Diario de Sesiones 166, de fecha 21/4/2015
Punto 3

8L/CG-0025 COMUNICACIÓN DEL GOBIERNO SOBRE RENOVACIÓN DE LOS INCENTIVOS ECONÓMICOS DEL RÉGIMEN ECONÓMICO Y FISCAL DE CANARIAS.

El señor PRESIDENTE: Segundo punto, comunicación del Gobierno sobre la renovación de los incentivos económicos del Régimen Económico y Fiscal de Canarias.

Para la presentación de la comunicación, señor consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, don Javier González Ortiz.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD (González Ortiz): Presidente, señorías, buenos días a todos y a todas.

Asistimos hoy en esta Cámara a un nuevo capítulo en la historia del principal instrumento que tiene Canarias para su desarrollo, nuestro REF, destinado a reconocer nuestras singularidades y a la compensación de nuestros sobrecostes por vivir y trabajar en un territorio alejado y fragmentado.

Y es histórico porque nuestro régimen precisa adaptarse a las circunstancias actuales, como así lo ha hecho a lo largo de los quinientos años en los que el archipiélago ha tenido un tratamiento singular, tanto en lo administrativo como en lo económico y lo social. Unos derechos tradicionales que se consolidan en el siglo XIX con la Ley de los Puertos Francos, que exoneraba a las islas del pago de derechos arancelarios y demás gravámenes a la importación y que dio paso, en los años 60, a numerosas excepciones en la aplicación de impuestos estatales en las islas.

Pero cuando no fue suficiente este librecambismo comercial llegó la aprobación, en 1972, de la primera Ley del REF, para ratificar nuestro modelo específico y dotarlo además de un conjunto de medidas económicas y fiscales adicionales que estimularan nuestro desarrollo.

Un sistema especial que nunca fue estático. Hubo que adaptarse otra vez a los profundos cambios surgidos con la Constitución de 1978, la nueva arquitectura del Estado, estructurado en comunidades autónomas, y la adhesión de España a la Unión Europea, lo que nos llevó a una profunda reforma de los aspectos fiscales con una nueva ley en 1991. En ella se aseguró una presión fiscal indirecta menor que en el resto del Estado, se adoptaron las figuras impositivas y se garantizaron los ingresos de nuestras corporaciones locales. Sin embargo, Canarias precisaba de un mayor impulso en lo económico. Fruto de esta necesidad, en 1994 volvimos a introducir cambios con especial incidencia en la cohesión social y territorial, en la creación de empleo y en el reconocimiento expreso de compensaciones a los sobrecostes de los servicios básicos.

Tras este recorrido, veinte años después, hoy asistimos a otro momento histórico. Pasadas dos décadas de vigencia, el REF requiere de nuevo un paso adelante.

A lo largo de esta legislatura, hemos dado importantes avances, comenzando por la resolución que, de forma unánime, aprobó este Parlamento en junio del 2012 y que mandató al Gobierno a renovar nuestro régimen tanto en sus aspectos económicos como en los fiscales. Después de un largo proceso de diálogo y participación, al que le siguió la negociación con el Gobierno central y la Comisión Europea, logramos reformar el ámbito fiscal del REF para adaptarlo a la nueva realidad y, sobre todo, para adecuarlo a la primera necesidad que hoy tiene Canarias: crear empleo. Con esfuerzo y el trabajo de todos, disponemos hoy de nuevas herramientas que, desde el pasado 1 de enero, están a disposición de empresas y emprendedores para generar más actividad, más dinamismo económico en las islas. Hemos cumplido con nuestro compromiso y también con nuestra responsabilidad, estableciendo las mejores condiciones posibles para que el crecimiento ya iniciado en el 2014 no solo se consolide sino que acelere el recorrido. El nuevo REF fiscal será, sin duda, una palanca esencial para activar ese crecimiento, de forma que Canarias alcance, a través del amplio abanico de sus instrumentos, una velocidad de crucero.

Una vez conseguida la reforma de los aspectos fiscales, debemos completar la tarea con la actualización de los incentivos económicos. Un conjunto de medidas de amplio calado tendrá incidencia en la vida diaria de todos los canarios y las canarias, que también es preciso renovar. La ley estatal que recopila estos preceptos, que, como les decía, data de 1994, requiere incorporar elementos hasta ahora inéditos, además de reforzar y mejorar los ya existentes.

Con ese objetivo, el Gobierno trae a la Cámara esta comunicación. Un documento que somete a todos los grupos para su debate, desarrollo y concreción, que pueda culminar en una propuesta consensuada políticamente y en un mandato expreso para su posterior negociación. Su fin último es fortalecer las necesidades y justas compensaciones a nuestros sobrecostes, hacer frente a los inconvenientes adicionales que tenemos en Canarias los ciudadanos, las empresas y las administraciones por razón de la lejanía y la insularidad; paliar, en definitiva, la desigualdad para situarnos en similares condiciones al resto de ciudadanos y territorios del Estado, a lo que se añade el reconocimiento de nuevos sobrecostes surgidos durante este periodo y que hoy no están atendidos: la especial incidencia en las islas no capitalinas como consecuencia de la doble insularidad, la mayor atención a aspectos sociales como el empleo y la formación, el refuerzo y la incorporación de medidas para el desarrollo económico; y, por último, la obligación para que el REF se cumpla en todos sus términos y no quede a expensas de coyunturas políticas o económicas.

Una comunicación, señorías, que llega tras el consenso de los agentes económicos y sociales y con el respaldo mayoritario de las instituciones y entidades más representativas de las islas, y este es un aspecto trascendental. No abordamos, por tanto, hoy una propuesta de reforma diseñada de manera unilateral por el Gobierno de Canarias; por el contrario, lleva el sello de una amplia representación de la sociedad canaria. Patronales, sindicatos, universidades, administraciones públicas han suscrito los aspectos fundamentales que debe contener la vertiente económica de un REF renovado y siempre -recuerdo, señorías- en función de la resolución parlamentaria de julio del 2012, que, recuerdo, fue aprobada por unanimidad. Una voz única, fruto del trabajo común, para lograr un nuevo REF de todos y para todos, sin olvidar lo que resta por hacer, sobre todo para generar una mayor conciencia social de lo que supone nuestro régimen, su importancia, su relevancia, asignatura pendiente a la que debemos dedicar un mayor empeño colectivo desde todas las instituciones, porque solo conociéndolo e identificando su utilidad y beneficio se puede poner en valor y defenderlo.

Por eso es fundamental el consenso hasta ahora alcanzado, acuerdo que deseamos y esperamos tenga su continuidad en el ámbito parlamentario, como también que se haga extensivo al Gobierno de España para fijar un renovado tratamiento a Canarias que nos permita afrontar unas desventajas estructurales que son permanentes, así como la garantía de una compensación efectiva. Una finalidad que se alinea con lo establecido en la legislación comunitaria, donde la consideración del archipiélago como región ultraperiférica se encuentra anclada en el derecho primario de la Unión Europea.

Pero para lograr que tal reconocimiento sea real se demandan políticas específicas y suficientes por parte del Gobierno central que, además, promuevan la cohesión económica, social y territorial de las islas, y lo hagan con especial atención a nuevas vías para nuestro desarrollo, como el impulso a la internacionalización de la economía en un mundo cambiante y globalizado. De esta forma, en la renovación de nuestro REF que hoy debatimos se deben incorporar a los principios generales que rigen la actual ley de 1994 otros nuevos que afianzarán y ampliarán su contenido.

Además de los derivados de la reafirmación de Canarias como región ultraperiférica, se debe incluir la equidad en materia de financiación y el relativo a la cohesión del archipiélago, con gran relevancia en la doble insularidad, y la promoción por parte de los poderes públicos de la responsabilidad social corporativa de las empresas.

Pero, como les decía, el REF económico es de gran trascendencia para la ciudadanía al incluir un extenso catálogo de actuaciones que inciden en el día a día de todos los canarios y las canarias. Para tratar de ponernos en igualdad con el resto de ciudadanos, se debe reforzar la garantía de una presión fiscal menor al resto de España y se han de ampliar las medidas en servicios básicos como el transporte, la energía, el agua, las telecomunicaciones o la gestión de residuos. Así, la reforma ha de contemplar el reconocimiento del transporte de personas como un servicio público esencial. De la misma forma que debe establecer la posibilidad de aumentar el 50% actual de la subvención a los trayectos aéreos y marítimos, en función de la evolución del mercado y que presta estos servicios, y, en especial, para atender cuestiones económicas y sociales singulares. Asimismo, poder fijar, de manera excepcional, precios máximos de referencia cuando existan razones de interés general.

En relación con el transporte de mercancías, se pretende elevar hasta el cien por cien la compensación del coste efectivo entre las islas, entre estas y la Península y con países de la Unión Europea, a diferencia de lo que ocurre en la actualidad donde la subvención queda a expensas de las disponibilidades presupuestarias.

También debería considerarse como servicio público esencial el transporte de viajeros por carretera, de forma que se pueda financiar el sobrecoste que se produce en Canarias.

Además, los puertos y aeropuertos canarios tendrían la calificación de infraestructuras de interés general, vitales para la movilidad de personas y mercancías, en los que se aplicaran tarifas diferentes y reducidas para asegurar la conectividad del archipiélago y su desarrollo económico-social.

En este tratamiento diferenciado ha de cobrar especial relevancia la participación de las instituciones de la comunidad autónoma en la planificación y gestión del modelo portuario y aeroportuario, así como la posibilidad de incentivar nuevas rutas con carácter permanente, junto a la aplicación definitiva de la quinta libertad.

En este ámbito del transporte, se hace necesario introducir, además, un nuevo aspecto no considerado hasta ahora; se trata de las emisiones de gases de efecto invernadero en la aviación, penalizadas por una directiva comunitaria para luchar contra el cambio climático. La aplicación de estos nuevos costes tendría como consecuencia un encarecimiento de la conectividad canaria, por lo que solicitamos una excepción a la Unión Europea para los vuelos entre las regiones ultraperiféricas y sus respectivos Estados miembro.

Continuando con los servicios básicos, que repercuten directamente en los ciudadanos y las empresas, se debe garantizar el derecho de acceso a las tecnologías de la información y la comunicación a toda la población canaria y, por tanto, solicitar la compensación de los sobrecostes para el despliegue de servicios como los de banda ancha.

En materia energética, se precisa reiterar el mantenimiento de unos precios equivalentes al resto de España e incorporar un marco regulatorio propio para hacer el sistema progresivamente suficiente. Asimismo, se requiere un plan para implantar un modelo basado en las energías renovables, junto a políticas tarifarias que primen el uso racional y el ahorro energético.

Y sobre el coste del agua desalinizada, regenerada o reutilizada, indispensable en Canarias, se impulsaría un sistema de compensación para que las tarifas se moderen hasta alcanzar un nivel equivalente al resto del territorio estatal.

Como novedad, también se reconoce la necesidad de atender los sobrecostes generados en la gestión de residuos, de forma que se garantice la financiación de su tratamiento en Canarias o, en su defecto, el traslado a la Península.

Por otra parte, la propuesta de actualización del REF debe contemplar aspectos sociales de gran trascendencia para las islas, como el fomento del empleo, la cualificación profesional y la formación. En el caso del empleo, y atendiendo a las singularidades del mercado laboral canario, debe establecerse un plan integral en el que se deberán aplicar medidas específicas de protección social para los colectivos más vulnerables. Y con el fin de reactivar el empleo, debería desarrollarse un programa especial de Formación Profesional con becas para los estudiantes que no encuentren en su isla de residencia la oferta educativa que demanden, ayudas que también deben abarcar los desplazamientos para aquellos que realicen prácticas en empresas fuera del archipiélago.

En el ámbito de la formación, se requiere una especial atención a nuestras universidades, de tal forma que puedan estar en igualdad de condiciones al resto del sistema español, debiendo, por tanto, compensarse sus sobrecostes. Se precisa, por tanto, la consideración de nuestros centros de educación superior como centros de referencia en el marco de las políticas universitarias estatales, la inclusión de medidas para incrementar su competitividad y focalizar los esfuerzos en la investigación e innovación con impacto en los sectores productivos, adaptando, por tanto, su oferta a las necesidades del mercado.

En esta línea, se deben potenciar actuaciones para favorecer especialmente la movilidad de estudiantes y profesores, de forma que puedan ser compensados por los sobrecostes adicionales de la lejanía cuando realicen tareas de investigación y formación en el exterior.

De otro lado, la propuesta de modificación debe contener medidas singulares para impulsar el desarrollo económico. En este sentido, en el nuevo régimen se hace imprescindible la internacionalización de las empresas canarias y prestar especial atención al sector turístico, con el establecimiento de nuevos planes específicos. En concreto, debe realizarse un plan estratégico del turismo que contenga incentivos a la inversión para la modernización de la planta alojativa, a las actividades de ocio complementarias y a nuevos productos especializados y alternativos; un programa que deberá tener en cuenta las consecuencias de la estacionalidad del sector para favorecer el mantenimiento de la actividad económica y el empleo. A este plan se debería unir otro de Formación Profesional para la cualificación de sus profesionales, en el que tendría especial relevancia el aprendizaje de idiomas y la utilización de las tecnologías de la información y la comunicación. Y un tercero dedicado a las inversiones públicas e infraestructuras en las áreas turísticas, dotado de forma suficiente en los presupuestos generales del Estado y gestionado por las instituciones canarias.

En cuanto al sector primario, se considera prioritario fijar actuaciones encaminadas a que Canarias obtenga una mayor capacidad de autoabastecimiento, además de fomentar su competitividad e innovación, apoyando a las pequeñas y medianas empresas y el desarrollo de cooperativas agrícolas y ganaderas. En este contexto, se debe contemplar la dotación presupuestaria suficiente que garantice la totalidad de la financiación adicional en el marco del Posei.

Otra de las medidas implicaría el compromiso de los poderes públicos para promover el consumo de productos agrícolas, ganaderos y pesqueros locales en los establecimientos turísticos de Canarias.

Por otra parte, en el área de los incentivos económicos regionales, habría que primar la inversión en las islas, apoyando con más intensidad las realizadas en las no capitalinas, y a los proyectos industriales, turísticos y aquellos desarrollados por las cooperativas y sociedades de economía social.

Y por primera vez se debe incluir el concepto de responsabilidad social corporativa, que deberán asumir las empresas beneficiarias de estos incentivos, así como el empleo de calidad para obtener una mayor valoración de sus proyectos.

Por último, para obtener la financiación que necesitan las empresas y los autónomos, se introduciría una línea de préstamos a través del ICO, con tipos de interés preferentes, y cuyo importe ascendería cada año a un mínimo del 1% del PIB canario.

En resumen, el nuevo REF económico deberá ofrecer una respuesta efectiva y actualizada a las singularidades de Canarias para compensar nuestros sobrecostes y evitar las desigualdades que se producen por causa de la lejanía y la insularidad. Compensaciones que se extienden a las inversiones estatales, de forma que no pudieran ser inferiores a la media de las comunidades autónomas, y considerando siempre que los recursos del REF serían, en todo caso, complementarios y adicionales.

Unas medidas de obligado cumplimiento que vienen respaldadas por la consideración de las islas como región europea ultraperiférica, encaminadas a avanzar en un sólido crecimiento y en la cohesión social y territorial del archipiélago.

Por último, señorías, quiero agradecerles, en nombre propio y del Gobierno, la altura de miras y la responsabilidad para el acuerdo que todos y cada uno de los diputados y diputadas han demostrado en todo el proceso de renovación de nuestro REF. Lograr una voz política y social unánime es, sin duda, la mayor y mejor defensa que podemos hacer de nuestras singularidades, del reconocimiento de nuestros sobrecostes y del principal instrumento que tienen las islas para su desarrollo, de nuestro REF. Espero que así sea.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor consejero, don Javier González Ortiz.

Por los grupos parlamentarios, Grupo Parlamentario Mixto, don Román Rodríguez.

El señor RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ: Señor presidente, señorías, señor presidente del Gobierno: muy buenos días.

Este es un debate, seguramente el penúltimo de esta legislatura, pero relevante. Lo es porque su contenido tiene importancia para el bienestar presente y futuro de nuestra gente. Cierto es que algunos no lo consideramos el elemento principal. El elemento principal de nuestro futuro es nuestra gente, cómo articulemos nuestro futuro, cómo organicemos nuestra convivencia, nuestro sistema económico, nuestro modelo democrático. Los instrumentos que hemos conquistado en materia económica y fiscal contribuyen a lo anterior, pero lo determinante del futuro de este pueblo es su gente y la dirección política que seamos capaces de imprimir a este pueblo en la búsqueda de mayores niveles de bienestar, de progreso y, por lo tanto, de felicidad para nuestra gente. Por lo tanto, creo que los instrumentos fiscales y económicos contribuyen a ello, pero no determinan nuestro futuro. Nuestro futuro lo determinará este pueblo en cada etapa histórica en función de sus capacidades y de sus mayorías.

Nosotros somos de los que no mitificamos el REF, ni el fiscal ni el económico, pero le damos mucha importancia, porque reconocen algo consustancial a nuestra condición de archipiélago y a nuestra condición de archipiélago alejado del continente y a nuestros problemas de orden estructural, que hacen más difícil el desarrollo económico y que colocan a esta sociedad, a sus personas, a sus empresas, a sus instituciones, a sus actividades productivas, en condiciones de desventaja con los pueblos de orden continental, donde las sinergias económicas, las proximidades, los modos de comunicación facilitan las cosas. Lo que hace el REF es reconocer esta singularidad, consustancial a nuestro hecho territorial, que es compensar, buscar respuestas adaptadas a esta circunstancia y es lo que históricamente han intentando, en los distintos momentos, pues, los responsables a lo largo de la historia de los intereses canarios.

En julio del 2012 aprobamos aquí, después de una comunicación del Gobierno, una resolución que trataba de aproximar las líneas conductoras de lo que debía ser la negociación del REF fiscal, que ha concluido razonablemente bien, y lo que debían ser los contenidos actualizados de nuestro REF económico. Sé que los términos estrictos de conocimiento de los contenidos de nuestro Régimen Económico y Fiscal desgraciadamente no hemos conseguido que sean compartidos, asimilados o defendidos por la mayoría social, seguramente por la complejidad de sus contenidos y también porque, seguro, tenemos que ser autocríticos. No hemos hecho las tareas debidas para que la comprensión, para que el manejo de sus contenidos sea de orden, digamos, más popular, más extendida entre la ciudadanía.

Pero, en esencia, el REF fiscal tiene el objeto de generar condiciones para que el crecimiento económico se haga sobre la diversificación, capitalizando nuestras empresas, generando empleo. El REF fiscal son políticas de orden fiscal destinadas a eso, a buscar diversificación de nuestro sistema productivo, a capitalizar nuestras empresas y a generar empleo. Cierto es que los resultados de nuestro REF fiscal a lo largo de la historia no han conseguido, por ejemplo, mejorar la diversificación de nuestro sistema productivo y seguimos actuando sobre pocas actividades, algunas de ellas muy relevantes y razonablemente competitivas. Y tampoco hemos conseguido arrastrar a la economía canaria hacia niveles de generación de empleo comparables a los pueblos continentales, ni siquiera en los momentos de crecimiento.

No obstante, nosotros creemos que el REF fiscal, que logramos convalidar en la Unión Europea y aprobar por las Cortes Generales, recoge esencialmente lo que aquí reclamábamos. Cierto es que una de las cuestiones básicas que apuntábamos, que era el abaratamiento de los costes de la Seguridad Social para determinadas empresas, para determinadas actividades y durante un tiempo determinado, no se consiguió, aunque hay gente por ahí ahora prometiendo el 50% de reducción de los costes de la Seguridad Social para todo el mundo. Esto sí, sin tener competencias, sin tener ninguna fuente que pueda avalar semejante decisión, cuando este Parlamento había solicitado una bonificación para determinadas actividades, para determinadas empresas, por tiempo determinado, para contribuir a pelear por el mantenimiento y la mejora del empleo. Ahora los brindis al sol, son época de ello, ¿no?

Y luego está este segundo aspecto de nuestro Régimen Económico y Fiscal, que es el económico. Este estaría esencialmente destinado a compensar los sobrecostes de lo que significa vivir, trabajar y prestar servicios en un territorio como el nuestro. Está destinado a políticas sectoriales que tratan de compensar la lejanía, la insularidad y los problemas que esto conlleva. Son diversos y se expresan en todos los órdenes y condiciones de la vida, en las personas, en las empresas y en las instituciones, y el REF económico teóricamente debiera tratar de compensar, paliar, equilibrar las consecuencias que la lejanía, la insularidad, el pequeño tamaño de nuestros mercados, las dificultades objetivas que genera un territorio como el nuestro. Por eso tienen mucho interés las políticas para mejorar y abaratar la producción y el consumo de agua, lo propio en materia energética. Hay que decir que tanto en la comunicación del Gobierno como en la resolución que estamos pactando aparece con mucha fuerza el tema de las energías renovables, haciendo un cambio de tercio sobre la historia reciente que nosotros valoramos y apreciamos. El elemento de los residuos, de las telecomunicaciones, evidentemente el tema del sector primario.

Pero yo quiero hacer énfasis en lo que a nosotros nos parece que son los elementos que más determinan. Por supuesto, en el tema industrial, en fin. Las áreas sectoriales de la economía canaria tienen respuesta en la propuesta que viene del Gobierno y que ha sido ampliamente debatida y consensuada con los sectores sociales y económicos y que también se recoge en esta propuesta de resolución, amplia, que estamos tratando de consensuar todos los grupos parlamentarios.

Pero yo quiero destacar elementos fundamentales del REF económico. Si algo identifica el REF económico son las compensaciones al transporte. Si algo condiciona a las personas, a las familias, a las empresas y a la prestación de servicios públicos es la movilidad, la movilidad en un territorio como el nuestro, entre nuestros territorios y entre nuestros territorios y el continente, condiciona de forma absoluta el futuro de esta tierra. Por eso las políticas de transporte son fundamentales. Hemos conseguido, gracias a la fuerza acumulada, a la presión generada y también, hay que reconocer, a la sensibilidad del Gobierno español en alguna etapa, que las ayudas al transporte de personas estén por encima, es la única cosa que está por encima sobre las previsiones de la ley. Hemos alcanzado el 50% del coste del transporte de personas cuando en la norma está solo el 33, producto de la presión que se generó e, insisto, del momento político que lo posibilitó.

Este es un elemento que identifica el REF económico, es la manera más clara de presentarlo. Es muy costoso moverse entre las islas, es muy costoso moverse entre las islas y el continente europeo y por eso las políticas, las ayudas al transporte con recursos públicos son un derecho que nos aproxima -no nos iguala, nos aproxima- a los costes de transporte en materia continental. Está bien calculado lo que significa moverse aquí, siete u ocho veces más que hacerlo en el territorio continental por este hecho que nos condiciona. Y no solamente condiciona en la situación de insularidad, sino, como bien cita el documento, de la doble insularidad, que complejiza este parámetro de los ámbitos, de los territorios menos poblados.

Pero el transporte no solamente es de personas, es también de mercancías, y aquí sí que tenemos un estrepitoso fracaso. Cuando habíamos conseguido el 65% de los costes en el transporte de mercancías al final del año 2010, hemos vuelto a retroceder y ahora estamos en escasamente el 25%, con un flagrante incumplimiento de los avances que habíamos logrado conquistar en las relaciones con los poderes centrales del Estado. Es fundamental, por lo tanto, garantizarnos, y el documento, hace un esfuerzo no, el documento es un documento de máximos, habla del 100% de los costes del transporte.

Pero este es un elemento, insisto, que para nosotros es identificador de lo que significa el REF económico.

Segundo elemento, la formación y el empleo. Este es otro parámetro esencial, donde también hemos perdido la batalla. Logramos hasta 80 o 90 millones/año para infraestructuras educativas y planes de empleo, reconociendo la Administración General del Estado la singularidad de Canarias con la cobertura del REF económico, y estamos en estos momentos en cero, cero euros para las infraestructuras educativas y cero euros para los planes de empleo diferenciados, porque nuestro problema lo es en grado sumo. Desgraciadamente, en este parámetro habrá que concentrar una parte de los esfuerzos en los próximos años para que se reconozca la singularidad en esta materia, por supuesto las enormes tasas de desempleo y las dificultades de que un sistema económico como el nuestro lo pueda suponer, y eso significa que la formación y el empleo tienen que ser políticas sectoriales determinantes en el próximo futuro.

Lo debe ser también en materia del crédito. Si algo está sufriendo la economía canaria, además de los recortes en las administraciones públicas, que han detraído casi cuatro puntos de recursos al sistema económico canario en esta dura crisis que hemos vivido, es la falta de crédito. No saldremos de esta, no romperemos el ciclo de injusticias y de paro y cierre de empresas si no logramos cambiar la austeridad por los estímulos, y eso pasa por que el sector público crezca razonablemente, recuperando los derechos que tenemos en materia de financiación autonómica, recuperando los derechos que tenemos en materia de inversión del Estado, recuperando los derechos que tenemos en materia de financiación de las políticas sectoriales que consagra el REF económico, pero no será suficiente con la recuperación de esos recursos económicos si no somos capaces de inyectar a la economía privada la savia, la sangre que hace posible el funcionamiento de la economía de mercado, que es el crédito, y el crédito es escaso, caro y además excesivamente garantista y hace muy difícil el acceso de las pequeñas y medianas empresas al mismo. Por eso el apartado referido a la facilitación de crédito barato a pequeñas y medianas empresas, a empresas estratégicas, es fundamental y el Instituto de Crédito Oficial, es una obligación que al menos el 1% del PIB se otorgue en créditos facilitadores de la actividad económica, y nos parece otro elemento muy relevante. Por supuesto, la responsabilidad social corporativa que se apunta aquí como concepto nos parece de relevancia y que es una aportación, me consta además, de las organizaciones sindicales.

Pero hay otro elemento que retrata el REF económico, que son las infraestructuras. Seguramente, después del transporte, es el que mejor expresa la necesidad que tiene Canarias de que en materia de infraestructuras... Puertos, aeropuertos, carreteras, tráfico rodado y guiado y, por supuesto, telecomunicaciones son determinantes para que Canarias esté en condiciones de competir, además de lo que significa tirar de la demanda. Y aquí el incumplimiento es flagrante, es palmario. Habíamos conseguido, después de quince años de olvido en la primera etapa del sistema democrático español, que los gobiernos de España aceptaran, reconocieran que teníamos derecho a participar en los planes de infraestructuras de interés general, y eso se concretó en los famosos convenios, de carreteras, obras hidráulicas, etcétera, pero el de carreteras concitaba lo sustancial de los recursos. Ya saben sus señorías, porque lo hemos sufrido y debatido aquí, que el incumplimiento flagrante del Convenio de Carreteras, suscrito, firmado, con las obras adjudicadas, pone en evidencia el trato injusto que ha representado por parte del Gobierno de España el incumplimiento de una de las cuestiones que mejor definen, digamos, los derechos de Canarias en materia de inversiones del Estado en nuestra comunidad. 628 millones de euros, que estaban comprometidos, que estaban contratados, han sido eliminados de las leyes de presupuestos de estos años y han paralizado de facto la red de carreteras o de obras de carreteras que estaba en ejecución.

Por eso quiero destacar que, aun reconociendo que la comunicación viene sustentada en un proceso de debate y de consenso, aun reconociendo que la comunicación y la resolución que estamos pactando tienen muchísimos contenidos históricos -la mayoría de ellos- y otros actualizados, hay que decir, desgraciadamente, que no bastará con una resolución unánime o no de este Parlamento, sino que tendremos que acumular fuerzas suficientes para que los poderes centrales del Estado, por razones políticas, respeten nuestros derechos fiscales, razonablemente consolidados en el REF que hemos aprobado, pero nuestros derechos económicos claramente, manifiestamente incumplidos. Por eso en esta tribuna, en varias ocasiones, me han escuchado decir, señorías, que yo firmaría el REF actual si se cumpliera. Por supuesto que vamos a suscribir los contenidos de la propuesta gubernamental, insisto, de la resolución que estamos consensuando, pero, digo como lo siento, ni el Partido Popular ni el Partido Socialista ni Podemos ni Ciudadanos cumplirán con lo que hoy aprobaremos en esta Cámara y, si no, al tiempo. Solo lo conseguiremos si tenemos a este pueblo unido, fuerte y organizado, y habrá oportunidades de recordar lo que digo hoy.

El señor PRESIDENTE: Muchísimas gracias, don Román Rodríguez.

Por el Grupo Socialista Canario, don Manuel Marcos Pérez Hernández.

El señor PÉREZ HERNÁNDEZ: Gracias, señor presidente. Señorías.

Al Grupo Parlamentario Socialista le satisface que se traiga hoy a esta sesión plenaria la comunicación del Gobierno sobre la renovación de los incentivos económicos de nuestro REF.

En la parte más positiva, debemos señalar que, en términos generales, la propuesta resulta interesante y consideramos que puede ayudar al archipiélago canario en su ánimo de progreso y crecimiento; en su vertiente menos positiva, consideramos que es un proceso desacoplado de la reforma fiscal y que adolece de instrumentos propios que garanticen su cumplimiento, como ya veremos a lo largo de nuestra intervención.

Lo decíamos en esta misma Cámara el día de la toma en consideración del Real Decreto-Ley 15/2014, de modificación del Régimen Económico y Fiscal de Canarias, es decir, el día en que se revisaban sus aspectos fiscales, hemos tenido una oportunidad para haber realizado una revisión más profunda. No ha sido posible por las causas que ya también se han señalado en otras intervenciones. Para revisar de forma más profunda, como decía, la principal herramienta de política económica, nuestro REF.

La crisis reciente ha dejado de manifiesto que el régimen que diseñamos en los años 90 ha dado lugar a un modelo económico débil y generador de desigualdades. Nos preocupa la falta de garantías que se observan en el texto articulado para la aplicación efectiva de las disposiciones relativas al REF económico. Es bien sabido que el principal problema que padece el REF económico en la actualidad es la inaplicación de algunas de las medidas contempladas en el mismo y el progresivo desmantelamiento de otras que sí se aplicaban. El Gobierno de España no cumple, viéndose esta posición amparada por la doctrina del Tribunal Constitucional.

Por este motivo, hemos advertido en repetidas ocasiones sobre la importancia que adquiere para el correcto desarrollo del REF la introducción de un buen blindaje del mismo en el Estatuto de Autonomía de Canarias. Esta modificación se encuentra incluida en la última propuesta aprobada por este Parlamento con relación al Estatuto, por lo que su aprobación es fundamental para que los avances incluidos en el texto, que comentamos hoy, y los ya incluidos en la Ley 19/1994 se cumplan de forma efectiva.

Señalaremos también, señorías, igualmente, el riesgo de la separación de la negociación entre los aspectos económicos y fiscales. Como muestra de ello, pueden sacarse a la palestra las opiniones vertidas desde el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas haciendo entender que negociación del REF económico y el sistema de financiación de las comunidades autónomas de régimen común deben ir de la mano. El REF, señorías, es un bloque de incentivos económicos y fiscales diferencial con el que las islas Canarias cuentan desde el siglo XVI y que debe mantenerse cohesionado y separado de otros acuerdos relevantes entre la comunidad autónoma y el Estado español.

Señorías, señor consejero, valoramos muy positivamente el elevado grado de consenso alcanzado entre los agentes económicos de las islas para redactar este documento. Es especialmente significativo que en el texto de la comunicación se señale que los principales ejes de la estrategia económica de futuro de Canarias para alcanzar un sólido crecimiento son la competitividad, el impulso de aquellos sectores de actividad con mejores perspectivas de progreso en las islas, el refuerzo de la productividad del tejido económico y la internacionalización de la economía canaria.

Para el Grupo Socialista, adquiere cada vez mayor relevancia poner el acento en el rol que debe desempeñar el REF como instrumento proactivo y dinamizador de la actividad económica de Canarias y que esta visión se vaya imponiendo sobre otra, muy importante, fundamental, la otra vertiente, la de la compensación de nuestras desventajas.

Ha sido todo un acierto incluir referencias expresas a la conexión que el REF debe tener con la consideración de Canarias como región ultraperiférica de la Unión Europea. La vinculación del artículo 349 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea da pie a la modulación de las actuaciones de los poderes públicos en regiones como Canarias.

Del mismo modo, la referencia a la doble insularidad refuerza el mensaje de cohesión territorial que no podemos perder de vista cuando hablamos de desarrollo económico de las islas. La situación particular de las islas no capitalinas debe tenerse especialmente en cuenta e introducirse, siempre que sea posible, como un elemento adicional en las propuestas formuladas.

Entrando en los aspectos más concretos de la propuesta, valoramos especialmente la inclusión de una serie de medidas novedosas, así como algunas actualizaciones de las ya existentes.

La primera -y también ya se ha señalado aquí por el señor consejero- es el reforzamiento de las ayudas al transporte, que tan relevantes resultan para el desarrollo de la actividad económica en un territorio, como es el caso del nuestro, un territorio archipielágico, lo que se consolida no solo en las subvenciones al transporte de pasajeros y mercancías sino también -y ya se ha señalado- en la inclusión de la quinta libertad aérea, lo que dinamizará el posicionamiento de Canarias como un hub aéreo atlántico.

La segunda cuestión tiene que ver con la apuesta por la mejora de las telecomunicaciones y la adaptación de nuevas tendencias. La redacción actual en esta materia se había quedado obsoleta, lo que resulta lógico a la vista del imponente avance que han experimentado las tecnologías de la información y la comunicación desde los años 90. La apuesta por la conectividad a través de banda ancha y la apuesta por el desarrollo de las actividades audiovisuales, incluido el software, adquieren un peso más relevante en el nuevo REF económico frente a lo que hasta este momento venía siendo la clave, la telefonía fija.

A la energía se le ha reservado una especial consideración dentro de las nuevas propuestas del REF económico. De gran importancia resulta no solo mantener el actual sistema de ajuste de precios de consumo para moderarlos y sintonizarlos con los existentes en la Península, sino también para impulsar el desarrollo de un sector de actividad económica de tanto futuro como son las energías renovables.

De igual forma, señorías, la inclusión de medidas sobre gestión, valorización, reciclaje y descontaminación de los residuos es una novedad derivada de la creciente importancia adquirida por estas actividades en las sociedades avanzadas, máxime teniendo en cuenta el alto impacto que la doble insularidad adquiere en una correcta gestión del sistema canario de tratamiento de residuos.

El REF económico, señorías, no podía olvidarse de nuestra principal actividad económica, el turismo, para lo que se contempla un paquete de medidas que se articulan a través de un plan estratégico de turismo. Acompañando al mismo se incluyen propuestas orientadas a la mejora de la calidad del sector como apuesta competitiva, lo que contempla mejoras en los programas de formación y la inversión en los espacios públicos turísticos y en las infraestructuras claves para su correcto desarrollo, las carreteras, los puertos, los aeropuertos, los centros hospitalarios.

No menos importantes han sido las consideraciones que se han recogido para el sector primario, que en la actualidad se encuentra en una situación muy delicada y requiere el mayor entendimiento posible por parte de las autoridades públicas. Se pide el compromiso del Gobierno del Estado para mantener el Posei adicional y garantizar así las producciones agrícolas y ganaderas del archipiélago canario.

Nos produce también especial satisfacción el importante conjunto de medidas ideadas para impulsar el conocimiento y la formación. Desde el apoyo decidido a la labor desarrollada por las universidades canarias, pasando por las becas de estudio y desplazamiento de los estudiantes, así como la inclusión de planes de Formación Profesional y la incorporación de facilidades para fomentar las prácticas de empresa.

Finalmente, señorías, el texto propuesto incluye la exigencia de impulsar un programa de empleo especial para el archipiélago, consistente en recuperar los planes integrales de empleo de Canarias para luchar contra el desempleo de carácter estructural que doblega al mercado laboral canario hasta ponerlo en una situación de debilidad.

Como resumen, apuntamos que, en conjunto, las medidas incluidas en esta propuesta de renovación del REF son positivas y así las valoramos. Ya hemos señalado que algunas de las propuestas más avanzadas que hacíamos, de las más ambiciosas, no pudieron salir adelante. También señalamos la dificultad que tenemos para dar mayores garantías al cumplimiento de las medidas incluidas y negociar el REF como un conjunto y no como partes independientes. (Abandona su lugar en la Mesa el señor presidente y pasa a ocupar su lugar la señora vicepresidenta segunda, Tavío Ascanio).

Esperamos que, con un nuevo Gobierno de España, sensible a las particulares circunstancias económicas del archipiélago canario, se pueda hacer una revisión más profunda, incluyendo algunas de las cuestiones que en su día aprobó este Parlamento, una revisión más profunda de nuestro REF en los próximos años y que venga acompañada de su adecuado blindaje en el nuevo estatuto de autonomía.

Nuestro grupo, por lo tanto, se felicita del trabajo realizado y valoramos de forma muy positiva que esta es una herramienta importante para el impulso y el desarrollo económico del archipiélago. Y ya lo decíamos antes, es para nosotros muy positivo el consenso alcanzado y el trabajo que se ha realizado con todos los agentes sociales y económicos.

Quisiera terminar mi intervención, señora presidenta, haciendo un agradecimiento a la Mesa, a los servicios de la Cámara, a los grupos parlamentarios, a todos ellos, por el trabajo que hemos venido realizando, las facilidades que nos han dado tanto la Mesa como los servicios de la Cámara en nuestra tarea como diputados y diputadas. A todos los grupos parlamentarios, a todos los diputados y diputadas, por el trabajo conjunto que hemos hecho, cada uno defendiendo nuestras posiciones, pero en el marco del diálogo y del consenso. Y un agradecimiento especial a mi grupo parlamentario, de ellos he aprendido mucho, de los diputados y diputadas de mi grupo parlamentario he aprendido mucho, me han ayudado mucho en mi tarea como diputado en esta Cámara regional. Y quiero terminar destacando el papel de nuestro portavoz, de Manuel Fajardo, que ha trabajado con seriedad, con eficacia; que ha demostrado además la capacidad para dirigir un grupo y hacerlo de la forma en que lo ha hecho, en el que siempre ha imperado el diálogo y el consenso. A todos mis compañeros y compañeras, gracias.

Gracias, presidenta.

La señora VICEPRESIDENTA SEGUNDA (Tavío Ascanio): Muchas gracias, señor Marcos Pérez.

Tiene la palabra, en nombre del Grupo de Coalición Canaria, su señoría, el señor diputado don José Miguel González Hernández.

El señor GONZÁLEZ HERNÁNDEZ: Gracias, señora presidenta.

Tiene cierto simbolismo que sea precisamente en la última sesión de esta legislatura cuando tratemos un tema tan trascendente para nuestra gente, como es el Régimen Económico-Fiscal de Canarias, porque, señorías, ahí está nuestro pequeño fuero.

Ya me gustaría, y espero que sea así, que las resoluciones que se planteen posteriormente sean aprobadas por unanimidad y que puedan servir de base y fundamento para que tanto el Gobierno como el Parlamento que nos suceda pueda poner en marcha y llevar a feliz término lo que es necesario, un REF actualizado.

Porque Canarias, desde finales del siglo XV, cuando la conquista de los castellanos, ha venido disfrutando de un régimen económico y fiscal excepcional respecto del resto del territorio de España. Todos ustedes saben que esto empezó por una determinada disminución de fiscalidad al tráfico comercial en la isla de Gran Canaria por la reina Juana de Castilla, la hija de los Reyes Católicos, y que posteriormente se fue desarrollando.

Saben ustedes que cuando Bravo Murillo establece el decreto de puertos francos viene a decir: responde a una demanda de la población canaria. A veces se comenta poco. Se intentó establecer, el arancel general de toda España aplicarlo a las islas Canarias y hubo una verdadera rebelión del pueblo de Canarias a estar sometido a ese arancel, porque entendían que con ello se producía la muerte económica de la población aquí residente.

El decreto de puertos francos viene a decir, describe -yo les recomiendo a todos lo que no lo hayan leído últimamente que lo vuelvan a leer- cuál era la situación en aquellas islas. Él hablaba de la tristeza, de la pobreza, de la miseria que estaba siguiendo el pueblo canario y acababa diciendo: declárense puerto franco las islas Canarias y todos estos inconvenientes van a desaparecer.

Realmente en el Régimen Económico y Fiscal no es posible separar la parte fiscal de la parte económica. Nosotros ya lo dijimos cuando se trató este tema y se discutió el tema fiscal, porque era necesario, porque tenía que pasar por el control de la Unión Europea y porque los preceptos que el propio REF económico tenía también, que tienen trascendencia fiscal también se discutieron a la misma vez.

Porque Canarias tiene -todos lo sabemos- carácter insular, alejado, somos islas y lejos; fragmentación propia de su estructura archipielágica, somos archipiélago, somos siete, ocho islas, depende de si consideramos La Graciosa como una, nuestra octava isla, porque lo es, separada.

Y luego además, sinceramente, necesitamos una regulación del sistema porque a través de su evolución histórica... Hemos tenido un sistema singular, es decir, Canarias tenía, al principio, empezó, como era lógico, en su primer desarrollo económico, con una norma muy simple y se fue complicando: el decreto de puertos francos, la ley de puertos francos, la ley del 72 y demás. A ello se ha aludido y no voy a insistir más por ello.

¿Cuáles son las características fundamentales del Régimen Económico y Fiscal? Si ustedes leen la tesis doctoral de Martín Orozco -se la recomiendo, la pueden ver ustedes en la propia biblioteca-, claramente dice que lo fundamental del Régimen Económico y Fiscal es tener, que Canarias tiene una fiscalidad diferencial y menor que el resto del territorio del Estado, y eso todo tiene trascendencia hacia una serie de temas que van a luchar contra el carácter de insularidad.

El Régimen Económico y Fiscal de Canarias está caracterizado por ser un ordenamiento jurídico, aduanero, fiscal y económico singular, más beneficioso y flexible que el aplicado en el resto de España, tendente a compensar las especiales dificultades derivadas de la lejanía, la fragmentación, como he dicho, y la escasez de recursos naturales del archipiélago. Este régimen se ha ido modificando a lo largo de la historia, adaptándolo, como es lógico, a la evolución de la economía y del comercio internacional, pero manteniendo la institución sus objetivos básicos y el trato singular de Canarias, no sin -y esto es importante- conflictos entre los principios, siempre de carácter, pudiéramos llamar, generalista de las autoridades fiscales, que los modelos singulares los rechazan, y no, por lo tanto, adaptados a lo que es necesario en una comunidad como Canarias.

Todos sabemos los problemas que hemos tenido, las dificultades de interpretación. Cómo después de la ley del 72, en la negociación con Europa, tuvimos la protección de -que haré referencia después- la disposición adicional tercera de la Constitución. Y siempre nos habíamos planteado por qué y de qué forma quedó esto recogido en la Constitución española. Mirando, rebuscando y trabajando en los papeles de la negociación que estableció la Constitución española, en un momento determinado Acenk Galván, senador por la isla de La Palma, había presentado una propuesta que trataba el régimen económico y fiscal de Canarias en igualdad absoluta con el régimen foral navarro o con el régimen vasco y fue un reparo de uno de los padres de la Constitución que dijo que, si lo ponían de esa forma, podían tener dificultades para la integración de España en la Unión Europea. Realmente el tiempo demostró que ese no era el caso y que Europa hubiera sido sensible para poder adaptar las singularidades canarias dentro de la propia Constitución española. Eso quiere decir que de cara al futuro tendremos que seguir manteniendo un tema similar a lo que en aquella época dijo al respecto el señor Galván: que el régimen de Canarias es un régimen que debe tener una protección profunda en la Constitución y su alteración debe ser voluntad de los canarios, interpretada y apoyada por la Administración General del Estado.

En el presente, el resultado de ese proceso evolutivo de esa institución, porque es una institución jurídica, está centrado o modificado, dentro del bloque de la constitucionalidad, a través de lo que dice el propio Estatuto de Autonomía. Así, dice lo siguiente, en el artículo 46, que ustedes conocen y al que hemos aludido reiteradamente en este pleno: que Canarias goza de un régimen económico-fiscal especial, propio de su acervo histórico -este al que he querido aludir rápidamente-y constitucionalmente reconocido -está así en la Constitución española-, basado en la libertad comercial de importación y exportación, no aplicación de monopolios y en franquicias aduaneras y fiscales sobre el consumo. Dicho régimen fiscal y económico incorpora a su contenido los principios y normas aplicables como consecuencia del reconocimiento de Canarias como región ultraperiférica de la Unión Europea, con las modulaciones y derogaciones que permitan paliar las características que Canarias tiene para la aplicación de las políticas comunitarias.

El contenido de hoy, de hoy en día, del REF viene desarrollado en sus aspectos esenciales -todos lo sabemos- por la Ley del 91 y la Ley del 94 y un conjunto de normas, que son muy importantes, de la Unión Europea, que se ha ido adoptando. Desde lo que se llamó Protocolo II, que fue cuando la adhesión de España a la Unión Europea, se dijo claramente que Canarias quedaba fuera de las políticas, de una serie de políticas, como la política agrícola común, pero también dice en el acta de adhesión que en Canarias no se aplicaría el impuesto sobre el valor añadido ni tampoco, sino en condiciones muy singulares, los impuestos especiales, cosa que, evidentemente, seguimos manteniendo, forma parte del derecho primario de la comunidad.

Pero también la singularidad del régimen viene apoyada por la adicional tercera de la Constitución. Ya he dicho que, tal y como está establecida, ha sido interpretada en mi opinión erróneamente, porque en el bloque de la constitucionalidad, donde estaba el 46 también, viene a decir que para que el informe sea positivo hace falta mayoría determinada y todos tenemos claro que eso no puede tener más justificación que es una mayoría de bloqueo, obstativa negativa, que impide, si no se llega al consenso suficiente por los representantes legítimos del pueblo canario -que somos los que estamos aquí, en este Parlamento, y los que nos sucedan-, que den su visto bueno. Sin embargo, no ha sido interpretado así por los tribunales y necesariamente tendremos que reforzar -y esta será una labor a hacer por todas las fuerzas políticas, y yo espero que sea unánime, porque estamos defendiendo no los intereses de los partidos sino los intereses de los canarios-, que tenemos que tener muy consolidado el tema de que la modificación de nuestro régimen tiene que ser iniciativa nuestra, desde luego contrastada y apoyada por el Gobierno del Estado, pero en ningún caso realizada a espaldas o en contra de la opinión de este pueblo.

En la normativa comunitaria, ustedes saben que el artículo 349 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, bueno, referido a las que llaman comunidades ultraperiféricas, donde está, como ustedes saben, Canarias, también sirve esta norma para garantizar la supervivencia de lo que es nuestro esquema tradicional. Así se establece que, teniendo en cuenta la situación socioeconómica caracterizada por la gran lejanía, la insularidad, la reducida superficie, el relieve, el clima adverso y la dependencia económica de un reducido número de productos, factores cuya persistencia y combinación perjudican gravemente a su desarrollo, faculta al Consejo, a través de un procedimiento, a la aplicación en las RUP de las políticas agrícolas y pesqueras, las condiciones de abastecimiento de materias primas y de bienes de consumo y las condiciones de acceso a los fondos estructurales y los programas horizontales de la Unión. Por lo tanto, nosotros tenemos un respaldo del derecho primario comunitario que nos garantiza que el tratamiento que da Bruselas -y yo creo que los tratados, cuando son pasados, son refrendados por un país, forman parte del régimen interno- en cierta manera obligaría al Estado español a aplicar los criterios también, es decir, la diferenciación de criterios en toda esta serie de políticas.

Y por ello, por ejemplo, puedo aludir a algunos temas que no entiendo cómo han surgido a lo largo del tiempo en manifestaciones recientes, que yo lamento porque debilitan la posición, las posiciones del pueblo canario. Es decir, se nos dice por ejemplo que Canarias, al tener una determinada distribución en las competencias, como puede ser la competencia de carreteras o puertos que no sean de interés general, dice, bueno, eso ustedes, como la Constitución dice claramente en un momento determinado que son competencia del Estado aquellas infraestructuras de ese tipo que abarcan varias comunidades autónomas, cosa que es imposible que pueda ocurrir en la condición insular, se nos dice, se nos dijo y se nos dice aun ahora, que las competencias esas corresponden a la comunidad autónoma, olvidando que la ley aprobada que desarrolla el REF dice clarísimamente que ese tipo de infraestructuras, las que conectan las islas entre sí y las islas con el resto de España, son de interés general del Estado, y dice exactamente: "para la elaboración de programas y financiación por el Estado". Esa es la norma vigente. Yo no entiendo cómo alguien todavía puede pensar que no es la norma, que no es de aplicación o incluso mire hacia otro lado. Yo puedo entender que haya dificultades para conseguir el nivel de inversiones que a veces deseamos, pero lo que no puede haber en absoluto es alguien que diga que no tenemos derecho a ello, porque eso va contra lo sustancial y la defensa del principio, principio fundamental en que se ha insistido hoy, que es el de la continuidad territorial. Nuestra posición es lejana, nuestra posición es cercana a África, estratégicamente situados, somos avanzadilla de Europa y de España, pero necesitamos tener conexión con el resto del territorio. La política de continuidad territorial, que ya hace muchos años que la lanzaron los franceses en relación con Córcega, es decir, el hecho de que a nosotros, todas nuestras actividades económicas nos las tienen que poner en el puerto de Cádiz a coste cero, es decir, que allí entremos a competir en condiciones de igualdad, es un principio que aquí tendremos que defender siempre como una necesidad y en ningún caso como un privilegio, sino como una obligación del Estado dentro de ese principio de atención al hecho insular del 138 de la Constitución española.

La evolución de la economía española o mundial desde el año 1994 es muy grande, es decir, en aquella época nosotros fuimos adelantados hablando del transporte. Hablábamos, sin nombrar la quinta libertad, estábamos definiendo lo que era la quinta libertad, es decir, que no solamente hubiera unas ayudas a los transportes sino que Canarias pudiera ser lugar donde los aviones que iban destinados y que llevaban transporte de mercancías o de personas, incluso los turistas de vuelta, pudieran recoger personas en Canarias y llevarlos hacia el exterior. Bueno, eso realmente hoy en día todos lo entendemos.

También en aquellas fechas decíamos claramente que era necesario mejorar la formación de nuestra gente, que, por lo tanto, era necesario tener programas de formación; era necesario también abrir la posibilidad a las experiencias de los canarios en el resto de España en industrias que aquí no existían. Ahí se han quedado a lo largo del tiempo sin mucho desarrollo.

También decíamos que había que facilitar el comercio de Canarias, Canarias como avanzadilla, es interesante para el resto de España, en un lugar de comercio, y hablábamos del Capcao, el famoso centro de cooperación para el Atlántico, que ha quedado en algo muy difuso y poco efectivo.

Señorías, yo creo que -y con eso quiero terminar mi intervención- gran parte de las manifestaciones que aquí hacemos realmente ya estaban en la ley anterior, pero no han pasado a la realidad: nunca se han ejecutado, nunca se han cumplido. Por lo tanto, con independencia de que hoy tenemos que hablar claro, ya no hablamos de tarifas de teléfono, hablamos de la banda ancha, o no hablamos del transporte solo marítimo, el importante... Hablábamos de que era necesario que hubiera ayudas a las empresas que estaban trabajando, que hubiera créditos especiales y singularidades cuando no se llegaba a la renta media. Todos esos principios son válidos y lo único que estamos haciendo es recalcando mucho más, porque siempre han tenido algo debajo el papel respecto a la creación de empleo y al apoyo al empleo.

Señorías, yo creo que las propuestas de resolución que se están intentando llegar como conjuntas y negociadas yo creo que marcan un camino, un camino importante que yo llamo a todos a recorrerlo, porque aquí creo que estamos defendiendo hoy algo que ya nuestros antepasados, en la época de Juana de Castilla o cuando el decreto de puertos francos, querían: que Canarias quiere estar integrada en el resto del mundo, en condiciones de igualdad, y que se atienda a sus singularidades, porque estamos aquí y seremos siempre islas separadas y lejanas, con pocos recursos. Pero, eso sí, necesitamos que la capacidad intelectual, la formación de nuestra gente y la educación lleguen al límite suficiente para poder hacer frente a este mundo incierto que a todos...

La señora VICEPRESIDENTA SEGUNDA (Tavío Ascanio): Pasamos a la intervención del Grupo Parlamentario Popular. En su nombre, tiene la palabra su señoría, el señor diputado don Jorge Alberto Rodríguez.

El señor RODRÍGUEZ PÉREZ: Señora presidenta, señorías.

El 1 de enero entró en vigor la modificación de los aspectos fiscales del REF. Fue el resultado, como saben, de incorporar al derecho español las negociaciones con las autoridades comunitarias para adecuar esta herramienta tan importante a los cambios introducidos en la normativa de la Unión Europea en materia de ayudas de Estado para el periodo 2014-2020.

La sociedad canaria en general comparte la convicción de que el REF constituye nuestro verdadero fuero por ser históricamente la norma que refleja el hecho diferencial canario en respuesta a la necesidad de amortiguar esos costes adicionales que soportamos los canarios y las empresas canarias, de esas especiales características de nuestras islas que están relacionadas con la insularidad, con la lejanía, con la fragmentación del territorio. Pues bien, con este cambio son ya más de diez las modificaciones incorporadas al REF desde 1994, año de la primera transformación, como saben, de la ley de 1972. Todas ellas referidas a los incentivos fiscales, como la RIC, como la deducción por inversiones o más tardíamente con la ZEC.

Ahora bien, aunque los incentivos fiscales son absolutamente necesarios, bien saben que no son suficientes para generar inversión, para generar empleo y así reducir la insostenible tasa de paro que mantenemos del 31,08%. Cierto que la permanente alusión al REF cuando nos referimos a sus instrumentos fiscales desvirtúa, digo bien, desvirtúa la esencia, la esencia misma, del fuero canario. El REF es mucho más que incentivos fiscales.

Conviene recordar que el REF vigente se desdobló en dos leyes: la de 1991, sobre la modificación de los aspectos fiscales del REF, y la de 1994, de modificación del REF. Esta última inició su andadura como borrador de anteproyecto de ley y, como saben, perdió en el camino la denominación correcta que evidentemente se refería a la modificación de los aspectos económicos del REF, ya que contiene los incentivos fiscales pactados en 1991, así como un conjunto de medidas económicas relevantes tanto para las actividades económicas realizadas en las islas como para los propios ciudadanos que aquí vivimos.

Señorías, el REF, aunque en ocasiones no se perciba con claridad, afecta y tiene como eje central a los ciudadanos canarios y además también a las empresas. Está presente en nuestra vida diaria, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, y afecta directamente a nuestra cartera al tratarse de medidas compensatorias que intentan, que intentan paliar los sobrecostes que padecemos derivados de lo que antes comenté, de la lejanía, de la insularidad. Es el caso de la energía, es el caso del agua, es el caso del transporte, las telecomunicaciones, el fomento del empleo o la financiación de las pequeñas y medianas empresas.

Pero, a diferencia de los incentivos fiscales, que se han modificado, como digo, en más de diez ocasiones, el contenido económico del REF recogido en la ley de 1994 ha permanecido inalterable, sin haberse revisado entonces, y los avances logrados en la construcción de la Unión Europea desde la perspectiva de las regiones ultraperiféricas, bueno, pues, lo hacen, ahora más que nunca, necesario.

Afortunadamente, de este acervo comunitario nos beneficiamos, puesto que, como saben, se desvincula la intensidad de las ayudas de Estado del nivel de renta. Una cuestión nada baladí dado que Canarias supera, como ustedes saben, hace ya años, el 75% de la renta media comunitaria en paridad de poder de compra. Con este dato, quedaríamos absolutamente fuera de buena parte de las ayudas europeas. Y es cierto también que la redacción actual de gran parte de los aspectos económicos se encuentra desfasada y se encuentra, además, superada por la normativa sectorial específica. Por ejemplo, respecto al principio de libertad de transporte y la liberalización de servicios, por ejemplo, la redacción actual del REF recoge la ausencia de monopolios en la prestación de servicios del transporte marítimo y aéreo cuando estos servicios, ya se sabe, están liberalizados desde hace algunos años. Las tarifas de servicios regulares de transporte marítimo o aéreo contemplan una reducción del 33%; ya hemos subido al 50%. Y así unas cuantas cosas más. En fin, son muestras ciertamente de la obsolescencia de las medidas económicas que todavía están insertas en el instrumento del REF.

Estamos de acuerdo, señorías, en que la norma se ha de adaptar a la realidad económica y social de Canarias actual. Y la realidad actual, señorías, bien, es muy diferente a la de hace veintiún años, ya sea por el volumen de población con medio millón de habitantes más que en 1994, la mayor tasa de desempleo conocida en la historia de Canarias en la actualidad o la consolidación de la actividad turística como locomotora de la economía de Canarias, así como la necesidad de prever y potenciar las nuevas oportunidades que ofrece un mundo globalizado y en permanente transformación.

Por tanto, ¡claro!, claro que sí hay que fijar las bases de la actualización de los incentivos económicos del REF, pero, señorías, pero, señorías, las medidas económicas no pueden limitarse a reclamar más fondos presupuestarios al Estado sin saber qué modelo económico queremos para Canarias. La reformulación del REF económico debe tener como objetivo, a nuestro juicio, también el desarrollo sostenible de la economía canaria y la creación de empleo. Si se trata únicamente de pedir más dinero al Estado, no adelantaremos nada.

En lo que estamos de acuerdo, señorías, es en que el REF debe limitarse a fijar una serie de reglas mínimas que sirvan para que Canarias compita como una economía integrada, no aislada ni desde luego suscitando conflictos y, sobre todo, ahuyentando a los inversores. Cualquier reformulación del REF económico, propiciado únicamente por quienes en estos momentos apoyan al Gobierno en pacto, no podrá funcionar con los niveles actuales de administración y de intervencionismo con los que se han caracterizado.

En la comunicación, que todos hemos tenido ocasión de examinar, se mantiene el camino de la plantificación, con el mismo error de partida. Somos seres absolutamente sabios, omniscientes, que pretendemos saber hacia dónde hay que orientar la economía canaria y no tenemos ni idea, señorías, no tenemos ni idea. El Partido Popular maneja la idea de la libertad en todos los órdenes, en todos sus sentidos. La libertad, como la entendemos nosotros -ya nos lo han oído en más de una ocasión-, es la ausencia de coacción, es la ausencia de fuerza, y aquí el Gobierno está metido en todos los órdenes, en el intervencionismo.

No nos gusta una negociación del REF económico deprisa, deprisa y corriendo. Debe mantenerse, a mi juicio, a nuestro juicio, el mismo espíritu de colaboración con el Gobierno del Estado que existió con el bloque fiscal y no, para nada, un nuevo escenario de conflicto y de batalla. En su momento logramos, señorías, con el concurso de todos, no solo el mejor REF fiscal posible sino el más ambicioso y además el más completo. Una demostración palpable de que el diálogo más consenso es igual a éxito.

No se entiende por eso, señorías, señora presidenta, la tardanza y la demora con que el Gobierno de Canarias y su presidente, don Paulino Rivero, hayan tardado tanto en traer este documento en forma de comunicación a debate en esta Cámara y esperan de nosotros, señorías, que en apenas cuarenta y ocho horas, y en este pleno, nos pronunciemos sobre el modelo económico de Canarias, nada menos.

Sepan, señorías, por paradójico que pueda resultar, que no es el REF lo que se encuentra desfasado, sino que esta condición debe imputarse más bien al actual modelo económico de Canarias, y es este planteamiento el que conduce a advertir de la inutilidad, si ustedes me permiten la expresión, de lo que vamos a hacer hoy.

En este punto no se trata de realizar, ni lo pretendemos, un estudio en profundidad sobre la estructura productiva y características del modelo económico canario. Bastaría con alcanzar o analizar, si ustedes lo quieren oír de esta manera, la distribución sectorial y su comportamiento en estos últimos años, sus consecuencias para el mercado laboral y cómo este se ha visto afectado por la evolución de la población.

Por eso siempre hemos mantenido que, en un proceso de transformación como el que nos concierne, es necesario consensuar una actualización del REF orientada a la consecución de un modelo económico ambicioso, pero a la vez, a la vez, realista, que tenga en cuenta los factores de éxito del pasado y las nuevas oportunidades que se nos están abriendo para el futuro. Un modelo que está condicionado por factores endógenos y por factores exógenos de diferente naturaleza. Los elementos que han determinado el desarrollo de aquellos sectores con demostrada competitividad en el conjunto de la actividad productiva de Canarias, la evolución de la economía internacional, en un entorno cada vez más globalizado, donde los sectores de la logística, la tecnología y el conocimiento adquieren cada vez mayor relevancia, los condicionantes propios del entorno ultraperiférico para el desarrollo de la actividad económica, la lejanía de los principales mercados... Pues bien, la conjunción de estos factores son los que nos deben orientar para establecer las líneas estratégicas que determinarán las acciones a llevar a cabo.

Los grupos que apoyan al Gobierno y el propio Gobierno parece que prefieren ignorar y pasar de esta tesis y deprisa y corriendo quieren aprobar una comunicación y unas propuestas de resolución con una serie de medidas y principios que son los que han de inspirar y orientar el texto económico del REF. Y, señorías, no nos vamos a oponer, no nos vamos a oponer frontalmente, siempre que el texto a proponer al Gobierno de la nación lo madure el próximo Gobierno que está a punto de salir después del 24 de mayo y lo apruebe la nueva Cámara que se constituya, repito, después del 25 de mayo, porque el objetivo de todos tiene que ser conseguir un REF económico potente, que sea útil para el desarrollo y el crecimiento económico de Canarias, para la inversión y que, en definitiva, propicie mayor empleo. Y sobre todo que no es deseable que este asunto, señorías, forme parte de la agenda electoral con reproches entre distintas administraciones, entre distintas formaciones políticas.

Lo que esperan y piden los canarios es que resolvamos sus problemas, el del paro y el de la economía. Esperan capacidad de todos de trabajar conjuntamente, Gobierno de Canarias, también Gobierno de la nación, para andar por el camino de la recuperación económica y de la recuperación del empleo. Por eso no entendemos que, teniendo el Gobierno de Canarias en su poder la resolución que aprobamos en julio del 2012, que estuvo aprobada por unanimidad, con una hoja de ruta muy clara, pues, ahora, casi en el pitido final de la legislatura, para impulsar una cuestión que podía haber sido ya perfectamente negociada. ¿Qué ha estado haciendo el Gobierno de Canarias desde 2012? ¿Por qué ha tardado tanto? ¿Cuál ha sido el motivo por el que el Gobierno de Canarias ha esperado al tiempo de descuento de la legislatura para iniciar este proceso? Hemos perdido una legislatura en ese sentido sin negociar estos aspectos y ahora, al final del partido, ponen a rodar la pelota y pretenden que en una mañana logremos un consenso sobre el modelo económico de nuestro REF.

Por esto mismo es por lo que insistimos en que debe ser la nueva Cámara que resulte del próximo 25 de mayo y el Gobierno que se forme a partir de ese momento la que lleve a efecto este proceso negociador con el Gobierno de la nación. Así que permítanme, señorías, definir este debate como simplemente una puesta en escena para mayor gloria del Gobierno de Canarias, los grupos que lo apoyan y también de su presidente, don Paulino Rivero. (Se reincorpora a su lugar en la Mesa el señor presidente).

Los objetivos del REF económico, señorías, no son ni deben ser la cobertura de circunstancias coyunturales y, aunque un REF, y aunque un REF bien vertebrado y jurídicamente seguro puede contribuir a cubrir las eventualidades de un contexto económico adverso, el objetivo no puede ser otro que el de articular un sistema de compensación robusto y eficaz que dé respuesta a las desventajas estructurales que lastran la producción en Canarias.

Estoy ya terminando, señor presidente, mínimamente unos segundos más, porque no quiero hacer una conclusión sin manifestar que el problema del empleo, el problema que hay en Canarias hoy del empleo, no es una cuestión de incentivos fiscales o de incentivos económicos. No, la variable, la variable, señorías, está en las expectativas. El problema que hay en Canarias, desde el punto de vista económico, bien lo saben, es de confianza, es de expectativas. El problema por el que una diáspora de inversión desde Canarias hacia fuera ha venido existiendo en los últimos años es porque aquí no han podido hacer la inversión adecuada. ¿Por qué?, pues por el grave problema del intervencionismo que tenemos, la reglamentación excesiva, la burocracia desmedida, el recelo extraordinario, el hiperformalismo, el expedientalismo que hemos tenido hasta ahora, y eso está haciendo mucho daño a Canarias y a los canarios.

Así que, señorías -y termino-, si hemos sido convocados hoy a este pleno, a esta sesión, lo ha sido a algo importante: nada menos que a reformular la parte económica del REF; y si hemos venido convocados a eso, hagámoslo bien.

Nada más, señor presidente.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, don Jorge Rodríguez.

Para turno del Gobierno, el señor consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, don Javier González Ortiz.

El señor CONSEJERO DE ECONOMÍA, HACIENDA Y SEGURIDAD (González Ortiz): Presidente, señorías.

Hemos hablado aquí durante la mañana de la necesidad de blindar nuestro Régimen Económico y Fiscal, y en eso permítanme recordarles que estamos todos de acuerdo, porque en la resolución parlamentaria de julio del 2012, aprobada por unanimidad, incluso quienes no estaban de acuerdo en la reforma del Estatuto de Autonomía consideraban, de forma unánime, todos, que para eso sí podía o debía reformarse el Estatuto. Repito, recuerdo la resolución parlamentaria de julio de 2012, aprobada por unanimidad, reconoce la necesidad de reformar el Estatuto para asegurar el blindaje del mismo.

Pero, miren, señorías, el blindaje de una norma, el blindaje de reconocimiento a un hecho diferencial y la puesta en marcha, por lo tanto, de las medidas que compensen esos sobrecostes requiere generalmente de algo más, requiere de conciencia. Requiere de la conciencia diariamente de quien legisla, requiere de la conciencia diariamente de quien realiza los decretos, requiere de la conciencia diariamente de quien licita; requiere, en definitiva, de la conciencia de quien toma las decisiones. Y ese es el instrumento más importante que tenemos, señorías, nosotros en el que trabajar, porque las normas se cambian con el tiempo, pero si generamos una conciencia, primero en Canarias y luego en la Administración General del Estado, en el Estado, de que esto no es una dádiva, de que esto no es un privilegio, sino que esto son medidas que nos hacen a los canarios estar un poco más cerca del conjunto, del resto de los ciudadanos y territorios del Estado, habremos dado un paso fundamental. Pero para eso, para eso requiere, señorías, para poder generar conciencia fuera requiere generar conciencia dentro, y ahí todos tenemos una tarea: los que estamos aquí, en este Parlamento, el conjunto de cabildos y ayuntamientos de Canarias, nuestras universidades, las patronales, las organizaciones sindicales.

Y, señorías, a quien dice que hemos llegado tarde -hablaré después del proceso-, lo que ha hecho este Gobierno en estos últimos meses, en estos últimos años, es intensificar ese aspecto fundamental, que es la generación de conciencia, la generación de conciencia interna. Y llegamos hoy aquí, a este Parlamento, después de una resolución en julio del 2012, dando un paso importante: tenemos el consenso social. Hemos hecho un esfuerzo entre todos y todas, entre todos aquellos que han participado en el conjunto de las reuniones, en la aportación de documentos, de los estudios, para dar ese paso. Conciencia interna, que es fundamental para el siguiente paso, generar conciencia externa, en aquellos quienes finalmente toman las decisiones, a quienes corresponde la toma de decisiones como esta, de modificación de una ley, que viene, por tanto, a corregir aquellas dificultades que tienen los canarios y las canarias por vivir y desarrollar su actividad en Canarias. Segundo paso: la conciencia, por tanto, externa. Pero para eso necesitamos fuerza, no solo la fuerza política, sino la fuerza institucional, y por eso es fundamental, señor Rodríguez, señor Rodríguez, señor González, señor Marcos, el consenso político. Y por eso el esfuerzo hecho en este Parlamento -y en mi primera intervención les reclamaba continuar en ese sentido-... Para poder exigir algo, para poder generar conciencia fuera, debemos tenerlo todos muy claro dentro, y por eso el aspecto importante, histórico, en esta sesión.

Miren, no hemos estado quietos ni parados. Julio del 2012, se aprueba la resolución de forma unánime por este Parlamento. En noviembre de 2012, el Gobierno de Canarias remite el documento, sus aspectos fiscales, que tenía fecha de caducidad, al Gobierno central. Miren, señorías, no es hasta enero del 2014, hasta enero del 2014, después de una reunión entre el presidente Rivero y el presidente Rajoy, cuando se da el impulso al ámbito fiscal. Enero del 2014, enviados los documentos en noviembre del 2012. Febrero del 2014, reunión de este consejero con el ministro de Hacienda para avanzar en ese aspecto, febrero del 2014. Y ya en febrero del 2014, comenzada la negociación de los aspectos fiscales, este Gobierno lo que hace es, vuelve a tener reuniones con ochenta instituciones, empresas, universidades, asociaciones, sindicatos del conjunto del archipiélago para avanzar en algo que eran las bases de acuerdo de renovación del Régimen Económico y Fiscal, en febrero-marzo del 2014. En abril del 2014, este Gobierno remite a la Moncloa el documento de bases consensuado con las organizaciones. Abril del 2014. Luego, este Gobierno no ha estado parado, este Gobierno ha estado trabajando día a día en esa materia. De febrero a junio del 2014, negociaciones con el Gobierno central para el ámbito fiscal; de julio del 2014 a noviembre, diciembre del 2014, negociaciones con la Comisión Europea; enero-marzo del 2015, en este primer periodo, reuniones nuevamente con el conjunto de las instituciones que firmaron y suscribieron el documento de bases aprobado en marzo del 2014 y que fue remitido en abril a la Moncloa, y generamos el consenso social; el Gobierno aprueba la comunicación y hoy estamos discutiéndola. Este Gobierno no ha estado parado, ni mucho menos, señorías, ha estado trabajando en algo muy importante, en generar la conciencia, en generar la conciencia primero, pero sobre todo también en generar el consenso económico y social, fundamental para afrontar un problema de este tipo.

En esta legislatura, señorías, hemos trabajado en estos aspectos, como ha trabajado en un elemento fundamental, al que hacía referencia el señor Rodríguez y con el que estoy al cien por cien de acuerdo, y es en acordar una estrategia de crecimiento con el conjunto de la sociedad, con la participación de los agentes económicos, sociales, universidades... todo el mundo, acordada y pactada, señor Rodríguez, para pensar en eso, en el futuro. Porque el REF, señor Román Rodríguez, evidentemente es un instrumento. A usted que le gusta hablar de política, pues, claro que estamos hablando de política; estamos hablando de la gente, de las personas, de lo que afecta al conjunto de las personas e, identificados los problemas que afectan a las personas, se buscan soluciones, y eso es política. Otra cosa es cómo dirigen algunos esa acción política, pero esto es política: identificación de los problemas de los ciudadanos y puesta en marcha.

Porque sí, señor Rodríguez, nos afecta al día a día: desde por la mañana, desde que encendemos la luz, el REF está afectando a nuestras vidas, está corrigiendo aspectos que nos atañen. Desde que abrimos el grifo, desde que desayunamos, desde que cogemos el coche o nos subimos a la guagua, el REF está incidiendo en nuestras vidas. Y por eso, por eso, estamos hablando de gente y por eso estamos hablando de política, porque, en definitiva, de nada sirve establecer instrumentos que estén al margen de los problemas de los ciudadanos. Y lo que hemos hecho ahora es escoger aquellas cosas buenas, fundamentales, que en su momento se trabajaron, de forma maravillosa, e identificar aquellos nuevos que en su momento no eran un problema, que ni se pensaron. No fue un defecto, simplemente es, como dice usted, que las cosas avanzan. Claro que avanzan, afortunadamente avanzan, avanzan. Y por eso hemos identificado algo de lo que en su momento ni nos ocupamos, y era qué elementos tenemos que poner sobre la mesa para afrontar un problema como puede ser la gestión de residuos. Y por eso, identificado el problema de la energía, hemos trabajado mucho, muchísimo, en los últimos meses para generar conciencia de la necesidad que tiene este pueblo de avanzar en la utilización de las energías renovables, y este documento lo refleja, el conjunto de la sociedad.

Eso es, afortunadamente, afortunadamente, lo que hemos hecho, en la creencia de que los que tenemos la responsabilidad de gobernar tenemos, por tanto, que intentar poner soluciones a los problemas que afectan a los ciudadanos. Y eso, señorías, es lo que hemos hecho.

Y no se ha hecho con imposición, puedo dar fe de que el conjunto de las reuniones que hemos mantenido con los agentes económicos y sociales... Por ejemplo, hacía referencia el señor Rodríguez a la aparición en este documento de la responsabilidad social corporativa, una petición expresa de las organizaciones sindicales, aceptada perfectamente por las patronales canarias, en el entendimiento de que el Régimen Económico y Fiscal contiene aspectos fundamentales como avanzar en la cohesión social. Porque de nada sirve que se avance en determinados territorios o determinados grupos sociales por encima del resto, porque entonces no será un verdadero avance. Y por eso el aspecto fundamental que contiene el REF del reconocimiento de algo de lo que todos hablamos, pero que hay que ponerle efectivas medidas sobre la mesa, y es aquellas medidas que van a luchar contra los sobrecostes que tiene la doble insularidad. El reconocimiento de que, si existen sobrecostes por vivir en un territorio alejado y fragmentado, se incrementan aún más en aquellos territorios donde aún es más difícil el desarrollo de la actividad diaria.

En definitiva, señorías, creo que es fundamental que demos hoy un paso en este momento, que demos un paso al frente y que digamos, quienes tenemos la responsabilidad de representar al conjunto de los ciudadanos y ciudadanas de Canarias... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede un minuto adicional). Gracias, presidente. Decía que quienes tenemos la responsabilidad de representar al conjunto de los canarios y las canarias demos hoy un paso al frente y digamos que sí, que, con diferencias, que con matices, pero aquí estamos todos hoy empeñados en hacer cada día la vida más fácil a los canarios y a las canarias.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Muchísimas gracias, don Javier González Ortiz.

Para turno de réplica, los grupos parlamentarios. (Pausa). Don Román Rodríguez, don Román (el señor diputado rehúsa su intervención). Había otro turno pero si no lo quieren usar no... Si lo damos por finalizado, lo damos por finalizado, perfecto.

Entonces, a partir de estos momentos, se abre un plazo para propuestas de resolución, que acaba a la una y treinta, media hora.