Diario de Sesiones 109, de fecha 12/2/2014
Punto 4

8L/PNL-0280 PROPOSICIÓN NO DE LEY DEL GRUPO PARLAMENTARIO NACIONALISTA CANARIO (CC-PNC-CCN), SOBRE LA SAL MARINA ARTESANAL PRODUCTO AGROALIMENTARIO.

El señor PRESIDENTE: Entonces, pasamos al cuarto punto, proposiciones no de ley. Del Grupo Nacionalista Canario, sobre la sal marina artesanal como producto agroalimentario. Tiene una enmienda del Grupo Parlamentario Popular.

Don Ignacio González Santiago (Pausa).

(Abandona su lugar en la Mesa el señor presidente. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente primero, Cruz Hernández.)

El señor GONZÁLEZ SANTIAGO: Buenos días, señorías.

Subo a esta tribuna para defender una proposición no de ley para conseguir la pervivencia de una actividad, posiblemente la más antigua de las islas, las salinas artesanales canarias. Se dice que son anteriores a la llegada de los españoles, se dice que con métodos, en su momento, de origen romano, fenicio. Desde luego, la primera salina artesanal industrial data de 1530, por lo tanto, más de 400 años, y siguen funcionando, si bien con muchas dificultades.

El motivo de esta proposición no de ley es intentar suavizar algunas de esas dificultades para que este sector agroalimentario pueda seguir en funcionamiento en las islas. Un sector, por lo tanto, con un incuestionable valor histórico y etnográfico, además de las propiedades de la sal marina producida en las salinas artesanales canarias como alimento. Un sector que llegó, en su momento, allá por los siglos XVII y XVIII, a ser tan importante como para poner en entredicho las salinas más importantes entonces del imperio -las de Matas y la bahía de Cádiz-, lo que motivó que se prohibieran entonces la aprobación de nuevas instalaciones salineras en Canarias. Un sector que creció en Canarias paralelo al crecimiento de las actividades pesqueras y conserveras, y que, por lo tanto, su declive fue también paralelo a la aparición, después de la II Guerra Mundial, del frío como principal método para conservación de alimentos.

Como digo, en su momento, Janubio -que sigue existiendo, redimensionada hoy- llegó a abarcar una superficie de medio millón de metros cuadrados, la más importante del mundo. El declive no solo fue motivado por, como digo, la aparición de otros métodos de conservación para el pescado basados en el frío y no la sal, sino también por la aplicación de una legislación que surge para aumentar o gravar la fiscalidad de las instalaciones mineras. En este caso, en la ley primero del 44 y después del 73, la ley franquista del 73, Ley de Minas, incluye la sal también, la producida por métodos artesanales en Canarias, en las salinas canarias, como producto minero. Y eso, aparte de la fiscalidad, ha impedido que se considere como lo que es: una actividad agroalimentaria, que no depende de una máquina, sino, como cualquier finca y cualquier explotación agraria, de la naturaleza, de las mareas y del sol para evaporar el agua y dejar la sal marina. Lo que quiere decir que, si estamos hablando de estos métodos tradicionales de producción, estamos hablando de una actividad agroalimentaria.

Y por eso proponemos, en el primer punto de nuestra proposición no de ley, que se cambie el régimen que se le aplica a las instalaciones salineras artesanales canarias del régimen minero a ser considerado lo que es: un producto agroalimentario. Porque de esa manera se puede incorporar junto con otros productos agroalimentarios -todos más jóvenes que este, menos tradicionales y con menos valor histórica y pervivencia en el tiempo, más modernos que este; este es el más canario de todos- a los programas de ayuda para los productos agroalimentarios en la Unión Europea, lo que quiere decir que ese cambio de régimen, desde la aplicación del régimen minero contemplado en la Ley de Minas, a ser considerado, como lo que es, un producto agroalimentario, es una pieza clave y previa a cualquier otra consideración.

Por ejemplo, una de las dos enmiendas que propone el Partido Popular tiene que ver mucho con el primer punto al que nos estamos refiriendo, que, como digo, es el cambio del régimen jurídico, porque dice "que el Gobierno de Canarias incorpore una línea específica de apoyo para los productores de sal marina de las islas dentro del Programa de Desarrollo Rural de Canarias 2014-2020", programa destinado a productos agroalimentarios. Por lo tanto, primero hay que cambiar el régimen jurídico que se le aplica a la sal artesanal marina canaria. Nosotros, ya me adelanto, no tendríamos ningún inconveniente -porque para eso estamos presentando esta proposición no de ley- de enriquecerla con el añadido de este párrafo que propone el Partido Popular.

En segundo lugar, en la PNL proponemos que se aumente el tipo del AIEM, para este producto. No para todas las sales, para este producto, las sales producidas de manera artesanal en Canarias desde la época que dije antes, desde hace más de cuatro siglos. Solo para ese producto.

Por otro lado, hablamos de las ayudas necesarias para rehabilitar aquellas salinas que se han ido reduciendo en número en el tiempo, en ese largo periodo de tiempo, y que en este momento en explotación son 9 en diferentes islas. La de Fuencaliente, en La Palma; Bufadero, Boca Cangrejo, Florida, Arinaga y Tenefé, en Gran Canaria; El Carmen, en Fuerteventura; y Teguise, Yaiza y Janubio, la más importante, en Lanzarote. Lo que quiere decir que, si no queremos perder esta industria agroalimentaria, tendremos también que ayudar a la rehabilitación de las que todavía están en funcionamiento.

Y después algo muy importante que se ha conseguido recientemente para otro producto también antiquísimo en Canarias, que data de épocas aborígenes, el gofio: la denominación de origen protegida. Una vez que se cambie el régimen aplicable y se considere un producto agroalimentario -más nuestro que el gofio es la sal marina producida en las salinas artesanales centenarias en Canarias-, solicitaremos que se comience el expediente para conseguir la denominación de origen protegida para este alimento, que consideramos nosotros -y por eso instamos el cambio de régimen jurídico aplicable- un alimento agroalimentario al que se le puede aplicar también esa denominación de origen protegida.

La posición de mi grupo es completamente abierta a la incorporación de cualquier sugerencia o enmienda para defender a este sector. Ya es hora de que, después de tantos siglos, hagamos algo para defender a un sector que sin ayuda, en un declive evidente, con cambios en los mercados internacionales en el sistema que fundamentaba su origen, en el de conservación, así y todo han pervivido, y ha demostrado que son algo más que una actividad agroalimentaria, y, por lo tanto, creo, creemos, que ha llegado el momento de echarles una mano para que sigan perviviendo, para que sigan existiendo y en mejores condiciones que hasta ahora.

Muchas gracias, señorías, y espero que los intervinientes posteriores del resto de los grupos valoren en su importancia esta proposición no de ley y, sobre todo, que es lo más importante ya que parte del propio sector, la necesidad de hacer algo y de hacerlo ya.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.

A esta proposición no de ley se ha presentado una enmienda del Grupo Parlamentario Popular. Para su defensa, doña Ana Guerra, por tiempo de diez minutos, tiene usted la palabra.

La señora GUERRA GALVÁN: Gracias, señor presidente.

Se necesita tener desfachatez, señor González. Traer esta PNL a esta Cámara hoy es un insulto a los ciudadanos canarios y a los productores de sales marinas. Y le voy a decir y le voy a explicar el porqué.

En diciembre del 2010, hace ya más de tres años, en esta Cámara se aprobó por unanimidad una proposición no de ley con nueve puntos dirigida a impulsar la producción de sales de las islas. Pero señorías... -me gustaría que me escuchara, señor González... sí- (Ante comentario del señor González Santiago, que le dice que le está escuchando); pero, señorías, lo más curioso es que fue Coalición Canaria quien hizo la propuesta hace más de tres años; y hoy vuelven a traer a este Parlamento una iniciativa sobre lo mismo. Señores de Coalición, el Gobierno de Coalición Canaria ya tiene una proposición no de ley con el mandato de favorecer a los productores de sal marina de Canarias. Mire, señor González, ¿qué han hecho? Pues se lo voy a decir: absolutamente nada. ¿Qué hace su grupo que no exige a su gobierno que cumpla lo que se aprobó por unanimidad?

Mire, el lunes me reuní con los productores de sal, y la principal reivindicación de los productores curiosamente no aparece en esta proposición de ley, que es la ayuda a la comercialización.

Señorías, si aprobamos esta proposición no de ley tal y como está, seguiremos cayendo en el mismo error de siempre, que es considerar a la agricultura, la ganadería, la pesca y la alimentación de una forma aislada, y eso, créanme, es una equivocación. Estamos hablando de sectores productivos que pueden generar actividad económica y pueden generar empleo.

Mire, en primer lugar, lo principal para los salineros de Canarias es vender la sal. Y el Gobierno de Canarias, del que usted forma parte, tiene el mandato desde el año 2010, a través de una proposición no de ley incumplida. Y, en segundo lugar, por supuesto, piden que se les ayude a rehabilitar las salinas. Mire, a nosotros nos parece verdaderamente increíble que en Canarias la sal marina no tenga aparejada una industria potente, fuerte. En Canarias llegó a haber nada menos que 60 salinas. En la actualidad solo hay 9 en producción. Y esto solo representa, como usted bien sabe, señor González, porque veo que está muy al tanto de esto, un 10 % de la cuota de mercado de Canarias. Un 10 % de la sal que se consume. Pero, mire, es evidente que tendremos que hacer algo, pero la PNL que ustedes nos han traído hoy a debate no representa a los productores, señor González. Ahora vamos a ir punto por punto de su PNL.

Primer punto. Dicen ustedes solicitar al Gobierno de la nación pasar las salinas del régimen minero a la agrícola, para que la sal marina tenga el carácter de producto agroalimentario. Pues bien, señorías, en noviembre del 2011 el Consejo de Ministros ya modificó esa norma, y la adaptó a la normativa de la Unión Europea. Existen, por tanto, las denominaciones "flor de sal" y "sal marina virgen". También el Reglamento europeo 1151/2012, del 21 de noviembre, establece claramente que la sal, señor González, es producto alimenticio. Como ven, el Gobierno de la nación y la Unión Europea cumplen con su parte de la PNL aquella del 2010. Desgraciadamente, no podemos decir lo mismo del Gobierno de Canarias. Lo raro, señorías, tristemente, es que este Gobierno lo hubiese cumplido.

Pues mire, punto dos, señores de Coalición Canaria. En el punto dos de la PNL que ustedes presentan, mire, es increíble, ¿hablan ustedes de subir los impuestos a la sal? ¿Pero, señoría, usted habla en serio? ¿Cómo le va usted a explicar a los consumidores que van a subir el tipo del AIEM de la sal importada en Canarias? Mire, los propios productores cuando les enseñé esta propuesta se tiraron manos a la cabeza, decían que eran inviables. Y yo le digo, espero que usted retire ese punto de su PNL.

Y, ahora, voy a hacer una serie de preguntas, señor González, a ver si usted sabe responderme. ¿Por qué el Gobierno no favorece una bajada del IGIC a los productores de Canarias?, ¿o bien que se facilite su acceso al REA? ¿O desde luego campañas de promoción y de difusión para la sal de Canarias? Ya les digo que el Grupo Popular no va a apoyar en ningún caso que se suba el AIEM. Por lo tanto, el punto dos de la PNL nos parece inaceptable. Y pedimos, señor González, que reconsidere esta propuesta, que, por cierto, los productores también ven descabellada.

Mire, puntos tres y cuatro. En estas dos peticiones cuente con el apoyo del Grupo Popular. Nosotros creemos que el Gobierno de Canarias tiene la responsabilidad de rehabilitar estas construcciones, algunas de ellas muy antiguas y de alto valor cultural. Hablamos de construcciones que tienen siglos de existencia, la gran mayoría, por supuesto, está en ruinas.

Mire, y es más, vamos a ver, y el oleaje, usted sabe muy bien que estos temporales que se han producido estos fines de semana han hecho grandes destrozos en estas instalaciones y, si el Gobierno de Canarias no hace algo por ayudar a nuestros productores, estas salinas se terminarán cerrando.

Señorías, vamos a ver qué pasa con la denominación de origen protegida para la sal marina de Canarias. Les animamos, señores de Coalición Canaria, a exigir al consejero de Agricultura, que está aquí hoy oyéndonos, que trabaje y desbloquee los expedientes; pero no los de la sal de Canarias solo, todos los que son de su responsabilidad. Mire, el caso de la sal marina no es diferente al resto. Este Gobierno vive en la pura desidia. Desde el año 2010, en que comenzó la tramitación de la denominación de origen, lo único que tenemos es una declaración de buena voluntad.

Señorías, en conclusión, le proponemos una enmienda de sustitución que nosotros creemos que es muy positiva y viene a mejorar lo que ustedes nos presentan. Les proponemos cambiar los puntos uno y dos de la proposición no de ley y ajustarla a lo que piden de verdad los productores. Primer punto: que el Gobierno de Canarias incorpore una línea específica de apoyo para los productores de sal marina de las islas, dentro del Programa de Desarrollo Rural de Canarias 2014-2020, y que permita la recuperación de las estructuras salineras existentes. Miren, los productores me lo pidieron y estamos en el mejor momento posible. El Programa de Desarrollo Rural 2014-2020 está en fase de avance, y el Gobierno debería incorporar a las salinas entre las prioridades para este periodo y subvencionar estas construcciones para que puedan ser, como bien dije antes, mucho más productivas.

Segundo punto: que el Gobierno de Canarias, en colaboración con la Asociación de Productores de Sal Marina de Canarias, coordine acciones que permitan mejorar la comercialización de las sales marinas obtenidas en las islas, y difundir entre los consumidores la calidad y el valor de este producto. Mire, sería muy interesante, señor González, señores de Coalición Canaria y del Partido Socialista, y muy positivo que hoy saliéramos de aquí con un texto acordado y consensuado entre todas las fuerzas políticas; un texto realista que de verdad ayude a los productores de Canarias, y que, por favor, no esté tres años en un cajón esperando a que lo llevemos a cabo.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.

Para fijar posición en relación a la enmienda del Grupo Parlamentario Popular, por el grupo proponente. Señor González, por tiempo de cinco minutos, tiene usted la palabra.

El señor GONZÁLEZ SANTIAGO: Gracias, presidente.

¿Por dónde empiezo? Voy a dejar que el consejero la ilustre, a la ponente que me antecedió en la palabra, a ver si tiene más suerte que yo. Yo lo he intentado antes; espero que el consejero le haya explicado lo siguiente: señoría, hay diferentes tipos de alimentos. Hay algunos que son mineros -ahora mismo la sal, también la artesanal-, y otros agroalimentarios; es por el origen de la actividad. En este caso, la actividad que regula las salinas artesanales canarias es la industrial, la minera. Están sujetas a la Ley de Minas de Franco, la del 73. ¡Y, por lo tanto, es un alimento, claro que sí! ¡Pues va a descubrir ahora que la sal es un alimento y que nos la comemos! ¡Pues claro que es un alimento, pero no es agroalimentario! ¡Por lo tanto, su propuesta, empezando sin la nuestra, no tiene sentido! ¡Ya se lo expliqué antes, si es que yo se lo expliqué antes! (Mostrando un documento a la Cámara.) ¡Si es que esta letra es del consejero!, que espero que haya tenido más suerte que yo para explicarle que, mire, es que pone -la suya-: "siempre que se autorice el cambio a la clasificación de la actividad, porque si es minera no se puede incorporar"; es un programa que es para productos, alimentos, agroalimentarios por su origen. ¡Agroalimentarios, agroalimentarios!

Y mire, para terminar, para que no me crea a mí ni crea al consejero, o por si no nos entiende ni a mí ni al consejero. Y estoy de acuerdo que la sal es un alimento, eso sí que estoy de acuerdo, lo que pasa que es un alimento, en este momento, minero, minero por su origen. No es agroalimentario.

Mire, dice, y después le digo quién: "al margen del carácter preconstitucional de esta legislación -se refiere a la Ley de Minas del 73-, debe resaltarse su carácter obsoleto e inadecuado para dar respuesta a las necesidades actuales del sector. Junto a ello, la calificación de la sal como producto minero -¡minero!- ha tenido como efecto negativo la imposibilidad de acceder al sistema europeo de incentivos previstos para los productos agroalimentarios". ¿Y sabe quién dice eso? El Gobierno de España, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural. Para qué pide usted que se incorpore esto, si ya reconocen ellos mismos lo que yo estoy diciendo. Yo le acepto la enmienda, pero de adición, porque sin la PNL, sin el número 1 de la PNL, lo que usted propone sí que no se puede hacer, y lo dice su ministro, el ministerio, el Gobierno central -que la copié de aquí, a ver qué dice ahora-. Se la acepto, pero no de sustitución, porque entonces eso no va a ninguna parte; se la acepto de adición. Esa es mi posición, así fijo la posición. Se la acepto, pero de adición.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor González.

Señora diputada, doña Ana, a los efectos de si está de acuerdo el Grupo Popular en que sea de adición y no de sustitución -y a solo esos efectos, le manifiesto-, le doy la palabra.

La señora GUERRA GALVÁN (Desde su escaño): No, señor presidente, no se la admito.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias.

Señor González, no admitida la adición sino que manifiesta la sustitución, entiendo que el Grupo Nacionalista rechaza la enmienda, ¿o la mantiene? (El señor González Santiago indica que no acepta la enmienda.) ¿La rechaza? Bien.

Para fijar la posición en relación a la proposición no de ley, que queda exactamente como ha sido propuesta por el Grupo Nacionalista dado que las enmiendas, en razón a lo expuesto, no han sido aceptadas, fija la posición por el Grupo Mixto, doña Carmen. Tiene la palabra por tiempo de cinco minutos.

La señora HERNÁNDEZ JORGE: Gracias, señor presidente.

Buenos días, señoras y señores diputados.

Superado el debate ya de que la sal es un alimento, podríamos entrar en las propiedades nutricionales de la sal, porque también tendría debate. Lo que está claro es que la sal es conocida desde la antigüedad como el oro blanco. En Canarias se sabe que los aborígenes ya recolectaban la sal de las charcas, cultivándola y salando con ella la carne y el pescado. Con el paso de los siglos, y gracias a los primeros gaditanos y portugueses que arribaron a nuestras cosas, se inicia la construcción de las salinas, tal y como las conocemos hoy, para obtener este producto del que hablamos hoy, que es un producto de gran valor como conservante y en la alimentación.

El archipiélago canario -y creo que este dato confirma la necesidad de una iniciativa para proteger una actividad y un producto local- llegó a contar con 60 salinas repartidas en casi todas las islas. Hoy la proposición habla de 10, el dato que yo tenía era 9 -me confirma el ponente que son 9-; por tanto, el descenso en el número de salinas justifica la necesidad de acciones desde el Gobierno de Canarias y desde el Estado para proteger la producción y para proteger la actividad.

Acertadamente, es una actividad y una infraestructura protegida, bien por su interés arquitectónico -es un bien de interés cultural-, o también por su interés natural como espacio natural, al ser, per se, zonas húmedas de gran relevancia para la avifauna, y porque constituyen uno de los modelos de intervención humana más ejemplar por su calidad de diseño, adaptación al medio, referente de la historia, valor cultural, respeto a la tradición, aportación al medio ambiente y a la riqueza patrimonial de las islas Canarias. Por tanto, su valor cultural y patrimonial es claro y también su valor como contribución a la actividad económica.

Por tanto vamos a apoyar la proposición no de ley, nos parece...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Disculpe, señora diputada. Perdón.

Señorías, por favor. Guarden silencio.

La señora HERNÁNDEZ JORGE: Gracias, señor presidente.

Decía que vamos a apoyar la iniciativa, la valoramos, creemos que es importante proteger los productos y las actividades locales.

El punto que tiene que ver con la protección de las salinas artesanales de manera real y efectiva por parte de todas las administraciones; la importancia, como ya ha explicado el ponente, de reconocerla como un producto agroalimentario y no como un producto minero; reactivar -y en eso sí comparto una de las dos enmiendas del Partido Popular- la importancia de reactivar la actividad, y para ello es fundamental el apoyo del Gobierno de Canarias en materia de comercialización, que es en la línea en la que va la segunda propuesta; y, por supuesto, proteger fiscalmente este producto, y la única manera de proteger fiscalmente este producto, o una de las maneras importantes, es desincentivando el consumo de las sales importadas, y eso pasa por subir el AIEM de esas sales importadas.

Por tanto, estamos absolutamente de acuerdo, también se podría desarrollar -que no creo que sea especialmente costoso- algún tipo de campaña informativa y de fomento de lo que es el producto canario, de lo que es la actividad y de concienciación hacia los consumidores para que consuman sal canaria.

Gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.

Por el Grupo Socialista Canario. Doña Belinda Ramírez, por el mismo tiempo de cinco minutos, tiene usted la palabra.

La señora RAMÍREZ ESPINOSA: Gracias. Buenos días, señor presidente, señorías.

Bien, los datos hablan por sí solos. Que de las salinas que existieron en Canarias solo queden ahora mismo aproximadamente unas diez, pues pone en evidencia esa paulatina desaparición, ese deterioro de las salinas marinas artesanales que, sin embargo, estando vinculadas al sector de la pesca, fueron de gran trascendencia en Canarias.

Desde luego, resulta paradójico que en Canarias, con la importancia de la industria artesanal salinera, con lo que supone la sal para nuestro paisaje y nuestro territorio, que hoy día queden tan pocas y que además esas pocas tengan que estar luchando, enfrentándose a los problemas que tienen que sortear para poder subsistir. Las de El Janubio, Fuencaliente, Bocacangrejo, Florida, Arinaga, Tenefé y las salinas de El Carmen, en Fuerteventura, son ejemplo de ello.

Haciendo alguna lectura de algunos artículos sobre las salinas artesanales del conjunto del Estado, y algunos estudios, me ha resultado curioso que todos se centran en las salinas del archipiélago canario, porque coinciden en que Canarias es el mejor ejemplo, porque es más que manifiesta la necesidad de implantar políticas de promoción de la sal propia artesanal en sustitución de la sal industrial importada, y ponen el acento en querer formar parte de un alegato a favor de que la sal canaria se consuma en las propias islas en lugar de la importada.

Por lo tanto, es inexcusable, es inevitable que las administraciones, todas, Administración central, Administración canaria -cada una en el ámbito de sus respectivas competencias- contribuyan a salvar la actividad, especialmente lograr que la sal marina artesanal canaria se identifique en las islas como producto de alta calidad gastronómica, de alta calidad alimentaria, que logre el aprecio de los consumidores y que los animen a su consumo. Y ello pasa, efectivamente, como se pide en el primer punto de esta proposición no de ley, por superar de la manera que corresponda la problemática de carácter legislativo relacionada con que las salinas se encuentren encuadradas en el sector de la minería, cuando lo lógico y lo que pide el sector es que pertenezcan al sector agrícola como producto agroalimentario. Algo para lo que es necesario la obtención de la denominación de origen protegido de la sal marina de Canarias, y ya se han llevado a cabo varios trámites y varias actuaciones desde el Gobierno, desde el ICIA con el trabajo de la Asociación de Productores de Sal Canaria, pero, desde luego, urge agilizar esa tramitación de manera que la denominación de origen se obtenga cuanto antes. Porque, si bien prácticamente todas están protegidas a través de la figura de BIC o de espacio natural, esta protección patrimonial y natural no garantiza que desaparezca esa situación de deterioro que las amenaza seriamente: deterioro de las estructuras, problemas de mantenimiento, deficitarias instalaciones, falta de control de calidad, falta de iniciativas de promoción de marketing o de comercialización, problemas de distribución, falta de distribución del producto, incluso la falta de relevo generacional son algunas de las cuestiones que señala el sector como causas que impiden su reactivación económica.

Y a todo esto hay que añadirle la importancia de la sal en el paisaje y en la cultura canaria. Hemos de tener en cuenta que las salinas y el oficio salinero son parte importante en la riqueza de nuestro territorio y de nuestro paisaje, y hemos de ser conscientes de que su pérdida supondría la pérdida también de nuestro patrimonio cultural e histórico.

La verdad, dicho esto, es que no entendemos las contradicciones, la postura tan contradictoria en la que ha incurrido el Partido Popular en su intervención, y lo digo porque en la PNL aprobada por unanimidad en diciembre de 2010 el Partido Popular mostraba su apoyo firme a la misma; incluso al cambio del encuadre legislativo de la actividad porque estaba dentro de la actividad regulada como actividad minera. Entonces ¿por qué esa contrariedad ahora?, ¿por qué ese cambio de postura ahora? Cuando además sabemos que se han comprometido incluso con la propia Asociación de Productores de Sal Marina de Canarias a forzar la aplicación de la PNL de 2010, y hace escasos meses, no hace mucho tiempo. Pregúntenle, si no, a don Francisco Cabrera, diputado del Partido Popular por Lanzarote, o pregúntenle, si no, a doña María del Carmen Hernández Bento, que se comprometieron, como digo, incluso al cambio de encuadre legislativo de la actividad, reconociendo así que la actividad está regulada como actividad minera. Por lo tanto, señorías, un poco más de coherencia.

Por lo demás, nuestro apoyo a esta iniciativa, nuestro apoyo al sector, a la Asociación de Productores Salineros de Canarias y espero que sirva para que, cuanto antes, se agilicen las líneas de actuación para que todas las administraciones competentes...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.

Señorías, habiendo finalizada la discusión sobre la proposición no de ley, que queda como ha sido redactada por el Grupo Nacionalista, pasamos a la votación de la misma. (El señor González Santiago solicita intervenir.)

¿Sí, señor González?

El señor GONZÁLEZ SANTIAGO (Desde su escaño): Si me lo permite el presidente, como la portavoz del Grupo Mixto-Nueva Canarias, doña Carmen, hizo una matización, que yo recogí como una enmienda técnica, en la exposición de motivos que donde dice: 10 salinas en funcionamiento, debe decir "9", y es lo correcto, para proponer esa matización como enmienda técnica.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.

Saben sus señorías que consta en el Diario de Sesiones que no son 10, que son 9, pero lo que se vota exactamente es el texto de la iniciativa y no la exposición o los antecedentes previos. Por lo tanto, procedemos a la votación de la proposición no de ley, del Grupo Nacionalista Canario, tal como ha sido en el texto redactado y que consta en el Boletín Oficial de este Parlamento.

Comienza la votación. (Pausa.)

50 señorías presentes: 32 votos a favor, 18 votos en contra, ninguna abstención.

Queda aprobada.