Diario de Sesiones 59, de fecha 13/11/2012
Punto 12

· 8L/PNL-0142 Proposición no de ley del Grupo Parlamentario Popular, sobre privatización de Radiotelevisión Canaria.

El señor presidente: Siguiente proposición no de ley: del Grupo Parlamentario Popular, sobre privatización de la Radiotelevisión Canaria.

Tiene una enmienda del Grupo Mixto.

Don Víctor Moreno.

El señor Moreno del Rosario: Gracias, señor presidente. Señorías.

Quiero dejar claro, en primer lugar, que el Grupo Popular no sube hoy a esta tribuna para pedir el cierre de la Televisión Canaria ni queremos que se despida a un solo trabajador; con esta proposición no de ley queremos que se cambie su modelo de gestión para que no sea una carga para la comunidad autónoma en tiempos de escasez de recursos.

En unos días se cumplirán 28 años desde que fue aprobada la Ley de creación de la Radiotelevisión Canaria y 28 años después podemos afirmar que la realidad que estamos viviendo en 2012 poco o nada tiene que ver con la de 1984. Muchas cosas han cambiado. Hoy vivimos una situación económica difícil, hay mucha gente que lo está pasando mal. En estos momentos no podemos gastar más de lo que ingresamos y por ello, señorías, tenemos que priorizar. Lo importante hoy es atender los servicios públicos básicos; todo lo demás en este momento puede y debe esperar.

Canarias, como otras regiones, tiene graves problemas de liquidez. Precisamente por ello el Gobierno de España tuvo que auxiliar a las islas con el Fondo de Liquidez Autonómico y también con cientos de millones de euros para que las administraciones públicas canarias pudieran pagar a sus proveedores.

Pero la cosa no queda ahí: el próximo año las dificultades irán a más. El presidente Rivero ha dicho que habrá despidos y recortes sociales, los sindicatos hablan de miles de despidos de empleados públicos, no hay dinero para construir colegios e incluso se atreven a plantear el cierre, intolerable y temerario, de la Unidad de Cardiología Pediátrica y Cardiopatías Congénitas del Hospital Universitario Materno-Infantil de Canarias. Pero lo sorprendente es que, mientras esto ocurre, en el Consejo de Administración de Radiotelevisión Canaria celebrado el pasado 30 de julio los consejeros de Coalición Canaria allí representados votaban a favor de incrementar el presupuesto de Radiotelevisión Canaria un 4,35% para el 2013. Sí, señorías, Coalición Canaria aprobaba destinar 1,6 millones de euros más al presupuesto de Radiotelevisión Canaria para el próximo año. Qué sinsentido el de este Gobierno: 1,6 millones de euros más para la Televisión Canaria y ni un euro para los niños con cardiopatías. ¿Es eso normal? Con ese dinero se mantendría la unidad durante un año y medio.

Les voy a dar un dato: cuando en la pasada legislatura el Partido Popular llegó al Gobierno en el 2007 el presupuesto de Radiotelevisión Canaria era de 60 mil lones de euros y cuando elaboramos el último Presupuesto con José Manuel Soria como consejero de Hacienda, el presupuesto de la Radiotelevisión Canaria fue de 38 millones de euros. Una disminución de 22 millones de euros en cuatro años. No por un capricho, señorías, sino porque había otras prioridades en las que gastar. Seguramente habrá quien diga que el modelo de Radiotelevisión Canaria es tan barato que solo le cuesta a cada canario 13,50 euros, pero las cifras hablan por sí solas. El Gobierno de Canarias ha gastado desde su creación más de 400 millones de euros en la Televisión Canaria, sin duda una cantidad importante y a tener muy en cuenta.

Desde luego en una crisis económica como la actual es imposible a medio y a corto plazo seguir con este volumen de gasto, sobre todo si tenemos en cuenta que en los últimos diez años las radios y las televisiones autonómicas en España han costado más de 20.000 millones de euros.

Por todo ello, me atrevo a decir, en nombre de mi grupo parlamentario, que las televisiones públicas autonómicas no se justifican hoy, ni en España ni en ninguna comunidad autónoma, tampoco en Canarias.

Precisamente por este motivo, el Gobierno de España modificó la Ley general audiovisual para posibilitar la entrada de capital privado en las televisiones autonómicas y ofrecer de esta forma a las comunidades autónomas alternativas nuevas de gestión sobre estos entes. El objetivo es ayudar a las comunidades autónomas a que dentro de sus estatutos puedan elegir los modelos de gestión más eficaces y menos gravosos para sus televisiones. No se trata de establecer por ley ninguna obligación a las comunidades autónomas, lo que se pretende es buscar la viabilidad de las televisiones.

De momento la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha ya han iniciado las gestiones para privatizar Telemadrid y la televisión castellano-manchega, respectivamente. Murcia, por su parte, ha anunciado su intención de privatizar la gestión de su televisión y Radiotelevisión de Mallorca ha echado el cierre.

Aunque resulte obvio la Televisión Canaria no es gratis, la pagamos todos. Solo la empresa Televisión Pública de Canarias, sin incluir ni la radio ni al ente, tuvo unas pérdidas en 2011 de casi 41 millones de euros. Con todos mis respetos, señorías, hoy en Canarias existen otras prioridades. Les pido que salgan a la calle y que hablen con la gente. Hay muchos canarios pasándolo mal, hay auténticos dramas. Por ello tener una televisión pública se nos antoja un capricho que hoy no nos podemos permitir. Los presupuestos públicos hay que destinarlos hoy más que nunca a los bienes de primera necesidad: la educación, la sanidad, la dependencia y hasta poder ayudar a muchas familias que no llegan a final de mes.

Por todo ello, insisto, la solución pasa por la posibilidad que permite la Ley general audiovisual de privatizar las televisiones públicas autonómicas. Estamos seguros de que existirían muchos empresarios canarios dispuestos a hacer un producto competitivo y con buenos gestores al frente. Estamos convencidos de que la misma sería totalmente rentable.

Antes de finalizar, quiero reiterar que el Grupo Popular no está pidiendo hoy el cierre de la Televisión Canaria, lo que pedimos es que el Gobierno de Canarias inicie el procedimiento que marca la ley para proceder a su privatización.

Y algo importante que también quiero destacar es que la Televisión Canaria y el Gobierno tienen que cumplir con las obligaciones que han contraído. En la actualidad una empresa que ganó un concurso es la encargada de realizar sus informativos. Hablamos de infraestructuras, de medios técnicos y de capital humano. Evidentemente la Televisión Canaria y el Gobierno, como no puede ser de otro modo, tienen que cumplir con sus compromisos.

Señorías, estamos ante una situación económica complicada que requiere respuestas, soluciones serias y eficaces. A los problemas de liquidez del Gobierno de Canarias habrá que sumar los recortes que tendrá que afrontar en los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para el próximo año. Así, pues, resulta inaplazable que el Ejecutivo regional se decida a afrontar las reformas y los ajustes necesarios para eliminar los gastos superfluos y a destinar los escasos recursos a financiar lo verdaderamente importante. Y desde luego tener una televisión pública en Canarias no es en estos momentos de dificultad ninguna prioridad. Así lo ha reconocido el secretario general de Coalición Canaria en Tenerife, el señor Fernando Clavijo, o un destacado miembro del PSOE como Javier Abreu.

Por todo ello les pido su apoyo a la proposición no de ley que hoy el Grupo Popular somete a la consideración de esta Cámara, por la que el Parlamento de Canarias insta al Gobierno de Canarias a iniciar, con carácter de urgencia, el procedimiento pertinente para sacar a concurso y privatizar el ente público Radiotelevisión Canaria.

Muchas gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, don Víctor Moreno.

Hay una enmienda de sustitución del Grupo Parlamentario Mixto.

Don Román Rodríguez.

El señor Rodríguez Rodríguez: Señorías.

Hay varias maneras de intervenir en esto de la política, unas más rentables que otras. Cierto es que unas también más coherentes que otras. Hay gente que hace una cosa cuando está en el Gobierno y la contraria cuando está en la Oposición e incluso hay gente que dice una cosa en la campaña electoral y hace otra cuando llega al Gobierno. Y no les va mal, tampoco es que yo crea que les vaya mal, lo que digo es que esa es una manera de proceder y otros hemos elegido otra, que tiene algunos inconvenientes pero tiene una ventaja, y es que es más difícil que te echen en cara las incoherencias, ¿no?

Yo en esta tribuna, estando en la Oposición, además un grupo pequeño, hemos venido aquí en más de una ocasión a proponer al Gobierno medidas impopulares pero yo creo que correctas. Hemos venido aquí a pedir al Gobierno que suba determinados impuestos para atender determinadas necesidades sociales. Lo habitual es que cuando uno está en la Oposición esto lo haga quien gobierna, que para eso gobierna y debe asumir las consecuencias, pero lo hemos hecho y lo vamos a hacer las veces que sean necesarias porque nos parece que la política obliga a ser riguroso, serio y coherente, se esté en el Gobierno o en la Oposición, antes y después de los procesos electorales.

Hoy venimos aquí a defender una cuestión que seguramente habrá gente que si me escucha no comprenda lo que digo, pero nosotros la vamos a defender porque creemos en nuestras ideas, creemos en nuestros valores y creemos en determinados principios para garantizar una convivencia y un futuro para todos. Yo soy de los que creo -y lo he defendido siempre- que en los países democráticos los medios públicos, de titularidad pública, son muy importantes para garantizar la información veraz y objetiva, para garantizar el pluralismo, para que la información no solo sea un negocio sino un servicio, para que cuando la cuenta de resultados no da se pueda informar sobre El Hierro o sobre las lluvias. Defiendo la existencia de medios de titularidad pública como servicio básico que contribuya a la cohesión, a la democracia, al pluralismo, al rigor, a la información, a la educación de la gente. Y yo, por lo tanto, entonces, ahora y espero que mañana defiendo la necesidad de este tipo de instrumentos, que no son un lujo si se hacen bien, si se hacen de forma eficiente, que no tienen que ser un instrumento partidista, si se hacen bien, sino que pueden ser, esencialmente, un elemento de cohesión en una sociedad además con notables elementos de desvertebración, como es la sociedad canaria.

De manera que nosotros, aunque no sea lo normal y estando en la Oposición, defendemos la continuidad de la radiotelevisión pública. Cierto es que no nos gusta el modelo vigente. No nos gusta el modelo vigente como no nos gusta el modelo que han vuelto a colocar a nivel de España. Creemos que un medio de comunicación de titularidad pública tiene que tener unos rectores basados en el consenso de la mayoría parlamentaria, de la mayoría de los representantes del pueblo. Quien dirija un ente de estas características no puede ser el amigo del de turno, tiene que ser un profesional que tenga un amplio apoyo en la Cámara correspondiente. Debe haber un consejo de administración también plural y con un amplio apoyo de la Cámara correspondiente y tiene que haber un consejo de redacción, un consejo de profesionales, una redacción que anteponga la información veraz y rigurosa al uso partidista y táctico de un instrumento como este.

Y, por lo tanto, nosotros, aprovechando este desliz del Partido Popular, nosotros proponemos a esta Cámara, si aceptara el proponente la enmienda, coger el toro por los cuernos y traer aquí una ley de radiotelevisión pública que vuelva a poner las cosas en su lugar, en su cauce; que tengamos estos medios austeros, adaptados a las circunstancias de crisis y sin demagogia; y que sobre todo se democratice, sobre todo que este Parlamento pinte sobre la decisión de quién lo dirige, la decisión de quién debe administrarlo y sobre todo darles poder a los profesionales para que la línea editorial represente lo más profesional, lo más independiente posible.

Sé que el éxito no está en absoluto garantizado con esta enmienda, pero esta es nuestra posición política, antes, ahora y mañana. Esto lo dijimos en la campaña electoral y lo decimos ahora. Lo haríamos si tuviéramos poder y no lo hacemos pero lo proponemos porque no lo tenemos.

Y acabo haciendo una referencia a lo que yo creo que no es bueno para la política, incluso pudiera ser bueno para quien lo promueve, ¿no?, y es -insisto- hacer lo contrario de lo que han hecho, ¿no? Es decir, aquí el Partido Popular ha gobernado esta comunidad en tiempo de crisis y la radiotelevisión pública se ha mantenido en tiempo de crisis. El Partido Popular ha criticado aquí, durísimamente, la decisión de la Policía Canaria y el Partido Popular compartió la decisión de la Policía Canaria. De manera que no se puede hacer una cosa y decir la contraria.

Y con respecto a los supuestos gastos superfluos y los despilfarros, no sé cómo lo voy a hacer pero lo voy a hacer -lo digo para que se organicen-, voy a traer a esta Cámara los gastos superfluos del Cabildo de Gran Canaria. No, no, no sé cómo lo voy a hacer, ya me buscaré el mecanismo reglamentario para hacerlo, pero lo voy a traer para ver si ustedes son capaces de mantener la coherencia donde gobiernan. Porque el Cabildo de Gran Canaria gasta dinero de todos en un momento de crisis extrema en asuntos que nada tienen que ver con las necesidades de la gente, por ejemplo en las gradas del estadio de Gran Canaria. A ver qué necesidad tenemos de gastarnos 5-6 millones de euros. Yo no sé por qué no lo utilizan los partidos del Gobierno. Yo no estoy aquí para hacer la oposición al Partido Popular en esta Cámara, estoy aquí para hacer oposición a los que gobiernan, legítima, alternativa y constructiva. Allí lo digo. Pero me parece poco razonable que se utilicen argumentos de estas características. Digan ustedes de frente las cosas. ¿Saben?, Esperanza Aguirre -no la votaría en la vida, no-, por lo menos dice las cosas, por lo menos dice las cosas de frente. Me gusta Esperanza Aguirre en el sentido... y su sucesor lleva el mismo camino, que no hace como ustedes aquí, que no dicen las cosas de frente. Digan ustedes... (Ante un comentario que se suscita desde los escaños.) Claro. Yo no la votaría en la vida, ni a ella ni a ustedes, pero ella tiene una ventaja sobre ustedes, y es que dice las cosas de verdad y de frente. No se puede hacer una cosa y la contraria.

Y a mí me gustaría, me gustaría, que ustedes aceptaran esta enmienda y se pusieran a hacer, junto con el resto de la Cámara, una ley en relación a la radiotelevisión pública que ponga el control de ese instrumento en manos de la mayoría de esta Cámara, donde ustedes jugarían un papel relevante; que pusieran en la radiotelevisión pública un consejo de administración que se renovara cuando corresponde y que representara el pluralismo político de esta Cámara; y que tuviéramos un consejo de redacción en la radiotelevisión pública que la legitimara ante los ciudadanos como un servicio de información, de comunicación, de cohesión y no se convirtiera solo en un aparato al servicio del Gobierno de turno. Creo que esto sería lo razonable, pero yo sé que no es lo que impera en política y es más fácil apuntarse al chascarrillo, al oportunismo de última hora.

Y una cuestión que casi se la pido a nivel personal, porque yo puedo entrar en ese terreno también y no se trata de amenazar a nadie, pero no confundan ustedes a los ciudadanos diciendo que el problema de la cirugía cardiaca infantil... -que desgraciadamente está en debate y que espero que se resuelva, por la vía que se deben resolver los problemas serios, anteponiendo el interés de los chicos, de su familia y de los ciudadanos de Canarias, espero que se resuelva- tratando de hacer política de bajo vuelo sobre asuntos como este. Yo espero que no lo hagan. ¿Saben por qué?: porque, aunque no lo aparenten, tienen ustedes más posibilidades de volver al Gobierno que yo. Tienen ustedes -escúchenme bien, interpreten esto porque tiene truco-, tienen ustedes más posibilidades de volver al Gobierno que yo y entonces las cosas que se hacen y se dicen se convierten en una losa. Aprendan ese tema porque ustedes son un partido de gobierno, de alternancia. No quemen las naves, sean responsables, sean sensatos. Vean las cosas en perspectiva y no quemen las naves antes de tiempo. Acepten esta enmienda e iniciaremos una nueva andadura en este Parlamento en favor de un servicio público que yo creo que en estos momentos desgraciadamente no lo es en lo sustancial, desgraciadamente, pero que nosotros defendemos, aunque no tocaba hacerlo nosotros hoy aquí, pero, bueno, para eso estamos.

Muchísimas gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, don Román Rodríguez.

Don Víctor Moreno, para fijar posiciones sobre la enmienda.

El señor Moreno del Rosario (Desde su escaño): Gracias, señor presidente.

Señor Rodríguez, señor Rodríguez, le respondo a su enmienda.

El Grupo Popular no puede estar más de acuerdo con el panorama idílico que nos propone el Grupo Mixto en su enmienda para la Radiotelevisión Canaria. En ella propone que el director general del ente público sea elegido por el Parlamento, por cierto, tal y como propuso el Grupo Popular en una proposición de ley que trajo a esta Cámara y que algunos, que llevaban en su programa electoral, votaron en contra.

También contempla un consejo de redacción que garantice unos servicios informativos plurales y rigurosos, tal como viene haciendo muy bien, por cierto, Televisión Española (Rumores en la sala).

Y, por último, una programación de calidad, y, por último, una programación de calidad. Señoría, todo eso, todo eso le reconozco que nos encanta, todo eso nos encanta, por eso le digo que ojalá fuera posible; sin embargo, señorías, sin embargo, señorías, estamos ante una situación económica muy complicada. Es inaplazable que el Gobierno de Canarias lleve a cabo las reformas y los ajustes necesarios para eliminar los gastos superfluos y destinar los pocos recursos que hay a lo verdaderamente importante. Sinceramente, mi grupo parlamentario cree que cuando hay tantas necesidades tener una televisión pública en estos momentos no es una prioridad.

Que nadie se deje engañar, señorías: el Grupo Popular no quiere que haya despidos. El Gobierno está alargando una decisión que tarde o temprano tendrá que tomar y muchos nos tememos que será demasiado tarde.

Por todo ello, señorías, señor presidente, por coherencia y por responsabilidad, no vamos a aceptar la enmienda.

Muchas gracias.

El señor presidente: Muchas gracias, don Víctor.

Fijación de posiciones de los grupos. Grupo Socialista Canario, doña Belinda Ramírez tiene la palabra.

La señora Ramírez Espinosa: Gracias, señor presidente. Muy buenas tardes a todos.

Señorías, la exposición de motivos de esta proposición no de ley alude a razones como la actual coyuntura económica, al compromiso con la estabilidad presupuestaria, habla de esfuerzos para atender los servicios públicos y finaliza diciendo que "en la línea de optimizar los recursos públicos, el Gobierno de España reformó la Ley General de la Comunicación Audiovisual". Para optimizar recursos públicos: ¿a quién quieren engañar, señorías? Todos sabemos que la modificación o la reforma de la Ley General de la Comunicación Audiovisual llevada a cabo por el Partido Popular responde al único criterio del Gobierno de Rajoy de ejercer un control absoluto de los canales públicos, controlarlos y manipularlos. Allá donde gobiernan y donde pueden y les interesa los mantienen con su control político y donde no es así intentan la vía más fácil y la que más les conviene: la privatización.

Yo espero, señorías, espero que el Partido Popular no tenga en Canarias la misma intención que supuestamente hay en Madrid, donde supuestamente quieren privatizar Telemadrid, pero antes se encargan de que algunas empresas, de las que más posibilidades tienen de optar a quedarse con la tele autonómica, estén en manos de algún alto cargo del Partido Popular, por ejemplo algún ex ministro que ahora es consejero en una de esas empresas. Así se aseguran que la tele pública siga en sus manos, claro. No nos intenten engañar ni se engañen a ustedes mismos: ustedes lo que quieren es otorgar las televisiones públicas a grupos mediáticos afines a su formación política.

Es verdad, decía el señor Moreno en alguna ocasión que hay muchísimas empresas capacitadas, es verdad, con profesionales de acreditada trayectoria profesional que pueden prestar el servicio, pero mucho me temo, señorías, que los procesos de privatización de las radiotelevisiones autonómicas que ustedes quieren liderar no van a estar exentos de intrusismo político, de manera que sean total y absolutamente independientes del Gobierno, que es el primer condicionante que se requiere a priori para que un medio de comunicación público empiece el camino hacia la buena gestión, hacia una gestión independiente y plural. Algo a lo que, desde luego, las reformas legislativas llevadas a cabo por el Gobierno de Rajoy, haciendo uso de su mayoría absoluta, no contribuyen en absoluto. Al contrario, lo han hecho de tal manera que les permite no solo privatizar sino además el control total y absoluto de Televisión Española, en la que, después de la transformación que experimentó en la época de Zapatero, reconocida desde todos los ámbitos, incluso por la propia Audiencia... Hizo lo que nadie había hecho antes, una televisión pública independiente y plural, pero llegó el PP y, tal y como supuestamente decía algún ministro en los pasillos del Congreso de los Diputados, vamos a hacer uso de esta mayoría absoluta para cambiar el régimen de las televisiones públicas. ¡Y vaya que sí lo hicieron, vaya que sí la usaron, porque, ipso facto, por medio de un decreto-ley, eliminan de un plumazo y cambian el régimen de nombramiento de los máximos responsables de Radiotelevisión Española, de manera que si antes hacían falta los dos tercios de los votos del Congreso para su elección, obligando así a un acuerdo entre todos los grupos políticos, ahora no, ahora basta la mayoría absoluta. Así, el Consejo de Administración de Radiotelevisión Española cuenta con 6 consejeros a propuesta del Partido Popular, 1 por CiU, 1 por Izquierda Unida y 1 por el Partido Socialista. ¡Esa es la pluralidad que tanto reivindica el PP para las televisiones públicas!

Pero desde luego eso no es lo que nosotros queremos para nuestra Radiotelevisión Canaria. Nosotros queremos fiscalización parlamentaria, pero no control político, y la privatización no deja de ser una herramienta más de control desde el punto de vista informativo, desde el punto de vista de participación ciudadana, educativo, social, de proximidad. Por lo tanto, creemos que cabe buscar otras fórmulas distintas a la privatización, de manera que sea una televisión pública viable, pero por supuesto con una reducción importante de los fondos procedentes de las arcas públicas, reducción totalmente necesaria en época de crisis.

Por ejemplo, otra fórmula, incorporando capital privado al ente, convocando concursos públicos para la explotación de determinadas franjas horarias, convenios de colaboración entre el sector cultural y audiovisual de Canarias. Hay que buscar otras fórmulas de gestión que garanticen el control democrático en los contenidos y en la financiación, a través de las que se delimiten las competencias, se ajusten los medios y la programación a las necesidades reales y a la situación económica actual, pero siempre garantizando su objetivo de servicio público y el futuro laboral de los trabajadores que trabajan en ella, que no dependa nunca del gobierno de turno, y eso no se conseguirá con la privatización.

Ahora bien, y esto lo digo tanto para los miembros del Gobierno como para los grupos que apoyamos al Gobierno, de los que formo parte, es urgente y totalmente necesaria la modificación de la actual ley que regula el ente de la Radiotelevisión Canaria. Así que trabajen en ello, trabajemos en ello, para que esa modificación vea cuanto antes la luz, porque no creemos en la privatización, pero desde luego tampoco creemos en el actual modelo de Radiotelevisión Canaria que tenemos... (Corte del sonido producido por el sistema automático de control del tiempo y el presidente le concede un tiempo adicional.)

El señor presidente: Sí.

La señora Ramírez Espinosa: Gracias, señor presidente.

Señorías, de verdad, señorías del Partido Popular, ¿ustedes creen que privatizar la Radiotelevisión Canaria resuelve los problemas de financiación de la comunidad autónoma? ¿De verdad creen que las carencias en sanidad, en educación, en los servicios básicos de Canarias, se resuelven privatizando la Radiotelevisión Canaria? ¡Ojalá fuera tan sencillo y tan fácil, ojalá! Todos sabemos que no es así. Así que no jueguen con la mala situación económica que estamos atravesando para justificar con ello la privatización del ente, porque, por desgracia, eso no lo soluciona.

Decía el señor Moreno que hay mucha gente que lo está pasando mal, ¿pero saben cómo se ayuda a esa gente que lo está pasando mal?: votando a favor de las enmiendas presentadas en los Presupuestos Generales del Estado para dotar financieramente las partidas que han dejado a cero para Canarias, levantando la mano a favor para aumentar la partida del Plan integral de empleo de Canarias, del Convenio de Carreteras, del Convenio de obras hidráulicas, del Convenio de infraestructuras turísticas, etcétera, etcétera, etcétera, y no votando en contra como hicieron ustedes; corrigiendo el desastre de gestión que están llevando a cabo con el desmantelamiento de la sanidad pública, poco a poco, entre el copago y la privatización de hospitales y centros de salud, y corrigiendo el desastre que han hecho con la Ley de Dependencia, por ejemplo, que también...

El señor presidente: Gracias, doña Belinda.

Por el Grupo Parlamentario Nacionalista Canario, doña Nuria Herrera.

La señora Herrera Aguilar: Gracias, señor presidente.

Dos anotaciones, señor presidente, con respecto a las intervenciones que se han realizado por el que me ha precedido en el uso de la palabra y que no voy a rehuir.

Hablan de las manifestaciones realizadas por nuestro secretario general insular en la isla de Tenerife con respecto a la Televisión Canaria. ¿Y eso saben cómo se llama, señores diputados del Partido Popular?: libertad de expresión, cosa que no veremos nunca en el Partido Popular de Canarias (Rumores en la sala).

Con respecto a la segunda cuestión, sí me gustaría hacer referencia... Un poquito de respeto, por favor. Señor presidente...

El señor presidente: Señorías, por favor, sí, guarden silencio (Continúan los rumores en la sala). Guarden silencio, por favor.

¡Por favor!, no puede hablar sino quien está en la tribuna de oradores.

Gracias.

Doña Nuria, continúe.

La señora Herrera Aguilar: Gracias, señor presidente.

La Televisión Canaria es un medio público de comunicación que tiene cobertura constitucional, no meramente política, aunque, visto lo visto, el cumplimiento de algunos mandatos constitucionales al Partido Popular le produce cierta urticaria o alergia.

La verdad es que, en función del acuerdo que se pretende adoptar por parte del Partido Popular, fue bastante surrealista, por no calificarla de otra forma, la exposición de motivos que presenta. Hace referencia, para justificar el acuerdo a adoptar, a que debe abandonarse el discurso de que todo va bien, que hay que asumir la realidad, que hay que afrontar las reformas justas y necesarias, y en este sentido la verdad, francamente, señor portavoz del Partido Popular, ni usted se cree lo que ha escrito en la exposición de motivos. Hay una canción infantil que dice Vamos a contar mentiras. Ustedes no han cumplido nada de lo que han prometido.

Nosotros -y lo ponen ustedes en la exposición de motivos-, nosotros nunca hemos dicho que todo va bien; al contrario.

Y con respecto al objeto de esta iniciativa nosotros, con respecto a la Televisión Canaria, desde el año 2008 se han ahorrado casi 30 millones de euros.

Habla usted de respuestas eficaces. ¿Se refiere usted con respuestas eficaces a lo que decía el presidente del Gobierno, el actual, en octubre del 2011, antes de la celebración de las elecciones generales, cuando decían que estaban preparados para gobernar y sacar a España de la crisis, llevando un importante paquete de medidas estructurales se revertiría la situación? ¿Cuáles, una reforma laboral que abarata el despido y es lesivamente dañosa para los jóvenes y para las mujeres? La cual, por cierto, ha sido recurrida ante el Tribunal Constitucional.

Habla usted de destinar los recursos a lo verdaderamente esencial. Si para el Partido Popular lo verdaderamente esencial es cumplir el objetivo de déficit con políticas económicas que asfixian a los ciudadanos, eso es lo realmente esencial para el Partido Popular. Deben abandonar su discurso, señorías del Partido Popular, ya no cala. Su objetivo es privatizarlo todo. Es un discurso falso. A ustedes no les gustan los medios de comunicación públicos, no les gusta la Televisión Canaria, no les gusta una televisión hecha aquí que hable de nuestras cosas y que sea un elemento cohesionador de nuestro territorio, ¡no les gusta!

Además -y esto se lo quiero decir a todos los que quieran escuchar- el modelo actual de la Televisión Canaria está avalado por la Ley General Audiovisual actual en su artículo 40, que recordaría o que sería bueno que alguno procediese a su lectura, siendo, y así se dijo en el Congreso de los Diputados por todas las formaciones políticas que intervinieron, que era el modelo fácilmente exportable en épocas de crisis económica. ¿Qué televisión privada va a hablar de nuestras costumbres por lo menos durante más de un minuto, señor portavoz del Partido Popular?

La función debe llegar a su fin. Si ni siquiera saben ustedes lo que quieren. Ahora toca la postura, intervino usted y lo primero que realiza en su intervención es decir que ustedes apoyarán a los profesionales y que nunca han dicho o que hoy no apuestan por cerrar la Televisión Canaria. Si el pasado 15 de junio de 2012 el señor Miguel Cabrera Pérez-Camacho pedía su cierre; o don Jorge Rodríguez, en pasadas comisiones parlamentarias. Ahora usted, hoy, dice que la solución no pasa por los despidos. A ustedes realmente, señor portavoz del Partido Popular, ¿sabe lo que ocurre, la verdad?, a ustedes no les importa realmente ni el coste económico ni los planes de viabilidad ni sus trabajadores; ustedes lo que defienden, frente a un modelo de cohesión territorial, es un modelo de negocio popular. De ahí los ejemplos que están ocurriendo en comunidades autónomas como Murcia y Baleares.

La crisis económica, señorías, no puede ser una razón para acabar con el Estado de las Autonomías. No puede ser la razón para que el Partido Popular determine la ideologización de todo, porque esto es lo que se oculta detrás de la mayor parte de las iniciativas del Partido Popular, que el pensamiento único centralizador penetre en la ciudadanía. Y yo me pregunto: ¿por qué no han pedido el cierre o la privatización de Televisión Española, que sí podría calificarse como que constituye, lógicamente, un agujero sin fondo, como se suele decir?

La situación económica -creo que debe estar claro- no se va a solventar ni con la Televisión Canaria ni sin la Televisión Canaria y la causa de la crisis económica tampoco es la Televisión Canaria. Nosotros seguimos apostando por sistemas o por medios públicos de comunicación. Tendrían que hacerle más caso, lógicamente, a lo que dice la presidenta del Fondo Monetario Internacional con respecto a la política económica que está llevando, lógicamente, el Partido Popular.

No podemos apoyar su iniciativa, en definitiva, señor portavoz, porque su motivación real es una motivación de carácter ideológico. Decía Voltaire: "no comparto lo que dices pero defenderé hasta la muerte...

El señor presidente: Un minuto, doña Nuria, para ir terminando.

Continúe, sí.

La señora Herrera Aguilar: Esta máxima, señorías, no debe gustarle mucho al Partido Popular: miren lo que están haciendo con la Televisión Española y el resto de las televisiones autonómicas.

Nada más y muchas gracias.

(Pausa.)

El señor presidente: Disculpen, señorías, vamos a votar la proposición no de ley del Grupo Parlamentario Popular, sobre la privatización de la Radiotelevisión Canaria. Que no se han admitido las enmiendas; por lo tanto, se vota el texto de la proposición no de ley. Comienza la votación (Pausa).

Resultado de la votación: 50 presentes; 16 a favor, 34 en contra y ninguna abstención.

Queda rechazada.

Un momentito. Entonces, en lugar, señorías, en lugar de 16 votos en contra son 17. No creo que merezca... A favor, tiene razón (Dirigiéndose a la señora Tavío Ascanio). Disculpen.

Sí. Serían los votos que había, que eran 38 votos en contra y 17 a favor. Ese es el resultado que queda reflejado. Bien.

(Abandona su lugar en la Mesa el señor presidente y le sustituye el señor vicepresidente segundo, Fernández González.)

(Ocupa un escaño en la sala el señor secretario primero, González Hernández.)