Diario de Sesiones 134, de fecha 16/9/2014
Punto 25

8L/C-1630 COMPARECENCIA DEL GOBIERNO -CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD-, INSTADA POR EL GRUPO PARLAMENTARIO NACIONALISTA CANARIO (CC-PNC-CCN), SOBRE LAS BALANZAS FISCALES Y EL SISTEMA DE FINANCIACIÓN AUTONÓMICA.

El señor PRESIDENTE: Por lo tanto, comparecencia del señor consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, instada por el Grupo Nacionalista Canario, sobre balanzas fiscales y sistema de financiación autonómica.

Tiene la palabra don José Miguel Barragán Cabrera.

El señor BARRAGÁN CABRERA: Gracias, señor presidente. Buenas tardes, señorías. Señor consejero.

Santiago Lago, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Vigo y director del Foro Económico de Galicia. He buscado a un economista de una región gobernada por el Partido Popular y con bastante ascendencia sobre los temas del Gobierno gallego para introducir este tema: balanzas fiscales y financiación autonómica. Decía en el año 2013, y las balanzas fiscales han aparecido este año, decía en el año 2013 que es un disparate que se quieran aplicar las balanzas fiscales para establecer el sistema de financiación autonómica; decía que el experto -que es un experto en esta materia- se mostró rotundo al negar la relación entre las balanzas fiscales y la financiación autonómica, afirmando que quienes pretendan hacerlo solo dan excusas a quienes, en las comunidades más ricas, pretenden pagar menos impuestos.

Señorías, ¿por qué traer hoy aquí, al Parlamento de Canarias, una comparecencia que hable de balanzas fiscales y de financiación autonómica, si nada tienen que ver? Pues la saco, señorías, porque cuando salen las balanzas fiscales -este es un tema muy recurrente-, las balanzas fiscales al final saben ustedes, en este caso, siempre se han hecho sin contar los recursos de las propias comunidades o lo que pagan todos los ciudadanos, es decir, ayuntamientos, cabildos, en el caso de Canarias, Gobierno de Canarias y el Gobierno del Estado, y siempre se suelen hacer en un balance que diga ingresos del Estado/gastos del Estado en ese territorio. Eso es una balanza fiscal. Y esto es recurrente en las comunidades más ricas para explicar que ellas aportan más al sistema y se ven perjudicadas de lo que ingresa el Estado en esa comunidad o, mejor dicho, lo que gasta en esa comunidad.

Cuando salen las balanzas fiscales, ahora, y se habla del tema de Canarias, a nosotros se nos dice, se nos insinúa, poco menos que estamos cobrando..., en este caso, que estamos beneficiándonos de nuestro Régimen Económico y Fiscal, que vamos sobrados con el Régimen Económico y Fiscal. De hecho, en los últimos informes sobre financiación autonómica, es la única comunidad autónoma en la que aparece al lado los ingresos del REF -en el resto parece que no cobra nadie ningún tipo de impuesto, me refiero a impuestos propios, y solo lo hace la comunidad autónoma dentro del régimen común-.

Lo traigo, señor consejero, y me gustaría que nos lo explicara, porque aquí, en Canarias, rápidamente, cuando sale el tema de las balanzas fiscales, el Partido Popular nos viene a decir, como un elemento, mezcla la financiación autonómica con las balanzas fiscales y nos dice: "¿ven cómo es que estamos bien financiados?, es que, según estas balanzas fiscales, hasta nos sobra dinero en la comunidad autónoma". Y, bueno, ya esto es el colmo de la desfachatez, el colmo de la desfachatez es decir que la balanza fiscal, como el Estado aparece con mayor gasto -gasto en el que están también, por ejemplo, el ejército, los servicios sociales, la sanidad, la educación, pero también otros gastos propios del Estado y que no tienen una incidencia directa en el bienestar de los ciudadanos-. Y se nos intenta decir esto.

Lo que creo que es importante hoy es aclararlo; aclarar, señorías, que las balanzas fiscales tienen un objetivo, son una herramienta económica para trabajar, para saber, exactamente, cómo funciona. Pero que no se nos esconda que el sistema de financiación autonómica actual es perjudicial para el archipiélago.

Ya decía usted anteriormente que no hay intención de modificarlo. La verdad, me habrán oído en más de una ocasión, cuando estaba planificándose el año pasado esta agenda económica del Gobierno del Estado, que estábamos esperanzados. Y entendíamos, entendíamos, que primero tenía que ser la reforma fiscal, para saber exactamente qué ingresos podrían repercutir después, posteriormente, en el sistema de financiación autonómica.

No solamente se nos anuncia un sistema fiscal que puede perjudicar gravemente a la prestación de los servicios públicos esenciales, sino que, además, se nos dice que la reforma fiscal a que se comprometió el Partido Popular, a que posteriormente se comprometió el señor presidente del Gobierno en la Conferencia de Presidentes Autonómicos, que iba a suceder, no ha sucedido. Me da a mí que en el tema de Cataluña, tanto en el tema de las balanzas fiscales como en la propuesta económica que han hecho para que no hagan la consulta, tiene mucho que ver; y, mientras tanto, los ciudadanos de Canarias, en sanidad, en servicios sociales y en educación, tienen menos recursos... (Corte del sonido producido por el sistema automático de control del tiempo.)

(Sin micrófono.)...resto del Estado.

Gracias.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don José Miguel Barragán.

Por el Gobierno, el señor consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, don Javier González Ortiz.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD (González Ortiz): Gracias, presidente. Señorías, buenas tardes de nuevo.

Las balanzas fiscales o cuentas públicas centralizadas -como se han llamado en este caso- y el sistema de financiación que sufraga la sanidad, la educación y las políticas sociales nada, por supuesto, tienen que ver entre sí; aunque es verdad, señor Barragán, que algunos, de forma premeditada, se han empeñado en vincularlos con el único fin y ánimo de confundir. Las balanzas fiscales lo que cuantifican es la diferencia entre los impuestos que recauda el Estado a una comunidad autónoma y el gasto que realiza en ese territorio. Y, por tanto, el resultado de la misma, sea positivo o negativo, no se relaciona en absoluto con el modelo o con el sistema de financiación que exista, que, por otro lado, lo que hace es distribuir recursos para sostener los servicios públicos esenciales. Por tanto, no tiene nada que ver una cosa con la otra, ¿no?

Por lo tanto, digo que las conclusiones de las balanzas fiscales, hechas públicas por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, ni pueden, en su caso, ni deben, supeditar o condicionar el volumen de los fondos destinados a sufragar los servicios públicos esenciales. Lo que certifican esas balanzas son las diferencias de renta que existen entre los ciudadanos de unas comunidades autónomas y otras; eso es lo que vienen a certificar, para lo que sirven. Y, también, por lo tanto, lo que vienen a constatar es la obligación del Estado de nivelar los recursos entre los que viven en distintos territorios para garantizar, salvo que corrijan, los principios constitucionales, digo, para garantizar el principio constitucional de solidaridad.

Porque, como no puede ser de otra forma, bueno, según entendemos algunos, ¿no?, las regiones más ricas deben aportar más al sistema general, de la misma forma que las personas con mayores ingresos pagan más impuestos que las que de menos disponen. Esa es la realidad.

Por tanto, que a Canarias se le adjudique un saldo positivo en su balanza fiscal no viene más que a acreditar las diferencias de renta que ya todos sabíamos que existían y que la Administración General -garante del principio de igualdad- poco hace por subsanar. Una confirmación que nada tiene que ver con las necesidades de financiación de los servicios públicos esenciales, que entendemos que no pueden depender de si se vive en una comunidad rica o en un territorio pobre. O, lo que es lo mismo, las balances fiscales no quitan el derecho a los canarios de tener un sistema de financiación justo, que resta ochocientos millones de euros a la sanidad, la educación y los servicios sociales. Todos, constitucionalmente, todos, tenemos los mismos derechos a recibir iguales prestaciones públicas, al margen de los saldos fiscales; circunstancia que no ocurre con Canarias, que continúa siendo -recuerdo, señorías- la comunidad autónoma peor financiada.

Por tanto, además de elaborar y difundir las balanzas, en lo que se tiene que empeñar el Gobierno del Partido Popular es en cumplir con su obligación de distribuir, con equidad, los impuestos que se reciben de todos; nivelar a los que menos tienen y de formar un sistema de financiación que acabe con las desigualdades actuales. Tanto es así que el propio autor del informe, el director del informe sobre las balanzas fiscales, el señor profesor Ángel de la Fuente, asegura que todas las comunidades autónomas deben tener la financiación suficiente para prestar los mismos servicios, independientemente de que sus saldos sean positivos o negativos en las balanzas fiscales. Lo dice el autor del informe.

De cualquier modo, en estas cuentas territorializadas, se han empleado algunos criterios, algunas variables, que, a nuestro juicio, han distorsionado el resultado final, ¿no? Por ejemplo, imputar a Canarias un porcentaje del gasto total de las infraestructuras ferroviarias, de los aeropuertos peninsulares o del Museo del Prado es, cuando menos, discutible.

Hablan del efecto, en el informe, hablan del efecto arrastre que eso tiene para el conjunto de las comunidades autónomas. Puede ser que lo tenga para alguna comunidad autónoma limítrofe, pero todos estamos seguros de que en absoluto, en absoluto, el gasto de esas infraestructuras tiene un efecto, por tanto, en la comunidad autónoma, ¿no?

Más grave aún es el trato -aquí hizo referencia el señor Barragán-, el trato que se da en el informe a nuestro REF, ¿no? Porque, a nuestro juicio, y ahí sí somos enormemente críticos, el estudio evidencia un absoluto desconocimiento de nuestra realidad, obviando que el REF son recursos que intentan, pero no lo consiguen en su totalidad, compensar los sobrecostes que padecemos por la lejanía y la insularidad. Es decir, el REF intenta compensar, pero no en su totalidad, los sobrecostes que tenemos en Canarias.

Por lo tanto, no entender que nuestra menor presión fiscal o que las ayudas al transporte de personas y mercancías son una necesidad para igualar a los ciudadanos de Canarias con los del resto del conjunto del Estado denota una falta de visión sobre el significado de vivir en un archipiélago alejado.

Sin embargo, con el resultado que sea, vincular las balanzas fiscales a la revisión del sistema de financiación no solo es, a nuestro juicio, una imprudencia, sino un gran despropósito que no constituye base alguna para fijar las necesidades de unos ciudadanos frente a otros, en el ámbito de los servicios públicos esenciales.

Y, por tanto, es aquí donde apelamos a la responsabilidad de todos, evitando intencionadas y erróneas interpretaciones sobre el resultado de Canarias en un estudio -realizado bajo unas premisas determinadas- que, como es obvio, sería absolutamente distinto o cambiaría de forma notable si se utilizaran unas nuevas variables para su cálculo.

Porque, señorías, y en eso, creo, nos debemos empeñar todos, el REF no es un privilegio. Ni tener un saldo positivo significa que el Gobierno central dispense un mejor trato a Canarias en el gasto de las inversiones. Nada más lejos de la realidad. Lo refleja el propio informe en cuanto a las inversiones del Estado.

La realidad, manifestada en cifras objetivas, es la reducción constante de los ingresos estatales año tras año. Una situación que reviste mayor gravedad en el caso del ya mencionado sistema de financiación. En referencia, por tanto, a los servicios básicos, las islas se sitúan también, año a año, a la cola de recursos por habitante para sufragar la sanidad, la educación y los servicios sociales. Nos separan de la media del conjunto de las comunidades autónomas ochocientos millones de euros al año, que serían en torno a mil setecientos millones de euros si nos comparamos con la comunidad autónoma mejor financiada. Unas cifras, señorías, desorbitantes si las relacionamos con nuestro presupuesto.

Estamos ante un modelo de financiación que empeora con el paso del tiempo. Las cantidades a cuenta, comunicadas el pasado mes de julio por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, para 2015, siguen, señorías, aumentando la brecha. Para el próximo año, contaremos con treinta millones de euros menos que este, treinta millones de euros menos que este en el 2015. Cuatrocientos millones de euros menos que lo percibido en 2009. Cuatrocientos millones de euros menos que lo percibido en 2009. Lo que demuestra, por tanto, la evolución negativa del actual sistema.

Ante esta evidencia, y teniendo este Gobierno como prioridad los servicios esenciales, volveremos, un ejercicio más, a tener que aportar recursos propios de la comunidad autónoma para poder garantizar su prestación. Y, mientras esto ocurre, el Gobierno del Partido Popular vuelve a romper una promesa y un compromiso que adquirió con todas las comunidades autónomas, negándose a modificar un sistema, por conveniencias electorales como toda justificación.

Necesitamos de forma urgente esa reforma. Porque, señorías, recibir anualmente 350 euros menos por habitante es el verdadero efecto de las políticas del Estado, y no el resultado de unas balanzas fiscales que poco aportan a la vida diaria de los ciudadanos.

Prolongar esta situación discriminatoria es una responsabilidad exclusiva del Gobierno central, ya que no puede apelar a un sistema heredado, porque en su ámbito de decisión está, y no lo hace. Es su revisión. Aquí ya se acabó la excusa de que el modelo era anterior. Muy bien: revíselo. Tiene usted el mandato de la ley para revisarlo. Si no lo hace es responsabilidad absolutamente suya.

Con ello, por tanto, con la negativa a reformar el sistema y a mantener las brechas entre las distintas comunidades autónomas, entre ciudadanos de unas comunidades autónomas y otras, el mensaje es rotundo: el mensaje que están lanzando a los ciudadanos es el menosprecio al gasto social y a los servicios públicos que prestamos las comunidades autónomas con la financiación estatal, que no cubre su coste, al tiempo que permite agravios entre ciudadanos de unos y otros territorios.

Está más que acreditado que los recursos del actual sistema son insuficientes y no cumplen con el principio constitucional de igualdad; y amplían, cada vez más, la brecha entre las comunidades autónomas mejor y peor financiadas.

Lo demás, incluidas las balanzas fiscales, son cantos de sirena, alejados de los problemas reales. Una instancia que el Gobierno de España puede recordar -recortar, en su caso-, si tuviera voluntad política. Y eso esperamos.

Canarias, junto con otras comunidades autónomas, y mientras no se modifica el sistema de financiación actual, hemos solicitado el establecimiento de mecanismos de compensación, a modo de fondos de nivelación, destinados a las comunidades autónomas peor financiadas, que están por debajo de la media. Una petición que, hasta el momento, sigue sin respuesta.

Aunque este no es el único instrumento posible, se lo hemos dicho en innumerables ocasiones. En breves semanas, podrá demostrar el Gobierno del Partido Popular su grado de implicación con aquellos ciudadanos que están peor tratados a través, bueno, digo, porque están peor tratados en el sistema de financiación. Podrá demostrar si tiene de verdad voluntad política, a través de las partidas que consigne para Canarias en los Presupuestos Generales del Estado. El Gobierno del Partido Popular está ante una gran oportunidad de corregir los graves desequilibrios que comete con las islas. Una nueva ocasión para evidenciar su compromiso real con un territorio singular que, lejos de privilegios -esos privilegios, como algunos entienden el REF-, lo que requiere son medidas específicas para atajar sus problemas.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don Javier González, señor consejero.

Por los grupos no solicitantes de la comparecencia. Don Román Rodríguez.

El señor RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ (Desde su escaño): Las balanzas fiscales y la financiación autonómica son cosas distintas, pero están relacionadas. Por eso se hacen. Y, en términos políticos, van a contribuir negativamente a los intereses de Canarias en ese debate. Vamos a ser conscientes de que las comunidades que aportan más de lo que reciben tienen una fortaleza en el debate político que las comunidades que aportamos menos de lo que recibimos.

Otra cuestión es que es de justicia que el sistema de financiación tiene que ir a garantizar los derechos y servicios a la ciudadanía, al margen de su condición económica y territorial. Pero decir que no hay relaciones... No hay relaciones si no queremos, pero los catalanes esgrimen esto como elemento esencial de sus reclamaciones. Ellos sostienen que aportan más de lo que reciben.

¿Qué debiéramos hacer nosotros? Lo preocupante de este debate es: primero, que los poderes centrales del Estado y los intelectuales que le acompañan, de uno y otro color, consideran el Régimen Económico y Fiscal -por tanto, políticas económicas y fiscales- como un privilegio, cuando es un derecho que compensa, en parte, un hecho estructural y determinante, que es la lejanía y la insularidad. La primera cosa en la que debemos insistir es en que los primeros en defender esto debiéramos ser nosotros.

Sorprende ver fuerzas políticas, teóricamente de aquí, poco menos que mandarnos a callar por defender la continuidad de las políticas económicas y fiscales y la exigencia de un sistema de financiación. Por lo tanto, la primera cosa es que los canarios aprendiéramos a defender nuestros derechos -fiscales y económicos-, sin perjuicio de defender un sistema de financiación que garantice servicios e infraestructura en igualdad de condiciones, al margen de la condición territorial.

Y combatir elementos como el que hemos vivido: eso que se ha publicado en la prensa española y canaria. Y el ciudadano que lo ha dirigido, cuando interpreta los asuntos de Canarias de esa manera, nos daña, nos perjudica, nos debilita; y hay que tener la fuerza y la unidad suficientes para combatir en el terreno de las ideas lo que este señor, por ejemplo, ha dicho en la prensa local. Yo ponía un ejemplo: a este -no tengo nada contra el ciudadano, es un tipo interesante, es un estudioso-, yo lo mandaría -y tengo menos contra La Gomera- dos años a La Gomera, con tres hijos, y que tenga que mandar a la gente a la universidad en Tenerife y venir al médico en Tenerife. Para que comprenda lo que significa vivir en un territorio como este y tener que coger un avión y un barco, porque esas son las cosas que en la Península, de uno y otro signo, no entienden.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don Román Rodríguez.

Por el Grupo Socialista Canario, don Manuel Marcos Pérez.

El señor PÉREZ HERNÁNDEZ: Gracias, señor presidente.

Señorías, cuando en el año 2008 el Gobierno socialista de entonces publicó las balanzas fiscales, prefirió no entrar a valorarlas. Se limitó a decir por boca del que entonces era secretario de Estado de Hacienda: "Tenemos un sector público que contribuye a la redistribución de la renta personal y territorial más justa y equitativa. No permitimos, por tanto, que se mezclaran debates, y separamos completamente la financiación autonómica del debate de las balanzas". Incluso el propio Montoro, ministro de Hacienda, una vez publicadas, reclamaba a los responsables autonómicos responsabilidad, que rebajaran sus declaraciones, decía que invitaba a todos a que se utilizaran con objetividad.

Por eso no entendemos, no entendemos, cómo el día 23 de julio el Partido Popular en Canarias dice que esto era una bofetada al Gobierno de Canarias. Era una bofetada a la reivindicación legítima del Gobierno de Canarias de un mejor sistema de financiación o de que se cumpla, por ejemplo, con los convenios firmados. No lo entendemos, señorías.

Porque tenemos en Canarias un Partido Popular que está más preocupado en hacer oposición a cualquier precio; lástima, por ejemplo, que no utilizara esto, pues, para otros asuntos, como el que acabo de señalar: el sistema de financiación, la privatización de AENA, el Convenio de Carreteras, los fondos de empleo... Podía haberlo utilizado para ser reivindicativo en esto.

Nosotros, señorías, no entendemos el porqué. Si tenemos, como ha dicho ya el señor consejero, y está constatado, un déficit de ochocientos millones de euros anuales menos de la media en nuestro sistema de financiación, ¿por qué, si eso está constatado, nos negamos a revisar un sistema de financiación? Un sistema de financiación que ha demostrado que abre una brecha entre Canarias y el resto de las comunidades del Estado.

Y, por último, señorías, nos parece gravísima la imputación de los beneficios del REF, una herramienta -ya lo ha dicho el consejero, lo ha dicho don Román Rodríguez, lo ha dicho el señor Barragán-, una herramienta que tenemos, que hemos conseguido a lo largo de los siglos, para, simplemente, compensar, de alguna manera, los sobrecostes que se derivan de la lejanía y de la insularidad.

Intentar decir que esto computa dentro de las balanzas fiscales es un despropósito, señorías, y demuestra que algunos piensan que en Canarias todavía seguimos teniendo un Régimen Económico y Fiscal -que es, insisto, una herramienta potente para conseguir amortiguar esas desigualdades-, que eso es como un privilegio que tenemos en el archipiélago y que habrá que acabar con él. Y lo más grave es que el Partido Popular saque pecho con esto.

Gracias, presidente.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don Manuel Marcos.

Por el Grupo Parlamentario Popular, doña Mercedes Roldós Caballero.

La señora ROLDÓS CABALLERO: Muchas gracias, señor presidente.

Señorías, llama la atención que siendo precisamente los nacionalistas, en este sentido los catalanes, los grandes reivindicadores de que se publicaran las balanzas fiscales para justificar aquello del "España nos roba", ¿verdad?, y que los nacionalistas de aquí, que tanto admiran y tratan de imitar a ese nacionalismo catalán con el "España nos maltrata", cuando por fin se publican las balanzas fiscales, o este nuevo sistema de cuentas territorializadas, y se pone negro sobre blanco, se evidencia la inmensa solidaridad de los ciudadanos de otros territorios españoles para con los canarios.

Porque, señorías, las balanzas fiscales no ofrecen más que una radiografía detallada de la incidencia territorial que tienen los presupuestos públicos desde una metodología de carga/beneficio, y ahí es donde se pone de manifiesto que en esas balanzas fiscales, en el caso de Canarias positivas, por valor de 4.054 millones de euros, 4.054 millones de euros, positivo, el segundo balance positivo más alto de toda España después de Andalucía, si el balance lo miramos por balance per cápita, es decir, por ciudadano, resulta que somos el tercer territorio de toda España con un balance más positivo por ciudadano -después de Ceuta, Melilla y Extremadura-; somos los canarios los que más recibimos solidaridad del resto de españoles, 1.910 euros por habitante y año, el año de referencia, que es el 2011. Y eso se llama solidaridad, solidaridad interterritorial, solidaridad de unos españoles al lado de otros.

Y por supuesto que en el Partido Popular sabemos que no es lo mismo financiación autonómica que balanzas fiscales; lo que pasa es que aquí, que han intervenido todos los grupos, resulta que aquellos que hicieron un nefasto e injusto sistema de financiación, lo ha dicho usted, señor consejero, decía usted "injusto y perverso", muy perverso y muy injusto, lo hicieron sus socios socialistas, apoyados por ustedes en las Cortes Generales, por los nacionalistas de Coalición Canaria, ¡qué mala conciencia tienen del inmenso daño que está haciendo ese injusto sistema de financiación a todos los ciudadanos de Canarias!

Pero ya lo sabíamos, que a ese victimismo inagotable del nacionalismo -del catalán y del de aquí- no le iban a servir las balanzas fiscales: se les agotaba el discurso, el discurso de "España nos roba", el discurso de "España nos maltrata", porque pone de relevancia que las regiones más ricas, los ciudadanos de las regiones más ricas... (Corte del sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo.)

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, doña Mercedes Roldós.

Por el grupo solicitante de la comparecencia, don José Miguel Barragán Cabrera.

El señor BARRAGÁN CABRERA: Gracias, señor presidente.

El Partido Popular en Canarias tiene el síndrome del colono. Cuando se conquistaban las tierras, saben que una forma posterior a que llegaran los ejércitos era trasladar colonos. Y durante un montón de tiempo, estos colonos pagaban impuestos al Estado. Y cuando empezaba a salir una nueva tercera o cuarta generación que empezaba a reivindicar el sitio donde estaba, normalmente, aquellos colonos que eran fieles a la corona eran siempre los que defendían o intentaban decir que no era verdad que se cobraran más impuestos en esas tierras, que eran todo mentiras y que eran súbditos leales al rey, y que no entendían a estas nuevas personas que habían nacido en el territorio colonizado, que estaban reivindicando que, efectivamente, el Estado, la corona, estaba teniendo un trato injusto porque simplemente cobraba impuestos y no se hacían los servicios, no se hacían las infraestructuras en función de lo que se pagaba. Y eso se llama el síndrome del colono. Y el Partido Popular de Canarias cambia el síndrome del colono en función de si gobierna o no gobierna.

(El señor presidente abandona su lugar en la Mesa. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente primero, Cruz Hernández.)

Porque hay que recordar que la señora Mercedes Roldós -lo recordarán muchos de los que estamos aquí de la pasada legislatura- era una fiel reivindicadora de que España nos robaba. No España, no confundamos a los españoles con el Gobierno. Y decía, le decía el PSOE y ahora decimos nosotros, el PP. Es decir, fíjense en que cuando estaba la señora Mercedes Roldós en Sanidad, ya iba por mil y pico millones lo que nos debía el Estado en materia de Sanidad, y ¡qué rápido se ha olvidado!, ¿eh?, justo antes de noviembre del año en que entra el Partido Popular en el Gobierno del Estado. Ahora eso se ha olvidado, ahora no es solamente que no nos lo deba, sino que seguramente la señora Mercedes Roldós estaba tan equivocada que ya no nos debe absolutamente nada el Estado en materia de Sanidad...

Pero, miren, me gustaría decir en el tema de las balanzas fiscales... Decía el portavoz del Partido Socialista que han puesto el REF. No estaría mal puesto, no estaría mal puesto, si se ponen todos los impuestos que cobran todas las comunidades, pero es que solo aparece Canarias. Y, además, aparece Canarias y el señor que hizo el informe sabe perfectamente que una parte importante de esos impuestos, 58, 42%, una parte viene a la comunidad autónoma y otra parte va directamente a las corporaciones locales canarias; por lo tanto, no forma parte de la financiación de la comunidad autónoma que vaya a repercutir en los servicios que son competencia de la comunidad autónoma, porque son impuestos, los del REF, que están compartidos entre dos tipos de corporaciones: las corporaciones locales -cabildos y ayuntamientos- por una parte; y, por otra, la propia Administración de la comunidad autónoma.

Pero hay que recordar, en el tema de las balanzas fiscales, que nosotros no estamos en contra de que se publiquen. Válgame Dios, se han venido publicando desde hace un montón de años -algunas veces cada quinquenio, otras veces en una época mayor- y nosotros no estamos en contra de que se haga. Pero fíjese en que si se publican las balanzas fiscales y no se hace por los periodos sobre los que abarca, una comunidad autónoma se puede haber beneficiado de inversiones importantísimas en trenes, en autopistas, durante una larga temporada, y después hacen lo que es la balanza fiscal en el año siguiente o en el quinquenio siguiente, porque no tiene una metodología, es decir, cada dos años, cada cuatro años, y resulta que todo lo que ha invertido el Estado ahí no aparece, porque la balanza fiscal es de un año completamente distinto. Y eso hay que tenerlo en cuenta.

Y no hay que olvidar que la balanza fiscal no se hace sobre los territorios, se hace sobre las personas, sobre los contribuyentes. Y, si se hace sobre los contribuyentes -y el Estado debe garantizar la justa redistribución de los recursos sobre las materias esenciales-, la gran pregunta, señora Mercedes Roldós, es el mismo argumento que usted explicaba cuando intentaba explicarnos y convencernos en esta Cámara de que estaba mal financiada la sanidad. La misma, la misma. Y se trata de que en Sanidad, Servicios Sociales y Educación, esos tres servicios públicos, ningún español, viva donde viva, debería tener una financiación distinta. Y ustedes la tienen.

Y ahora nos dice. Nosotros, yo ya le he reconocido, cuando uno cree que hacía las cosas bien y puede haber un error, lo corrige y dice: "oye, sí, en el año 2009 funcionó bien y a partir del año 2010 no funciona bien la financiación". Acuérdese de que cobramos mejor el primer año. Y nosotros hemos dicho: "efectivamente, funciona mal". Nos equivocamos nosotros y seguramente se equivocaron muchas otras comunidades autónomas, pero de eso han pasado bastantes años, y ustedes llegaron aquí en el año 2011, en noviembre del 2011. Y, dígame, si coincidían con nosotros en que ese sistema estaba mal, año 2011, año 2012, año 2013, año 2014, y ahora nos anuncian que tampoco se hace.

Si es malo y ustedes nos lo reprochan, y nosotros tenemos que aceptar el reproche, dígame: ¿por qué están dejando que un sistema que ustedes nos dicen que está mal y que perjudica a Canarias, están permitiendo que cuatro años lo mantengan? ¡¿No tienen mayoría absoluta para cambiarlo?! ¡¿No la tienen?! Sí la tienen. ¿Qué es lo que ocurre entonces, señora Roldós?, ¡¿qué es lo que ocurre entonces para que ustedes, teniendo el poder absoluto en el Congreso de los Diputados, teniendo la mayoría de las comunidades autónomas para que en el Consejo de Política Fiscal y Financiera se adopte el sistema, cuál es el motivo para que Canarias, después de cuatro años, si nos equivocamos, ustedes sigan robándole dinero a Canarias?!

Señores, señores del Partido Popular...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Señorías, por favor, guarden silencio. (Ante los comentarios de los diputados del Grupo Parlamentario Popular desde sus escaños.)

El señor BARRAGÁN CABRERA: Señores del Partido Popular, cuando un canario, cuando un canario, cuando un canario necesita para sanidad, educación y servicios sociales unas cantidades de dinero, cuando un madrileño necesita unas cantidades para dar la sensación -digo la sensación, por lo menos- de que todos somos iguales en el sitio donde vivamos, y que Sanidad, Servicios Sociales y Educación sean lo mismo; cuando hay un reparto de esos recursos por parte del Estado para que la sanidad sea igual en todas partes, para que la educación sea igual en todas partes, y ustedes, en los Presupuestos Generales del Estado, ustedes, que dicen, que reconocen que el sistema de financiación está mal, y siguen manteniéndolo, les guste o no les guste, ustedes le están robando 320 euros a cada canario en los servicios sociales; ustedes están tomando la decisión de robarles 320 euros, todos los años, a los canarios. Y, después, cuando ustedes se ponen, cuando ustedes se ponen "que eso de robar no se dice", cuando "eso de robar no se dice", por favor, cojan ustedes el Diario de Sesiones y escúchense, de las barbaridades que nos han dicho, en más de una ocasión, a nosotros.

Señor consejero, señor consejero, yo no sé si va a haber una oportunidad de que, efectivamente -ya nos dice que no-, pero yo espero, sigo confiando todavía en que el Partido Popular, el señor Montoro, haga una última reflexión, aunque sea última, antes de terminar la legislatura, aunque sea para que el nuevo sistema de financiación entre en vigor no en el año 2015, sino en el año 2016; pero todavía sigo confiando en que crean que esto es un problema importante, no solamente para esta comunidad autónoma, no solamente para la Comunidad Autónoma de Canarias; somos conscientes de que otras comunidades del resto del Estado también sufren este problema de la financiación autonómica, y que haya una posibilidad -insisto- de que el señor Montoro se lo piense dos veces y que, por lo menos -insisto-, si no es para el 2015, que en esta legislatura se cierre ese sistema para que entre en vigor en el 2016.

No sé la oportunidad que usted tendrá, y junto con el resto de las comunidades, de que esto sea así, pero inténtelo.

Gracias.

(La señora Navarro de Paz solicita intervenir.)

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.

Sí, doña Australia, ¿a qué efectos, por favor?

La señora NAVARRO DE PAZ (Desde su escaño): Gracias, presidente.

A efectos del artículo 82.1. El señor portavoz ha hecho un juicio de valor inexacto.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Señora diputada, el artículo 82.1 se refiere a su persona, y creo que, en todo caso, a su persona no...; entiendo que usted lo que quiere decir es a su grupo; y, por lo tanto, si... Entiendo que es a su grupo lo que usted me quiere decir... Pues le doy un minuto para contestar a esa alusión.

La señora NAVARRO DE PAZ (Desde su escaño): Muchas gracias, señor presidente.

Le agradezco todo lujo de explicación que nos ha dado. He confundido el número del artículo, no en cuanto al 82, sino al apartado, pero muchísimas gracias.

Vamos a ver, señor Barragán: yo entiendo que usted en este momento tenga que hacer méritos para continuar con la responsabilidad que tiene al frente de Coalición Canaria, pero lo que no le autorizo, en nombre de mi grupo, es que nos falte al respeto, y mucho menos, que nos diga que estamos robando a los canarios; por lo que le ruego que se retracte y retire esa afirmación que ha hecho sobre este grupo parlamentario.

Muchísimas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.

Señor Barragán.

Señorías, guarden silencio, por favor.

El señor BARRAGÁN CABRERA (Desde su escaño): (Sin micrófono.)

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Señor Barragán, perdone un segundo.

El señor BARRAGÁN CABRERA (Desde su escaño): Perdón.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Tiene usted la palabra.

El señor BARRAGÁN CABRERA (Desde su escaño): Yo lamento que en los debates económicos ustedes intenten siempre meter otras cuestiones internas de los partidos; lo entiendo, son cuestiones de estilo y tampoco lo vamos a discutir.

Sigo manteniendo y se lo reitero una vez más: el Partido Popular, con los presupuestos y con la Ley de Financiación, sabiendo que está mal, siguen hurtándoles todos los años 320 euros a los canarios per cápita.

(La señora Roldós Caballero solicita intervenir.)

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.

Señora Roldós, ¿a qué efectos, por favor?

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): Señor presidente, el artículo 82.1, en este caso, sí que es por alusión personal, en reiteradas ocasiones, por parte del portavoz de Coalición Canaria, el señor Barragán.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Señora diputada, en la intervención que oí al señor diputado -ya estaba empezada, sí se lo quiero decir- no le oí ningún juicio de valor sobre su persona, que es a lo que se afecta.

¿Me quiere decir cuál es el juicio concreto, por favor?

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): Sí.

En innumerables ocasiones, el señor Barragán me ha citado a mí, con nombre y apellidos, y refiriéndose a mi etapa como... (Sin micrófono.)

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Sí, señora diputada, es que apretó usted, o algo... Apriete el botón del micro.

Sí. Dígame. ¿Cuál es la alusión concreta que le hizo, por favor?

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): Sí.

Vamos a ver, el señor Barragán ha hecho alusión a que cuando yo era consejera del Gobierno de Canarias solicitaba un trato justo en el sistema de financiación que había en aquel momento, que era el sistema que se aprobó en el año 2002, que tenía un déficit de financiación per cápita para la sanidad canaria de 1.983 millones de euros...

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Sí.

Señora, señora diputada...

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): Señor presidente, yo intento, dado que usted no estaba, intento aclarárselo para que usted lo pueda entender.

Yo, si usted me permite hablar, yo encantada.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Yo la entiendo perfectamente, pero dígame qué alusión o juicio de valor hace a su persona.

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): Sí.

La alusión y el juicio de valor es que el señor Barragán dice que yo en aquel momento lo reivindicaba y ahora no; y yo le digo, señor Barragán: ahora, antes y después, señor Barragán.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Sí.

Señora diputada, no es una alusión, sino es una contradicción en el debate que, consecuentemente... Y es lógico, en un debate entre grupos parlamentarios, que discrepen entre las posiciones de un grupo y otro. No hay una alusión ni un juicio de valor sobre su persona y no le puedo dar la palabra.

La señora ROLDÓS CABALLERO (Desde su escaño): (Sin micrófono.)

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Señora diputada, no es un juicio de valor sobre su persona.

Señor... No tiene la palabra, por favor.

Señor consejero, señor consejero, para contestar, por parte del Gobierno, en esta comparecencia, a los distintos grupos parlamentarios, por tiempo de diez minutos, tiene usted la palabra.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD (González Ortiz): Señor presidente. Señorías.

Señor Rodríguez, don Román.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Sí, perdón, señor consejero.

Señorías, por favor, guarden silencio.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD (González Ortiz): Gracias, señor presidente.

No estoy de acuerdo con usted. Dijo usted que la publicación de las balanzas nos restaba poder, capacidad política, para reivindicar lo que reivindicamos. Y en absoluto. En absoluto de aquellos que creemos que un sistema tributario lo que hace es recaudar recursos del conjunto de los ciudadanos para distribuirlos. Si ese es el ejemplo, la acción final, del sistema tributario -redistribuir recursos entre las personas, en términos generales-, estoy seguro de que usted coincide conmigo en que los temas tributarios, además, deben ser progresivos y, por tanto, como coincide conmigo en esto, digo, no estoy en absoluto de acuerdo en que nos reste capacidad política.

Nos da incluso hasta más fortaleza. Porque viene a evidenciar las diferencias de renta entre el conjunto de los ciudadanos del territorio español. Y, por tanto, evidenciando esas diferencias de renta, cosa que ya conocíamos, nos da mucha más capacidad para poder seguir reivindicando la necesidad de establecer políticas específicas que compensen esas diferencias de renta. Por eso, cuando hemos planteado en todo este barullo una reforma del sistema de financiación, hemos dicho... Miren, aquí hay que tener en cuenta varias cosas.

Primero, un sistema de financiación que vaya a asignar cantidades similares para la prestación de servicios públicos esenciales. Punto uno.

Pero no podemos olvidarnos de un elemento fundamental, y es la actuación de un Gobierno para poder llegar a la nivelación de los niveles de vida -y, por tanto, de los niveles de renta- del conjunto de los ciudadanos. Y, por tanto, todo lo contrario: las inversiones de un Estado deben hacerse en aquellos territorios donde tiene menores niveles de renta. Y, por tanto, en absoluto, en absoluto, disminuyen la capacidad y la fortaleza política de los argumentos que tenemos para seguir reivindicando un sistema de financiación y unos Presupuestos Generales del Estado mucho más justos. Por eso no coincido con usted en ese sentido, a pesar de que cualesquiera otros intenten utilizarlo de una forma mucho más preocupante.

Son preocupantes los análisis que hace el propio informe y las referencias que hace al REF. Evidentemente, coincido con usted. Yo reconozco que es un buen estudio. O sea, creo que es un esfuerzo intelectual importante el realizado. Otra cosa es que se hacen determinadas consideraciones con las que no se puede estar de acuerdo.

Porque este resultado al que hacía referencia la señora Roldós, hombre, ¿cómo se llega a ese resultado? Mire, voy a ponerle un ejemplo para que usted lo entienda. El informe... Sí, porque usted dijo o habló de la solidaridad. No. La solidaridad, no. No. Mire, el informe llega a decir... Vamos a ver, ¿cómo podemos consignar los gastos que realiza el Gobierno central en los ministerios? ¿Podemos asignárselos todos al mismo territorio donde los realiza? No. Habrá que distribuirlos entre el conjunto de los territorios. Porque no todo el gasto del Ministerio de Agricultura tiene que ver con la Comunidad Autónoma de Madrid, aunque los funcionarios estén en Madrid. Por poner un ejemplo.

Y, entonces, distribuye entre las comunidades autónomas el gasto que realiza el Ministerio de Agricultura, y cualquiera de ellos, entre el conjunto de los territorios.

Oiga, una pregunta, ¿cómo considera usted los ingresos derivados de IRPF de los funcionarios que están en Madrid? ¡Ah, no!, esos los asigna a la Comunidad Autónoma de Madrid. ¡Ah! O sea, que para llegar a ese punto de solidaridad al que usted hace referencia, los ingresos sí se los centralizamos, pero los gastos los distribuimos entre todos. Hombre, cuando menos, es parcial ese criterio. Y, siendo parcial ese criterio, llega a ese punto de solidaridad al que usted hace referencia; y por lo tanto...

Por eso digo que, siendo un buen estudio y un estudio teórico, tiene algunas premisas que lo invalidan; y lo invalidan después, desde nuestro juicio, de forma absoluta, cuando concluye de la forma en que concluye el REF, cuando habla, por tanto, y cuando da esa consideración al REF. Cuando cualquier estudio de cuáles son los beneficios, de cuáles son las asignaciones por cantidades teóricas y finales que recibe la comunidad autónoma por el REF concluye que ni siquiera compensan en menos de un 50% el conjunto de los sobrecostes que tienen no solo las economías, las familias y las administraciones públicas canarias. Todos los estudios concluyen esa diferencia.

Por lo tanto, creo que lo que es fundamental -y ahí coincidimos todos, algunos más que otros, y lamentamos la actuación de algunos- es lo que se dijo en el momento de publicar las balanzas fiscales. Porque, evidentemente, señor Marcos Pérez, es verdad que sorprendió que el Partido Popular dijera que esto era una bofetada al señor Rivero. No, bofetada al victimismo.

Pues, mire, ¿sabe lo que es una bofetada? La bofetada se la dieron al señor Soria. Yo creo que no se han dado cuenta de que cuando hablaron de la bofetada le estaban dando un cachetón, para ser más exactos, al señor Soria. Porque, en esta misma Cámara, en esta misma sede, en el año 2011, el señor Soria, sobre las relaciones Canarias-Estado y cómo debíamos actuar en ese sentido, si debíamos ser o no victimistas, dijo que "Canarias no puede permanecer quieta y encantada, como si las cosas se arreglasen por sí solas. Tiene que haber una posición beligerante", utilizó el señor Soria; y, dirigiéndose al señor Rivero, el señor Soria le dijo: "y si usted lo que hace es lo contrario, y lo que demuestra es pleitesía y adulación, la gravedad se torna aún mayor. Es una irresponsabilidad, y quien así actúa se convierte en cómplice". Y añadió: "pediremos lo que nos corresponde, sin complejos, sin agachar la cabeza y sin avergonzarnos de nuestra singularidad". Bofetada del Partido Popular al señor Soria con todo ese tipo de cosas.

Eso es lo que ocurrió finalmente, porque, evidentemente, es verdad, señor Barragán, que sorprende que en la publicación de las balanzas fiscales salga un Partido Popular de Canarias poco menos que congratulándose del resultado al que llega ese estudio que, como he dicho, parte de determinadas premisas; eso es lo que hace.

Y, claro, uno se pregunta: ¿eso es una temeridad o es un desconocimiento? Es decir, cuando se aplaude esa situación, cuando se habla, en aquel mes de julio y hoy, en esta tribuna, diciendo, hablando de la solidaridad. Es decir, y se llegaron a nombrar los privilegios recogidos en las balanzas.

Mire, cuando se hace eso por parte del Partido Popular, déjenme decirles, señoras y señores del Partido Popular, que lo que ustedes están celebrando es que el Gobierno del Partido Popular reste financiación a los servicios esenciales año tras año -incumpliendo, por tanto, su promesa de reformar el sistema-; que no cumpla con la obligación de invertir en las islas la media estatal, disminuyendo sucesivamente las partidas a Canarias; que el esfuerzo fiscal que soportamos es superior al resto de comunidades autónomas en relación con la renta disponible; y, sobre todo, ustedes, señorías, aplauden a un estudio que pone en cuestión el REF, al no considerar que su finalidad sea la de tratar de compensar la lejanía y la insularidad para intentar poner a los canarios en igualdad de condiciones.

Por tanto, mientras ustedes califican de privilegiados a los canarios, porque les parece que tenemos recursos suficientes, su mismo partido, en otras comunidades autónomas, lo que hace es reclamar al Estado una reforma urgente del sistema de financiación para que podamos atender a los ciudadanos de la misma forma.

Señoras y señores: no debemos dejar ni entender que un estudio realizado bajo unas determinadas premisas puede dejar, quitarnos la capacidad, la razón y la fuerza que tenemos los canarios y las canarias de, por un lado, la existencia de un régimen permanente que compense los sobrecostes, los sobrecostes de familias, empresas y administraciones, el Régimen Económico y Fiscal; y, segundo, por tanto, no podemos nunca, nunca, nunca, siquiera poner en duda que eso lo que hace es una bofetada a los gobernantes... No, no, no: eso lo que hace es, en parte, compensar -repito- esos sobrecostes que tenemos. Es decir: no cometamos el error, señorías, de aplaudir a quien pone en duda algo que lleva más de quinientos años de historia.

Muchas gracias.

El señor VICEPRESIDENTE PRIMERO (Cruz Hernández): Gracias, señor consejero.