Diario de Sesiones 56, de fecha 1/12/2020
Punto 23

10L/C/P-0424 COMPARECENCIA DE LA SEÑORA CONSEJERA DE EDUCACIÓN, UNIVERSIDADES, CULTURA Y DEPORTES, SOBRE LA VALORACIÓN DE LA NUEVA LEY DE EDUCACIÓN Y SU APLICACIÓN EN CANARIAS, A PETICIÓN DEL GRUPO PARLAMENTARIO SOCIALISTA CANARIO.

El señor PRESIDENTE: Continuamos con la siguiente comparecencia: de la consejera de Educación, Cultura y Deportes, sobre la valoración de la nueva ley de educación y su aplicación en Canarias, a petición del Grupo Parlamentario Socialista Canario.

Tiene la palabra.

Adelante.

El señor VIERA ESPINOSA: Gracias, señor presidente. Buenos días, señorías.

Señora consejera, está usted hoy aquí compareciendo ante el pleno del Parlamento a petición del Grupo Socialista, lo hacemos para que realice una valoración de la nueva ley de educación y su aplicación en Canarias.

Señora consejera, la ley que se deroga es una ley ideológica, recentralizadora, elitista, retrógrada, segregadora y que fue apoyada solamente por el Partido Popular. Una ley que cuando acabe el trámite parlamentario dejará de existir. Una ley que supuso un ataque frontal contra toda la comunidad educativa, especialmente hacia la escuela pública. Una ley, señorías, que vino acompañada de los mayores recortes que se recuerdan en el sistema educativo español. Precisamente por todo esto surge una nueva ley, la Lomloe, que responde al compromiso social y político del Gobierno de Pedro Sánchez y que inicialmente fue aprobada por diez fuerzas políticas hace siete años. Una ley que persigue tres grandes objetivos.

Primero, modernizar el sistema educativo con una perspectiva para el año 2030. Una nueva ley supone un modelo educativo contemporáneo, avanzado, equitativo, inclusivo y que está dentro de los objetivos de la agenda 2030. Es la primera ley en incluir los derechos de la infancia y de las personas con discapacidad como principios que van a regir el nuevo sistema educativo. Es una ley que ordena el currículo de forma más coherente, que facilita que los centros tengan cierto grado de autonomía en el ámbito curricular, que fortalece el valor educativo a la enseñanza de 0 a 3 años y que potencia la formación permanente y continua del profesorado. Se crea, además, un instituto de desarrollo curricular con el objetivo de ir actualizando el currículo académico, se recupera también el papel de los consejos escolares en la toma de decisiones.

La escuela es un reflejo de la sociedad, y si nuestra sociedad es plural, diversa y democrática la escuela también lo tiene que ser. Tenemos que avanzar para que nuestros chinijos y chinijas vean cuál es la realidad de la sociedad y no la realidad que la derecha pretende que se vea.

El segundo gran objetivo es aumentar el éxito escolar reforzando la equidad. Los resultados escolares no solo dependen del esfuerzo del alumnado, sino también del esfuerzo que hagan las instituciones educativas para detectar de forma temprana las dificultades que impiden al alumno alcanzar sus metas, poniendo el acento en un aprendizaje competencial y más personalizado. Esto nunca lo hacen los gobiernos de la derecha por su idea selectiva, elitista y mercantilista de la educación, por eso se introducen medidas que eviten la segregación y favorezcan una educación de calidad, de tal forma que consigamos reducir el abandono escolar y aumentar el éxito escolar. Se refuerza el papel de la escuela rural, por tanto, el de las unitarias y también se tiene en cuenta el hecho insular.

En tercer lugar, la digitalización del sistema educativo. La realidad es que esta sociedad es la sociedad del conocimiento y con una economía cada vez más digitalizada hace que tengamos que incorporar en todos los niveles educativos dicha competencia.

Una de las grandes apuestas de esta ley es la de la Formación Profesional, ya que se impulsa la organización modular, se impulsan los máster, se crea la figura del profesor especialista que permite la entrada de profesionales de los distintos sectores productivos en el sistema educativo, en definitiva, tener una formación profesional más inclusiva, personalizada, no sexista y competencial que permita a nuestros jóvenes el acceso al mercado laboral en las mejores condiciones posibles..

Señora consejera, tanto el Gobierno central como el autonómico apuestan firmemente por la educación como el principal elemento contra las desigualdades por eso han hecho un esfuerzo de inversión que va más allá del contexto económico y social para que nadie se quede atrás como se pone de manifiesto al responder a la situación de crisis provocada por el coronavirus con más inversión. Esto se observa con el aumento en los presupuestos del 2021 de casi cien millones de euros hasta alcanzar en 4,55 % del PIB.

Los y las socialistas hemos contribuido a consolidar el Estado del bienestar y hemos querido modernizar la educación para poder modernizar el país y ganar en justicia social. Luchamos para que el alumnado desarrolle el máximo su talento y esto se consigue, señorías, con más inversión no con más recortes como lo hizo el Partido Popular en la anterior crisis.

Señora consejera, esta ley va a permitir aumentar el nivel educativo de nuestra juventud, generar personas comprometidas, mejores trabajos, mayores salarios y mayor participación en la vida pública, por eso no entendemos que el Partido Popular en un acto de irresponsabilidad política haga un llamamiento a las comunidades autónomas donde gobierna para que se incumpla una ley orgánica aprobada por mayoría absoluta de 7 fuerzas políticas. Esta acción no es concebible en un Estado de derecho. Esa actuación del Partido Popular no es propia de partidos europeos de larga tradición democrática, más bien actúa como un lobby que defiende intereses particulares abandonando a la escuela pública a su suerte.

Finalizo, señor presidente.

Señora consejera, creo que la aprobación de esta ley va a tener un mal recuerdo para aquellas fuerzas políticas que entendieron en su día que la educación era un privilegio, no un derecho.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señor diputado.

Turno para el Gobierno, señora consejera. Adelante.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN, UNIVERSIDADES, CULTURA Y DEPORTES (De Armas Rodríguez): Gracias, señor presidente. Buenas tardes de nuevo.

Bien, la comparecencia que usted hace, señor diputado, donde me dice exactamente que valore la nueva ley de educación, efectivamente, el valor que yo le doy a esta ley es muy grande, ¿no? Yo creo que estábamos necesitados de que apareciera una ley con estas características, es decir, fíjese que es algo importante, y usted ha señalado cuando ha intervenido que defiende la educación como derecho, eso es algo fundamental en cualquier país democrático; no es lo mismo defender la educación como derecho para algunos y para el resto que sea una caridad. Yo creo que sea un derecho, que todo el mundo respete me parece... y que, además, esté puesto en una ley yo creo que es un avance muy importante. Pero, además, los principios en donde se basa, que antes comenté que era la equidad y la excelencia, entendiendo la excelencia también como expliqué esta mañana, que tuve la oportunidad en una pregunta que me hacía, de entender la excelencia no como la contemplan otras fuerzas políticas sino entendiendo que es lo mejor que uno tiene tiene que sacarlo y poner los medios para que así sea me parece que es algo que también pongo en valor porque esta ley lo tiene, es además, ponen el derecho de la infancia y el interés superior del menor, en ninguna otra ley se había contemplado esto. Yo creo que son razones suficientes también para poner de nuevo esta ley en valor.

Es una ley, a pesar de los comentarios que ha habido, plural porque, efectivamente, son 7 fuerzas políticas las que la defienden. Nos hubiese gustado que fuera más participada, evidentemente, a nadie se le esconde, pero son 7, como digo, los que han entendido que esta ley conviene para la educación en España.

La participación ha sido de, miren, más de cuarenta y tres consultas, ha habido en las conferencias sectoriales, a las que evidentemente voy como representante de educación de Canarias. Yo les puedo asegurar que en más de cinco conferencias sectoriales se ha trabajado sobre la ley de educación, en los consejos escolares autonómicos, en las distintas asociaciones; es más, hay un comunicado concreto de la Confapa, que es la Confederación de Padres y Madres de toda España, donde, efectivamente, apoyan de manera clara y contundente esta ley. Por lo tanto, la participación, en la medida que han querido han participado.

Esta ley, además, tiene otro valor, que se lo habían robado, que era el protagonismo de los consejos escolares, eso es fundamental, el protagonismo que nunca debieron perder, yo creo que si alguien debe estar representado en los centros son también los padres y esto lo vuelve a contemplar y lo pone en el lugar que tendrían que no haberse ido nunca.

Como saben, hay muchísimos comentarios, no sé con qué intención, o quizás lo sepa, que ponen en duda muchas de las cosas que en la ley no aparece. Esta mañana también tuve la oportunidad de decir que se habla del cierre de los colegios de educación especial cuando no es verdad, que desaparece la educación concertada cuando no es verdad, que desaparece la religión del currículo cuando también es verdad. No hay ni un solo, en el texto, ni una sola frase que diga que esto se va a hacer y, sin embargo, lo repiten continuamente, ¿no?

Es una asignatura, sin embargo, evidentemente quita la religión, pero no es que la quite de la escuela, lo que la quita es de contar como nota para el expediente académico. No hay derecho que un niño tenga más derecho que otros porque sea más religioso que otros en el momento de pedir una beca, porque contaba como si fuera una asignatura más. Eso no se puede permitir. (Palmoteos desde los escaños). Sin embargo, pone una asignatura que a nosotros nos parece fundamental, que son los valores éticos. Valores éticos es una asignatura transversal con contenidos constitucionales, con contenido en derechos humanos, y con valores comunes. ¿Y saben lo que pasa? En el año 2015 España firmó una declaración de París en la que se comprometía a que esta asignatura tenía que estar en el currículum y, sin embargo, no se había cumplido. ¿Por qué? Porque era para equipararnos al resto de los Estados que, efectivamente, ya dan esta asignatura y está metida en su currículum con toda normalidad.

Yo, evidentemente, soy docente, pero a parte de eso y, por supuesto, socialista y progresista y no dejo de estar muy contenta con esta ley, por estas razones y por muchas otras que a lo largo de la intervención que tendré que hacer como contestación a los distintos grupos iré desgranando.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señora consejera.

Turno para los grupos proponentes, Grupo Mixto.

Adelante.

La señora ESPINO RAMÍREZ: Gracias, presidente.

Señora consejera, para Ciudadanos la nueva ley de educación aprobada en el Congreso de los Diputados es una ley injusta, es una ley que golpea directamente de lleno la libertad de los padres para decidir sobre la educación de sus hijos. Pérdida de libertad, aunque su partido y sus socios de Podemos y los independentistas la vendan como una nueva norma educativa impregnada de equidad. Todo lo contrario, es una norma impregnada de sectarismo ideológico. Para garantizar esa libertad, mi formación política va a continuar luchando y va a enmendar esta ley en el Senado.

Una ley que nace porque el Partido Socialista ha decidido vender a los españoles por un puñado de votos a un partido independentista como es Esquerra Republicana de Cataluña, para que les aprueben unos presupuestos, señora consejera. Nunca podrá decir el PSOE, nunca podrá volver a decir el PSOE, que no tenía otra opción que pactar con los independentistas. Han renunciado ustedes a una vía moderada que era la vía que les ofrecía Ciudadanos.

Mire, señora consejera, una ley que está ya bautizada con el nombre de una persona es como punto de partida una ley que no puede ser buena, ni era buena la ley Celaá, ni es buena la ley Wert, ni la ley de ningún partido político. Esta ley tenía que haber salido fruto del consenso y de un pacto de Estado educativo, y fueron ustedes, los señores del Partido Socialista, los que se levantaron de la mesa porque se los ordenó el señor Sánchez en la última negociación para llegar a un pacto educativo en este, en este... país. Y se levantaron ustedes de la mesa y ahora hacen su ley a medida.

Miren, esto no me podrá decir que no es verdad, eliminan ustedes el castellano como lengua vehicular en la educación en todo el Estado. ¿Se imaginan lo ridículo y surrealista que sería que en un Länder alemán no se pudiera estudiar en alemán o que en una de las regiones de Francia no se pudiera estudiar en francés? Pero es que además ustedes van en contra de lo que dice la Constitución en su artículo 3, van en contra de las sentencias del Tribunal Constitucional que asegura que el castellano no puede dejar de ser también lengua vehicular y de aprendizaje en la enseñanza. Se lo van a poner mucho más difícil a todos aquellos padres que llevan años luchando en Cataluña para que sus hijos estudien también en castellano, ustedes les van a poner más obstáculos.

Y miren, además, ustedes atacan a la escuela concertada, porque deja de ser complementaria y pasa a ser subsidiaria, y fue el Gobierno, un Gobierno socialista, el que echó mano de la educación privada y la hizo concertada porque hacían falta plazas y centros para que estudiaran los niños. Y ahora ustedes atacan... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia le concede un tiempo adicional). ¿Concluyo? Y ahora con esta ley, señora consejera, el Partido Socialista ataca a esa escuela a la que pidió ayuda para educar a los niños y, además, pues limitan también la libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos.

Esta es una ley ideológica, es una ley sectaria, es una ley que ha sido aprobada por los pelos en el Congreso de los Diputados por 177 votos, nosotros vamos a seguir trabajando para enmendarla y ya le digo, no es la ley que venía reclamando la comunidad educativa y la ley que necesita este país, estable y que no sea la ley de un partido político, sino la ley... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señora Espino.

Turno para el Grupo Parlamentario de Agrupación Socialista Gomera.

Adelante, señora...

La señora MENDOZA RODRÍGUEZ: Gracias, presidente, buenos días, señorías, buenos días, señora consejera.

Señorías, esta nueva ley, como todas las leyes anteriores, está siendo una ley muy polémica. Pero a pesar de las diferencias que puedan existir, lo que sí todos coincidimos es que era necesario revisar algunas medidas de la Lomce y ajustarlas al resto de medidas actuales en educación.

Y sí que quiero destacar que en esta ley estamos orgullosos de que la educación pública constituya el eje vertebrador del sistema educativo.

A pesar de que siempre lo que trasciende son las partes más polémicas o las partes que más interesa que trasciendan para armar más polémica y para que exista enfrentamiento y no exista acercamiento ni entendimiento, que es lo que los ciudadanos esperan de la clase política en estos momentos de tanta incertidumbre, y más en una ley tan importante para cualquier país como es la ley educativa pues estamos hablando de la ley que marca el futuro de una sociedad, pero a pesar de las polémicas la realidad es que esta nueva ley tiene muchísimas cuestiones positivas que van a servir para mejorar la calidad del sistema educativo en nuestro archipiélago.

Y yo voy a aprovechar mi intervención para resaltar los asuntos de los que nadie habla pero que nosotros entendemos que son importantes y positivos y que eran fundamentales que se incluyeran en esta ley.

La ley incluye el enfoque de derechos de la infancia entre los principios rectores del sistema, adopta un enfoque de igualdad de género a través de la coeducación, reconoce la importancia de atender al desarrollo sostenible con lo establecido en la Agenda 2030, tiene en cuenta el cambio climático, refuerza la equidad y la capacidad inclusiva del sistema como derecho humano para todas las personas con una nueva redacción, por tanto, se velará para evitar la segregación del alumnado por razones socioeconómicas o de otra naturaleza, se dispone que la comunidad educativa participará en el gobierno de los centros a través del consejo escolar, y el profesorado también va a participar en la toma de decisiones pedagógicas.

En el último curso de educación primaria y la ESO se llevará a cabo una evaluación de las competencias adquiridas por el alumnado, además también se van a mejorar los itinerarios formativos de la formación profesional.

Y no quiero tampoco terminar sin resaltar la atención que se recoge en la ley sobre las escuelas rurales. Yo como gomera siento que es una gran medida, teniendo sobre todo en cuenta el arraigo que tienen estas escuelas en mi isla, y el papel tan importante y fundamental que desempeñan en la vida de los pueblos más... más no, en este caso, menos habitados.

Aunque tampoco quiero terminar sin decir que echamos de menos la obligatoriedad del primer ciclo de 0 a 3 años como etapa universal y gratuita... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia concede un tiempo adicional). Señora consejera, que nuestra formación política ha hecho en reiteradas ocasiones en esta Cámara, y no podemos dejar de reconocer que echamos en falta esa obligatoriedad en esta nueva ley, pero, señorías, yo creo que no es justo y no es real y no debemos de transmitir que esta es una ley mala, porque no lo es.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señora Mendoza.

Turno para el Grupo Parlamentario de Sí Podemos Canarias, señor Marrero.

Adelante.

El señor MARRERO MORALES: Buenos días.

Buenos días, señora consejera.

Para los que llevamos toda una vida persiguiendo la utopía de una escuela pública de calidad, inclusiva, laica, etcétera, en la educación, pues, la aprobación o el trámite que está siguiendo la Lomloe para su aprobación nos deja, pues, algunos pequeños... e incertidumbres y de alguna manera no tanto incertidumbres sino ese poso de no haber dado el paso más valiente de haber avanzado más aún en lo que significa avanzar definitivamente hacia una escuela laica, avanzar definitivamente hacia la subsidiariedad definitiva en vías de caminar hacia la extinción de que se siga destinando en este país dinero público para el negocio privado de la educación.

Pero dicho esto, y ante las tremendas invectivas que se lanzan desde la derecha y la ultraderecha sobre esta ley, la cantidad de mentiras que se están diciendo al respecto, pues a uno no le queda otra situación que defender esta ley, porque pensamos que significa un avance sobre lo que teníamos anteriormente.

Habíamos convenido el conjunto de la comunidad educativa en que la Lomce de Wert nos hizo retrotraer en este país cincuenta años atrás, nos llevó a tiempos anteriores a la Ley General de Educación de Villar Palasí, cuando introdujo las reválidas, cosa que Villar Palasí en su Ley General de Educación eliminó, a través de aquel libro blanco pensado, y eran los tecnócratas del tardofranquismo. Pensemos que ustedes lo superaron con la Lomce cuando la aprobaron.

Sin embargo, en estos momentos esta ley lo que hace es retrotraernos a la anterior hecha por el PSOE, es decir... y aquellos intentos vanos que hizo el bueno del ministro que estaba con Zapatero, el actual portavoz en la Comunidad de Madrid, que intentó con el PP llegar a un acuerdo, puso negro sobre blanco un acuerdo que eran todas las exigencias del Partido Popular, y ustedes, señores del Partido Popular, en aquel momento lo que plantearon es "esperemos a ver pasar el cadáver del Partido Socialista para no llegar a acuerdo ninguno".

Entonces, bueno, las valoraciones que han hecho de la ley ya lo han hecho los compañeros y compañeras anteriores intervinientes. Yo creo que eliminar las reválidas, la religión queda en la situación que estaba anteriormente, recuperar la educación infantil, eso nos parece a nosotros un valor fundamental, esa educación infantil de 0 a 6 años, de 0 a 6 años, con una comunidad educativa en Canarias donde solo están escolarizados el 16 %, el treinta y tantos por ciento a nivel de Estado, y se aspira a llegar al 54 % a lo largo de la legislatura... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia le concede un tiempo adicional). Nos parece un elemento central, central en lo que significa esta ley.

El introducir la ecoeducación, el medio ambiente, la memoria democrática en la escuela sabemos los que nos hemos dedicado a la enseñanza la tremenda contradicción en la que vivimos que a veces enseñamos unos valores en la escuela mientras nuestros gobiernos hacen todo lo contrario después en la práctica con medida en que arrasan el medio ambiente, etcétera, pero, en fin, se sigue apostando porque siempre dedicarse a la educación es ser optimista.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señor Marrero.

Turno para el Grupo Parlamentario de Nueva Canarias, señora Hernández.

La señora HERNÁNDEZ JORGE: Gracias, señor presidente. Buenos días.

Cambiar la Lomce es necesario por dos razones fundamentales: primero, porque fue una ley profundamente segregadora y, en segundo lugar -y podría estar mucho tiempo diciendo por qué otras razones-, por ejemplo, porque no tuvo consenso social ni político, pero, fundamentalmente, porque no ha servido para el gran reto que tiene la educación en España, que es favorecer la equidad y la excelencia. Y ahí están los datos, los informes internacionales que apuntan que seguimos teniendo demasiadas tasas de repetidores, baja tasa de titulación en todos los niveles y una escolarización de 0 a 3 años absolutamente insuficiente. Por tanto, es necesario cambiar la ley.

Es cierto, desde nuestro grupo siempre lo hemos dicho, que la educación no puede ser un arma de ataque partidista, que la educación, que es de todos y de todas, debe ser un elemento de cohesión social y, por tanto, debe ser un pacto de Estado quien haga que España por fin tenga una ley educativa estable, vamos por la octava.

Si analizamos cualquier modelo educativo de Europa -y, sobre todo, los exitosos-, no se caracterizan por cambios legislativos, todo lo contrario, se caracterizan por grandes pactos donde, gobierne quien gobierne, se mantiene esa estabilidad legislativa. Y tiene mucho que ver con esto que decía al principio: no se utiliza la educación como elemento adoctrinador, ideologizante y como arma de ataque partidista. ¿Por qué pasa esto en España? Yo, humildemente, creo que esto tiene mucho que ver con nuestra historia, con que seguimos teniendo en la cultura de muchos y muchas una influencia antidemocrática de nuestra historia como país que sufrió una dictadura y eso hace que algunos sigan creyendo que las escuelas deben ser lugares para adoctrinar y nosotros creemos, los demócratas creemos que la escuela debe ser ese lugar donde se construyen, donde se favorece ciudadanos y ciudadanas que estén preparados para afrontar los retos del momento que les ha tocado vivir, que no es poco, los retos del siglo XXI, ciudadanos y ciudadanas que respetan las normas de convivencia, los principios éticos y los valores de una sociedad democrática. Y, en definitiva, construir entre todos y todas una sociedad más justa, donde la excelencia y la equidad no sean elementos contradictorios sino que el sistema puede ser de excelencia, efectivamente, un sistema donde podamos desarrollar todas nuestras capacidades como seres humanos, nuestros talentos, nuestras competencias y también de equidad que significa no que a todos los eduquemos igual, no se trata de homogenizar, la equidad significa que todos y todas tengamos las mismas oportunidades para desarrollar, como decíamos antes, esas capacidades y esas potencialidades que, como ser humano, pues, todos tenemos de manera innata.

Gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señora diputada.

Turno para el Grupo Parlamentario Popular, señora Hernández.

La señora HERNÁNDEZ LABRADOR: Gracias, señor presidente. Buenas tardes ya, señorías.

Señora consejera, veo al Partido Socialista algo preocupado por la ley Celaá, hoy una pregunta, una comparecencia de su grupo, y no por la opinión del Partido Popular, que yo sé que a ustedes les preocupa poco, aunque seamos el principal partido de la Oposición, pero sí debería preocuparles la cantidad de colectivos que todavía hoy dicen no a la ley Celaá y que van a plantar cara a esta ley junto, también, con el Partido Popular. Y lo que de verdad nos molesta no es que, como decía, no les importa a ustedes la opinión de nuestro partido, sino que ustedes ninguneen o traten de llamar ignorantes o personas manipuladas a toda esa gente que se ha leído la ley y que entienden que están vulnerados sus derechos. Le puedo asegurar que no somos nosotros los que adoctrinamos en esos vídeos, son ellos los que voluntariamente están diciendo no y no están de acuerdo con la ley que ustedes plantean. Son personas con voz propia que temen la vulneración de sus derechos y, por tanto, lo quieren decir alto y claro.

Como les decía, ustedes no tienen en cuenta la opinión del Partido Popular, vale, pero tampoco lo hacen con miles de familias a las que les afecta directamente.

Una ley sin consenso, sin consenso, señora consejera, no del Partido Popular, como le decía; ustedes dicen que han votado diez partidos a favor pero es que siete han votado en contra y tres se han abstenido, así que tampoco es la ley más consensuada, ni siquiera en el Congreso de los Diputados, que más vamos a decir en la comunidad educativa.

Y ya lo dije en el anterior pleno y lo vuelvo a repetir hoy: no estoy orgullosa del consenso de la ley última educativa del Partido Popular, pero están acostumbrados en este Gobierno últimamente a que los anteriores lo habían hecho peor -con inmigración lo hicieron peor, con educación lo hicieron peor-, ocúpense ustedes de los que les toca ahora que es gestionar y gobernar y olviden ustedes un poco el pasado y aprendan sobre todo de los errores.

Ustedes han roto el verdadero pacto de Estado, claro que sí, volvemos otra vez a perder una oportunidad después de ocho leyes educativas para tener el pacto de Estado que se merece nuestro país, una oportunidad perdida.

Decían que la ley Wert era una ley ideológica, quisiera saber qué tipo de ley es esta. Excluyen a más de dos millones de alumnos en España, a 42 000 en Canarias, a más de cien centros y atemoriza, claro que sí, a los centros de educación especial, y los atemoriza, señora consejera, porque, obviamente, ustedes hablan a diez años vista, pero para el Partido Popular no caduca la educación especial. Nosotros decimos sí a una educación pública, inclusiva, por supuesto que sí, pero también a una educación especial que no caduque dentro de diez años, sino que todos esos alumnos durante toda su etapa educativa, y esas familias, puedan elegir el centro que quieren para sus hijos.

Reclámele usted al Estado los 42 millones de euros, porque no sé, señora consejera, qué hará esta comunidad autónoma si no tenemos dinero para infraestructuras educativas, no tenemos una educación de 0 a 3 años obligatoria tampoco en esta ley y, por tanto, tampoco tendremos nuevas plazas, así que nos... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia le concede un tiempo adicional).

Señora consejera, ¿de qué manera ustedes van a aplicar esta ley en una educación concertada que ustedes tachan de elitista, de los ricos...? Y, de verdad, sáquense ya esa máscara, señora consejera, las ha acompañado la educación concertada durante muchísimos años en este país y en esta comunidad autónoma con un papel imprescindible para la educación de todos nuestros niños y nuestras niñas, por lo tanto nosotros defendemos la educación pública sin ningún tipo de reparo y sin ningún tipo de máscara. Quítense ustedes la educación concertada porque, entre otras cosas, les hace falta para su política educativa.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señora diputada.

Bien, perdón.

Turno para el Grupo Parlamentario Nacionalista. Disculpe.

Doña Beatriz, tiene la palabra.

La señora CALZADA OJEDA: Gracias, presidente. Buenas tardes, consejera.

Miren, para que no haya dudas, compartimos la necesidad de derogar la Lomce, pero no el momento y la forma.

Los nacionalistas canarios hemos votado en contra de la Lomloe igual que en su día votamos en contra la Lomce. Ambas leyes, la ley Celaá y la ley Wert coinciden en la falta de consenso y pluralidad y sesgo ideológico.

Los nacionalistas canarios siempre hemos apostado por la educación pública, universal y gratuita, desde el respeto al principio constitucional que reconoce el derecho a la libertad de elección y, en este sentido, presentamos enmiendas a las modificaciones que la ley introduce que no fueron tomadas en consideración. Se trata de una ley tramitada sin el consenso de la comunidad educativa, sin participación, no se ha permitido que comparezcan profesionales para opinar y aportar; para la ley Wert se permitieron unas cincuenta comparecencias de las que cerca de veinte fueron a petición del Partido Socialista y, aunque no se tuvieron en cuenta, se les dejó participar.

Los nacionalistas canarios no compartimos ninguna de las dos formas de actuar, ya que ello supone que se aprueben leyes ideológicas abocadas a su derogación desde que haya un cambio de Gobierno. No nos parece responsable que los gobiernos sigan aprobando leyes que no van a permanecer en el tiempo, favoreciendo así el fracaso de nuestro sistema educativo.

Han hecho esta ley sin contar con nosotros, no la han consensuado con la comunidad educativa y este es el error que han cometido todas las leyes educativas hasta la fecha; esto es lo que han dicho algunos sindicatos. Hasta los que han visto las partes más positivas de la ley han denunciado la falta de participación, oírles decir que sí se ha dejado participar me preocupa. No basta con decir que la han apoyado más grupos políticos que la ley Wert, que es cierto, pero saben que más bien ha sido intercambio de intereses.

Miren, no le negamos aspectos positivos a la ley, como la revisión de los currículums o la recuperación de competencias para los consejos escolares, sin embargo dejan fuera aspectos fundamentales como la bajada de las ratios y la reducción de la carga lectiva de los docentes, una lástima que no hayan considerado prioritaria esta bajada de ratios porque una mejor apuesta curricular y metodológica se puede ver arruinada por un aula masificada, deben ir a la par. Y una lástima que tampoco hayan considerado prioritario ni importante establecer el carácter de universal y gratuita de la educación de 0 a 3 años. Qué pena que Unidas Podemos se haya olvidado de su exigencia de que el Estado regule este ciclo y declare su gratuidad. Presentamos enmiendas a la ley para establecer esa gratuidad y garantizar la financiación del Estado a las comunidades autónomas, pero el Gobierno de España no la tuvo en consideración. Miren que hemos hablado aquí de la urgencia de la escolarización de los niños a 0 a 3 años y el Gobierno de España, Partido Socialista y Unidas Podemos, con la complicidad de los partidos que lo apoyan, lo que hacen es establecer un plan a nueve años. Han perdido la oportunidad de contar con una escolarización de 0 a 3 años real, universal y gratuita que podamos mantener en Canarias. A ver qué nos dicen la próxima vez que traigan una comparecencia aquí de 0 a 3 años. (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia le concede un tiempo adicional).

Los nacionalistas canarios lamentamos que no se haya aprovecha la necesaria modificación de la Lomce para fortalecer nuestro sistema educativo y se haya usado como moneda de cambio ante otros compromisos políticos. Solo conseguiremos tener un sistema educativo sólido y permanente en el tiempo cuando el mismo sea realizado por profesionales, consensuado y abandonando los sesgos ideológicos.

Gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señora diputada.

Turno para el grupo proponente, Socialista. Adelante.

El señor VIERA ESPINOSA: Gracias, señor presidente. Señorías.

Si la ley que acaba de derogarse es tan buena, ¿por qué no han explicado por qué el número de alumnos y alumnas que repiten más veces y los que menos logran el título de Secundaria corresponden a familias con escasos recursos económicos?

En esta última semana he estado escuchando a los negacionistas de la nueva ley, me da la sensación de que o no se han leído la ley o no han querido escuchar el contenido de la misma o tienen un problema de competencia lectora. Han estado más en permanente enfrentamiento ideológico y difundiendo mentiras que en hablar de educación.

Miren, señorías, eso que hacen ustedes es una absoluta irresponsabilidad y nos hace más fuerte en la defensa de una escuela pública y democrática. Son tantas las falsedades que han estado difundiendo que, aunque ya la señora consejera se ha referido a ellas, me voy a detener en algunas.

Empezaré por la que aglutina más adeptos, de que vamos a terminar con el castellano, eso es un mensaje falso cuyo único objetivo es generar confrontación y odio. Para el Grupo Parlamentario Socialista las lenguas son motivo de unión y de riqueza cultural, para ustedes división. Señorías, ¿olvidan que más del cuarenta por ciento de los españoles tienen derechos lingüísticos? ¿Cómo pueden decir que lo recogido en la ley es inconstitucional cuando dicha ley cita literalmente a la Constitución española?

La segunda gran mentira: la educación especial. ¿Pero cómo y cuántas veces hay que decirles que no van a cerrar los centros de educación especial? Dejen de jugar con la sensibilidad de las familias, dejen de engañar y de enfrentar a este Gobierno con algo tan sensible como es la discapacidad. Lo que queremos evitar es que lo que nos dice el Comité de la ONU sobre los derechos de las personas con discapacidad, que España violó el derecho a la educación inclusiva de un niño con síndrome de Down que fue enviado a un centro de educación especial por las autoridades nacionales a pesar de la objeción de sus padres. Son ustedes sencillamente ruinitos. (Palmoteos desde los escaños).

La tercera gran mentira la del consenso de esta ley, la Lomce, la ley del Partido Popular, sufrió 11 enmiendas a la totalidad y se registraron más de mil seiscientas enmiendas de las que solamente el Partido Popular aceptó 30. Frente a ello, en la Lomloe ha sido aceptada más de trescientas, una ley que ha sido consensuada y dialogada con distintas formaciones políticas y con la comunidad educativa, donde han participado más de doscientos colectivos y se han incorporado más de doscientas aportaciones. Sí, señorías, más de doscientas aportaciones, para que luego digan que no ha habido participación.

Y recordar aquí el papel jugado por Coalición Canaria, que firmaron hace siete años un compromiso para derogar esta ley y se han olvidado completamente del mismo dando un giro de 180º, votando en contra de la misma, situándose en contra de la enseñanza pública y al lado de aquellas formaciones políticas que defiende una enseñanza que tiene preferencia por la educación privada, por la religión y la recentralización. Sí, utilizando para ello las mismas falacias que Vox y el Partido Popular, cuando fue una formación política que aprobó la Ley Canaria de Educación, la cual tiene cierta similitud con la Lomloe. Estamos seguros de que dentro de su formación política habrá muchos miembros de la comunidad educativa que no compartan ese criterio.

La cuarta mentira, un ataque a la concertada y a la libertad. Señorías, ¿hay libertad cuando se utiliza a menores para sus reivindicaciones o es adoctrinamiento? Defienden ustedes el concepto de libertad solo para aquellos que tienen recursos, pero se olvidan de los que no lo tienen. La ley garantiza la libertad de enseñanza y libertad de elección a las familias de acuerdo con la programación general de la enseñanza recogida en el artículo 27.5 de la Constitución. Ahora se refuerzan las garantías de una distribución más justa, evitando que sean los centros los que seleccionen a los alumnos. No podemos tolerar las desigualdades en la admisión de alumnos y su tratamiento en centros privados sostenidos con fondos públicos con respecto a los centros públicos porque ambos prestan el servicio público de educación. Vamos a poner fin a que los centros concertados tengan una doble vía de financiación y a ciertos abusos cometidos en la época de los gobiernos del Partido Popular, como era la concesión de suelo público gratuito a empresas ajenas a la educación bajo el pretexto de demanda social que han permitido que se lucren a costa de reducir las plazas en los centros públicos. ¿Saben, señorías, lo que consiguieron? Nada más y nada menos que tramas corruptas como la Púnica. Seguro que de eso sí que se acuerdan.

Quinta mentira, con la iglesia hemos topado. Esta ley no ataca a la religión, seguirá ofertándose, pero ya no tendrá valor académico, al igual que sucede en toda Europa. Hay que recordar que cuando Coalición Canaria, Partido Popular y Ciudadanos votaban en contra de esta ley estaban votando en contra de un proyecto en valores. ¿Qué problemas hay, señorías, con la educación afectivo-sexual? ¿Qué problema hay con la igualdad de género o con la educación ambiental? Ustedes votaron en contra de que los consejos escolares recuperaran su función de control y de gestión. ¿Por qué impiden ustedes la participación real y efectiva de la familia y de la comunidad educativa en los órganos de gobierno? ¿Por qué se oponen ustedes a que en los centros concertados se incorpore un representante de los ayuntamientos, cuando son centros sostenidos con fondos públicos? Salgan a la calle y díganselo a las familias.

Cuando ustedes votaban en contra de esta ley estaban votando en contra de la potestad que tienen los equipos docentes para que, de forma colegiada, decidan sobre la titulación y promoción de nuestros jóvenes. ¿Por qué un alumno o alumna no puede titular o promocionar si así lo considera el equipo educativo? Explíquenselo a los docentes.

Señorías, el objetivo último es que todo el alumnado, cuando termina la secundaria obligatoria, tenga un título que lo habilite a la formación profesional o universitaria. Por eso en esta ley se recupera el programa de diversificación curricular y se modifica la formación profesional básica. Cuando ustedes están votando en contar de esta ley, están votando contra el futuro de muchos jóvenes. Salgan a la calle, usen sus medios de cabecera, explíquenselo a nuestros jóvenes.

Y, por último, señorías, cuando ustedes votaban negativamente estaban votando en contra del artículo 24 de la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad. ¿Pero qué problema hay en que en una clase puedan convivir alumnos con necesidades educativas especiales o con discapacidad? Este es el mayor ejemplo de libertad, de igualdad y de tolerancia. Salgan a la calle, explíquenselo a la sociedad.

Señora consejera, Canarias va a disponer, de acuerdo con esta ley, de un 35% de las competencias... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo. La Presidencia le concede un tiempo adicional). Esta ley para dar un salto cualitativo, cuantitativo, para que los números de abandono escolar que lastran la formación personal y profesional de nuestros jóvenes no comprometan el desarrollo de las islas. Tenemos que adaptarla a los nuevos tiempos, a nuestro contexto social y económico, a los sectores productivos y a la nueva economía, sin olvidarnos del rico patrimonio cultural e histórico.

La ciudadanía reclama un sistema educativo moderno, más abierto, flexible, multilingüe, cosmopolita, un sistema educativo basado en los principios de inclusión, sin segregar ni excluir a nadie por su capacidad, por género, por origen familiar. Porque todos y todas somos necesarios para construir un país más justo e igualitario.

Finalizo, señor presidente. Señorías, de lo que realmente tiene miedo la derecha es que el Gobierno de Pedro Sánchez defienda a los hijos e hijas de los trabajadores y las trabajadoras para que puedan ser personas libres con pensamiento crítico. (Palmoteos desde los escaños). A lo que aspira mi grupo es a una sociedad en donde exista más igualdad de oportunidades, porque eso es, señorías, la condición inexcusable... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo). (Palmoteos y aplausos desde los escaños).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor diputado.

Turno de cierre para el Gobierno, señora consejera.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN, UNIVERSIDADES, CULTURA Y DEPORTES (De Armas Rodríguez): Sí, intentaré...

El señor PRESIDENTE: Adelante, adelante, sí, sí.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN, UNIVERSIDADES, CULTURA Y DEPORTES (De Armas Rodríguez): ¿Ya? Digo que intentaré ir respondiendo a cada uno de los planteamientos que ustedes... o afirmaciones que han hecho en sus intervenciones.

En primer lugar, estaba Ciudadanos, que dice que esta ley golpea la decisión de los padres, ¿y cuando dice esto usted piensa en los niños con necesidades educativas especiales que esta ley les da a los padres un protagonismo fundamental para decidir si el niño se queda en un centro de necesidades educativas especiales específico o pasa a un centro ordinario con las medidas oportunas? Ahí la decisión de los padres a usted no le importa, le importa en la parte concreta de la educación concertada.

Mire, usted dice que por qué no nos arrimamos o por qué no tuvimos en cuenta la propuesta que hacía desde su grupo para que fuera una propuesta moderada... Mire, ¿sabe qué le digo, señora diputada?, a veces la moderación no cabe, y en una ley como esta, que lo que se pretendía era acabar con la otra ley, tan nefasta para la educación, ahí no cabe moderación, ahí hay que actuar con valentía, como ha hecho este Gobierno. Esa es nuestra opinión.

Mire, la lengua vehicular que usted dice que le afecta tanto, ¿no?, esta ley, que la nombró Wert por primera vez, porque de ahí para atrás nunca se había nombrado, usted tiene que reconocer que la Constitución española considera que el castellano, junto con otras lenguas de algunas regiones, como puede ser el catalán, son cooficiales, por lo tanto, tienen el mismo derecho. Y yo creo que uno tiene que ser generoso, en el sentido de que una lengua de una región concreta es una riqueza más que tenemos. Nos empeñamos en que los niños sepan inglés, francés, que terminen una carrera, o terminen un estudio, cuantas más lenguas saben mejor, y resulta que las propias que tenemos en nuestra España, que es una riqueza, esas las tenemos que esconder por si acaso. Bueno, yo lo que digo es que el niño, lo que hay que garantizar es que el niño, cuando termina sabe... sepa hablar muy bien en español, sepa hablar muy bien en la lengua materna a la que pertenece y, desde luego, cuantos más idiomas extranjeros tenga, mejor. Eso es lo que nosotros pretendemos y lo pretendemos también con esta ley.

Por otro lado, la educación concertada -y aprovecho tanto para contestarle a usted como a la diputada del Partido Popular-, mire, evidentemente, la educación concertada aparece en el año 1985, con Felipe González, porque resulta que necesitábamos, como muchas veces, los poderes públicos no tienen capacidad para atender algo tan fundamental, en este caso, como era la educación, y echamos manos de empresarios, que pusieron a disposición sus centros educativos para cumplir un objetivo. Pero es que nosotros ya tenemos muchos centros vacíos, ya tenemos capacidad, y entonces nosotros tenemos que ir desprendiéndonos de aquello que ahora mismo no necesitamos y eso no le puede parecer mal a nadie, entiendo yo. Eso es lo que hacemos, no quiere decir que vaya a desaparecer, vamos a meterle un poco en vereda la situación y nada más.

Pero a mí me sorprende -y ahora paso, ya que estoy hablando con usted, señora diputada del Partido Popular-, sigo... estos días, que las he oído a ustedes y a su grupo continuamente desde que salió la ley, y un poco antes, me da lástima, de verdad, una cosa que quiero comentarle. Mire, parece mentira que la única misión política que se tenga en esta ley de su grupo político sea siempre hacer enfadar a la gente. No importa que sea verdad ni sea mentira; cuanto más enfadados estén con el Gobierno, mejor. Los colegios al padre de los niños de necesidades educativas especiales los enfada usted diciendo que cierran, mentira; a la gente que quiere la escuela concertada, que cierran los centros, mentira; a la gente que quiere que siga la religión en las escuelas, también, que lo vamos a quitar. Todas cosas no son verdades, entonces, hombre, por favor, seamos un poco más serios, porque ya les expliqué esta mañana que, si usted me busca un artículo concreto, porque yo, claro, yo me creo lo que dice la ley, lo que está escrito, no lo que ustedes se inventen, entonces, búsqueme usted un artículo donde aparezca que vamos a cerrar los centros concertados, que vamos a cerrar las necesidades educativas... los centros de educación especial, que vamos a... ¡dígame dónde está! Porque del resto... es una falacia. Y entonces está usted crispando y mortificando a unos padres que tienen una desgracia muy grande de tener un niño con necesidades educativas especiales. Entonces, por favor, seamos serios. Yo entiendo que a usted no le gusta esta ley, entiendo que le quiten los privilegios a mucha gente, lo entiendo, pero sea sincera y honesta cuando diga las cosas, no diga mentiras.

Entonces, repito, hablaba también usted de cuántos colectivos y cuánta gente está en contra de esta ley. Pero, vamos a ver, y también me dice que no me... que me olvide del pasado, no, yo no me puedo olvidar del pasado, no se olvide usted, reclamando la ley Wert me voy a olvidar no, no, no me puedo olvidar. Yo que le digo es, vamos a ver, ¿usted se acuerda -y, si no, yo le traigo los videos- las mareas tan grandes que se hacían, las mareas verdes defendiendo a la educación pública? ¿Las mareas tan grandes de padres, madres, profesores, de todos los colectivos, en contra de la ley Wert? O sea, entonces usted ahora me pide consenso y no sé cuántas cosas más, hombre, no sé, yo creo que debe de pensárselos, pero usted es por supuesto dueña de decir lo que considere y como tenga que decirlo lo dirá.

Me sorprende, desde luego, Coalición Canaria, ¿no?, hasta cierto punto, no cabe duda. Vamos a ver. Coalición Canaria dice que esta ley no la apoya porque no ha habido consenso, parece que con las consultas necesarias, y sobre todo y fundamentalmente porque no baja la ratio y no hay 0 a 3 años. Todo el resto... o sea, prefiere quedarse con la ley Wert, señores diputados. Es decir, vamos a ver, una ley que tiene tantos valores, en todos los sentidos, como no pone 0 a 3 ni pone que bajen las ratios, que se puede conseguir, usted sabe que de muchas maneras, no hace falta que esté en la ley, no hace falta que la ley que le diga a usted que baje la ratio. Y habla de la calidad, si habla de la equidad, se habla de tantas cosas, de ahí desprende todo el resto de cosas. En las leyes no aparecen todos los objetivos, evidentemente, en el desarrollo, en los decretos que la desarrollan, se podrá poner todo ese tipo de cosas, pero eso no es excusa. Usted no vota porque no le da la gana, porque considera que hay otro modelo que le guste más, y eso es respetable, no pasa nada, pero que me diga que por la ratio o porque el 0 a 3 no aparece usted prefirió no votar, hombre, a mí, desde luego, de verdad, se lo digo sinceramente, me duele muchísimo, porque, no sé, será por la cercanía, por lo que sea. Si a lo mejor lo hace un partido vasco o catalán, pero con un partido canario vote que no a una ley tan justa y tan necesaria para Canarias, pues me duele, señora Beatriz, qué voy a hacer, se lo tengo que decir.

Al señor Marrero, desde luego... (Corte de sonido producido por el sistema automático de cómputo del tiempo). Señor Marrero...

El señor PRESIDENTE: Un minuto más, señora consejera.

La señora CONSEJERA DE EDUCACIÓN, UNIVERSIDADES, CULTURA Y DEPORTES (De Armas Rodríguez): Nada.

Yo vuelvo a reiterar el agradecimiento al Gobierno por haber tenido la valentía de presentar esta ley. Ya digo que habrá un desarrollo de la misma y ya se irá viendo la cantidad de cosas que ella aporta para la calidad educativa, no de Canarias, de todos los españoles, incluidos, por supuesto, los catalanes, los vascos y todos los que vivan en España.

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE: Gracias, señora consejera.

Damos por finalizada esta comparecencia.

Suspendemos la sesión plenaria hasta las dieciséis treinta.

(Se suspende la sesión a las catorce horas y veinte minutos).

(Se reanuda la sesión a las dieciséis horas y cuarenta minutos).

El señor PRESIDENTE: Señorías, buenas tardes.

Vayan ocupando sus escaños.

Gracias, señorías.