadie se siente cómodo si no puede nombrar a su equipo directivo ni tomar decisiones de manera directa. Y esto es lo que usted ha impuesto con su estilo y su modo de hacer política.'

'La relación entre la consejera y el viceconsejero, en los ámbitos de los nombramientos, se resque­brajaba a medida que se iban produciendo los nombramientos de carné de la consejera, frente al criterio de la profesionalización del director del Servicio Canario de la Salud. El estilo de la señora Roldós no gustaba, no ya solo en el ámbito sanitario, que ya sabemos cómo está, sino en el propio seno del Servicio Canario de la Salud.'

'Pero no fueron las diferencias con los nom­bramientos las únicas discrepancias entre la número 1 y el número 2, la manera de utilizar la sanidad como un arma electoral fue minando la visión profesionalizada de la misma. No parecía encajar en el director del servicio la pretensión de una gestión sanitaria profesionalizada con utilizar ésta como un campo de batalla donde esgrimir las refriegas políticas. La sanidad, consejera, es mal sitio para la campaña y para la bronca con el Ministerio de Sanidad y con el Gobierno de España, de quien usted tanto se le llena la boca, porque quienes lo pagan son los pacientes.'

'Si unimos estas circunstancias al estilo beli­gerante de la consejera y del Gobierno, que ante un conflicto echan gasolina, tenemos un cóctel explosivo que ha terminado por estallar en la sanidad, a tenor de todas las conflictividades que se están desarrollando en todos los sectores sanitarios y no sanitarios del Servicio Canario de la Salud. Las discrepancias comentadas fueron distanciando la confianza y la relación, pero, sin duda alguna, el más que probable detonante de la crisis fue la desviación tan espectacular de recursos hacia la sanidad privada a través de los conciertos.'

'El señor Abásolo, señoría, ha sido el único, frente a tanta concertación sanitaria y tantos recursos privados ...(Ininteligible.), como le gusta decir a la consejera, el único responsable de la consejería que se ha atrevido a apostar públicamente por la sanidad pública, optimizando el rendimiento de nuestros hospitales y dotando a la Atención Primaria de mayor capacidad resolutiva, esto es, dotándolos de mayores recursos humanos, más medios y más formación.'

'Miren, después de analizar los Presupuestos del 2008, de lo que la señora consejera, evidentemente, conoce poco, a tenor de las declaraciones últimas que le hemos escuchado, vemos cómo las inten­ciones manifestadas por el señor Abásolo eran de imposible cumplimiento. Tenemos el incremento espectacular del 20,82 de los conciertos para el próximo año, el decrecimiento en capítulos de Atención Primaria, en torno a un 5,62%, lo cual hacía inviable, hacía inviable, lo que el señor Abásolo pretendía.'

'Señorías, parece que el proceso de asistencia sanitaria concertada iniciado por el anterior Gobierno y potenciado a pasos agigantados por éste, se ha cobrado su primera víctima y ha abierto una crisis en la Consejería de Sanidad de difícil solución. Todas estas son algunas de las circunstancias conocidas que ha tenido que vivir el señor Abásolo en sus escasos tres meses al frente del Servicio Canario de la Salud y que han motivado su dimisión.'

'Consejera, con todos los respetos, una inevitable conclusión: allá donde va deja un rastro de conflictividad y de dimisiones. Ya sabemos de su estilo, de su modo de hacer, de sus imposiciones, de sus descalificaciones. En fin, todo un cúmulo de despropósitos -que la veo que le causan risa- que ha dado lugar a un colosal desbarajuste en la sanidad canaria y que ha dado más que sobradas razones para pedir su dimisión o, como dijo mi compañero Juan Carlos Alemán esta mañana, "mándese a mudar" y, si es en compañía -cómo no-, mucho mejor.'

'Señora Roldós, el director del Servicio Canario de la Salud no le aguantó ni 100 días y lo peor de esto, siendo esto un hecho grave, no es lo peor que nos puede pasar. No, consejera, no es lo peor que nos puede pasar. Lo peor es que ya no le aguantan ni los médicos de familia, no le aguantan ni los especialistas, no le aguanta ni el personal de Enfermería, no le aguantan ni los grupos C, D y E y mucho menos, mucho menos, le aguantan los pacientes impacientes que, hartos de tanta ineficacia, han decidido salir a la calle a reivindicar y a exigir el derecho a una sanidad digna. Miren, no me cabe ninguna duda de que la dimisión del señor Abásolo supone el fracaso del funcionario independiente y el triunfo de la política del carné.'

'Señora consejera, si en los cien primeros días usted ha sido capaz de montar este colosal desbarajuste sanitario, no quiero pensar cómo va a quedar nuestra sanidad, pública especialmente, y ahora más que se ha ido el señor Abásolo, al final del presente mandato, en el caso, digo bien, en el caso, de que usted lo finalice como primera responsable política de la sanidad canaria. Permítame, cuando menos, que al paso que usted lleva, ese trote ligero, cuando menos lo ponga en duda. Esta crisis abierta en su departamento, al que no le han dado ninguna importancia -es un hecho sin más, en cien días se va un viceconsejero y aquí no ha pasado nada y una hace política gamberrista-, es evidente que esta crisis no se ha cerrado. Me temo que no; antes al contrario: estoy convencida de que es la punta del iceberg de lo que nos queda por ver y por padecer por tenerla a usted al frente de esta consejería.'

'Muchas gracias.'

'El señor presidente: Gracias, señora Darias San Sebastián.'

'Señora consejera, tiene la palabra, señora Roldós.'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): Sí, muchísimas gracias, señor presidente. Señoras y señores diputados.'

'Señora Darias, me va a permitir que, en primer lugar, le diga que nunca he visto a nadie con tanta falta de rigor, con tanta falta de preparación, como usted en política. Mire usted, se lo dije en mi primera comparecencia en la Comisión de Sanidad, está usted de meritoria y está haciendo méritos en su partido a costa de los pacientes y de los profesionales sanitarios. Pero, mire usted, usted, su actuación, su forma de actuar en política, con esa falta de conocimiento, de rigor, con esa manifiesta ignorancia, pues, la lleva a usted a decir las bar­baridades que dice continuamente. Mire usted, usted tiene una manera de hacer política basada en la especulación, en el rumor, en la fabulación, en una imaginación desbordada, pero que desde luego no tiene ningún rigor.'

'Y usted me decía que dijera la verdad. Mire usted, si yo por algo me caracterizo es por decir la verdad hasta cuando no me conviene, pero siempre digo la verdad. Creo que usted no puede decir lo mismo y se lo demostraré enseguida. Mire usted, en primer lugar, quisiera demostrar mi más absoluto respeto a las decisiones personales. Y yo no voy a entrar, por respeto, a valorar los motivos personales de nadie y menos de don Ignacio Abásolo, un magnífico profesional, una persona a la que tengo en una gran estima, tanto como que lo puse de número 2 de mi departamento, y a quien quiero aprovechar hoy aquí para agradecerle los servicios prestados y la actitud con la que se comportó. Porque el señor Abásolo, pese a que presente esa dimisión el día 23 de octubre, permanece en la dirección del Servicio Canario de la Salud hasta que se produce su sustitución, de tal forma que en ningún momento el servicio queda sin dirección. Esa supuesta crisis virtual de la que usted habla, la que usted desearía que hubiera, pues, mire usted, yo le digo que no hay ninguna crisis y que ustedes, usted, cuando no hay crisis, se la inventan. Porque ha llegado usted a decir tal cúmulo de despropósitos que yo, si me lo permite, se los voy a empezar a rebatir.'

'Dice usted que el señor Abásolo no permanece más que 100 días porque no tenía carné del Partido Popular. Pues, mire, le digo que el señor Martinón, que es su sustituto, tampoco lo tiene y que el sustituto del señor Martinón, el señor Máximo Bautista, tampoco lo tiene. ¿Sabe usted qué pasa, señora Darias? Que usted proyecta sus propias frustraciones y su propio sectarismo en las actuaciones de los demás. Y, mire usted, afortunadamente no todos somos como usted, afortunadamente.'

'Y le digo más. Mire usted, efectivamente, yo he apostado, y sigo apostando, por un determinado perfil académico. Efectivamente, Ignacio Abásolo es un doctor en Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de La Laguna, máster en Economía de la Salud por la Universidad de York, en el Reino Unido, y desde luego un magnífico profesional. Pero, mire usted, don Guillermo Martinón, el actual director, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de La Laguna también, máster en Marketing y Dirección Comercial y técnico de Comercio Exterior. Y además, mire usted, no ha tenido ni que ponerse al día, porque es que lleva quince años en la casa, y lleva quince años en el Servicio Canario de la Salud, primero como responsable del Servicio de Gestión Económica del Hospital Materno-Infantil desde el año 90; luego como jefe de Servicio de Contratación y Aprovisionamiento del complejo Materno-Insular; y, finalmente, como director de Gestión Económico-Administrativa del Complejo Hospitalario Materno-Insular y después como director de Recursos Económicos.'

'Pero, mire usted, es que usted me acusa a mí de algo que realmente resulta un poco patético. Mire usted, ¿a mí me dice usted, a mí me va a hablar usted de defensa de la sanidad pública cuando voy a cumplir nueve trienios al servicio de la Administración pública? Que pese a que tengo una especialidad médica, que podría haberme instalado, legítimamente, de manera privada, y además haberlo compatibilizado, y nunca lo he hecho, mire usted, ¿a mí me viene usted a dar clases de sanidad pública?, ¿a mí me viene usted a dar clases de sanidad pública?'

'Pero, mire, yo le voy a decir algo más. Yo le voy a decir que nosotros seguimos empeñados en esos criterios que, de acuerdo conmigo, el señor Abásolo hizo públicos, que son obtener la máxima salud de los canarios con los recursos públicos disponibles, mantener la equidad en el acceso al sistema sanitario y seguir velando por la sostenibilidad financiera del sistema sanitario público.'

'Pero me va a permitir, señora Darias, que yo ponga de manifiesto su comportamiento. Mire usted, el pasado día 5 de noviembre -creo que conoce este documento, porque creo que es suyo-, en la presentación por parte de esta consejera de los Presupuestos de esta Comunidad Autónoma, durante la comparecencia usted reparte este panfleto. Y le llamo panfleto, le llamo panfleto porque no es más que eso, y le digo -tiene el logotipo del Partido Socialista Canario-, y dice: "su portavoz de Sanidad, Carolina Darias, resalta el desmesurado incremento de los conciertos con la sanidad privada de las islas, que sitúa en un incremento de 74,6 millones de euros". Primera mentira. Señora Darias, su desconocimiento y su radicalidad la llevan a esto. Y dice además que este Presupuesto responde a los clientes del Partido Popular y Coalición Canaria y, por ende, a las expectativas de la sanidad privada. Y dice usted aquí que la Dirección de Área de Tenerife aumenta 54,6 millones de euros, y además lo escenifica con un diagrama de barras así (Mientras muestra un documento a la Cámara), para revivir un pleito insular inexistente que solamente existe en su malintencionada actitud. Esto que usted presenta es la segunda mentira, y le voy a explicar por qué. Su ignorancia y su radicalidad la llevan a cometer los errores siguientes. Mire usted, de esos 54 millones de euros que usted dice, que se los coloca en la Dirección de Área de Tenerife, ¿sabe usted que 35.346.529 euros corresponden al incremento para este año de la financiación del Hospital Universitario de Tenerife, hospital público de esta Comunidad Autónoma desde hace décadas?, ¿lo sabe usted? ¿No, verdad?'

'Pues le digo algo más: por lo tanto, a ese crecimiento que usted pone para Tenerife con respecto a Gran Canaria, tiene usted que quitarle los 218 millones de euros del Hospital Universitario de Tenerife.'

'Pero es más, quien le hace los papeles se los hace tan mal como que, por ejemplo, en este otro gráfico, señora Darias, resulta que aquí, en el capítulo VII, se come un cero, se come un cero, y en vez de 2.488.000, resulta que son 24 millones, señora Darias, y usted dice que es que hay una disminución, un decremento de un 90%.'

'Pero es más, señora Darias, usted con su radicalismo llega a decir cosas como, por ejemplo -y está en todos los periódicos y subrayado, además entrecomillado como declaraciones suyas en todos los teletipos-, y usted me está dando la oportunidad de desenmascararla hoy, de que esta consejería dedica a gastos de representación el 35% de su presupuesto. Y le traigo... sí, se ríe usted (Ante los gestos de la señora Darias San Sebastián desde su escaño) porque la verdad es que es para reírse, porque está en todos los periódicos y usted, que lo dijo porque está entrecomillado, usted no lo ha desmentido, no lo ha desmentido. ¿Sabe por qué? Porque, mire usted, esta consejería tiene 2.700 millones de euros y ya quisiera yo tener el 35% de gasto de representación, porque supondría que tendría más de 900 millones de euros. Es que esto... Me decía usted que yo antes me reía; es que, mire usted, me da la risa. Mire usted, esta consejería tiene 18.000 euros de gastos de representación, 3 millones de las antiguas pesetas. Desde luego, bastante menos. ¡Hombre!, yo no le he sacado el porcentaje con respecto a los 2.700 millones de euros porque mi calculadora me da error, del cero coma cero, cero, cero, del porcentaje. Pero, mire usted, bastante menos que su compañera, presidenta del Cabildo de Lanzarote, que tiene 30.000 euros de gastos de representación, con un montante de presupuesto de 150 millones de euros. Desde luego el peso...'

'El señor presidente: Sí, señora consejera, le quiero pedir, por favor, que se atenga al asunto, no...'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): Sí, claro, muchísimas gracias, señor presidente, yo me atengo al asunto... (Rumores en la sala.)'

'El señor presidente: ¡Silencio!'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): ...yo me atengo al asunto, señor presidente...'

'El señor presidente: Silencio, por favor, silencio, por favor. Sí, la comparecencia, evidentemente, es sobre el cese del director del Servicio Canario y se está hablando de presupuestos.'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): Sí, señor presidente.'

'A mí, la señora Darias ha comenzado su intervención diciéndome que diga la verdad, ¡y esta es la verdad! Esta es la verdad oficial, colgada en la página web del Gobierno de Canarias en el anteproyecto de Ley de Presupuestos de esta Comunidad Autónoma y aquí quien único miente se llama doña Carolina Darias, del Partido Socialista Canario. Es más, usted, que todos los días... Porque, mire usted, yo le contesto en sede parlamentaria, que es donde le tengo que contestar, y usted todos los días siembra mentiras, que algunos le compran, que algunos le compran, cuando usted dice que yo estoy privatizando la sanidad. Mire usted, el porcentaje del presupuesto de esta Consejería de Sanidad destinado a la concertación con la sanidad privada es el 6,9%, 6,9, no el 20,8, y el incremento con respecto al 2007 es un incremento del 8% frente al 11,7 que crece esta consejería (Se enciende la luz roja en la tribuna de oradores).'

'Pero, mire usted, me va a permitir, señora Darias, que cuando usted habla de privatizaciones e intenta alentar a los profesionales sanitarios y a los pacientes, que es lo peor, le tengo que recordar una y mil veces la ley, la Ley General de Sanidad, aprobada por un Gobierno socialista, y la Ley de Ordenación Sanitaria de Canarias, que dice que la financiación es pública y la prestación de servicios mixta, pública, complementaria con la privada. Mire usted, señora Darias, los pacientes que son atendidos en la sanidad privada concertada, con fondos públicos, desde luego con fondos bastante más de este Gobierno de Canarias que no los que nos vienen del Estado, pues, resulta que no pagan ni un euro.'

'Mire usted, señora Darias, ya está bien de que este Grupo Socialista me haga perder el tiempo, nos haga perder el tiempo, con tanta mentira, con tanta mentira. Mentira demostrada, que se la puedo demostrar una y mil veces. Porque, mire usted, tenemos mucho trabajo que hacer para atender...'

'El señor presidente: Señora consejera, por favor...'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): ...a los pacientes.'

'El señor presidente: ...vaya terminando, por favor.'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero): Sí, señor presidente, si me lo permite su generosidad, en 30 segundos yo termino, incluso en menos.'

'Yo le quiero decir que ya está bien, ya está bien de esa falta de rigor. Mire usted, señora Darias, cuando alguien llega al desempeño de una actividad política y en este caso a usted le ha tocado ser la portavoz de Sanidad porque para su grupo nunca la sanidad ha tenido importancia y, por lo tanto, no tienen gente que sepa de esto. Pues resulta que usted, que no sabe nada de sanidad, porque no tiene ninguna trayectoria en materia sanitaria, yo pensé, pensé que al menos sabría algo de Presupuestos, porque creo que usted es funcionaria y, además, creo que estaba en la Oficina Presupuestaria, pero ya nos ha demostrado que ni siquiera sabe de Presupuestos; o, lo que es peor, que sí sabe pero miente y manipula. Y, mire usted, a mí en el camino de la mentira, de la manipulación, no, porque, como le decía antes, afortunadamente entre usted y yo hay una distancia enorme, y esa distancia enorme se llama rigor, se llama verdad y se llama honestidad.'

'Muchísimas gracias.'

'(Aplausos.)'

'(La señora Darias San Sebastián solicita la palabra.)'

'El señor presidente: Gracias, señora consejera.'

'Sí, señora Darias, ¿en qué concepto?'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Sí, señor presidente.'

'Es evidente que he sido aludida personalmente, he sido aludida... (Rumores en la sala.)'

'El señor presidente: ¡Calma, calma!'

'Por favor, señora Darias...'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): ¿Puedo seguir? ¿Puedo seguir, señor presidente? No he terminado.'

'El señor presidente: Creo que... ¡No, no!...'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Quiero plantearle la cuestión.'

'El señor presidente: Usted dice que ha sido aludida.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Evidentemente.'

'El señor presidente: Evidentemente, evidentemente, pero no...'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): He sido contradicha.'

'El señor presidente: Pero no entiendo yo, no entiendo que haya habido alusiones fuera de lo que es un debate.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Sí, lo único que quería pedirle, señor presidente...'

'El señor presidente: No, alusiones... Señora Darias, yo se lo agradezco, pero alusiones aquí habrá permanentemente, a personas que están presentes, a personas que están fuera y demás. Yo siento no haber estado y por eso le pido disculpas, también a la señora consejera, y les agradezco a los portavoces, que se lo he pedido en numerosas ocasiones, que contribuyan a la buena marcha del debate, en el sentido -sí, un momentito, señora Darias-, en el sentido de que tuve que requerir al orden a la señora consejera en las intervenciones. Yo no había oído la de la señora Darias, pero evidentemente eso no quiere decir que porque alguien se la salte, nos la saltemos todos. Entonces, yo entiendo, entiendo, que la obligación de la Presidencia está en que cuando alguien se sale de lo que es el Reglamento establecido, se lo tiene que decir, y hay que entenderlo así. Y lo agradezco a sus señorías.'

'Señora Darias, yo le agradezco de verdad que no reabramos el debate, pues le tendría que volverle a dar la palabra a la señora consejera con toda seguridad. Yo sé que ha sido aludida, pero usted también ha aludido a ella, en el tiempo que yo estuve aquí, y entonces no procede, no procede. Francamente no procede.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Presidente...'

'El señor presidente: Francamente no procede.'

'Y si quiere, mire, si yo le doy...'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Si es que no me ha dejado ni plantearlo, señor presidente.'

'El señor presidente: No. Usted me ha dicho alusiones, aludida.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Señor presidente, cuando empecé a hablar, empezaron a armar algarabía...'

'El señor presidente: Tiene un minuto, señora Darias, y después se lo daré a la consejera.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Muchas gracias, señor presidente. Muchas gracias, señor presidente.'

'Solo una cuestión...'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Yo también he pedido la palabra por cuestión de orden, presidente. Si usted me lo permite, antes de dar la palabra a la señora diputada...'

'El señor presidente: Sí.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Estoy en el uso de la palabra, quiero recordar.'

'El señor presidente: Desde luego les agradezco que contribuyamos al orden del debate. Yo le podré dar la palabra, yo le doy la palabra luego al final.'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Es que así no se contribuye, con todos mis respetos, presidente, al orden en esta casa.'

'El señor presidente: Esa es su opinión, señoría.'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Es mi opinión y me gustaría, si me... (Sin micrófono.)'

'El señor presidente: Evidentemente. El presidente de la Cámara soy yo, se lo tengo que recordar, y lo lamento tener que recordárselo.'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Soy la portavoz...'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): ¿Puedo hablar, señor presidente?'

'El señor presidente: Un minuto, señoría.'

'La señora Darias San Sebastián (Desde su escaño): Muchas gracias, señor presidente.'

'Señora consejera, solo una cuestión. De rigor presupuestario y de Presupuestos hablamos cuan­do usted quiera. Solo le digo una cosa: los Presupuestos se comparan Presupuesto inicial 2007 con Presupuesto inicial de 2008. Vayamos a la partida 226.01, lo que usted tiene en el 2007 y lo que tiene en el 2008: hay un incremento de un 35%. Ese es el incremento al que yo me he referido. No diga que yo falto a la verdad, porque no le he faltado en ningún momento. Cosa que usted permanentemente minusvalora e insulta a esta diputada. Pero quiero recordarle, señoría, que usted no está insultando a mi persona sino a la representación que una ostenta, que para usted evidentemente debe ser muy poca.'

'Muchas gracias.'

'El señor presidente: Señora Darias, después de oírla, sinceramente, no procedía la intervención. No obstante, señora consejera, tiene usted la palabra también para contestar.'

'La señora consejera de Sanidad (Roldós Caballero) (Desde su escaño): Sí, muchísimas gracias, señor presidente.'

'Mire usted, señora Darias, se lo vuelvo a mostrar una y otra vez: sus papeles. Son sus papeles, no son míos, no son míos (Mientras muestra un documento a la Cámara). Mire usted, las mentiras tienen las patas muy cortas, la falta de rigor es muy evidenciable. ¿Sabe usted qué le pasa? Se lo digo una y otra vez: ante el vacío que hay en su grupo, en una zona de su grupo, usted está haciendo méritos. Y le vuelvo a repetir que me parece poco honesto que usted siga haciendo méritos a costa de los pacientes canarios y de los profesionales canarios.'

'Muchísimas gracias.'

'El señor presidente: Muchas gracias, señora consejera.'

'Espero, señorías, que entendamos que estamos en un parlamento y que vamos a ser permanentemente aludidos y contradichos, y entonces no podemos estar pidiendo la palabra. No obstante, como digo, como estamos todos en rodaje, pues, entiende la Presidencia que hay que dar la oportunidad de que todos vayamos conociendo la dinámica real del Parlamento.'

'Vamos a continuar con el Pleno y vamos a ver la primera proposición no de ley, dado que no tiene enmiendas, dado que no tiene enmiendas, porque es corta, y mañana el Pleno puede estar un poco ajustado. ¿Les parece, señorías? Pues muy bien.'

'Proposición no de ley del Grupo Parlamentario Socialista Canario, sobre creación del Observatorio de la Juventud... (Rumores en la sala).'

'¡Silencio, por favor!'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Presidente...'

'El señor presidente: Perdón, perdón, dígame, sí, dígame.'

'La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Quería que se procediese a un receso y que nos acercáramos los portavoces, porque al menos quien le habla es desconocedora de que se había hablado de que siguiera el debate una vez finalizadas las comparecencias y me gustaría acercarnos a hablar con usted.'

'El señor presidente: Encantado, no hay inconveniente.'

'Por favor, no se muevan de los escaños. Se ruega a los portavoces y alguien en representación, un representante del Gobierno, si quiere asistir.'

'(Los señores portavoces atienden el requerimiento de la Presidencia.) (Pausa.)'