Diario de Sesiones 6, de fecha 20/9/2011
Punto 18

· 8L/C-0015 Comparecencia del Gobierno, instada por el Grupo Parlamentario Nacionalista Canario (CC-PNC-CCN), sobre objetivos fijados por la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad para disminuir el fracaso escolar en los centros de enseñanza no universitarios.

El señor presidente: Concluido el punto del orden del día de las preguntas, como habíamos anunciado, pasamos a las comparecencias. Hay la comparecencia 15 y la 51, creo, que entiende esta presidencia que... No versan sobre la misma materia. En la Junta de Portavoces... Perdonen un momento (Pausa).

Bueno, de acuerdo, vamos a separarlas. Bien, de acuerdo. Vamos a ver la 15, efectivamente. Versan sobre, no exactamente sobre la misma materia, aunque es sobre educación también.

Comparecencia del Gobierno, instada por el Grupo Nacionalista Canario, sobre objetivos fijados por la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad para disminuir el fracaso escolar en los centros de enseñanza no universitarios.

Tiene la palabra la señora Zamora Rodríguez.

(El señor González Santiago solicita intervenir.)

Sí, don Ignacio, dígame. Sí, señor González, a ver si logramos que funcione el sistema. Manténgalo, manténgalo pulsado, a ver si los servicios de la Cámara logran... Ahora.

El señor González Santiago (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: Bueno, a mí me da, a mí me da aquí...

El señor González Santiago (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: No, igual no. Ya está, ya está. Bueno, siga aquí sin...

Yo creo que es el sistema, o sea, no son los micrófonos, y el sistema se ve que...

Sí, dígame, dígame.

El señor González Santiago (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.) plantear el reagruparlas o acumularlas. Y la siguiente, que era sobre la Ley de la Dependencia, la Ley de Promoción de la Autonomía Personal, es la 19 con la otra, la 45. Estamos hablando de las comparecencias.

(La señora Navarro de Paz solicita la palabra.)

El señor presidente: Calma, calma.

Sí, doña María Australia, dígame, dígame.

La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Gracias, presidente.

Hombre, no estamos de acuerdo con... Entiendo que está ejerciendo como portavoz de Coalición Canaria el compañero que ha intervenido, puesto que nosotros no hemos acordado esa acumulación con anterioridad, amén de que una de las comparecencias está referida al ámbito de nuestro país, de España, y la otra está referida a la Unión Europea, a los objetivos marcados por la Unión Europea. Por lo tanto, no habíamos hablado de esa posibilidad. Nos oponemos, porque no se había tratado.

El señor presidente: Sí, en cualquier caso esa es una decisión que le corresponde al presidente, oídos los portavoces, y efectivamente los habíamos oído, y se acumulan la 19 y la 45, pero estas otras dos no. ¿De acuerdo? (Asentimiento.)

Adelante, doña Marisa.

El señor Rodríguez Rodríguez (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: En la Junta de Portavoces los oí a todos y estamos aplicando aquí lo que oímos, lo que yo oí a los portavoces en la Junta de Portavoces.

El señor Rodríguez Rodríguez (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: ¿Que no se acumulan?

El señor Rodríguez Rodríguez (Desde su escaño): ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: No. Lo que dije es que esa es una facultad del presidente, pero el presidente debe escuchar a los portavoces, lógicamente. Me gusta llevarme muy bien con los portavoces y con las portavozas.

Bien. Vamos a recuperar la dinámica del Pleno.

Doña Marisa Zamora Rodríguez.

La señora Zamora Rodríguez: ...(Sin micrófono.)

El señor presidente: Cinco, cinco (Pausa).

Bueno, pues, estamos ahora también... Aquí habrá que darle algún premio a alguien, porque...

Vamos a ver si los servicios de la Cámara, que me escuchan por el sistema interno, hacen el favor de conectar el micrófono de oradores, de la tribuna de oradores.

La señora Zamora Rodríguez: Sí, pero no, no tiene lo del tiempo...

El señor presidente: En la pantalla me da que está funcionando perfectamente, pero yo...

La señora Zamora Rodríguez: Yo creo que funciona, pero los tiempos no los tengo yo aquí.

El señor presidente: No, el tiempo hasta que yo no lo ponga no sale. Por el tiempo no se preocupe. No, no, no, hasta que usted no empiece a hablar no le pongo el tiempo.

La señora Zamora Rodríguez: Buenos días. Gracias, presidente. Buenos días, señorías.

Señor vicepresidente del Gobierno y consejero de Educación y Universidades, ya he tenido la ocasión de felicitarle personalmente, de desearle mucha suerte al frente de la consejería, pero ya que estoy en esta tribuna también aprovecho públicamente para felicitarle y desearle mucha suerte en nombre de mi grupo parlamentario, porque creemos de verdad que de la educación y la formación de los jóvenes depende en gran parte el desarrollo económico y el bienestar de la sociedad canaria.

Hemos hablado en la legislatura pasada, que usted no estaba, hemos hablado en muchísimas ocasiones del fracaso escolar y del abandono escolar temprano como los problemas más graves de nuestro sistema educativo. Hemos hablado de aquellos jóvenes que abandonan las aulas sin tener la titulación académica oficial, sin tener ningún tipo de titulación académica, y hemos hablado también de aquellos jóvenes que también dejan el sistema educativo y, por tanto, dejan de estudiar cuando consiguen el título académico más bajo.

Desde luego las causas del fracaso escolar son múltiples y complejas. Es un tema muy complejo, porque no se deben solamente a causas individuales sino que a veces se deben al entorno sociocultural, al entorno familiar, al entorno de la escuela; y también se deben muchas veces, señor consejero, al desarrollo económico, al modelo económico de una sociedad. Y resulta que en Canarias el modelo económico, o el desarrollo económico que hemos tenido, se ha basado fundamentalmente en el turismo y en la construcción, y eso ha hecho que muchísimos jóvenes abandonaran los estudios en su momento, en la época del boom turístico, en busca de un trabajo además fácil y de baja cualificación o de ninguna cualificación. ¿Qué es lo que pasa? Que en la época de vacas flacas, en la época de crisis económica y de parálisis de estos sectores, como es la construcción y el turismo, pues, resulta que estos chicos se han quedado sin preparación, sin cualificación, se han quedado fuera del mercado laboral, y además tienen muchas dificultades para, de alguna manera, volver a adaptarse a un mercado laboral que en Canarias además es muy difícil.

¿Las expectativas de estos jóvenes que han abandonado la Educación Secundaria Obligatoria, que antes la consejera de Empleo decía que eran 15.000 jóvenes que no han acabado la Educación Secundaria Obligatoria?, pues sus expectativas de futuro son poco halagüeñas. ¿Poco halagüeñas por qué?: porque la Unión Europea, la Comisión Europea ha dicho que cada vez va a haber menos empleos que requieran mano de obra de baja cualificación; y, en segundo lugar, también tenemos otro problema, que es que el sistema de prestaciones sociales, de ayudas sociales, que de alguna manera va a ayudar a estos chicos que han abandonado prematuramente el sistema educativo, cada vez las ayudas sociales, con la crisis económica, se van a restringir, se van a reducir, y sobre todo en el futuro muchísimo más.

Desde luego desde nuestro grupo parlamentario siempre hemos apostado por un pacto por la educación, aquí y en Canarias. No fue posible, pero apostamos siempre duramente por un pacto por la educación, desde que lo expuso el ministro Gabilondo. No fue posible en su momento, pero desde luego yo creo que en temas como la educación no se pueden hacer políticas demagógicas, porque eso hace que la sociedad pierda la confianza en su sistema educativo, que es un sistema educativo en Canarias público. Pensemos que la mayoría de los centros son en Canarias públicos o financiados con fondos públicos. Tenemos un pequeño porcentaje, relacionado con otras comunidades autónomas, de colegios privados. Y, por tanto, es nuestra obligación aquí, en el Parlamento, buscar puntos de encuentro a los grandes temas de la educación.

Tenemos que partir desde lo que nos une y no desde lo que nos separa. Esa es nuestra obligación y nuestra responsabilidad como parlamentarios. Y, por tanto, eso es lo que la sociedad nos demanda y tenemos que hacer un esfuerzo: trabajar en buscar puntos de encuentro, en buscar consensos. Y desde luego podemos discutir, podemos discernir, podemos debatir, pero desde luego tenemos que plantearnos lo que nos pide la sociedad, que es ponernos de acuerdo en los grandes temas que son de interés para ella, como es la educación.

Por lo tanto, la pregunta que yo le hacía, en la comparecencia que le he solicitado, es para que nos haga un diagnóstico aproximado tanto de la tasa de fracaso escolar en Canarias y en el Estado, no solamente en Canarias sino también viendo cómo es la situación en todo el Estado, y cuáles son sus líneas de actuación para disminuir esas tasas de fracaso escolar.

Por tanto, nada más hasta la segunda intervención.

Muchas gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, doña Marisa Zamora.

Por parte del Gobierno, el señor vicepresidente y consejero de Educación, don José Miguel Pérez.

El señor vicepresidente del Gobierno y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad (Pérez García): Señor presidente, señorías.

En primer lugar, muchísimas gracias, señora diputada, por sus buenos deseos para la tarea que nos aguarda.

Y en segundo lugar, pues, congratularme de poder tener dos ocasiones diferentes para referirnos a temas que, si bien forman parte de un mismo problema, en realidad merecen tratamientos distinguidos y merecen también matices que son distintos también.

Efectivamente, permítanme que antes de haber logrado, como fue mi propósito, efectuar una comparecencia general ante la Comisión pertinente de Educación para exponer los aspectos fundamentales, los objetivos fundamentales de la Consejería de Educación y Universidades, permítanme que haga una breve introducción al tema en el que nos encontramos. Creo que alguna buena precisión puede servirnos para las palabras que vendrán a continuación de forma precisa para su solicitud de comparecencia.

La primera cuestión. Creo que convendremos todos en que nos adentramos en una etapa en la que la educación, si siempre ha sido fundamental, siempre ha sido muy importante, ahora es decisiva, y lo resumo. Pasamos de lo que se denomina la era industrial a la era tecnológica. Estamos ante un cambio formidable desde el punto de vista de la historia humana. En ese nuevo mundo en el que nos hemos adentrado, en el que nos estamos adentrando, el conocimiento, la formación, la educación, van a tener un papel central, absolutamente central. Marcarán con toda probabilidad las diferencias sociales, marcarán los desarrollos económicos como nunca lo han hecho con anterioridad. Por tanto, nos encontramos ante un ámbito que debe requerir acierto en el diagnóstico, acierto que no solamente incumba a las administraciones públicas, al ámbito normativo; debe ser incumbencia de toda la sociedad.

Y, en segundo lugar, y a raíz de esta cuestión, efectivamente nos encontramos ante un tema en el que no solo puede intervenir una Administración pública, a nivel europeo, a nivel nacional, a nivel autonómico o a cualquier otro nivel; nos encontramos ante un tema que exige y que requiere participación, corresponsabilidad del conjunto de los actores sociales.

Y, efectivamente, aunque la comparecencia viene centrada en la realidad de posiblemente uno de los grandes objetivos prioritarios que tenemos que afrontar, que es el fracaso, que se puede ver con claridad en distintos ámbitos de nuestro sistema educativo, efectivamente creo que es la tercera razón, porque le agradezco la comparecencia por haber ubicado ahí el gran problema y no dejarlo de lado. Este es realmente el gran problema, el más inmediato y no el único, pero el más inmediato al que nos enfrentamos. Por eso el Gobierno lo ha querido hacer objetivo prioritario. Pero, insisto, no es solo una cuestión de verlo en el ámbito del centro educativo. Los expertos en Sociología de la Educación nos hablan de la existencia de un círculo vicioso. Los factores de dificultad económica que se ciernen sobre muchas familias, sobre muchas personas, añaden causas muy potentes a la hora de ver el éxito escolar de generaciones jóvenes. A su vez, ese fracaso escolar redunda con claras consecuencias en seguir manteniendo una muy fuerte situación de fragilidad social. Si no acertamos al menos en el papel que en los centros los actores principales deben desempeñar, realmente estaremos perdiendo una circunstancia terrible.

Y quiero resaltar -y déjenme que empiece por algo que haga referencia al éxito y no al fracaso, al que me referiré inmediatamente-, quiero resaltar un dato que me parece muy relevante. Efectivamente nuestros alumnos, nuestras alumnas, se someten en distintos niveles a evaluaciones nacionales o internacionales. Bien. En lo relativo a la última evaluación hecha por el Ministerio de Educación en todas las comunidades autónomas hay un factor que estoy poniendo de relevancia últimamente de manera reiterada, porque creo que nos ayuda a comprender muy bien qué hace un centro educativo, y es el que pone en relación dos variables: la procedencia socioeconómica del alumnado y el rendimiento concreto que tiene. Se refiere esta evaluación a los niveles de la Enseñanza Secundaria Obligatoria, no a la Primaria. Bien. Nuestra comunidad autónoma, cuando se ponen en relación estas dos variables, queda por encima de la media nacional; es decir, que muchos de los estudiantes, de los alumnos, que llegan a los centros educativos y que traen un tremendo lastre por las circunstancias socioeconómicas de sus entornos familiares encuentran en los centros educativos una posibilidad clara de triunfo académico. Insisto, en tasas de nuestra comunidad autónoma, en la última encuesta, por encima de las medias nacionales.

Realmente no es la realidad general de nuestras encuestas, pero he querido poner el acento en esto porque creo que no debemos descuidar que estamos ante también una enorme oportunidad social para salir del círculo vicioso y los datos y las evaluaciones concretas lo están demostrando, lo demuestran. Que no hemos acabado con el problema ni siquiera en este aspecto señalado es evidente pero al menos quería ponerlo de manifiesto.

Por tanto, la educación no es solo y exclusivamente algo que dependa de los centros educativos, tiene ramificaciones más amplias y más importantes. Siempre suelo poner el ejemplo de alumnos que tienen dificultades para sacar adelante su proceso de aprendizaje en los centros. Sus coeficientes intelectuales no presentan ningún inconveniente para ello y evidentemente gran parte del problema viene, a poco que se escarbe, en la realidad personal, familiar, social, etcétera, de la que procede el alumno. Si ayudamos desde los centros y desde el sistema educativo a abordar bien la salida a las causas que están impidiendo el triunfo, el éxito escolar de ese alumno, estamos hablando de que también eso es una tarea del centro educativo. No se debe limitar, por tanto, la tarea del centro a impartir las enseñanzas regladas, consiguiendo con ello el triunfo en las competencias que exige la programación correspondiente.

Incido en todo ello porque estamos ante un tema -que luego explicaré- que el Gobierno quiere en Canarias hacer de él causa social, corresponsabilizar a todo el mundo. Insisto, no solo a las administraciones públicas, a todo el mundo -luego me referiré a ello a la hora de hablar de problemas-.

Pero efectivamente tiene usted razón, tenemos un diagnóstico que en líneas generales no es bueno. Yo diría, presenta aspectos negativos, y algunos ejemplos nos lo detallan, sacados además de estudios que cuentan con fiabilidad. Los resultados durante la etapa de la Educación Primaria nos están reflejando -y lo ha puesto de manifiesto el primer Informe de Pisa para Canarias- un retraso importante en rendimientos educativos del alumnado. Asimismo, el alto porcentaje de repetición al final de cada ciclo nos coloca en estos niveles 2 puntos por encima de las medias nacionales. Tenemos también otros datos significativos: la baja tasa de alumnos que obtienen, que titulan en el Bachillerato; en Canarias apenas el 37,5, mientras que a nivel nacional el 44,7; o en los grados medios de la Formación Profesional, también ahí hay distancias que hay que eliminar: el 13,5% de los alumnos en Canarias; el 16,6 en la media nacional.

Cuando vemos el nivel de la educación por cohortes demográficas, tenemos cómo la población canaria de entre 25 a 64 años apenas alcanza el 46%, los que tienen un nivel superior al de la segunda etapa de la Educación Secundaria Obligatoria, mientras que apenas llegamos al 23% en educación superior para esas mismas cohortes de población.

Es decir, estamos ante datos que efectivamente nos indican una situación negativa y que, por tanto, exige medidas y estrategias para poder acometerla. Creo que es fundamental porque, entre otras cuestiones -como decía al principio y este discurso me lo oirán siempre-, no solo se trata de obtener el éxito académico, se trata también de poner en pie de igualdad a todos los ciudadanos para que puedan estar afrontando con las mismas oportunidades los retos que les pone por delante la vida.

El Gobierno de Canarias tiene en su programa de gobierno una frase rotunda y tiene además unos objetivos que expresó en el discurso de investidura el presidente del Gobierno. Creo que son objetivos muy ambiciosos, difíciles, muy difíciles de conseguir...

El señor presidente: Sí. Don José Miguel, por favor, tiene un minuto para concluir esta intervención, por favor.

El señor vicepresidente del Gobierno y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad (Pérez García): En el programa de gobierno, efectivamente, se ubica la lucha, el combate contra el fracaso escolar como la prioridad absoluta en materia educativa.

Como tendré seguramente un segundo turno, me podré explayar en algunas de las medidas y de las estrategias que ya estamos poniendo en práctica para ello, pero culmino esta intervención.

Será posible si no lo hacen exclusivamente las administraciones públicas, y no me refiero solo al Gobierno de Canarias; será posible si existe una acción decidida desde todos los ámbitos sociales. Y por eso nos proponemos que aquí se logre el necesario pacto social para implicar a todo el mundo en el objetivo de la lucha contra el fracaso escolar o, lo que es lo mismo, en el objetivo de la lucha por lograr el éxito escolar.

Gracias.

El señor presidente: Sí. Muchas gracias, señor vicepresidente, don José Miguel Pérez.

Vamos a entrar en la intervención de los grupos no solicitantes de la comparecencia.

Quiero recordarles, señorías -y disculpen que sea tan insistente pero estamos al principio de legislatura, y todo lo que les comento ha sido debatido en el Junta de Portavoces-, recordarles que la comparecencia es una iniciativa básicamente planteada por el grupo que la plantea y el Gobierno, pero tienen oportunidad de intervenir los grupos no solicitantes, pero exclusivamente para referirse a lo que ha dicho el Gobierno, no para establecer intervenciones entre los grupos; y en segundo lugar, que el tiempo es de tres minutos sin ningún tipo de prórroga.

Entonces van en orden de menor a mayor.

Grupo Parlamentario Mixto, por el Grupo Parlamentario Mixto doña Carmen Hernández tiene la palabra.

¿Desde el escaño lo va a hacer? Puede venir aquí. Tiene usted tres minutos, lo puede hacer desde ahí, lo puede hacer desde aquí. Como usted quiera, ¿eh? De acuerdo. Muy bien.

La señora Hernández Jorge (Desde su escaño): Buenos días a todos. Gracias, señor presidente. Diputados, diputadas.

Efectivamente coincido con la exposición del señor consejero de que acabar con el fracaso escolar, o vamos a llamarlo en positivo, como también a nosotros nos gusta, construir el éxito escolar en Canarias, es una responsabilidad de toda la sociedad, porque el fracaso escolar no es solo el fracaso de la escuela, es el fracaso de toda la sociedad.

La corresponsabilidad en materia educativa, bien entendida, que no es aquella que habla de repartir culpas cuando la cosa no va bien, cuando los resultados no nos ayudan, sino entender la corresponsabilidad como que todos y cada uno de los sectores de nuestra sociedad -la familia, los profesores, los sindicatos, las otras administraciones que tienen mucho que decir en materia educativa, como son los cabildos y los ayuntamientos- también puedan participar en la planificación de acciones y, por tanto, en las propuestas y en el seguimiento de las mismas.

Coincido con usted en que los datos no son nada halagüeños. Tenemos las peores tasas en todos los indicadores: bajo porcentaje de graduados y titulados en todos los niveles -en Secundaria, Bachillerato, enseñanzas postobligatorias y universidades-, tenemos además una alta tasa de repetidores, tenemos la peor tasa de idoneidad de toda España -eso es algo que nos debería hacer reflexionar- y también tenemos una población adulta muy poco formada. Todo esto lo sabemos porque nos lo dicen los informes internacionales -Pisa-, nos lo dicen los datos estatales, la última Evaluación General de Diagnóstico y nos lo dicen nuestros centros educativos cuando analizamos las tasas brutas de graduación en Secundaria. Estamos hablando de que uno de cada tres chicos o chicas de 16 años en Canarias no titula y eso significa que no tiene ninguna puerta abierta, formativa ni profesional, y, por tanto, eso significa que hay un alto riesgo de exclusión social.

Yo diría que en materia educativa en España hay dos Españas: la España del norte, la España del éxito, la España de plantillas bien dotadas, la España de pocos repetidores, la España donde se invierte más y mejor por cada alumno, y la España del sur, la España del fracaso, la España donde se invierte menos, la España donde obtenemos peores resultados. Ahí estaría Canarias, Ceuta y Melilla.

Nosotros como Grupo Mixto, como Nueva Canarias, lo que queremos es acercarnos a esos indicadores europeos. Estamos muy lejos de ellos y, por tanto, en esa línea vamos a intentar trabajar.

Coincidimos también en que las causas no están solo dentro de la escuela sino que los factores que condicionan el fracaso son factores endógenos y exógenos y, por tanto, debemos alejarnos de políticas educativas que colocan la mirada estrictamente en el ámbito escolar y tenemos que empezar a abrir la mirada y a buscar políticas integrales, donde aspectos como las políticas en servicios sociales -es una pena que no esté ahí la consejera-, las políticas relativas a empleo y las políticas dirigidas a juventud deben también estar en el eje y en el centro del debate.

Gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, doña Carmen Hernández.

Por parte del Grupo Parlamentario Socialista Canario, la señora Gómez Castro, doña Rita.

La señora Gómez Castro: Gracias, señor presidente. Buenos días a todos y a todas.

No me quiero repetir, porque hemos coincidido prácticamente en lo que significa el fracaso escolar. Evidentemente, y como no podía ser menos, coincido plenamente con la exposición del consejero y vicepresidente del Gobierno de Canarias y me parece y estoy totalmente de acuerdo con lo que acaba de decir quien me ha antecedido en la palabra, la diputada de Nueva Canarias.

Han sido estos, tanto el fracaso escolar como el abandono escolar -aunque son dos problemas que están estrechamente ligados, pero tienen connotaciones diferentes y deben ser tratados de manera diferente-, han sido estos los dos problemas principales, junto al bajo rendimiento académico y junto a la baja tasa, al bajo índice de idoneidad de nuestro sistema, los problemas y lo que deberían haber sido las prioridades en toda esta etapa de gobierno, anterior, en esta comunidad autónoma canaria. Esos problemas eran las prioridades y eso era lo que demandaba el Grupo Parlamentario Social ista en el curso político anterior, que se consideraran como prioridades el fracaso y el abandono escolar. El fracaso escolar en sus dos vertientes: el de la no titulación y sobre todo también en el de los resultados obtenidos en las pruebas internacionales y en las pruebas nacionales.

Teniendo en cuenta lo que sucede en otras comunidades como el País Vasco, donde los índices son totalmente bajos; teniendo en cuenta esas mejoras y ese buen funcionamiento del sistema educativo en esas comunidades, nosotros ahora mismo, el Partido Socialista en la Consejería de Educación tiene claro que los márgenes de mejora son muy amplios y que se puede mejorar. Y se puede mejorar porque... A mí me ha satisfecho la intervención del hoy consejero de Educación, me ha satisfecho porque se quiere mejorar el problema del fracaso escolar y del abandono escolar, porque, en primer lugar, es la prioridad de este departamento y porque, en segundo lugar, no se elude la realidad. No se falsean datos, no se intentan maquillar datos, sino que se parte de la realidad. El fracaso escolar, el índice de fracaso escolar, ha aumentado en los últimos siete años en 3 puntos, pasando de un 32,3% a un 35,3%. Y si partimos de esa realidad sabemos la visión que tenemos y, por lo tanto, sabemos qué soluciones aportarle.

Señor consejero...

El señor presidente: No, lo siento y yo les ruego que vayan atendiendo a las normas, que estamos empezando.

Efectivamente. Muchas gracias, doña Rita, por su comprensión.

Por el Grupo Parlamentario Popular, doña María Isabel Oñate tiene la palabra.

La señora Oñate Muñoz: Gracias, señor presidente. Buenos días, señorías.

Señor consejero, no le he entendido lo que ha querido decir. Ha venido aquí a contar lo que es el fracaso escolar y las causas sociales, complejas, familiares, de donde puede venir, pero no sé todavía qué va a hacer usted con ese fracaso que encuentra en las aulas en estos momentos. No sé qué va a hacer con ello ni sé qué herramienta va a utilizar ni sé qué medidas va a poner, porque lo único que nos ha contado es que acabamos de pasar de la era industrial a la tecnológica. Creo que pasamos hace bastante más tiempo; usted se está enterando ahora. Y yo veo que la solución está muy alejada de lo que realmente necesitamos.

Llevamos dos décadas de Gobierno socialista y de leyes del Gobierno socialista. Dos décadas, que han sido los socialistas quienes nos han llevado a esta situación actual que tiene España y que, por ende, tiene Canarias. Es verdad que se ha mejorado algo en el norte respecto al sur, pero España entera está muy alejada de la Comunidad Económica Europea en la valoración en la competencia lingüística, matemática, de los alumnos. Los niños no entienden. Hay en 4º de Primaria niños -lo digo como anécdota- que todavía no saben restar, en 4º de Primaria. Los niños no tienen esa competencia desarrollada. Y, por lo tanto, estamos haciendo analfabetos, acumulándolos uno tras otro, no valorando el esfuerzo que tienen que tener los alumnos, etcétera.

Entonces llegamos aquí a hablar del fracaso escolar y usted nos habla en general: que las causas son complejas, que son las familias, la extracción social... Estamos de acuerdo, pero ¿qué va a hacer usted para eliminar ese fracaso escolar?

En el Diario de Sesiones la diputada que me ha precedido en la palabra le decía a Coalición Canaria que en una década había dejado un panorama desolador y ahora les ha tocado a ustedes llegar. Yo siento que usted cargue con la responsabilidad, que el Partido Socialista es el que ha llevado durante dos décadas la ley de educación en este país. Yo siento que sea así, pero usted tendrá que buscar unas herramientas o, si no, esperar al 20-N, esperar al 20-N, y cuando nosotros cambiemos la ley de educación, que la vamos a cambiar y que la vamos a valorar con el esfuerzo, con la excelencia, con la calidad, entonces, si usted sigue de consejero, tendrá una ayuda, ¡tendrá una ayuda ahí!

En fin, yo lo que le quiero decir es que ahora mismo el ministro de Educación, Gabilondo, ha dicho que el sistema es encorsetado y rígido. Se ha venido a dar cuenta cuando quedan unos meses para terminar sus elecciones, su mandato. Ahora dice que es rígido y ahora por la puerta de atrás ha metido el tema de las pasarelas. Pasarelas -que no son las de Cibeles-, pasarelas que yo oí hablar de ellas hace diez años. Hace diez años oí hablar de las pasarelas entre el Bachillerato y la Formación Profesional para darles una flexibilidad a los alumnos, que abandonan todos. Es que luego dicen... que los 30.000 euros que nos ha costado, que nos ha costado hacer el Informe Pisa, luego nos dicen que es exquisito en cuanto a la inclusión en el sistema canario. Pero, ¿de qué estamos hablando? La inclusión... porque es que abandonan tantos que los que se quedan están incluidos. ¡Es que abandona el 50%! ¡Es que no se puede decir eso, por favor!

Entonces yo lo único que le quiero decir, señor consejero -no sé si estoy terminando el tiempo, tres minutos-, es que nosotros esperamos que...

El señor presidente: Muchas gracias, doña Maribel.

Por el grupo solicitante de la comparecencia, por el Grupo Nacionalista Canario, doña Marisa Zamora tiene la palabra.

La señora Zamora Rodríguez: Señor consejero, ¿ve por qué no llegamos a un pacto por la educación? Es muy duro. Me da pena de que haya comunidades, comunidades autónomas como Madrid, que tienen incendiada la educación. No solamente los sindicatos sino padres, alumnos, profesores y todo el mundo, porque están sufriendo verdaderamente los recortes más graves de la política educativa.

Señor consejero, el tema del fracaso escolar es un tema que nos preocupa a todos. Preocupa a esta comunidad autónoma, al resto de comunidades autónomas. Pensemos en Baleares, que tiene más de un 42% de fracaso escolar, y pensemos que le preocupa al ministerio -lo ha dicho muchas veces el ministro Gabilondo- y que le preocupa también a la Unión Europea. Por eso se ha planteado en los objetivos, en la Estrategia europea 2020, reducir las tasas de fracaso escolar a un 10%. Actualmente están en un 14,4%. Pero no podemos estar satisfechos porque el Estado está en estos momentos en un 31,2% y en un informe que era del ministerio, que es datos y cifras del 2010, Canarias estaba en un 31,3%. Por tanto, se ha hecho un esfuerzo y hemos bajado 6 puntos en fracaso escolar.

Y los datos del Informe Pisa, del último Informe Pisa, son malos. Malos para todas las comunidades autónomas porque, según dijo el secretario de Estado, la diferencia de una comunidad a otra es de menos, inferior a un 4%. Por tanto, pensemos que estamos en el vagón de cola, junto con Portugal, junto a países como Malta, y verdaderamente la situación es realmente lamentable en el último Informe Pisa, porque España apenas ha avanzado desde el primero hasta el último informe.

Pero, mire, para comprender mejor la situación actual hay que partir del pasado más reciente, porque hay cosas que hay que comprenderlas. Cuando se transfirieron, no hace tantos años, en el año 83, las competencias en educación a Canarias, en Canarias era lamentable la situación de la educación. Era caótica. Tenía la peor tasa de analfabetismo, tenía la tasa más pequeña de escolarización de población infantil, teníamos 8.000 profesores -hoy tenemos 24.000-, teníamos un déficit de infraestructuras educativas tremendo, en malas condiciones, los centros escolares desdoblados en dos y tres turnos, no teníamos centros de Educación Especial, no se atendía a los niños con necesidades específicas... O sea, la situación era tan lamentable que quién ha hecho ese esfuerzo: ¡la sociedad canaria! El Gobierno de Canarias, año tras año, ha ido poniendo el dinero en los Presupuestos para llegar hoy en día a hablar en otro lenguaje, del que estamos hablando, y eso ha sido un gran esfuerzo y un gran logro de la sociedad canaria. Partíamos de una situación muy distinta, por ejemplo, a Cataluña cuando se transfirieron las competencias, y eso hay que tenerlo en cuenta, porque no nos podemos olvidar de nuestra propia historia. Hoy en día hablamos otro lenguaje. Hablamos de programas de refuerzo educativo: ¿quién los ha puesto, quién ha puesto un programa de refuerzo educativo por la tarde y gratuito para los padres, para que no paguen nada precisamente en materias como Matemáticas o Lengua? ¿Quién ha puesto las secciones bilingües, que han puesto, que empezaron en el año 2006 con 80 colegios y hoy tienen 450 colegios con secciones bilingües, en donde no se da solamente Inglés, sino Matemáticas, Conocimiento del Medio en inglés? ¿Quién apuesta, además, por potenciar la segunda lengua extranjera, como el alemán o el francés? ¿Quién apuesta por la gratuidad de los libros de texto? Que yo no soy, además, partidaria, porque creo que el que tiene tiene que pagar, pero hay gratuidad de libros de texto para igualdad de oportunidades. Además con una tarjeta que los padres van directamente a la librería más cercana, que es un sistema pionero en toda España. ¿Quién apuesta por el tema de los servicios complementarios, que somos la tercera y la quinta comunidad autónoma en el número de plazas escolares en comedores y en el transporte escolar, tanto el normal como el adaptado? ¿Quién apuesta por eso, si hemos puesto con la crisis un millón de euros más para pagar a las familias que han quedado en paro y no pueden pagar el comedor de los hijos? ¿Quién ha apostado por todo eso? Señor consejero, estamos apostando por las nuevas tecnologías, haciendo también un gran esfuerzo en informatizar, tanto para que les ayude a los profesores como para los estudiantes.

Todo eso son cosas que hay que valorar. Estamos hablando de otro lenguaje, estamos hablando de acogida temprana, de que los niños puedan entrar en el colegio una hora antes... ¿Quién ha puesto todo eso en práctica, quién lo ha hecho? ¿Eso no cuesta nada, eso no se valora? Estamos yendo en contra de nuestro propio sistema educativo, porque al final la gente no confía en el sistema educativo.

Señor consejero, evidentemente hay que seguir trabajando y hay que seguir apostando tanto por reducir el fracaso escolar como por aumentar o incrementar el rendimiento y el éxito escolar. Para eso hay que seguir, señor consejero... -es lo que dijo la señora Muñoz-, por supuesto que hay que hacer más flexible y menos rígido nuestro sistema educativo, que hace que muchos alumnos repitan. Hay sitios, como por ejemplo Finlandia, que está en los primeros puestos en Pisa, donde no hay alumnos repetidores. Ese es un tema que hay que seguir mirando. Hay que seguir averiguando el tema, avanzando en la acreditación de competencias. Señor consejero, hay que seguir apostando por la reforma de la Formación Profesional, porque es fundamental, porque tenía que ser una Formación Profesional, que ya se empezó en la legislatura anterior, adaptada a nuestro mercado laboral, a los yacimientos de empleo nuevos. No se puede convertir a la Formación Profesional en una máquina de hacer más parados, porque hay que mirar los empleos que se necesitan en Canarias, hacia dónde van dirigidos, y hay que potenciar la movilidad en la Formación Profesional, como en Alemania, que se dan muchas clases prácticas y los chicos prácticamente salen con un contrato de trabajo, y hay que potenciar la Formación Profesional también a distancia y on-line.

Señor consejero, hay que potenciar los llamados Proa, que usted los conoce muy bien, porque los Proa -los programas de refuerzo, orientación y apoyo educativo-, que empezaron en el año 2005, se están haciendo ahora por una vía totalmente diferente, novedosa, pionera, que ha propuesto el Estado, y hemos sido la única comunidad autónoma que ha suscrito 102 contratos-programa con los centros escolares para que tengan su propia autonomía, para que fijen sus propias estrategias, sus propios objetivos, aquellos chicos con unas grandes dificultades por su entorno sociocultural. Por lo tanto, de estos planes, de estos Proa, se están aprovechando, se están beneficiando más de 38.800 alumnos y se han acogido 3.755 profesores. ¿Se va a evaluar los Proa, señor consejero, se va a seguir trabajando? Hemos invertido este año más de 4.600.000 euros en estos programas de refuerzo educativo, cofinanciados entre el Estado y entre el Gobierno de Canarias.

Hay que seguir trabajando y apostando por el refuerzo educativo. Es en las competencias básicas en lo que fallamos, en Matemáticas y en educación.

Señor consejero, hay que seguir trabajando en el bilingüismo, en las nuevas tecnologías... Bueno, seguir trabajando en los programas de cualificación profesional inicial, que son importantísimos para aquellos chicos que quedan fuera del sistema educativo, para tener una cualificación profesional, incluso la oportunidad de tener la graduación en Educación Secundaria Obligatoria.

Es el momento de cambiar los contenidos de las materias educativas, es el momento de combinar las clases magistrales y teóricas de un profesor, en donde se transmiten conocimientos, con más clases prácticas, con más clases, con más talleres, con más proyectos en grupo, en donde se utilicen las nuevas tecnologías. Es la hora de cambiar, como Finlandia, que son clases mucho más prácticas y hay que combinar las dos cosas.

Y desde luego es fundamental la formación, tanto inicial como continua, del profesorado. El profesorado tiene que estar siempre reciclado, sobre todo en las competencias básicas y en las nuevas tecnologías, que a veces en muchos colegios no se han podido implantar las nuevas tecnologías porque los profesores no saben utilizarlas.

Es importantísima la implicación, señor consejero, de la familia. Es importante que se implique tanto en la vida de los centros como en la enseñanza de sus hijos. No puede ser que los padres dejen a los niños en los colegios, "ahí te dejo", y cuando lleguen a casa no tienen un seguimiento de los hijos.

Por tanto, señor consejero, yo creo que hay que poner en valor la cultura del esfuerzo. Eso es muy importante, el trabajo bien hecho. Pero no solamente le hablo de los alumnos sino de la cultura del esfuerzo de todos, de la consejería, de usted como consejero, de la Administración pública, de los profesores, de los equipos directivos, de los equipos de orientadores de los equipos de inspección, la cultura del esfuerzo, porque solo poniendo mano a la cultura del esfuerzo podremos hablar de excelencia y calidad educativa.

Muchas gracias, señor consejero.

El señor presidente: Muchísimas gracias, doña Marisa Zamora.

Para cerrar el debate de esta comparecencia, el señor vicepresidente del Gobierno y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad, don José Miguel Pérez.

El señor vicepresidente del Gobierno y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad (Pérez García): Gracias, señorías, por las aportaciones.

Efectivamente, en mi primera intervención quise hacer toda una declaración de principios y situar el problema. Supongo que de eso sí se ha enterado alguna señoría que exponía alguna duda.

Vamos a hablar de soluciones, por lo menos del intento de acometer uno de los problemas principales que tenemos delante. Confío en que antes y después del 20-N estas propuestas se puedan mantener en todo lo alto, porque si hacemos caso a algunos de los cantos de sirena de alguna antigua ministra de Educación... Pero, en fin.

Efectivamente, cómo paliar el fracaso escolar. Efectivamente, dos líneas que voy a intentar resumir. Primero, obtener mejores rendimientos en nuestros centros educativos, que es uno de los grandes problemas que salen en todas las encuestas y en todas las evaluaciones; y, segundo, mejorar sustancialmente la tasa de titulación en los distintos niveles de la enseñanza. Para ello el Gobierno se ha trazado toda una estrategia. No quiero detallarla, habrá tiempo seguramente en la correspondiente comisión, pero la estrategia no es ajena a la afirmación que antes hacía. No será solo cuestión del Gobierno, de la Administración autonómica. Tendrá importante papel en ella el resto de las administraciones públicas, porque nuestra idea de la educación es que efectivamente el sujeto principal es la persona que se forma y lo importante es el proceso de aprendizaje, como señalaba antes la señora diputada doña Marisa Zamora.

Efectivamente, nos encontramos con un conjunto de medidas que se están poniendo en marcha, que están puestas en marcha y que en los centros educativos podríamos resumir en el conjunto de los programas, de los planes, de las iniciativas y de las acciones educativas, que se desglosan en cinco grandes aspectos: primero, los programas dedicados a la prevención del abandono escolar y al logro del éxito escolar; segundo, aquellos que hacen referencia a la convivencia; en tercer lugar, a la corresponsabilidad de la familia y a la conciliación de la vida laboral y familiar; la formación del profesorado y el conjunto de programas transversales que son esenciales para también la propia formación, en aspectos como es la relación con el medio, con el lugar en el que habitamos, etcétera.

De cada uno de estos cinco grandes epígrafes hay multitud de programas. Puedo desglosarlos, puedo hablar de los programas que están en marcha ahora mismo en los centros, algunos los hemos visto en directo apenas se ha iniciado el curso, que hacen referencia al refuerzo en distintos niveles educativos; que hacen referencia también a la mejora en las variantes idiomáticas; que hacen referencia efectivamente también al tratamiento de los problemas familiares que llegan evidentemente al centro; que hacen referencia a los distintos aspectos en los que se sustancia la formación de los agentes educativos, los profesores, etcétera. Puedo dar cuenta cumplida de todas estas acciones, pero permítanme que, ahorrándome el que les cite más de 40 o 50 de estos programas que están en marcha, detalle con algún ejemplo a qué me estoy refiriendo.

Son, por ejemplo, los programas de refuerzo educativo a los que aludía, ¿no? Es una medida que articula programas para dar respuesta a un alumnado que está matriculado en Primaria o en la Educación Secundaria Obligatoria, que tienen dificultades en lectura, en escritura, en cálculo o en razonamiento matemático. Son programas que incluyen actividades de refuerzo, orientadas a conseguir las competencias básicas que están determinadas en los distintos programas escolares en cada una de estas áreas temáticas. Este es un ejemplo.

Líneas de actuación pueden verse a pie de tierra en cada centro, cómo se coordinan desde el punto de vista de la Administración autonómica, desde el punto de vista de los ámbitos de coordinación en las direcciones generales correspondientes.

Pero quiero reiterar, más allá de todas estas líneas y de la propia estrategia que, entre otras cuestiones, tiene algo que es fundamental, ¿eh?, y es la posibilidad de que aquí todo el mundo tenga las mismas oportunidades. Por eso son tan esenciales las medidas y las estrategias orientadas a amortiguar los problemas de la fragilidad social de un amplio sector, amplísimo sector, de alumnos. Por eso es importante no bajar la guardia, no estar reiterando mensajes contra los principales aliados que tenemos, que son los agentes educativos. No estar reiterando mensajes en tono de que "cada uno se las ventile como quiera". Y sobre todo no olvidarnos de que el proceso de aprendizaje en este país está reglado y normado por leyes que son el resultado de acuerdos que podrán ser cambiados y adaptados a nuevas realidades. Seguramente será así.

Y, efectivamente -espero extenderme luego en la segunda comparecencia o en la tercera-, hay novedades normativas muy importantes, novedades normativas que nos van a ayudar a lograr el éxito escolar.

Pero, insisto, puedo detallar el contenido de todos y cada uno de los programas, que se financian o cofinancian... Y esto es fundamental, casi todos estos programas tienen una cofinanciación o una finan­ciación directa del Ministerio de Educación y Ciencia, del propio Gobierno de Canarias. El Gobierno va a mantenerlos. Confío en que el Ministerio de Educación y Ciencia los mantenga en su integridad. Estamos hablando de programas como los de refuerzo, apoyo idiomático, etcétera, con una aportación que supera los 50 millones de euros por parte del Ministerio de Educación y Ciencia, y no les quiero contar la que aporta el Gobierno de Canarias.

¿Que estamos en tiempos de enorme dificultad?, sí, pero aquí nos jugamos algo mucho más importante. Y cuando quiera la señora diputada Oñate yo estaré encantado, a título profesional, de explicarle lo que significa el mundo en el que nos adentramos.

Muchas gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, don José Miguel Pérez.

Señorías, suspendemos la sesión hasta las cuatro y media de la tarde, que comenzamos con el informe del Diputado del Común y seguimos con las comparecencias.

Hasta luego. Muchas gracias.

(Se suspende la sesión a las catorce horas y diecisiete minutos.)

(Se reanuda la sesión a las dieciséis horas y treinta y seis minutos.)

El señor presidente: Señorías, muy buenas tardes.