Diario de Sesiones 116, de fecha 23/3/2022
Punto 1

10L/DGEN-0003 DEBATE GENERAL SOBRE EL ESTADO DE LA NACIONALIDAD CANARIA (CONTINUACIÓN).

El señor PRESIDENTE: Vamos a comenzar, señorías, con la intervención de los grupos parlamentarios Socialista, Nueva Canarias, Sí Podemos Canarias y Agrupación Socialista Gomera.

Gracias, señorías. Ocupen sus escaños.

Comenzamos, señorías, como les digo, con la intervención del Grupo Parlamentario Socialista Canario.

Tiene la palabra la señora Alemán.

(Rumores en la sala).

Gracias, señorías.

La señora Alemán tiene la palabra.

La señora ALEMÁN OJEDA: Presidente, consejeras, consejeros, diputados y diputadas, medios de comunicación, muy buenos días.

Sirva este debate del estado de la nacionalidad para la profunda reflexión y la rendición de cuentas que la ciudadanía, esta Cámara y la ejemplaridad democrática merecen. Este ejercicio democrático debe servirnos para la consecución y evolución de los objetivos que marcamos al inicio de la legislatura y también para conocer la situación del archipiélago canario en este último año.

Y, si miramos atrás, solamente un año atrás, vemos la diferencia en la situación y en las circunstancias de este debate de 2022, si lo comparamos con el del 2021, y contextualizar parece que no solo es necesario, es una obligación, porque precisamente han sido los condicionantes políticos los que han hecho que hoy tengamos más certezas, tengamos menos incertidumbres, que las certezas que teníamos en el pasado debate de la nacionalidad.

Pero en estos momentos que nos ha tocado vivir, de inmediatez, de información en tiempo real, de que lo que sucedió hace una semana se nos antoja antiquísimo, ni qué decir tiene lo que sucedió durante 2021, es necesario contextualizar.

En marzo del 2021, el porcentaje de personas vacunadas era bajísimo, incertidumbre derivada del cero turístico y los golpes de la recuperación para este sector que fundamentalmente consta de la libre movilidad y sin ninguna duda, aunque el Gobierno de España ya había articulado sus mecanismos, comenzábamos a entender cómo iban a funcionar aquellos fondos europeos, esos fondos que tanta claridad han aportado y que además han sido trascendentales, como decía, para que hoy tengamos más certezas.

Un año después del último debate del estado de la nacionalidad y dos años ya desde el inicio de la pandemia, hemos logrado en el país y especialmente en Canarias, con políticas, señorías, siempre con políticas, mutar lo que podría haber sido una situación dramática en una oportunidad de transformación de país y de comunidad.

Y no solo hemos ido superando la crisis sanitaria, se ha sorteado el embate económico y sus consecuencias y se mira al futuro próximo con la responsabilidad de saber que no podemos dejar pasar el tren de la transformación sostenible y cualificada que nos brinda la ingente inversión pública liderada por España dentro de la Unión Europea y en la que Canarias, con sus distintos condicionantes, es una de las regiones más beneficiadas en esta apuesta clara por lo público. Y esto es así se mire por donde se mire y se interprete como se quiera interpretar.

Hoy, gracias a todo eso y sobre todo gracias al sector público y a la valentía política, nos encontramos ejecutando unos presupuestos expansivos y con un 84 % de la población inmunizada. Un absoluto éxito colectivo.

En conclusión, la cohesión y la estabilidad nos hacen ganar terreno a la incertidumbre.

Más luz también queremos dar en el conflicto del Sáhara, que dura casi cincuenta años.

La Unión Europea saluda todos los desarrollos positivos de las relaciones bilaterales entre los Estados miembros y Marruecos. Bruselas apoya los esfuerzos del secretario general de Naciones Unidas para llegar a una solución política justa, realista, pragmática, duradera y mutuamente aceptable, y toda solución ha de reposar en un compromiso de conformidad con las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Mención aparte, la erupción del volcán de la isla de La Palma, la atención a su emergencia y la recuperación de la isla, en la que todos nos encontramos inmersos, comprometidos e implicados el tiempo que sea necesario, con toda la capacidad económica y social posible, como así lo han demostrado todas las administraciones a nivel local, pero sin ninguna duda el Gobierno de España y el Gobierno de Canarias.

Y sin tampoco hacer la vista a un lado de lo que sucede en nuestras costas y los flujos migratorios, donde hoy tampoco la situación es la misma de la que teníamos hace un año, afortunadamente los mecanismos de acogida se han ido perfeccionando, se ha ido agilizando, lo que hemos pedido siempre del PSOE de Canarias. Ahora nos encontramos en una situación distinta, hablamos de la obligatoriedad de la solidaridad en la acogida entre territorios. Con conciencia, responsabilidad y sentido de país y de unión lo vamos a conseguir también.

Actuando de igual manera con los indeseables hechos que estamos viviendo en Ucrania y cuyas peores consecuencias -la pérdida de vidas humanas- estamos viviendo ya. La sociedad debe ser absolutamente ejemplar, siempre en la solidaridad y en la acogida de los seres humanos, sean del color que sean.

Señorías, y todo ello con la gestión de un programa de gobierno del cambio al que nos comprometimos en el año 2019 y que con todos estos contratiempos y con todas las incertidumbres ha sido y sigue siendo la guía de este Gobierno.

Con la defensa y el compromiso incontestable, así reconocido también en el Plan Reactiva, la defensa de los servicios públicos fundamentales, la sanidad, la educación, los derechos sociales, la diversidad y la igualdad, y por supuesto con el compromiso inequívoco de la agenda canaria de desarrollo sostenible presentada el pasado mes de diciembre, un documento de todos y de todas y que va más allá de este Gobierno, porque va a ser la hoja de ruta, va a ser el manual de instrucciones de esta tierra durante muchos años.

Con el motor de una administración pública que ha dado pasos no solo en la modernización de su estructura, necesaria también, para la correcta aplicación de los fondos europeos y garantizar un buen servicio público, sino también el trabajo indiscutible en la regeneración y en la salud democrática de nuestra comunidad autónoma a través de los datos abiertos.

Y también motor son los empleados y las empleadas públicas, que en todas las áreas del Gobierno no solo han hecho posible superar cada ola de la pandemia, sino que han hecho posible que el corazón del Gobierno siga bombeando, siga bombeando de manera fuerte, frente a cada embate y que además de bombear proyecte el fututo de nuestra tierra. Por ello, y como venimos trabajando desde hace meses también desde el Gobierno de España, nuestro compromiso total y absoluto con los empleados y con las empleadas públicas y nuestro compromiso con acabar con la lastrada y heredada desde hace demasiados años situación de abuso de temporalidad de la Administración pública. Política valiente, de empeño y de compromiso con la dignidad laboral de muchas personas que hacen que todo esto funcione. Y esto, señorías, vendrá a transformar y ayudar a la modernización de nuestra comunidad autónoma.

Unido, como decía, al portal de datos abiertos, al Portal de Transparencia, impulsado y reconocido durante el último año, en el último año, la modernización y la calidad de los servicios, proyectando y gestionando con herramientas distintas que nos ayuden a mejorar la consecución de objetivos, mejorando el rendimiento y la productividad de nuestra propia Administración, vamos a hacer posible -lo estamos haciendo ya- que todo el engranaje administrativo funcione de una forma compacta, sólida, en el mismo camino y de forma más eficiente, reduciendo la complejidad administrativa y avanzando en tecnificar la Administración, mejorando nuestras herramientas digitales y también acortando plazos para llegar antes y mejor a la ciudadanía. Porque de eso se trata, no solamente se trata de prevenir, se trata de anticiparse en todas las áreas del Gobierno. Y demostrado está, lo hemos visto a lo largo de los últimos meses, a través del área de seguridad y emergencias, cómo la apuesta por la prevención, por la ciencia y por los equipos humanos ha permitido anticiparnos ante fenómenos naturales y evitar así dramas mayores, actuando de forma coordinada. Una apuesta clara por la coordinación y por la alta tecnología al servicio de la Administración pública, en la cual debemos continuar avanzando y mejorando en nuestro sistema de protección civil.

Desde la coordinación entre administraciones, desde la lealtad institucional y desde la cooperación gubernamental hemos demostrado -así lo ha hecho el Gobierno- que esa es la mejor receta para responder y dar la tranquilidad necesaria a la ciudadanía. Tranquilidad que da saber que hay un sistema que responde, como lo hemos visto en educación o en sanidad.

El eje vertebral, el patrimonio común de toda la ciudadanía, el ascensor social y la igualdad real y efectiva que da la educación pública forma parte de la obsesión diaria del Partido Socialista y del Gobierno. Un compromiso también del pacto de progreso, reforzar presupuestariamente la educación pública en Canarias, y así ha sido en los diferentes presupuestos del pacto de las flores, el presupuesto del 2021 y lo hemos consolidado en el presupuesto de este año 2022.

Pero nuestro compromiso no se ha quedado exclusivamente en lo económico, hemos ido desarrollando en la práctica nuestro programa de gobierno, fundamental para el desarrollo de la comunidad, especialmente en materia de 0 a 3 años, con el compromiso también del Gobierno de España y con el conocido por todos como Plan Estratégico del Primer Ciclo de Educación Infantil, para crear, junto a los ayuntamientos de Canarias, nuevas plazas públicas para aumentar la escolarización de los niños y las niñas de las islas, para así también mejorar la conciliación de la vida familiar y laboral, con un papel fundamental desempeñado por nosotras, las mujeres.

Compromiso también, así lo recalcamos en el debate de la nacionalidad del pasado año y vemos sus frutos en este, con la FP, con la FP Dual, no solo con esa anhelada diversificación, sino con el incremento este año de las plazas ofertadas. Avanzamos con el programa PROA+, avanzamos en el Programa esTEla, también con el Plan de Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras, el programa específico para el alumnado con trastornos del espectro autista y sin lugar a dudas, y en mayúscula y de forma ejemplar en nuestra comunidad autónoma, como ya hemos debatido recientemente en esta sala, la promoción de la salud mental y la educación emocional, tan necesaria y útil, como hemos visto en los últimos tiempos, tanto por el impacto de la pandemia como con la erupción del volcán de La Palma.

Para los socialistas la salud mental es una prioridad diaria en nuestros jóvenes, pero también en otras etapas vitales. Hemos visto como las diversas dificultades que nos han golpeado han puesto de manifiesto la necesidad de cuidarnos en el sentido más primario de la palabra y en primera persona. Necesitamos sociedades sanas para seguir avanzando, sociedades sanas y sin estigmas y construidas desde la empatía. Para ello no solo es necesario el papel presupuestario y comprometido de los gobiernos, sino también el compromiso de todas las consejerías. Estamos seguros de que esta otra pandemia tendrá respuesta adecuada de forma transversal en cada área de nuestro Gobierno. Y para ello, para atender cada caso, para llegar a la atención personalizada y atender cualquier tipo de diversidad dentro de las aulas, con nuestros estudiantes, el Gobierno de Canarias este último año ha hecho una apuesta clara por el incremento del personal como base fundamental para la atención. Casi mil personas más para mejorar la atención a la diversidad del alumnado, que junto con el personal contratado, y que así hemos visto incrementado, hace que uno de los grandes retos de la educación en Canarias, también para nosotros, se vea un poco más cerca: la bajada de las ratios en Canarias.

Medidas como las citadas, unidas a las políticas universitarias, de revalorización de nuestras universidades, con la bajada de los precios de las matrículas, las más bajas de España, sin estar reñido con la calidad de la enseñanza, con la atención a los más vulnerables, atendiendo además a las consecuencias de la erupción del volcán de La Palma, esa reescolarización de los niños y niñas afectados por la erupción, pero también atendiendo a la especificidad de la EBAU para la isla, cuestión que celebramos y que además respaldamos.

Todo esto demuestra, una vez más, que tenemos un sistema educativo público a la altura, que debemos cuidar, financiar y apoyar, pero que siempre responde y este es otro patrimonio común.

Y también lo es la cultura. En los tiempos más difíciles para el sector no se ha cejado en el compromiso del Gobierno de Canarias y de los partidos que lo conforman con un sector que no solamente aporta riqueza compartida, genera empleo de calidad y además nos enriquece como ciudadanos.

La cultura como derecho y en igualdad de oportunidades ha sido vital en el hacer del Gobierno de Canarias. Una cultura inclusiva que rompe con las barreras territoriales, una cultura para todos y para todas. Y esto se hace viable gracias al incremento en la inversión en esta área en casi un cincuenta por ciento de como lo encontramos cuando llegamos al Gobierno. Un compromiso plasmado también en la Agenda Canaria 2030, entendiendo la cultura como uno de los objetivos compartidos que debemos tener como sociedad. (Palmoteos desde los escaños).

Igualdad de oportunidades que también ejercemos desde el deporte, impulsando un área que implica a muchos canarios y muchas canarias y cuya relevancia hasta ahora nada tenía que ver con la implantación social que existe en las islas. Por ello, queremos destacar el programa de responsabilidad social deportiva y, sin lugar a dudas, la constitución del Consejo Canario del Deporte diez años después, como un órgano que sitúa al deporte y la actividad física como claves también dentro del Gobierno de Canarias.

Lo dijimos el año pasado y lo vamos a reiterar este año: ejercemos nuestro compromiso cada día en los derechos sociales. Todos los esfuerzos del Gobierno, toda la acción diaria en cada una de las áreas, empezando, como no puede ser de otra manera, con el empeño de la consejera en generar riqueza social en nuestra comunidad autónoma. Nunca es fácil, nunca es sencillo y con una tarea complejísima. Un área, además, que de atender lo diario, la rutina, ha estado indiscutiblemente a la altura ante la erupción del volcán de La Palma, estando, respondiendo, acompañando y, sobre todo, garantizando servicios que en plena tragedia fueron vitales para las vecinas y los vecinos afectados en esas zonas.

Y con todo, señorías, el objetivo inamovible: continuar protegiendo a los más vulnerables. Estas islas, que lastran datos de exclusión social, pobreza y demasiadas listas de espera muchísimos años, sientan las bases del crecimiento social, con valentía, con eficacia y con claridad.

Y no será sencillo, pero la implicación del Gobierno en su totalidad en materias trascendentales, como la dependencia, la discapacidad, la infancia, los servicios sociales y los pasos dados hasta ahora hacen y harán que estemos en el camino de dignificar los servicios públicos básicos y sociales.

Dos de las apuestas más importantes de este año que hemos pasado indiscutiblemente son el ambicioso Plan Canarias te Cuida, que requiere un tratamiento propio y destacado. Consideremos que es uno de los programas más transformadores, social y económicamente, que nos brindan los fondos europeos y la colaboración administrativa.

Un plan que viene a relanzar la economía de los ciudadanos, además de garantizar la dignidad del cuidado de las personas. Esta oportunidad nos posibilita diversificar economía, generar empleo, reforzar la atención a nuestros dependientes y a nuestros mayores y, además, caminar hacia un modelo más personalizado.

Y además, como decía, la ley de renta ciudadana, como anclaje legislativo vital para modernizar y garantizar la efectividad de estas prestaciones sociales a la ciudadanía. Ampliar la base social, incluir nuevos perfiles, garantizar junto con el ingreso mínimo vital una autonomía personal, que es imprescindible, señorías, para acabar con la pobreza.

Y eso es, como decía, la protección a los más vulnerables.

Estos dos ejes del Gobierno en materia de servicios sociales son primordiales para cambiar el sistema de prestaciones y atención a la ciudadanía, y esas bases ya están sentadas y, lo que es igual de importante, con financiación.

Al igual que la dependencia, otra prioridad y otra de las materias que más preocupan al Gobierno y al Grupo Parlamentario Socialista, porque somos conscientes de su necesidad. ¡No vamos a ser conscientes, si la ley de dependencia surge con un Gobierno socialista...! Por ello, el esfuerzo presupuestario y en recursos humanos este año ha sido incontestable, y empezaremos pronto a ver los resultados, no les quepa duda. Ese es el compromiso del PSOE y sabemos que lo es, en primera persona también, el compromiso de la señora consejera.

Como lo es el tercer sector, vital para que donde la Administración pública no llega se sigan prestando servicios, servicios imprescindibles para cientos de personas. Por eso, nuestro reconocimiento desde aquí a esas entidades que, en colaboración pública, hacen posible llegar a cada rincón de Canarias para prestar, como decimos, servicios imprescindibles.

Y, señorías, en materia de igualdad, debemos hacer un llamamiento claro, rotundo y sin fisuras en este Parlamento, un llamamiento por la igualdad y por una sociedad sin violencias machistas. Y nos queda muchísimo pero agradecemos el trabajo incansable de la consejería, de las consejerías, porque nos consta que este también es un trabajo transversal, como parte elemental de esa Agenda Canaria 2030, como valor fundamental para los socialistas y las socialistas en una democracia plena. Democracia plena que debe construirse con quienes somos el 50 % de la población mundial y también con los y las jóvenes de esta tierra.

Juventud que debe entender también el esfuerzo que está haciendo este Gobierno, el esfuerzo inversor, para que tengan oportunidades de trabajar en estas islas, para hacerlo desde la dignidad laboral y con perspectivas de futuro, para que hagan su vida en Canarias y no tengan que marcharse.

Señorías, como se dice siempre, la salud es lo primero, también debe serlo desde el punto de vista de la gestión pública, y para nosotros, para los socialistas, antes y después de la pandemia, era y es una absoluta prioridad en todos sus términos: en la atención primaria, en las urgencias, en la mejora de la cartera de servicios. Y esto, como en tantas ocasiones, se dice con palabras pero se demuestra con hechos, siendo el Servicio Canario de la Salud una de las áreas del Gobierno con mayor incremento presupuestario.

Por eso hay que resaltar la relevancia y la evolución de ese Plan Aborda, puesto en marcha por el Gobierno con el fin de reducir esas listas de espera, con resultados, pero invitamos al Ejecutivo a que se siga reforzando esa herramienta tan necesaria para acortar los tiempos de espera en nuestras islas.

Además, y paralelamente, la imprescindible mejora en las infraestructuras de nuestros hospitales, como la torre pediátrica del Materno Infantil, en Las Palmas de Gran Canaria, o los quirófanos del Hospital del Sur de Tenerife, y además con las medidas que el presidente anunció ayer, entre otras las 342 nuevas camas hospitalarias.

Han sido demasiados años de demanda y demasiadas horas en la carretera.

Avanzamos, señorías, en los servicios de salud mental, con paso firme y con un conocimiento realista del impacto que ha tenido la pandemia en nuestras vidas, poniendo en evidencia carencias y estigmas de etapas anteriores y no tan anteriores que urge abordar. Incluir la salud mental como prioridad en la sanidad pública es imprescindible. No solo desde el área sanitaria, creemos firmemente que esta debe ser otra de las grandes líneas transversales de todo el Gobierno, así lo planteamos también en materia educativa o en materia laboral.

Avanzamos también en los servicios infanto-juveniles o en los recursos de atención temprana, como nos comprometimos en el 2019.

Y paralelamente a eso, señorías, la gestión de una pandemia que no se acaba de ir, con la resistencia absoluta de un personal sanitario que aun agotado da lo mejor de sí, que aguanta olas, picos y presión asistencial, pero que también, y en colaboración con la ciudadanía, ha sido ejemplar en la vacunación. Es lo que hoy nos permite estar aquí, en la extensión de esa expresión, estamos aquí gracias a la vacunación y es lo que nos permite tener una vida más tranquila y que nos da garantías.

El éxito de la vacunación de nuestro país, y muy especialmente en Canarias, nos recuerda cada día que nuestro sistema público de sanidad es la joya de nuestro estado del bienestar.

Y decía que la vacunación hacía posible que todos pudiéramos estar aquí hoy y tener una vida más normalizada y también ha sido fundamental para nuestro principal motor económico, el turismo, el principal afectado por la falta de movilidad. Falta de movilidad que tantas y tantas vidas salvó, pero con consecuencias pésimas para este sector. Pero Canarias ha sabido responder con un destino seguro, con un destino de calidad para los que nos visitan y para los que vivimos aquí.

Para ello, una vez más, las políticas: ayudas directas, como los ya citados 1144 millones, de los que muchos hoteleros se han beneficiado; también las propias ayudas directas del Gobierno de Canarias y toda la masa laboral cubierta por unos ERTE que han sido una herramienta clave para que hoy nuestros datos de empleo no sean peores. Aminorar el impacto económico de la COVID ha sido absolutamente necesario para que hoy no estemos hablando de una debacle social.

Y ahora, en recuperación, con datos macros previos al COVID, debemos como obligación aprovechar todo el abanico de oportunidades que nos presentan los fondos europeos en materia turística para avanzar en la sostenibilidad del sector, también accesible, incluso mediante los planes de sostenibilidad turística en destino, en colaboración con los cabildos, con los ayuntamientos turísticos, con los agentes económicos, con el sector, con todos y cada uno de los que construyen este destino único que es Canarias, como con la estrategia Canarias Destino, exigente, responsable, realista y cumpliendo con la Agenda 2030.

Y, volviendo al inicio de mi intervención, hoy estamos en otro escenario económico, gracias a decisiones políticas valientes, que han hecho que la recuperación económica no solo sea más rápida, llegando a toda la ciudadanía, sino también que se esté convirtiendo en una oportunidad de presente y futuro para hacer de estas islas un territorio sostenible, equilibrado y socialmente justo, con oportunidades.

Después de estos dos últimos años de dificultades, hemos visto al Gobierno de Canarias y al Gobierno de España con una implicación económica máxima para proteger al sector productivo, a los trabajadores y trabajadoras de nuestro país. El mayor escudo social de la historia, y no nos vamos a cansar de repetirlo. Un Gobierno a la altura de las circunstancias que hace posible que hoy nos situemos en cifras económicas prepandemia. Y así lo dicen los datos de instituciones públicas y privadas y lo dicen respecto a distintos parámetros: crecimiento económico, PIB, número de personas desempleadas, salidas de personas de los ERTE, número de personas afiliadas a la Seguridad Social, etcétera, etcétera. Y esto se ha hecho en tiempo récord y, sin ninguna duda, gracias a la inversión pública. Una inyección directa, primero para proteger a la masa salarial a través de los ERTE, siendo Canarias, además, una de las comunidades autónomas más beneficiadas de esta medida, que, en nuestra opinión, ha sido la mejor medida del Gobierno de España para proteger a los trabajadores; y, en segundo lugar, a través de la liquidez, y ahí está el compromiso del Gobierno de Canarias con esos casi noventa millones que, sumados a los 1144, ese esfuerzo sin precedentes, transfiere el Gobierno de España a Canarias para inyectar a nuestras empresas y a nuestros autónomos.

Dijeron que no llegarían, que el Gobierno abandonaba a Canarias, ese discurso tan manido como años de gobierno nacionalista; luego dijeron que no se ejecutarían, que no llegarían a los bolsillos de los canarios y de las canarias, y cuando llegan ni se alegran. Ni todos somos iguales ni todos somos tan irresponsables.

La diferencia en los gobiernos no solamente se refiere a las políticas en sí, mucho hay también de cómo se ejerce la política, y ahí es donde se forjan los líderes. Nuestra responsabilidad y nuestro compromiso es indiscutible. El dinero ha sido empleado en su totalidad, el dinero ha llegado a los bolsillos de los canarios y de las canarias, de los empresarios grandes, de los empresarios pequeños. Y los primeros que deberían celebrarlo es quien representa a la ciudadanía canaria, ¡cómo no alegrarse de esto!

Por eso queremos felicitar al área de economía del Gobierno de Canarias por todo ese trabajo para hacerlo posible y hoy, gracias a esa inyección de liquidez, nuestro tejido productivo se encuentra en fase de recuperación, como así también lo certifica la evaluación del Plan Reactiva. Un plan aprobado por este Parlamento, un plan refrendado por la mayoría social, sindical y empresarial de las islas, que es fiscalizado de forma regular y que es una hoja de ruta compartida hasta el 2023. Un plan que, como ya hemos dicho, ha logrado más financiación de la planteada inicialmente gracias al apoyo de otras administraciones y al esfuerzo propio; un plan que ha sido ejecutado como nunca antes un plan había sido ejecutado en esta tierra, con responsabilidad y con un esfuerzo colectivo. Un éxito que es el de Canarias y que debiera alegrarnos a todos, pero en ocasiones en política no es así.

Medida a medida, política a política, presupuesto a presupuesto se ha ido cumpliendo, hemos ido cumpliendo, con el fin y único objetivo de que Canarias hoy esté en vías de recuperación. Con cero turístico, con pandemia, con volcán, con seis olas, pero sin distracciones. Y así lo dicen los sucesivos datos, como los de la recaudación, mejorando incluso las previsiones del propio Gobierno.

Y, si el Plan Reactiva se ha visto cumplido, nuestros presupuestos también. Niveles de ejecución que nos dicen que la maquinaria administrativa funciona y que las prioridades están claras. Hay voluntad, hay esfuerzo, no hay distracciones.

Nuestro compromiso y nuestra responsabilidad están más que garantizados. Por ello, también nuestro empeño en los sectores productivos claves en la transformación de Canarias, transformación incluida como motor del Plan Reactiva y también con la transversalidad del cumplimiento del Pacto de los Jameos y la Agenda Canaria 2030.

Inyectar liquidez a la economía, trabajar en la sostenibilidad de nuestras infraestructuras, mejorar la conectividad de las islas, en ellas y entre ellas, está la estrategia de movilidad sostenible y el plan director de movilidad sostenible que se ha hecho en Obras Públicas, Transportes y Vivienda, ha hecho que se ejecutaran 503 millones de euros. Esto, señorías, se traduce en obras imprescindibles para la ciudadanía, en calidad de vida, en seguridad, en oportunidades y en saldar una deuda histórica con los canarios y con las canarias.

El cumplimiento del Convenio de Carreteras, con un altísimo nivel de proyectos para ser licitados, compromisos en cada isla y nivel de ejecución de obras en cada una de ellas, hace que las perspectivas para los próximos años sean favorables y no como hasta ahora estábamos acostumbrados, gracias a la capacidad de redacción de proyectos que ha tenido este Gobierno, basada sobre todo en la preocupación y en la seriedad.Porque, como decimos en esta tierra, como bien saben, mucho chauchau y poco jace jace: mucho hablar del Convenio de Carreteras y poco proyecto redactado. Y así pasaron los años, con Coalición Canaria presidiendo el Gobierno de Canarias, incumplimiento tras incumplimiento y mientras las infraestructuras de Canarias a la cola y los canarios haciendo cola en esas infraestructuras obsoletas. (Palmoteos). Y cuando nos quejábamos oíamos aquello de "la culpa es de Madrid, Madrid nos castiga, Madrid nos roba, Madrid no nos recibe". Son los nacionalistas que más dependen de Madrid de la historia. (Palmoteos).

Cuestión similar ocurre en materia de vivienda. Si el año pasado celebrábamos en este mismo debate del estado de la nacionalidad ese plan de vivienda, ese pacto de vivienda, esa firma, este año debemos celebrar su ejecución. El inicio de la compra, construcción de más de mil quinientas viviendas, rehabilitación de más de siete mil cuatrocientas casas, más todas las ayudas directas para las personas más vulnerables y también para los jóvenes como primera oportunidad habitacional. También luchando contra la despoblación mediante la fijación de la misma a través de la adquisición de la vivienda. En resumen, más de catorce mil actuaciones.

Y esta es una de las líneas más importante para el Gobierno y para los socialistas, como política pero sobre todo como derecho fundamental, el acceso a la vivienda, y se salda en Canarias con una ejecución de 130 millones de euros. Y seguiremos sin descanso en la garantía de este derecho, también trabajando en la mediación a través de los distintos programas para frenar los desahucios y animamos al Gobierno a seguir trabajando en esta línea que tan buenos resultados está dando y que tan necesarios son para los y las canarias.

Y todas estas actuaciones, que vienen a mejorarle la vida a la gente, que vienen a hacernos la vida menos difícil, que cumplen con derechos y oportunidades, no pueden hacerse sin una perspectiva de sostenibilidad.Como saben, nuestro compromiso máximo, el del PSOE, el del presidente Torres y el del Gobierno en su conjunto, ha sido desde el primer día: darle centralidad política al cambio climático y a la sostenibilidad. Así se indicó desde las primeras medidas del Gobierno, así lo ha marcado la Unión Europea y el Gobierno de España.

Nuestra hoja de ruta compartida: el Pacto Verde, la ley de cambio climático de nuestro país y la nuestra, la canaria, la que ya está en este Parlamento.

Junto a ello, todo el mapa de inversiones que han posibilitado los fondos europeos y que estamos viendo cómo se van materializando, como la estrategia canaria de energía, que transformará este mix energético, con la imparable implantación de la fotovoltaica, con el incremento indiscutible del autoconsumo gracias a todas y cada una de las líneas de financiación que se han puesto en marcha de forma directa por el Gobierno de Canarias, ayudando al resto de administraciones a ser más eficientes, haciéndolo nosotros mismos en nuestras instalaciones públicas, en cada azotea, en cada espacio público.

Como también lo hacemos en la movilidad, renovando la sostenibilidad del parque móvil propio, tejiendo red también con sectores del transporte para que se sumen a este camino, del cual ni podemos ni vamos a retroceder: el camino de la reducción de emisiones.

Compromisos cumplidos, ejecución cumplida, también con la declaración de la emergencia climática, la primera política del Gobierno de Canarias.

Prioridad también con el Plan de Residuos de Canarias y la ley de economía circular, en colaboración con las islas, que se materializará en un año.

Unido a ello, la planificación hidrológica, que, como dijimos el año pasado ya, es una obligación. Debemos, con los fondos europeos, continuar avanzando con paso firme en completar todas las obras vitales para nuestras aguas y así también cumplir con el ciclo integral del agua.

Y otro de los sectores muy ligado a la sostenibilidad y a la diversificación es el sector primario. Con un incremento histórico en su presupuesto en este año 2022 muestra la importancia que tiene para el Gobierno de Canarias en todos sus ámbitos este sector, desde el tomate, pepino, otras hortalizas, a explotaciones ganaderas, queserías, la pesca, las bodegas...

Resituar el sector primario dentro de los sectores productivos fundamentales de la economía canaria, capital para su mantenimiento y futuro próximo, y así también lo ha entendido el Estado y la propia Unión Europea, que en los momentos financieramente más complicados tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea, con el temor que podía suponer una bajada en la ficha del Posei, lo ha mantenido y nosotros lo celebramos.

Ejemplos de esta prioridad también es la apuesta presupuestaria en ese plan de soberanía alimentaria, con más de un millón de euros, en agricultura ecológica, a través de GMR; o el incremento en el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias, en un 27 %. Una apuesta clara en los presupuestos que tiene mucho que ver con el futuro que queremos para nuestro sector primario en Canarias, un sector que debe ser moderno, de oportunidades para nuevos empleos, sostenible y donde cada vez veamos a más mujeres y a más jóvenes trabajando en él. Y aprovecho la ocasión para mandarle un afectuoso abrazo a Alicia Vanoostende, consejera de Agricultura.

Y esta, como otras áreas del Gobierno, ha sido fundamental en la emergencia del volcán de la isla de La Palma. Una isla que vive en un gran porcentaje del sector primario, especialmente del plátano, como sabemos, una isla que es su paisaje y que ha visto arrasada parte de su terreno. Y aun celebrando la implicación máxima y absoluta del Gobierno de España y del Gobierno de Canarias en mantener el riego y el trabajo en las zonas incomunicadas es uno de los sectores más perjudicados de la isla. Por ello, de forma inmediata además, se activaron mecanismos en el terreno, como decimos, para facilitar el acceso a las fincas, la pesca y demás actividades. Y también medidas de carácter financiero, ayudas directas, que hemos visto cómo se han ido entregando; con obra hidráulica para facilitar el regadío, con presencia y conocimiento permanente por parte de la consejera en el territorio, con sensibilidad, con empatía y cogobernanza absoluta con el Gobierno de España y con el comisario de la Unión Europea.

Y esta coordinación e implicación que hemos visto en cada área del Gobierno, en cada departamento de gestión, en cada administración y en cada uno de los miembros del Gobierno de Canarias y también del Gobierno de España ha sido ejemplar, señorías, ejemplar. No solo en materia de agricultura o sector primario, hablemos también de carreteras, de cómo en tiempo récord el Gobierno de Canarias de forma inédita abre vías, busca espacios, ejecuta una carretera precisamente para abrir posibilidades en determinadas zonas de las islas.

O en materia de vivienda, garantizando un derecho constitucional en el momento de mayor emergencia natural de la historia reciente de Canarias. Puede que alguien quiera olvidarse de cómo se gestionaban catástrofes con un daño muy inferior al que se está viendo en la isla de La Palma. Puede que la amnesia selectiva sea un recurso en ocasiones utilizado por aquellos a los que la realidad de la gestión y de la respuesta del Gobierno les dé en la frente. Los mismos que nos dicen que no recordemos datos del 2017. Pero, señorías, la única realidad es que jamás se habían activado tantos mecanismos y de forma tan coordinada ante un fenómeno natural, y podemos ver los ejemplos de otros países y de otras zonas cercanas. El Gobierno ha estado, sin lugar a dudas, a la altura.

Y claro que se han cometido errores, como cualquier Gobierno anterior o futuro. Lo que sí es cierto es que han sucedido en escenarios tan excepcionales que no estaban contemplados ni en las peores pesadillas del mejor visionario, pero se toma nota, se corrige y no se vuelven a cometer, porque eso se le pide a un Gobierno, que haga autocrítica y que mejore, para así poder alcanzar la excelencia de la gestión.

Pero sin duda alguna, y con el corazón en la mano, deberán reconocer que está siendo un Gobierno con muchas más luces que sombras y en unas circunstancias más que extraordinarias.

Nosotros realizamos autocrítica, pero la oposición también debería hacerla y pensar que por qué están sentados ahí. Deberían ir más allá y reflexionar por qué sus aportaciones en ocasiones no son aceptadas ni por el Gobierno ni por el Consejo Asesor. ¿Será que pretenden, tal vez, aplicar fórmulas que jamás funcionaron? ¿Será que el interés que persiguen no es el mismo que persigue la ciudadanía canaria? Pero sí hay que reconocerles una cosa: son mucho más proactivos en la oposición que lo que lo fueron en el Gobierno.

Habrá que hacer autocrítica en medidas que presentaban incoherentes. Por ejemplo, mientras el portavoz del PP en sanidad solicitaba endurecer las medidas en los aeropuertos, el portavoz de turismo o el portavoz de economía del mismo partido decía que las medidas del Gobierno en materia sanitaria ahogaban a los empresarios. Tal vez cuando ustedes se pongan de acuerdo y saquen una propuesta común, se la puedan trasladar al Gobierno, yo creo que tendrá muchísimo más rigor.

Y, para concluir, señorías, hemos hecho un análisis de los principales ejes de gestión del Gobierno con unas circunstancias por todos conocidas, unas circunstancias que requieren de capacidad de resistencia y resiliencia, unas circunstancias inéditas para un Gobierno del cambio que no solo da garantías, sino que da seguridad y estabilidad.

Mientras debatíamos el año pasado en el debate de la nacionalidad, probablemente tampoco hubiéramos acertado en que los acontecimientos que estaban por venir, una quinta y una sexta ola arrolladora, un volcán y una guerra nos esperaban. Factores propios y ajenos que hacen que nuestra fragilidad sea evidente y que esté expuesta a los acontecimientos que poco o nada tienen que ver con nosotros de forma directa.

Recuperarse y reinventarse es una obligación para el Gobierno; recuperarse y reinventarse también es una manera de gestionar, innovando cada día para acertar en la respuesta ofrecida a las circunstancias; innovar para estrechar la incertidumbre e innovar para que la ciudadanía siga entendiendo y sintiendo que este Gobierno gestiona el presente y que proyecta el futuro de nuestras islas, que garantiza servicios y prestaciones y que sobre todo está de su lado.

Muchas gracias.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señora Alemán.

Turno para el Grupo Parlamentario Nueva Canarias.

Silencio, señorías.

Señor Campos, tiene la palabra.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ: Muchas gracias, señor presidente. Buenos días, señorías.

Señor presidente del Gobierno, señor vicepresidente, señoras, señores consejeros del Gobierno de Canarias.

Desde Nueva Canarias afrontamos este segundo debate del estado de la nacionalidad canaria partiendo de la base de que estamos en un momento nuevamente excepcional, probablemente el momento más excepcional en la historia de esta tierra. Nunca antes, nunca antes, se dieron tantas circunstancias adversas, tan extraordinarias, en tan poco tiempo.

Nueva Canarias siempre inicia el debate del estado de la nacionalidad haciendo una contextualización del entorno en el que nos movemos: qué ocurre en España, en Europa, en el mundo. Es imposible hacer un diagnóstico real, acertado de lo que pasa en esta tierra si no somos capaces de entender en qué contexto nos estamos moviendo, pero me van a permitir que en esta ocasión ese contexto lo simplifique en dos elementos fundamentales, las circunstancias creo que obligan a ello.

El primero, la guerra de Ucrania, la miserable ocupación e invasión por parte de Rusia a un pueblo soberano como el ucraniano. Y lo voy a hacer desde tres perspectivas, desde tres dimensiones fundamentales.

La primera, por supuesto la humanitaria, como no puede ser de otra forma. Desde Nueva Canarias, nuestro más sincero afecto, nuestra más profunda solidaridad con un pueblo que está siendo masacrado, que ha promovido, finalmente, esa guerra que millones de personas, probablemente como nunca antes, al menos en las últimas décadas en territorio europeo, huyeran de sus hogares convirtiéndose en refugiadas, y afortunadamente en esta ocasión sí, en esta ocasión Europa ha sabido estar a la altura recibiendo a estas personas.

Un reconocimiento y nuestro pesar, nuestro afecto, a las familias de los miles de ucranianos y ucranianas que han fallecido, víctimas civiles, militares, en esta guerra, en esta invasión que el sátrapa de Vladimir Putin ha hecho sobre el territorio de Ucrania.

Una segunda dimensión que nos preocupa en la guerra de Ucrania es la de seguridad. No porque lo diga yo o lo haya planteado alguno de los que aquí estamos, sino porque cada vez son más voces las que hablan incluso de una hipotética tercera guerra mundial, y todos sabemos que si esa tercera guerra se produce será la guerra, será la última. Por tanto, estamos en un momento crucial en la historia de Europa, pero me atrevería a decir de la humanidad. Y depende de todos, de nuestra firmeza, de defender los valores y los principios de la legalidad internacional y el derecho de los pueblos, en el caso de Ucrania, para defender y que eso no termine sucediendo. Esperemos que solo se quede en lo que todo el mundo anuncia, y es el cambio de orden mundial que, sin lugar a dudas, se va a producir tras esta situación.

Y por supuesto una tercera dimensión, que es la económica, que es la que afecta al mundo entero, de manera global, pero que evidentemente tendrá una repercusión en Canarias, a la que me referiré con posterioridad.

El segundo elemento sobre el que quiero hablar hoy es sobre la miserable decisión del Gobierno de España, girando de manera lamentable en su posición de neutralidad histórica, la de este Gobierno y la de los anteriores. Rectifico: la decisión lamentable y miserable de Pedro Sánchez, porque no es la del conjunto del Gobierno de España, porque no es la del conjunto de quienes le han apoyado hasta ahora en el Congreso de los Diputados (palmoteos), porque estoy seguro de que no es la posición ni del Gobierno de España, del pueblo de España ni del pueblo de Canarias. Una posición que se aleja de las históricas, de las que han mantenido siempre los distintos gobiernos de España, sean del color que fueran, una posición que se aleja de la legalidad internacional, de la misma que Nueva Canarias se ha colocado al lado del Gobierno español, de Europa y del mundo para defender esa legalidad internacional en Ucrania, que se aleja de las resoluciones de las Naciones Unidas. Una decisión que significa de manera clara la claudicación ante el chantaje marroquí, permanente hasta conseguir sus objetivos, sobre el intento de la soberanía y la ocupación ilegal de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

Por tanto, ante todo esto, señor presidente, Nueva Canarias fue determinante para conformar este Gobierno, Nueva Canarias ha sido y es determinante en la acción de gobierno, y lo va a seguir siendo, Nueva Canarias es un socio leal, cumple con lo que firma, y lo va a seguir siendo, pero si a algo es leal Nueva Canarias es a sus principios y no vamos a ceder ni un solo milímetro en los principios de defensa del pueblo saharaui, de la legalidad internacional, de las resoluciones de las Naciones Unidas. Y no porque lo diga alguien que creo que se ha significado como nadie, no solo en Canarias, me atrevería a decir en el mundo, como Carmelo Ramírez, que pertenece a mi organización, no porque lo diga yo, que ya dije en el último debate del estado de la nacionalidad que una de las razones por las que yo estoy en política es por defender los derechos del pueblo saharaui, es porque nadie... Y no me voy a convertir en portavoz de nadie que no represente a mi organización política, aunque estoy seguro de que mucho de lo que estoy diciendo lo firma la mayoría del pueblo de Canarias, pero sé que mi organización, que Nueva Canarias, desde el primero al último de nuestros militantes, de la gente que nos sigue, no iba a permitir que nos moviéramos ni un solo milímetro de nuestras posiciones, no iba a permitir que durante el más mínimo segundo abandonáramos al pueblo saharaui. Y eso es lo que hizo hace unos días Pedro Sánchez y espero que no sea lo que haga el Partido Socialista Obrero Español y mucho menos el Partido Socialista Canario, porque no es verdad que es una posición histórica la que ahí está, la posición histórica ha sido siempre la de la resolución de las Naciones Unidas, en la búsqueda, es verdad, de una posición aceptada por las dos partes. Pero eso no hace falta venir a decirlo a esta Cámara, eso lo sabíamos todos. Lo que ocurrió el otro día, claramente, fue un cambio de posición, donde España, al mismo tiempo que defendía la legalidad internacional, de manera hipócrita -hablo de Ucrania-, de manera hipócrita se colocaba al lado, no del invadido, sino del invasor, del sátrapa de Mohamed VI, de quien ha conculcado los derechos humanos de todo un pueblo, incluido el suyo, que lo ha utilizado, y queda claro, a partir de lo que se ha declarado en estos días con la inmigración, sin importarle la vida de su propia gente. Y siempre defenderemos la necesidad de restablecer las relaciones diplomáticas con cualquier lugar, pero no a cualquier precio.

Mire, hoy alguien dice que la realpolitik es política y si no es otra cosa. ¡Cuántos desmanes se han hecho en nombre de la realpolitik! Pues que sepa el conjunto de los canarios y canarias que Nueva Canarias no va a aceptar ni un solo movimiento, y estoy convencido de que el Gobierno de Canarias no va a posicionarse, lo podrá hacer usted y espero que no... Flaco favor le ha hecho hoy su ministro Albares diciendo que avala las tesis de la autonomía en el Sáhara Occidental como posición oficial a partir de este instante del Gobierno de España, porque no permitiremos que esa sea la posición bajo ningún concepto del Gobierno de Canarias, bajo ningún concepto. (Aplausos).

Ojalá también recibiera aplausos de este lado, lo agradecería, porque creo que fue la posición histórica (aplausos y palmoteos), la posición histórica, y me consta que los socialistas canarios, me consta que lo que ha pasado no lo respaldan. Entiendo el posicionamiento que les toca jugar, pero tengo claro que esa no es su posición histórica.

Señorías, aunque parezca que no, estos dos elementos no están descontextualizados en el debate del estado de la nacionalidad canaria en absoluto. No lo están porque si algo tiene el pueblo canario es una profunda solidaridad, si por algo se distingue. Por supuesto por el respeto a la democracia, a los valores fundamentales y también a los pueblos oprimidos. Por tanto, nunca más contextualizado un inicio del debate del estado de la nacionalidad probablemente que cuando todos estos elementos están en quiebra por parte de un sátrapa en el este de Europa y por parte de otro sátrapa a muy pocos kilómetros de nuestra tierra, en Canarias.

Pero, centrándonos, ahora sí, de manera concreta, situándonos en el último año, desde el último debate del estado de la nacionalidad hasta ahora, es difícil plantear que Canarias está mucho mejor de lo que estábamos hace un año, en algunos parámetros sí, en otros obviamente no; lo que no va a hacer Nueva Canarias -y por eso voy a empezar con cuatro elementos fundamentales- es lo que hizo ayer la oposición, que me parece absolutamente irresponsable.

Miren, la pobreza es igual de dura cuando gobernaban ustedes que cuando gobernábamos nosotros, no la vamos a edulcorar, para quien la padece, igual de dura, pero intentar interpretar esos datos de la misma forma, cuando no había ni una sola circunstancia extraordinaria o cuando llegaban 16 millones de turistas a esta tierra a cuando hemos vivido las circunstancias más adversas en la historia de nuestra tierra, y en el día de ayer algún partido casi ni nombró la COVID, salvo para hacer alguna velada crítica a la gestión del Gobierno, lo que me parece increíble, porque analizar el estado de lo que ocurre en nuestra tierra sin abordar que la COVID sigue golpeándonos de manera importante, y sobre todo en el último año, que hemos tenido que padecer olas durísimas y que cuando por fin parecía que recobrábamos la normalidad en el ámbito económico, incluso casi en el sanitario, llegaba una nueva ola, más dura que la anterior, y nos volvía casi a la posición de partida... Nadie conocía cuál era la hoja de ruta y el que diga que lo sabía o es un imbécil o miente, porque no lo sabía absolutamente nadie. Y nos hemos enfrentado a una crisis sin precedentes, pero, fíjense, el COVID, como una de las cuatro grandes crisis de las que voy a hablar -luego lo haré de La Palma, lo haré de la crisis migratoria y también, por supuesto, de Ucrania, como afecta a Canarias-, nosotros no podemos determinar que esas crisis lleguen o no, lo que sí podemos determinar es cómo las afrontamos, y las afrontamos de una manera absolutamente en las antípodas a como lo hicieron otros aquí y allá, a dos mil kilómetros, en anteriores crisis. Sé que son crisis distintas, pero les garantizo que en absoluto esta ha sido más fácil y la suma de todas estas, ni de lejos más fácil que la que se vivió en otros momentos.

Esa lucha contra el COVID, que afortunadamente parece que empieza a encaminarse, aunque sigue estando ahí, no debemos olvidarlo, ha sido posible gracias, primero, a la ejemplaridad de nuestra ciudadanía, a la respuesta ejemplar, sin duda también, de los profesionales en el ámbito sanitario, pero también porque ha habido un Gobierno que se ha comprometido, que ha sabido reaccionar, que ha destinado cantidades ingentes de recursos, muchos llegados de fuera, pero peleados, combatidos, exigidos hasta que por fin llegaron, y que permitió contratar a más de cuatro mil sanitarios, permitió que nuestras cifras de vacunación fueran un éxito y durante muchísimo tiempo tuviéramos unos niveles afortunadamente mejores que el resto del Estado español. Eso en absoluto es casualidad, es fruto también de la determinación de un Gobierno a responder a una crisis sin precedentes.

Una crisis como la que ha sufrido la isla de La Palma. Sin duda alguna, el volcán, el primer volcán después de cincuenta años en el conjunto del Estado español, lamentablemente, el anterior también en la isla de La Palma, pero probablemente el volcán, en términos de daños materiales, más importante en la historia de esta tierra. Tendríamos que remontarnos al Timanfaya y, como digo, en términos materiales, ni siquiera tuvo ese alcance. Pero hemos sabido también reaccionar y, fíjense, de la misma forma que hice una crítica, que en el día de ayer no se hizo alusión a muchas de estas cuestiones, para intentar contextualizar en qué situación nos encontramos, en aquellos parámetros que, efectivamente, no son buenos y no vamos a quedarnos en la autocomplacencia, sí quiero reconocer una cuestión: tanto con el COVID como con la isla de La Palma dimos un ejemplo de unidad, todos los partidos, todas las instituciones, el conjunto de la sociedad canaria, y creo que es de una importancia esencial y quiero destacarlo en este debate del estado de la nacionalidad.

En La Palma quiero reconocer el ejercicio absolutamente, yo me atrevería casi a decir modélico, ejemplar, que tuvimos en la emergencia de la catástrofe de La Palma, y un reconocimiento a todos los que participaron, pero de manera muy especial al pueblo palmero, al conjunto del pueblo canario y a nuestras propias instituciones, que a veces son las que quedan relegadas, y hablo de nuestra policía canaria, nuestras policías locales, nuestros cuerpos de emergencia en todos los ámbitos, de bomberos urbanos y forestales. Pero queda mucha tarea por hacer. Se ha destinado multitud de recursos, pero tenemos que exigirnos más recursos, más rápidos, reconociendo que nunca antes, ante una catástrofe de este tipo, se destinaron ni tantos recursos ni mucho menos de manera tan rápida. Y tenemos que exigirnos que esa tarea de reconstrucción por supuesto sea participada desde el primer momento por la ciudadanía de La Palma, como nos instaban las plataformas de afectados, las asociaciones de vecinos estos días en Canarias.

La tercera gran crisis es la de migraciones, durísima. Nunca antes Canarias tuvo también que afrontar una crisis de esta dimensión, combinada con el COVID, combinada con todo lo que nos ha ido pasando. En ocasiones, en solitario. Afortunadamente, el Gobierno de España en los últimos meses ha tenido un cambio de actitud, las derivaciones empiezan a producirse. Pero desde Nueva Canarias planteamos cuatro elementos concretos relacionados con el ámbito migratorio.

El primero, tener una política propia en materia migratoria. Somos conscientes de la complejidad de este fenómeno. Somos conscientes de que la migración siempre existió y siempre va a existir y somos conscientes de que geográficamente estamos situados a cien kilómetros de un continente empobrecido, con 1200 millones de personas, que se doblarán en pocos años. Tenemos que tomar consciencia como pueblo de que no podemos estar a la expectativa ni de lo que pueda llegar a suceder o no ni de lo que decidan otros; una política propia en materia migratoria alcanzando la excelencia en nuestras competencias, exigiendo a quienes tienen otras que las cumplan y las ejerzan y teniendo posición en todos los ámbitos para poder opinar e influir en aquellos lugares donde se habla del tema migratorio y que pueda afectar a Canarias. Por eso es fundamental, y vamos a plantear en este debate, que el Gobierno de España, de una vez por todas, cumpla con nuestro Estatuto de Autonomía y el artículo 144.3 y nos dé voz en todos los espacios donde se trata la migración que pueda afectar a Canarias. Por eso creemos que es necesario tratar de influir en todos los ámbitos posibles para que la respuesta de Europa en el Pacto de Asilo y Migraciones que se está discutiendo sea más próxima a lo que hemos visto ahora para Ucrania que la respuesta que ha dado a través de la... (ininteligible) de sus fronteras, a través de la imposibilidad de, gente que intenta huir, establecer vías legales y seguras.

Y también, por supuesto, vamos a promover... -y me alegro porque en el día de ayer el presidente se hizo eco de una iniciativa que planteamos nosotros, pero que ha pasado a ser parte de una iniciativa, estoy convencido y así me lo han trasladado todos los portavoces de esta Cámara-, sacar una propia iniciativa legislativa, como nos ampara nuestro Estatuto de Autonomía, para poder llevarla de manera directa a las Cortes, exigiendo la corresponsabilidad, no la solidaridad, la corresponsabilidad desde la obligación, para atender a los menores migrantes que llegan hoy a esta tierra, en otros momentos a Ceuta y Melilla o a Andalucía; en definitiva, demostrar, como hemos demostrado los canarios, que el conjunto de España está con aquel territorio que en un momento determinado lo necesita y, de manera especial, cuando hablamos de menores, cuando hablamos de niños y niñas.

Por tanto, con todo este contexto y si le añadimos al final lo que sucede en Ucrania, que afecta de manera notable a nivel mundial, que está tensionando todos los mercados, desde los más fuertes en Estados Unidos, Europa, por supuesto que nos afecta a Canarias, por supuesto que nos afecta a nosotros de manera notable, porque dependemos además, como nadie, de la conectividad y el combustible, si ya estaba tensionado, la energía estaba tensionada, esta crisis, esta guerra, esta miserable invasión todavía profundiza más en ese elemento.

Por tanto, en cada uno de estos cuatro elementos, en los tres primeros hemos tenido una unidad de acción hasta ahora -hablo del COVID, de La Palma y de la crisis migratoria-, con independencia de que podamos tener posiciones distintas en algunos aspectos, recetas diferentes en ocasiones para abordarlo, pero en lo esencial, en lo fundamental ha habido una unidad extraordinaria, y apelo a esa unidad ante uno de los retos -y esperemos que se quede solo, como decía antes, en un nuevo orden mundial- como puede ser la guerra de Ucrania y el impacto que puede tener a nivel global.

Señores, si nosotros no hacemos este análisis sobre esos cuatro grandes elementos, que han afectado al mundo entero en muchos casos, pero alguno de manera exclusiva a Canarias, y además en simultáneo para analizar la realidad de lo que nos sucede en esta tierra, cualquier análisis está viciado, cualquier análisis es sesgado. Por eso, cuando hablamos de derechos sociales, nosotros no vamos a ocultar, este Gobierno no oculta y su consejera no ha ocultado los datos y ha reconocido el presidente en el día de ayer los datos de la tasa Arope o de la tasa de Foessa. Por cierto, algunos aquí, hace algunos años, cuando se hablaba de los datos de pobreza, los cuestionaban. Hoy, hoy, en Madrid, por ejemplo, cuando se habla de pobreza en esa comunidad, referente para muchos de muchas cuestiones, niegan que existan pobres en esa tierra. Nosotros los reconocemos, pero actuamos para intentar mitigar.

Como decía antes, a veces no podemos influir de manera clara en aquello que tenemos delante, las circunstancias que nos colocan ante una situación de pobreza como la que tenemos. Aunque esto no es solo una situación de pobreza derivada del momento actual, la agrava, pero Canarias tiene un problema estructural que viene de muy antiguo, pero que han tenido mucha responsabilidad también quienes han estado durante muchos años. La pobreza al final no deja de ser el reflejo de unos niveles educativos, de la falta de acceso, en términos asequibles, a una vivienda, a un empleo cualificado...; en definitiva, de muchísimos aspectos que como sociedad canaria tenemos que abordar para combatirla de manera clara.

Pero además hemos dado un paso importantísimo, por ejemplo, en la prestación canaria de inserción, nuestra actual herramienta para combatir la pobreza, llegando a cifras que nunca antes alcanzamos, en perceptores y en cuantía, que sumadas al ingreso mínimo vital ya son 30 000 familias que estamos sosteniendo. Hubo momentos en esta tierra, en circunstancias nada excepcionales, donde los niveles de pobreza eran similares y apenas se llegaba a 5, 7, 8000 personas.

Pero no estamos satisfechos, mientras exista una sola familia con problemas severos de pobreza en esta tierra, no podemos estar satisfechos, y estoy convencido de que ninguno de los que aquí estamos. Y por eso entra ahora en el Parlamento la renta de ciudadanía, nuestra próxima herramienta fundamental para combatir la pobreza en Canarias. Nosotros la defendimos en la legislatura pasada, conjuntamente con Podemos, incluso presentando una proposición de ley que fue rechazada. Igual que fue rechazado hace dos legislaturas cuando presentábamos una propuesta, un plan de lucha contra la pobreza, que luego tuvieron, por la presión mediática, por la presión social, que acceder y plantear una bastante descafeinada, por cierto. Pero la renta de ciudadanía tiene que convertirse en la verdadera herramienta para luchar contra la pobreza.

En el ámbito de la educación, yo quiero centrarme..., porque siempre hemos dicho que no hay nada más estratégico para cualquier territorio, por supuesto tampoco para cualquier Gobierno, que la educación de su gente, de su pueblo, y sobre todo en los pueblos que queremos tener una identidad propia, que queremos marcar nuestro propio destino, que queremos avanzar desde el autogobierno hacia un proyecto de país canario mucho más potente del que hoy en día tenemos. Y hay tres elementos que yo quiero resaltar en el día de hoy.

Por primera vez, desde mucho tiempo, hay un Gobierno que ha apostado por una etapa educativa, la de 0 a 3 años. Insuficiente aún, que tenemos que exigirnos más, pero que por fin toma partido, apuesta de manera decidida por una etapa educativa que en su momento quien único la defendía en esta Cámara era mi compañera Carmen Hernández, hace dos legislaturas, que cuando hablaba de esa educación infantil de 0 a 3 años, de aquellas escuelas infantiles, le decían que qué hacía defendiendo lo de las guarderías en el Parlamento de Canarias. Hoy está en la agenda de todos y creo que de eso debemos enorgullecernos.

Pero también la Formación Profesional, como el elemento más dinámico, más efectivo realmente para adaptar y cualificar a nuestros profesionales, a nuestros jóvenes, al conjunto de nuestra población para los retos que nuestras empresas nos demandan y sobre todo para el proyecto de futuro de nuestro país canario que seamos capaces de diseñar.

Y también, por supuesto, un elemento que creo y desde Nueva Canarias vamos a defender que a partir de ahora sea nuclear en las políticas educativas, porque es imposible concebir un proyecto de país canario potente sin nuestras universidades públicas canarias. Por eso en estos días nos reconocían el esfuerzo que Nueva Canarias hizo en los presupuestos generales del Estado para conseguir captar 10 millones de euros, 5 millones a cada universidad.

Canarias, por supuesto, ha hecho un esfuerzo importante también en sus presupuestos históricamente, pero no es suficiente, debemos en los próximos años reforzar en esa área, porque es absolutamente esencial para el futuro de esta tierra.

El sector primario, un sector que para Nueva Canarias también es profundamente sensible, siempre lo ha sido. Muchísimas personas que podíamos identificar, me van a permitir que lo haga en esta ocasión en Fermín Delgado, que independientemente de la responsabilidad que tenga esa siempre es una de sus prioridades. Un sector primario que ahora más que nunca necesita del apoyo de todos. ¡Ahora más que nunca!, y además de manera urgente. Con medidas, ayudas directas, imprescindibles, necesarias para la gente de nuestro campo, de nuestra mar, para nuestros ganaderos, que están profundamente golpeados y que, si no estamos a su lado, ahora y ya, muchos de ellos no van a poder resistir.

Y son claves para un elemento que para Nueva Canarias es esencial, como es la soberanía alimentaria. Y digo para Nueva Canarias porque también, hace pocos años, cuando hablábamos de soberanía alimentaria, la burla, el cachondeo, de muchos en el ámbito de la política, incluso de los medios de comunicación, eran manifiestos. Hoy está en la agenda de todo el mundo y esta crisis, la del posible desabastecimiento, en muchos ámbitos está cobrando más fuerza que nunca la necesidad de esa soberanía alimentaria y nuestro sector primario, los hombres y mujeres que están en ese ámbito, absolutamente imprescindible.

Por supuesto, el cambio climático, de la Consejería de Transición Energética. Mire, a pesar de todo lo que yo he dicho que nos ha sucedido de manera coyuntural, probablemente no hay ni un solo reto más importante para el ser humano en las próximas décadas que afrontar con éxito la lucha contra el cambio climático. Ahí sí que nos va la vida como especie y, por tanto, debemos determinar claramente, y esta tierra más que nadie porque puede verse afectada más que nadie en nuestra capacidad de acción.

Hablar de cambio climático, y aquí quiero hacer una mención muy especial también a alguien de mi organización. Primero, a una institución, la Mancomunidad del Sureste, que hace treinta años, cuando defendíamos hablar de manera clara, con fuerza, de energías renovables, cuando defendíamos hablar de sostenibilidad, nos tachaban de utópicos y, de manera muy especial, centrarlo en una figura como es Antonio Morales. Hablar de cambio y lucha contra el cambio climático, transición energética es hablar de ahorro energético, es hablar de penetración de renovables, es hablar de autoconsumo, de la apuesta por las comunidades energéticas, es hablar de gestionar bien nuestros residuos y, a partir de ahí, además impulsar la economía circular, es la electrificación de nuestro modelo de movilidad, es hablar de biodiversidad y de espacios naturales, de depuración de aguas, es hablar de reforestación; es hablar de tantos y tantos retos en los que tenemos una gran oportunidad histórica, además, para ser un referente para mucha gente.

También, y de manera mucho más rápida, me van a permitir, porque he querido apostar además por estas cuatro áreas, porque entiendo que son absolutamente estratégicas. Sé que el turismo lo es, esencial, es un sector a veces incluso demonizado, y quiero poner en valor el papel que ha jugado el turismo en el avance y en el desarrollo de esta tierra. Aunque hemos sido críticos sobre el modelo por el que se ha apostado en ocasiones, más centrado en captar cada vez más gente que llegue aquí sin preocuparnos tanto en ocasiones de cualificar el destino primero para que los que lleguen sean capaces de generar no solo más recursos, sino que esos recursos económicos se queden en nuestra tierra y que además sean capaces de generar un empleo de calidad, sean capaces de generar riqueza. Debemos ser un modelo en esa transición también en el ámbito del turismo para, en un momento en que la gente se cuestiona coger aviones de larga distancia por la huella de carbono que generan, seamos capaces y tengan la conciencia de que cuando llegan a Canarias compensan esa huella de carbono en un territorio que apueste, como decía antes, por una clara lucha contra el cambio climático.

Importantísima también el área de economía. Me van a permitir además que la englobe, no solo de empleo, sino también de comercio, de industria. Porque es un área que ha jugado un papel esencial en este momento tan difícil. En el ámbito del empleo, porque de la misma forma que algunos sacan y blanden algunos datos sin contextualizar en materia de pobreza, que reconocemos, luego cuestionan datos absolutamente espectaculares. En el peor momento posible, ante las circunstancias más adversas, tenemos mejores tasas de desempleo y mejores tasas de ocupación en esta tierra incluso que antes de la pandemia, incluso que en etapas de importante bonanza económica. Eso no es solo fruto, obviamente, de este Gobierno, del conjunto de la sociedad canaria, empresarios, de los propios trabajadores de esta tierra que han hecho sacrificios importantes renunciando a una parte de su salario a través de los ERTE, pero juntos avanzando. Pero claro que tiene mucho que ver este Gobierno, claro que tiene que ver la captación de los recursos que se ha hecho y la gestión importante de los 1144 millones de euros, junto con los recursos propios, que han conformado un paquete sin precedentes y que en colaboración con las cámaras de comercio hemos sido capaces de hacerlo llegar. Y lo hemos hecho con más cantidades que nunca y antes que nunca y creo que eso es algo que tenemos que reconocer, porque hemos sido capaces de estar a la altura.

Por supuesto, para la cultura una mención especial, porque ha sido uno de los sectores más afectados y que le está costando más volver a la normalidad y porque creo además que desde este Gobierno se está haciendo un trabajo importantísimo en un elemento que es fundamental también, como decía antes, en la configuración de ese futuro para nuestra tierra. Poner en valor, valorar, las enormes potencialidades que tenemos como pueblo, que muchas veces en uno de los mecanismos que mejor puede expresarse es precisamente a través de la cultura y de la gente que a través de ella se mueve; y porque estamos convencidos de que una parte importante del futuro en el ámbito económico también de esta tierra pasa por apostar por las industrias culturales.

Y quiero cerrar este ámbito sectorial antes de centrarme, por último, en uno de ellos, en el ámbito de vivienda. Hemos logrado un elemento importante: por primera vez, después de muchísimos años sin política de vivienda en nuestra tierra, tenemos un Plan Canario de Vivienda. Pero ahora, una vez logrado eso, tenemos que ir al siguiente reto. Tenemos plan, tenemos recursos, necesitamos viviendas. La gente necesita las viviendas y las necesita cuanto antes. Los proyectos de vida de mucha gente, sobre todo de gente que lo perdió todo en otras crisis, que no vio oportunidades en otras etapas, porque no había planes...; nos exige ahora, de manera inmediata, ser capaces de impulsar todos esos proyectos para que miles de viviendas en los próximos años puedan llegar a todas las personas que carecen de ese elemento fundamental.

Y permítanme que cierre por un área, como es obvio, en la que tenemos una especial incidencia, como es la de hacienda, y que dirige nuestro compañero Román Rodríguez. Un área que en este momento, hace poco, aprobaba su tercer presupuesto, cada año más expansivo que el anterior. Este último con 9098 millones de euros, 624 millones de euros más que en otros tiempos, que en los anteriores. Donde ha sido fundamental para que esto suceda, en un momento profundamente complejo, la gestión que se ha hecho para la captación de recursos y donde también quiero resaltar no solo la captación de recursos, plasmada luego en esos presupuestos, sino el altísimo nivel de ejecución de los mismos, hasta un 123 % en el caso del presupuesto del 2021 sobre el presupuesto inicial. Empezábamos con unos 8400 millones y hemos gastado 10 400 millones de euros en circunstancias profundamente adversas, en ocasiones con una parte importante de los funcionarios de nuestra comunidad autónoma trabajando desde sus casas, donde hemos hecho un esfuerzo extraordinario. Todo ello sin subir impuestos, sin subir la deuda.

Es más, una Consejería de Hacienda que ha hecho un trabajo excepcional en la reestructuración de esa deuda, ahorrando a los canarios y canarias 80 millones de euros en los próximos años. Además, teniendo uno de los periodos medios de pago a nuestros proveedores de toda España, en este momento catorce días, que ha sido la constante durante estos años, salvo un par de meses, de manera muy coyuntural, al cierre de ejercicio, pero nuevamente estamos en una de las cifras en las que somos un referente a nivel español, y siempre, siempre es importante pagar pronto a la gente que depende de esos cobros para salir adelante, pero en épocas de crisis, de dificultad, más que nunca, y a esa altura está este Gobierno.

También el papel en la recuperación del aval canario, de la sociedad de avales de Canarias, como un elemento profundamente necesario para el apoyo a nuestros autónomos, a nuestras pymes, siempre, pero también, en momentos de dificultad, más que nunca.

Hemos sido capaces de captar también desde el área de hacienda, pero también en esa área que llevamos, de asuntos europeos, en las relaciones con Europa, la captación de recursos importantes. En este momento ya hay programados 1588 millones de euros de fondos europeos, 629 del React-EU, 959 del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, y vamos a seguir captando recursos necesarios para avanzar en nuestra tierra. Presupuestos, recursos, al servicio de la ciudadanía, para mantener y para reforzar los servicios públicos en un momento en que lo necesitábamos y para apoyar al conjunto de los sectores productivos.

Terminado este repaso por los distintos sectores, por las distintas áreas de Gobierno, reconociendo los problemas que tenemos, pero afrontando también y reconociendo dónde hemos acertado y hacia dónde debemos dirigir nuestra acción de gobierno, permítanme también que me centre ahora en la agenda canaria. Una agenda canaria que es compartida en muchos aspectos, yo creo que en la mayoría, por el conjunto de esta Cámara, pero que desde Nueva Canarias fuimos capaces de protagonizar, de plasmar en un documento decisivo, en un momento determinado, con alguien que hoy cuestionamos, pero que en su momento fue necesario para intentar defender los derechos de esta tierra.

Y a pesar de que se plasmó en un documento esa agenda canaria, por parte nuestra y por parte de este Parlamento, de forma unida...Y ahí quiero también reconocerle, señor presidente, en el día de ayer se le cuestionaba su sumisión permanente y continua, decían algunos... Ya hubiera querido, y ahora le hablo como alguien que no pertenece al Partido Socialista, pero sí como alguien que vive en una tierra que tiene a un presidente del Gobierno que en esas ocasiones sí supo enfrentarse incluso a los miembros de su partido y al Gobierno de España, del mismo color político, ya me hubiera gustado a mí en otras ocasiones que otros hicieran exactamente lo mismo, hablo de Repsol, hablo de impuestos al sol, hablo de muchísimas cuestiones (aplausos), como cuando nos pedían el pasaporte, nuestro carné de identidad para salir de nuestra tierra. Nadie levantó la voz de ese mismo partido político. Por tanto, hay que reconocer ese elemento. Pero desde Nueva Canarias, cuando hemos planteado esta agenda canaria, lo hacíamos desde la necesidad del cumplimiento y el respeto a nuestro fuero y me gustaría también personificar en dos personas de nuestra organización, me lo van a permitir, obviamente. Hablo de Esther González, a la que mando un especial recuerdo, por su dedicación en este Parlamento, por su trabajo cualificado en la defensa de nuestro REF, pero también a nuestro compañero Pedro Quevedo, en Madrid.

Programas necesarios, fundamentales, trabajo para reforzar y blindar nuestro Régimen Económico y Fiscal. Hemos tenido que defender, como siempre, porque da igual el color político que haya en Madrid en ocasiones, Canarias siempre tiene que estar alerta y defender sus derechos, sus fueros. Y hablo del diferencial fiscal de las producciones audiovisuales. Conseguir ahora, en los próximos meses, retos fundamentales: mantener el comercio triangular de nuestra Zona Especial Canaria, o la ampliación de la RIC para el año 2022, o la devolución de los 5 millones de euros de la quiebra de Thomas Cook. Van a formar parte de esa agenda canaria, estoy convencido de que para todos, pero por supuesto para Nueva Canarias, y así lo vamos a exigir.

Hemos trabajado sin descanso para por fin corregir otro desprecio absoluto a nuestra tierra en su día, como fue el abandono, el incumplimiento de un convenio firmado con Canarias por parte del Gobierno del Partido Popular, como fue el Convenio de Carreteras. Ya hemos encauzado 300 millones de euros y en el día de ayer el presidente del Gobierno hablaba también de que en próximas fechas se van a encauzar cuantías importantes, pero no pararemos hasta que los 1000 millones de euros que nos adeuda el Gobierno de España, a través de las distintas fórmulas que se arbitren, finalmente estén del lado de a quien le corresponde, que es de este pueblo.

Y por supuesto también en esa agenda canaria vamos a insistir, porque lo plasmábamos así, porque creemos en eso y porque desde Nueva Canarias al menos lo vamos a defender, en los proyectos de los trenes de Gran Canaria y de la isla de Tenerife.

Señorías, probablemente no me dé tiempo, en el poco espacio que me queda, para la parte con la que quiero terminar mi discurso; si no, tendré ocasión de hacerlo en la parte de réplica.

Pero quiero terminar, después de haber hablado de Canarias, de en qué circunstancias nos encontramos, de reconocer que algunos de los datos nos son buenos, que no los aceptamos como Gobierno, por supuesto, pero estoy seguro de que como sociedad no podemos aceptarlo, quiero terminar con un mensaje de ilusión, de esperanza. Hemos hablado de nuestras debilidades, pero quiero hablar también de nuestras potencialidades, porque las tenemos, porque queremos apostar por un proyecto de futuro, por un proyecto de país canario potente para nuestra gente. Y lo vamos a hacer, afortunadamente, desde la convicción primero de que podemos, de un elemento que ha sido transversal en mi discurso, reconociendo algo que nos diferencia de otros territorios, como ha sido la unidad de acción cuando lo necesitábamos. Eso tiene un valor incalculable. Lo voy a plantear desde el reconocimiento claro de lo que para nosotros es un elemento esencial, el avanzar en el autogobierno.

El autogobierno es la expresión finalmente más explícita, y hemos tenido ejemplos claros, de que cuando más capacidad tenemos mejor le va a esta tierra. Nos pasó, históricamente, cuando cogimos las competencias de sanidad o de educación y nos ha pasado a la hora de afrontar estas crisis que hemos tenido que afrontar, en ocasiones en solitario, pero incluso, no siendo así, gestionando los recursos que nos llegaban desde fuera.

Un proyecto de futuro para Canarias, como digo, desde el autogobierno, pero reconociendo también nuestras instituciones. Para ese proyecto de país de futuro del que hablo desde Nueva Canarias tengo la certeza, la tranquilidad de que no lo hacemos partiendo desde cero, desde la nada o desde una Canarias absolutamente desarticulada en todos los ámbitos. Tenemos instituciones muy potentes, la primera esta, el Parlamento de Canarias, que nos da la posibilidad de legislar, de planificar, la posibilidad también de exigir a otras instancias, de defender nuestros recursos, nuestro fuero, nuestra identidad; pero también una institución como el Gobierno de Canarias, y no hablo de este Gobierno de Canarias, de los gobiernos de Canarias, como un elemento de expresión del autogobierno necesario, imprescindible para desarrollar todas nuestras políticas. Hablo de esa figura singular que no tiene nadie, muy potente, nuestros cabildos insulares, y también, por supuesto, el papel de los ochenta y ocho ayuntamientos de Canarias. Pero hablo también de instituciones, porque son instituciones muy potentes, y quiero reconocer, entre otras, al Servicio Canario de la Salud. Imposible entender cómo hemos afrontado esta crisis sin esa institución propia, esa institución canaria. Un elemento que forma parte de los marcadores de canariedad fundamentales, nuestro Servicio Canario de la Salud. Pero también nuestra Policía Canaria, como decía antes, o nuestra Agencia Tributaria Canaria, la necesidad de una fiscalidad propia para hacer frente a los grandes retos que esta tierra tiene... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede tiempo adicional). También instituciones como el Instituto Tecnológico de Canarias. Y, por supuesto, de manera muy especial quiero tener un reconocimiento a la Radiotelevisión Canaria, muy cuestionada en su día, creo que hoy ya nadie lo hace, que ha jugado un papel absolutamente cohesionador de nuestra tierra, que es uno de los marcadores claros de canariedad para construir Canarias, para unir a los canarios, y que ha sido capaz de trasladarnos lo que sucedía con el COVID o en la isla de La Palma mejor que nadie, alejados del sensacionalismo, con el rigor como un elemento sustancial, y además en nuestra propia forma de expresarnos.

Y aquí quiero, por tanto, enlazarlo con otra gran institución que ponemos en valor, hablo de nuestra Academia Canaria de la Lengua. Permítanme también en este momento un especial recuerdo a la familia de Juan Manuel Pérez Vigaray, una de las personas que fallecía en estos días que más ha hecho en esta tierra por defender el español que se habla en Canarias. Uno de los elementos más importantes, más determinantes de nuestra forma de ser, no de nuestra forma de hablar... La forma de hablar es una forma clara de nuestra identidad propia, del ser canario y, por tanto, tenemos que defenderla frente a cualquier intento de godo..., bueno, ya me entienden.

La Academia Canaria de la Lengua, pero también quiero tener un claro reconocimiento a Involcan, una institución también clave y que dentro de poco pasará a ser una institución canaria en su conjunto, cuando durante este tiempo han sido algunos cabildos quienes han estado al frente.

Pero quiero reconocer también el papel de nuestras empresas y me van a permitir que hable de dos test en concreto. Miren, siempre hemos puesto de ejemplo al País Vasco, como un referente. Ya quisiera el País Vasco tener compañías aéreas o marítimas que conecten a sus tierras, y de bandera canaria. No serán públicas, pero sus centros de decisión están aquí. Han servido para conectarnos a los canarios unos con otros, pero también ahora con el resto del mundo, con África, con Europa, y creo que debemos de sentirnos orgullosos de Binter o de Armas o de Fred.Olsen. Por tanto, no partimos de cero.

Y también, desde la conciencia de que no partimos de cero, porque cuando hablamos de instituciones, instituciones para nosotros es hablar de Los Sabandeños o es hablar de Los Gofiones. Quizás pocas instituciones hicieron tanto por la canariedad, por lo que representamos como pueblo como estas que acabo de nombrar. Y personas que en su momento han jugado un papel esencial y que creo que nos han llenado siempre de orgullo, hablo de Benito Pérez Galdós o de Alfredo Kraus, hablo de Óscar Domínguez, hablo de Viera y Clavijo, pero me gustaría que cuando hablamos de aquellos que sembraron un camino, me gustaría también tener un recuerdo muy especial para quienes... (nuevo corte automático del sonido) también avanzan y son una bandera y nos muestran el futuro de aquello que ha sido nuestra historia, de Benito Cabrera, de Víctor Batista, de Domingo Rodríguez, El Colorado, y de Yeray Rodríguez. Pero también de aquellos que nos abren al exterior de una forma distinta, que muchos de aquí quizás no sabemos entender; yo quiero reconocer a personalidades como Cruz Cafuné o Quevedo o Sara Socas o Real el Canario, pero también a Andrea Abreu o Alexis Ravelo o Armando Ravelo, que desde una mirada autocentrada trasladan lo que somos en esta tierra y también lo que aspiramos a ser en esta tierra.

Señores, desde el orgullo, desde la canariedad, desde sentirnos muy orgullosos de las potencialidades que tenemos, de creer que hay posibilidades de una Canarias mucho mejor aún de la que tenemos y de que tenemos mimbres para poder alcanzarla, lo hemos demostrado en los peores momentos, y no hablo solo de estos, hemos pasado momentos muy duros en esta tierra...

El señor PRESIDENTE: Tiene que concluir, señor Campos.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ: ... desde la absoluta convicción de que es posible, me gustaría, de verdad, un proyecto de país canario de futuro que sea un espejo, primero, para sentirnos orgullosos nosotros de nuestra tierra, pero también que sea un espejo donde se mire el resto de comunidades, de países; que seamos un territorio de paz para el resto, como dice nuestro Estatuto de Autonomía; que seamos freno a las políticas del odio y que la sociedad canaria no permita penetrar a las políticas del odio de la extrema derecha; y, por supuesto, un espejo para el resto de territorios y, me permiten, de manera especial, para el pueblo saharaui.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Campos.

Turno para el Grupo Parlamentario Sí Podemos Canarias.

Señorías, silencio, por favor. Silencio, señorías.

El señor Marrero tiene la palabra.

El señor MARRERO MORALES: Buenos días, señorías, buenos días, señor presidente, buenos días a todas aquellas personas que siguen este debate del estado de la nacionalidad desde sus casas.

En estos dos primeros días del debate de la nacionalidad canaria hemos asistido a ver las dos caras de una misma moneda: la cara positiva, objetiva, esperanzadora, que en líneas generales representó ayer su discurso, señor presidente, y su respuesta a los grupos de la oposición; y la cruz, la realidad catastrófica, la de los agoreros del no a todo lo que plantea el Gobierno, del cuanto peor mejor para ver si así recuperan pronto el poder perdido.

Realmente, al señor Domínguez, como él dice, le gusta decir, mirándole a los ojos, le tendría que asegurar que anoche, con esa petición suya de que salgamos del Gobierno y que en ese futuro pacto estemos excluidos, le aseguro que esas afirmaciones no me quitaron el sueño. Es todo un honor para nosotros esa consideración de la derecha canaria y española, que al mismo tiempo no tiene ningún problema en gobernar con la ultraderecha fascista en muchos lugares del Estado. Esa ultraderecha que es un peligro para los valores humanos, para los valores democráticos y para la convivencia. Es evidente que para usted somos la única oposición real a sus propuestas políticas, de lo cual nos sentimos muy honrados.

Hoy por la mañana, a pesar de los augurios de ayer tarde, ha vuelto a salir el sol, porque, como ha dicho Pepe Mujica, al que usted citaba ayer también, "la vida siempre es porvenir y todos los días amanece", y les aseguro que mucha más gente que nunca en Canarias se dirigía a sus puestos de trabajo, nuestros chicos y chicas iban a las escuelas manteniendo la presencialidad, la población está vacunada, hay más gente cobrando un mejor salario o con un contrato indefinido nuevo y mucha más gente que ha accedido al ingreso mínimo vital, a la PCI, y, sin embargo, seguimos teniendo unos índices inasumibles de pobreza. Eso sí que me quita el sueño, eso sí que nos quita el sueño a este Gobierno. (Palmoteos).

Pasada la negrura de ayer, hoy nos volvemos a dar un respiro y a recuperar la esperanza: a hablar de unidad, responsabilidad y firmeza en la toma de decisiones; revalidar la apuesta por los servicios públicos y, de manera especial, enfrentarnos con la pobreza. Vamos a hablar de datos, porque consideramos que hablar de datos mata los relatos falseados por algunos, y lo vamos a hacer con objetividad, sin trampas, hablando de dedicación presupuestaria, eficiencia, alta ejecución y rapidez. Vamos a hablar de mejorar el empleo haciéndolo decente y de calidad y seguir afrontando las diversas crisis con garantías y trasladando esperanza y confianza al conjunto de la ciudadanía, no el pesimismo que a ustedes los invade y que quieren hacer valer ante la ciudadanía.

Nos queda mucho por hacer, pero desde la inteligencia colectiva, la participación de los distintos sectores, el diálogo, la cogobernanza avanzaremos y daremos cumplimiento al pacto de las flores y seguiremos afrontando con solvencia estas crisis.

Nos reunimos hoy para rendir cuentas ante la sociedad canaria de lo realizado durante este último año, desde el Gobierno de Canarias y los grupos parlamentarios que lo apoyamos, de lo realizado con mayor o menor acierto y de lo mucho que aún resta por realizar.

Nunca un Gobierno en la reciente historia de Canarias había tenido que afrontar cinco crisis simultáneas y superpuestas que han marcado el devenir de nuestra sociedad desde el anterior debate: la crisis sanitaria, económica y social en la que estamos inmersos, la crisis migratoria, que ya es un fenómeno estructural en esta frontera sur de la Unión Europea, la crisis provocada por la erupción del volcán de La Palma, la crisis de paz y seguridad ocasionada por la guerra de Ucrania y la crisis climática, que afecta sobremanera a un territorio insular como el nuestro, y al final, como estrambote, la reciente posición sobre el Sáhara del presidente Sánchez, de la que hablaré a continuación.

El Gobierno de Canarias tiene unos compromisos claros con una hoja de ruta basada en la participación, en la cogobernanza con los distintos sectores y las distintas administraciones, y buena prueba de ello es la unidad concitada en torno al Plan Reactiva Canarias, al Plan de Vivienda de Canarias o al proceso de reconstrucción de la isla de La Palma tras la crisis volcánica. Por tanto, desde Sí Podemos Canarias consideramos que es un Gobierno que está bien orientado, siguiendo la hoja de ruta acordada, y bien arropado por el conjunto de los sectores sociales, que participan de manera activa en los distintos foros de diálogo y acuerdos. En tiempos de incertidumbre como los que estamos viviendo no hay mayor certeza para la sociedad que un Gobierno que apueste por las políticas sociales y por los servicios públicos.

De estas cinco crisis solo la climática figuraba en la agenda del Gobierno del pacto de las flores. Los cuatro grupos parlamentarios que apoyamos a este Gobierno desde posiciones dispares hemos sido capaces de encontrar un programa común de gobierno que contara con la mayoría de los votos y de apoyos parlamentarios como alternativa a más de un cuarto de siglo de gobiernos presididos por Coalición Canaria. Cinco crisis a las que el Gobierno de Canarias se está enfrentando con el apoyo del Gobierno de Estado y de la Unión Europea. De tal calado han sido y están siendo estas crisis que asuntos como el brexit o la huida de Juan Carlos de Borbón a su exilio dorado de Arabia Saudí, o los últimos episodios de tronos, trufados por denuncias de corrupción interna, ocurridos en el Partido Popular, todo ello ha pasado a un segundo plano en el foco del interés mediático.

La crisis sanitaria, que ha devenido en crisis económica y social, se ha afrontado de manera coordinada desde la Unión Europea, el Gobierno de coalición estatal y el Gobierno de Canarias. Atrás ha quedado una larga estela de muertes y de mucho sufrimiento. Pero, como sociedad, con unidad y fortaleza, hemos ido superando los más fuertes embates de la pandemia, y eso a pesar de no contar a nivel estatal con el apoyo de la derecha y la ultraderecha, más preocupadas por sí mismas que por los problemas reales de la población.

En los momentos críticos quedó en evidencia cuáles eran los servicios esenciales y las profesiones esenciales, muchísimas veces poco consideradas socialmente. Nuestro reconocimiento a todas esas personas que mantuvieron las constantes vitales en un país colapsado.

El parón de la economía y el empleo hubieran tenido catastróficas consecuencias si se hubieran vuelto a aplicar las medidas austericidas de recortes y privatizaciones de los servicios públicos de la crisis del 2008. Hemos aplicado los ERTE, que han sido un instrumento útil para la clase trabajadora, la conservación de los empleos y la recuperación económica. Del mismo modo las ayudas, las exenciones fiscales y los aplazamientos de obligaciones tributarias a empresas y autónomos han significado un apoyo importantísimo para el mantenimiento del empleo y de las propias empresas.

En esta ocasión, tanto la Unión Europea como los gobiernos de progreso del Estado y de Canarias, actuaron de manera muy distinta: mancomunar la deuda, suspender las reglas fiscales de gasto y déficit, permitir el uso del superávit, acordar una extraordinaria inyección económica, avanzar decididamente en energías renovables, diversificación económica, digitalización y modernización de las administraciones y de todo nuestro sistema productivo.

El diálogo continuado y el consenso obtenido entre Gobierno, patronal y sindicatos está permitiendo la recuperación del contrato social, cosa que habíamos perdido en este país. Y en el balance positivo una quincena de acuerdos sobre el empleo decente y de calidad, la recuperación de la negociación colectiva, el reequilibrio de fuerzas en el mundo laboral, las tres subidas del salario mínimo interprofesional, las nuevas formas de contratación y de formación en prácticas. Por ejemplo, las subidas del salario mínimo interprofesional han beneficiado a 1 800 000 personas, de las cuales 120 000 en Canarias.

A nivel estatal, esta legislatura se iniciaba con tres grandes reformas estructurales previstas: la de las pensiones, la reforma laboral y la reforma fiscal. Tanto la de las pensiones como la reforma laboral han avanzado muchísimo y están prácticamente acabadas; sin embargo, queda pendiente la reforma fiscal. Si queremos conservar y prolongar en el tiempo el escudo social que ha creado el Gobierno de coalición durante la pandemia, si queremos ensanchar el estado del bienestar y de manera especial su cuarto pilar, que tiene que ver con los servicios sociales, la atención a la dependencia y la economía de los cuidados, tenemos que acercarnos a Europa en materia de fiscalidad y cerrar la brecha que tenemos con unos ingresos públicos con relación al tamaño de nuestra economía notablemente inferiores a los que tienen países de nuestro entorno, como Francia, Alemania o Italia. Por tanto, urge abordar esta reforma estructural en esta legislatura, la reforma fiscal.

Mantener el empleo y mejorar los servicios públicos esenciales ha sido un compromiso de los gobiernos del Estado y de Canarias frente a las privatizaciones y los recortes de lo público con que se enfrentó la anterior crisis.

La apuesta por lo público en momentos de crisis si cabe es aún más importante, porque significa garantizar los derechos de la mayoría social a la sanidad, los derechos sociales, la vivienda, la alimentación.

Respecto a la guerra de Ucrania, que había comenzado desde febrero de 2014, con combates en varios territorios y que se ha recrudecido con la invasión de este país por parte de Rusia el pasado 24 de febrero, hace ahora cuatro semanas, desde Sí Podemos Canarias volvemos a reiterar nuestra condena a esta guerra, al uso de la violencia y de las armas, al incumplimiento del derecho internacional y a la violación de los derechos humanos. Manifestamos nuestra preocupación por las vidas de los civiles y militares que están muriendo en esta guerra, por los 3,5 millones de personas refugiadas, por las consecuencias sobre nuestras condiciones de vida y trabajo en Canarias, por la seguridad del planeta ante una hipótesis del uso de armas nucleares y desencadenamiento de una posible guerra nuclear, una tercera guerra mundial, y todo ello motivado por el control de los recursos estratégicos, por intereses económicos y geopolíticos y sobre todo por el nulo respeto a los derechos humanos. Somos conscientes de que en las guerras una de las primeras víctimas es la verdad y lo estamos comprobando con tanta intoxicación multidireccional. Abogamos por la paz, el diálogo, la negociación y el acuerdo auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas y nos oponemos al creciente armamentismo y a la política de bloques.

En este momento hay dieciocho guerras activas en el mundo, aunque solo nos hablen de una: Camerún, Etiopía, Mali, Mozambique, Lago Chad, el Sahel, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Uganda, Somalia, Darfur, Sudán del Sur, Afganistán, Myanmar, Irak, Siria, Yemen...

A la gente que defendemos valores de paz, solidaridad e internacionalismo nos duelen todas las guerras, también la de Ucrania. Todos los niños y niñas de todos esos países, todas las víctimas inocentes de todas esas guerras nos deben doler por igual y todas las personas refugiadas, independientemente del color de su piel o de sus ojos, deben ser tratadas del mismo modo.

Y no he mencionado ni la ocupación de Palestina por parte de Israel ni al pueblo saharaui hasta ahora en profundidad, que tiene reconocido por la ONU el derecho a la autodeterminación y con los que el Estado español tiene una responsabilidad histórica y legal. Y en este asunto reiteramos nuestro desacuerdo con el presidente Sánchez. Desde Sí Podemos Canarias reiteramos con firmeza nuestras críticas hacia lo que hemos considerado, y seguimos manifestándolo así, una indecencia histórica respecto al pueblo saharaui, al que el presidente del Gobierno del Estado español parece haber dejado a su suerte, pretendiendo terminar así la entrega del territorio del Sáhara Occidental a Marruecos, hecha de forma vergonzante el 14 de noviembre de 1975, en los estertores del dictador, le faltaban seis días para morirse, y, por tanto, rechazando así el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas y poniéndose de rodillas ante los chantajes de la monarquía alauita, que unas veces amenaza con droga, terrorismo o inmigración y otras declara su afán expansionista hacia el archipiélago canario, que, según parece, de forma inaudita, ha formado parte también del chantaje y la extorsión, lo que nos parece de extrema gravedad, señor presidente.

El plan de autonomía para el Sáhara Occidental presentado por Marruecos en 2007, y con el que tanto Zapatero como Rajoy estaban de acuerdo, no es la iniciativa más seria, realista y creíble, como ha afirmado el presidente Sánchez. Las relaciones de buena vecindad no pueden estar sometidas al chantaje, la extorsión de una de las partes, sino fundamentadas en el respeto mutuo y en la observancia del derecho internacional y los derechos humanos. Toda solución al conflicto debe pasar por el diálogo dentro del consenso de la resolución de Naciones Unidas y fundamentalmente contando con el respeto a la voluntad democrática del pueblo saharaui.

Esperamos al respecto, señor presidente, un acuerdo mayoritario, mejor unánime, de posicionamiento de este Parlamento, como lo hicimos con la última PNL que desde nuestro grupo parlamentario propusimos al resto de grupos, defendiendo entre otros asuntos el derecho a la libre autodeterminación del pueblo saharaui. (Palmoteos).

La tercera crisis, que se ha convertido en estructural, ya no es un fenómeno ocasional, es la migratoria. Canarias, por su cercanía al territorio continental africano, es la frontera más próxima para muchos de los habitantes de Marruecos, Mauritania, Mali, Senegal, que aspiran a llegar al continente europeo y se juegan la vida en una difícil travesía en manos de mafias para arribar a nuestras costas.

La falta de decisión conjunta por parte de los países miembros de la Unión Europea para acometer el problema de la inmigración, junto con la ausencia de solidaridad y de leyes que obliguen a la redistribución de estos inmigrantes, además de la falta de previsión y la respuesta precaria por parte del Gobierno del Estado, han traído consigo que Canarias se convierta en un lugar de estacionamiento permanente, muchas veces en condiciones deplorables, de miles de personas que buscan una vida mejor camino de Europa y de miles de menores no acompañados a los que se tarda por la Fiscalía bastante tiempo en dictaminar su mayoría de edad y a los que el Gobierno de Canarias tiene la obligación de su custodia -darles comida, techo, educación, atención sanitaria...-, viéndose en ocasiones superado por las circunstancias a pesar de realizar ímprobos esfuerzos, como así lo ha reconocido el nuevo defensor del pueblo. También en este caso estamos hablando de derechos humanos.

Durante tres largos meses, la fuerza del volcán palmero, con su lava, sus cenizas, sus gases, sembró la destrucción en tres municipios de la isla: El Paso, Los Llanos de Aridane y Tazacorte. Miles de personas desplazadas de sus hogares, sepultados los mismos bajo la lava junto con el terreno agrario, centros públicos, infraestructuras viarias, regadíos, etcétera; en definitiva, el discurrir de la vida cotidiana paralizado y destruido. Y ahora, junto con la recuperación de las emociones y de la salud perdida, la isla de La Palma se está enfrentando a su reconstrucción.

Desde Sí Podemos Canarias destacamos la unidad habida hasta el momento en el conjunto de las administraciones estatal, canaria, insular y local, trabajando con prontitud y disponiendo de medios legales y económicos para amortiguar el terrible daño causado y propiciar el impulso de la actividad económica y social en La Palma. Desde Sí Podemos Canarias celebramos el apoyo parlamentario a una PNL sobre la condonación de las hipotecas que se siguen pagando sobre viviendas que el volcán arrasó y sobre todo celebramos que el Gobierno del Estado, al menos, lo haya tomado en consideración.

La creación de una comisión parlamentaria al respecto, la participación ciudadana, el disponer de recursos y la inteligencia colectiva harán que primen los intereses generales con visión de futuro y que a todas y cada una de las personas afectadas se les encuentre una adecuada solución.

En la isla de La Palma, la carestía del suelo rústico, asociada a la posibilidad de poder construir todo tipo de suelos para reconstruir las viviendas, ha empeorado muchísimo la situación de las familias afectadas menos pudientes. Por ello, hemos planteado en varios momentos la propuesta de que las familias que, con anterioridad a la erupción del volcán, tuvieran fincas rústicas en otros municipios de la isla pudieran construir en las mismas, ajustándose a los parámetros recogidos en el decreto. Hemos dicho que lo principal son las viviendas y el empleo afectado.

Para Sí Podemos Canarias la referencia principal en la reconstrucción debe seguir siendo el sector primario, que tantos bienes ha aportado a la isla de La Palma, puesto que las veleidades con el modelo de turismo de hacinamiento y masificado no debieran tener cabida en la isla.

Uno de los aprendizajes de esta erupción es la importancia de la ciencia para la predicción y el establecimiento temprano y puntual de medidas de seguridad para la población. La importancia de la participación del IGN, el CSIC, el Involcan, etcétera, todos ellos aglutinados bajo el Pevolca, y la asistencia en Canarias de centenares de científicos de otros países que acudieron a estudiar el volcán. Sin embargo, una vez pasada la erupción, todos esos datos han quedado diseminados. Por eso, señor presidente, le hacemos la propuesta de, de acuerdo con el Gobierno del Estado, crear un centro de excelencia universitaria, tomando como modelo el IAC, dedicado a la geología y el vulcanismo, donde concurran el IGN, el CSIC, el Involcan y las dos universidades canarias, porque nadie entiende, por ejemplo, que en Canarias, que vivimos sobre un volcán, no haya en nuestras universidades oferta de estudio de geología o de vulcanismo.

De ahí la necesidad de continuar con la unidad del conjunto de las administraciones para la defensa de los intereses generales, que son los de la mayoría social afectada por la erupción, y no convertir a la población palmera afectada ni en moneda de cambio ni en rehén de falsas promesas electorales. Lo único que quieren los palmeros y palmeras es que se solucionen sus graves problemas y que la política y lo público les sean de utilidad para esos fines. Lo demás es confundir, generar desesperanza y seguir profundizando en el descrédito de las instituciones, que es el mejor caldo de cultivo para los enemigos de la democracia y el avance de la extrema derecha.

En quinto lugar, y no por ello menos importante, la crisis climática, sobre la que el Gobierno y este Parlamento aprobaron una declaración en los inicios de esta legislatura. Trabajar por la mitigación y, sobre todo, adaptación al cambio climático en un archipiélago como el nuestro es uno de los objetivos principales. Esta lucha está recibiendo un importante impulso con diversas leyes y, sobre todo, con medidas concretas y con una ficha financiera que sirva para propiciar una transición energética justa y sostenible que avance en cerrar el ciclo integral del agua, resolver el problema de los residuos, apostar por la movilidad sostenible y por la preservación de la biodiversidad.

Estamos asistiendo a una subida exacerbada y abusiva de los precios de la electricidad y los combustibles, que son responsables en un 80 % de la espiral de inflación que amenaza con un rápido y peligroso empobrecimiento de la mayoría social. Esto exige actuar de forma urgente desde la Unión Europea y desde el Gobierno del Estado, desacoplando el gas del mix energético, fijando un tope al precio del gas y poniendo fin a los beneficios caídos del cielo, que deben ser destinados a reducir la factura de la luz de los consumidores y del resto de empresas del país, protegiendo así la renta de los hogares y protegiendo también la competitividad de nuestro tejido industrial.

Y estas medidas también sirven para proteger la seguridad como país, que no queda desarbolado así en manos de los mercados o de los conflictos bélicos.

Es urgente, por tanto, adoptar estas medidas a la par que proteger y acelerar la transición energética, haciendo uso del segundo tramo de los fondos Next Generation que nos permite impulsar las renovables y vincular a ellas el autoconsumo con tejados solares para reducir la dependencia del exterior y avanzar en soberanía energética.

Durante todo este tiempo, ante las diversas crisis, y de manera especial las de índole económico y social, han quedado evidentes dos posturas antagónicas: la de una derecha defensora del neoliberalismo, de los recortes y privatizaciones de lo público, defensora de que la política esté al servicio de los intereses económicos de las minorías que siempre nos han gobernado y a las que pretenden seguir beneficiando y que continúen sin apenas pagar impuestos; y, por otra parte, la de un Gobierno progresista que garantiza los servicios públicos esenciales, se opone a los recortes y las privatizaciones, mejora la oferta de vivienda pública en alquiler, legisla para poner freno a los desahucios, propicia empleo estable y de calidad e intenta legislar en beneficio de la mayoría social y la redistribución de la riqueza, recuperando derechos.

Con este Gobierno estatal de coalición Canarias ha recibido un 53 % más de recursos estatales que en los últimos cuatro años de Mariano Rajoy.

Cuando algunos proponen bajadas de impuestos en el combustible, se olvidan de que en Canarias están realizadas muchas de esas bajadas. Y una simple observación: en islas como El Hierro y La Gomera las bajadas de impuestos y las subvenciones no han repercutido en el precio final del combustible, solo han servido para incrementar las ganancias del monopolio ostentado por DISA. No he oído a nadie de la oposición hablar del monopolio.

Respecto a los impuestos, más aún, ¿cómo se pueden mantener unas pensiones dignas, una educación gratuita y de calidad, una sanidad pública eficiente, un ingreso mínimo vital, una prestación canaria de inserción o una renta ciudadana si a la par se rebajan los impuestos o se realizan amnistías fiscales? Por eso, para mantener los servicios públicos, que son los derechos de la mayoría social, defendemos desde Sí Podemos Canarias una reforma fiscal progresiva donde las grandes fortunas aporten lo que les corresponde al erario público, al bien común, y donde, por ejemplo, las eléctricas dejen de saquear nuestros bolsillos y no continúen recibiendo beneficios caídos del cielo, favorecidos por una legislación europea en la que mucho han tenido que ver y, por su parte, que el Estado juegue el papel de redistribuidor de la riqueza y garantizador del ejercicio de los derechos constitucionales. La bajada del IVA que planteó el Gobierno el año pasado a nivel de Estado ha significado en el erario público 10 000 millones de pérdidas, 10 000 millones de pérdidas de ingresos que hubieran estado muy bien para favorecer los servicios públicos esenciales.

Es evidente que a la derecha y a la ultraderecha les gusta un país donde unos pocos acumulen la riqueza y la mayoría social no tenga derecho a la sanidad, a la educación o a una pensión digna si no se la puede pagar. Una derecha y una ultraderecha que votan, por ejemplo, en contra de la ley de cadena alimentaria, que garantiza un pago justo a los productores agrícolas y ganaderos, y luego, cínicamente, se ponen al frente de las manifestaciones del sector primario o se hacen un selfie con remolacha en la mano. (Aplausos). Y lo peor de esto, y lo peor de esto, es que encima logran engañar a mucha gente en nuestros pueblos, que piensan que son sus salvadores.

Sabemos que algunos grupos políticos tienen un sentido patrimonial del poder y, aunque no les guste la gente corriente de Sí Podemos Canarias, tenemos la legitimidad ciudadana para estar en gobiernos, desarrollar políticas en beneficio de la mayoría social. Nosotros seguiremos firmes en la defensa de nuestros principios, pese a quien le pese. Somos plenamente conscientes de que formar parte de la política institucional y, mucho más aún, formar parte de los gobiernos, el de coalición estatal y el cuatripartito de Canarias, para una confluencia de partidos jóvenes como es Unidas Podemos y Sí Podemos Canarias tiene sus retos. Hay que conciliar posiciones, gestionar contradicciones, enfrentarnos a no pocos dilemas y además procurando, eso sí, que nunca se antepongan los intereses a los principios y que siempre tengamos como objetivo el interés general.

Por ello, desde Sí Podemos Canarias nos oponemos a las bajadas generalizadas de impuestos y a la vez consideramos que no necesitamos incrementar nuestro gasto en defensa; lo que necesitamos con urgencia es incrementar los presupuestos públicos destinados a investigación, educación, sanidad, dependencia, y por eso nos seguimos reafirmando en que las eléctricas, con un incremento de los beneficios del 47 % en 2020, tienen mucho que aportar al erario público, como también las grandes fortunas.

Y también planteamos que el Gobierno del Estado y el de Canarias tienen que ser audaces y atreverse a crear una empresa pública de energía, que la produzca, transporte y comercialice. Como también que, en el asunto de garantizar el ejercicio de la vivienda, la Sareb debe ser gestionada íntegramente desde lo público y el actual parque de viviendas que posee pasar a ofrecerse inmediatamente como vivienda en alquiler social.

En cuestión de derechos fundamentales, no podemos seguir permitiendo que se consideren bienes de mercado, y por tanto objetos de negocio, ni la vivienda ni la sanidad ni el agua ni la electricidad.

En esta segunda parte de la legislatura, con la avalancha de leyes previstas, vamos a tener que dedicarnos a fondo en este Parlamento para darnos una salida rápida, con el mayor consenso posible.

Por tanto, nosotros hemos puesto nuestras energías en gestionar, de la manera más eficiente posible, las políticas que se nos han encomendado y estamos demostrando que, sin ser políticos profesionales, somos capaces de realizar una buena gestión de los dineros públicos. Antes de continuar, voy a hacer un reconocimiento público al equipo de nuestra diputada y consejera del Gobierno de Canarias, Noemí Santana Perera, gracias a Gemma, Silvia, Javi Bermúdez, Iratxe Serrano, Laura Fuentes, Víctor Ramírez, Mónica Fumero, Marta Arocha, sin olvidarme de Julio Concepción, o Jonás González o Miguel Montero, que decidieron regresar a sus puestos de trabajo. Muchas gracias, compañeros.

Del mismo modo, quiero resaltar la ingente labor que tan acertadamente está desarrollando el viceconsejero de Cultura y Patrimonio, Juan Márquez Fandiño, junto con Nona Perera y Rubén Pérez. Muchas gracias a todos ellos y al equipo de funcionariado que les acompaña.

Igualmente, gracias a José Ángel García al frente de la Escuela de Servicios Sanitarios y Sociales de Canarias.

Y, dentro de estos agradecimientos, también al equipo que nos apoya directamente a este grupo parlamentario: Chano Sosa, Elena, Eduardo y Salva.

Como de rendir cuentas se trata en este debate de la nacionalidad, Noemí Santana y su equipo en la Consejería de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias ha trabajado a destajo durante estos tres años con el objetivo de aumentar de manera contundente la protección de las personas en situación de vulnerabilidad en el archipiélago. Los datos demuestran que jamás hubo en Canarias tanta gente bajo el paraguas de la protección social. Esto supone un avance histórico para las familias con recursos escasos, para la infancia desprotegida, para los mayores dependientes y sus cuidadoras o para las víctimas de violencia de género.

Para avanzar en esta tarea, se han impulsado diversas medidas, pero destacan dos herramientas fundamentales: la ley de renta de ciudadanía y el Plan Canarias te Cuida. La ley de renta de ciudadanía, ya en trámite parlamentario, el Plan Canarias te Cuida, que es una estrategia que busca el desarrollo de una economía que pone el foco en el cuidado de la persona desde la cuna hasta la vejez.

La ley de renta ciudadana supone un cambio de modelo con respecto a la prestación canaria de inserción, lo que equipara al archipiélago al resto de comunidades autónomas en tener una renta garantizada mientras subsista la situación de pobreza y exclusión social, además de mejorar las cuantías que reciben las personas beneficiarias con respecto a la PCI, estableciendo la misma cifra de base que el ingreso mínimo vital, más elevado que la PCI. Así, las personas que perciben la PCI pasan, automáticamente, a cobrar la renta de ciudadanía, que en una primera fase tendrá 10 000 beneficiarios. Y, además, en un segundo impulso se aplicarán distintos complementos: para el acceso a la vivienda, para jóvenes de familias sin recursos que quieran continuar sus estudios superiores y para los perceptores de la pensión no contributiva hasta alcanzar el ingreso mínimo vital. Esta medida puede alcanzar, al final del proceso, a unas 40 000 familias que están en riesgo de pobreza en Canarias.

El Plan Canarias te Cuida es un programa impulsado a través de fondos europeos, que comprometió una inyección de 218 millones de euros para siete años procedentes del eje de economía de los cuidados y refuerzo de las políticas de igualdad e inclusión del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Está claro que esta no ha sido una legislatura al uso y, al tiempo que se construyen medidas de largo alcance, hay que trabajar en lo inmediato. Así, por ejemplo, ante la erupción de La Palma y la necesidad de asistir y tutelar a los menores extranjeros no acompañados con todas las garantías, eso nos ha puesto por delante unos retos descomunales de los que no nos hemos escondido y que afrontamos con responsabilidad y compromiso.

La prestación canaria de inserción, que es la última red a la que tiene derecho una familia cuando no recibe ingresos económicos, fue concedida a 9770 familias en 2021, casi dos mil más que en 2020 y un 70 % más que cuando llegamos al Gobierno en 2019. Estos son datos y no un relato falseado como algunos plantean.

A esto hay que sumar los beneficiarios del ingreso mínimo vital, que en estos momentos perciben 19 100 familias. Cuando llegamos al Gobierno, solo había 5687 familias beneficiarias de la PCI. En total, unas 26 900 familias en Canarias están percibiendo alguna de las dos prestaciones destinadas a los hogares más vulnerables y con ingresos más bajos.

Otra medida que vino a complementar las prestaciones fue la ayuda extraordinaria de navidad de 250 euros para las pensiones no contributivas o en La Palma las 900 familias que recibieron una paga extra con motivo de la crisis volcánica.

La Consejería de Derechos Sociales ha invertido 64 millones de euros en financiar la PCI y los complementos de la pensión no contributiva.

Otro de los problemas con que nos encontramos y que se le ha puesto solución es, por ejemplo, algo tan fundamental y tan esencial como es la implementación de un gestor de expedientes que esté modernizado, para poder actualizar los datos, tenerlos al día, actuar con diligencia.

La consejería ha reforzado también sus políticas de discapacidad para paliar el histórico abandono al que ha sido sometido este colectivo. Así, por ejemplo, Derechos Sociales ha destinado 5 millones a financiar 125 proyectos en esta materia.

También ha estado presente el trabajo conjunto con los ayuntamientos y con el tercer sector. Se ha invertido el doble en este concepto desde la llegada al Gobierno. En aquel momento había consignados 20 millones; en este año el convenio firmado a principios de febrero ha pasado a 41 millones.

En cuanto al tercer sector, se ha aumentado en más de un veintidós por ciento el presupuesto para atenderlo. Tenemos que destacar también el voluntariado.

Tenemos que, de alguna manera, destacar la gestión de la protección a los menores extranjeros no acompañados. La Dirección General de la Infancia y la Familia ha llegado al límite de sus fuerzas y sus recursos en la gestión de esta crisis. A las apenas 500 plazas que existían se han añadido 50 nuevos espacios y en estos momentos los menores no acompañados en Canarias están en torno a tres mil. El Gobierno de Canarias ha recurrido a todas las vías de su mano para reclamar al Estado y a las instituciones europeas un reparto responsable de los menores extranjeros. Hemos acogido la propuesta que había hecho Nueva Canarias al resto de los grupos también sobre esa proposición de ley para que se convierta de alguna manera en una obligatoriedad este asunto.

En estos momentos en Canarias, propios de las islas, tenemos a 1300 menores en acogimiento familiar.

Se ha trabajado en la lucha y la igualdad contra las violencias machistas. El Instituto Canario de Igualdad continúa este año con esa ingente labor de concienciar a la población de la necesidad de no mirar a otro lado cuando se produce un episodio de violencia de género. Ha jugado un papel importante el proyecto y la realidad de Mascarilla-19; el proyecto Juno, que sigue adelante cada vez con mayor éxito -se trata de una formación práctica a base de simulacros para cuerpos y fuerzas de seguridad-; la implementación de un expediente único informatizado para toda la red de recursos contra la violencia de género. En cuanto a la Viceconsejería de Igualdad y Diversidad, en trabajos con los distintos agentes de los ámbitos públicos y privados... En la Estrategia Canaria de Transición Igualitaria también se ha trabajado.

El Plan Corresponsables de Canarias ha tenido una financiación, similar al ejercicio pasado, de casi diez millones de euros, con un triple objetivo, que era favorecer la conciliación de las familias, crear empleo de calidad, dignificar y certificar la experiencia profesional del cuidado no formal.

Y también, por otra parte, ha tenido magnífica acogida en cincuenta y seis escuelas infantiles el programa Bicácaro.

La Estrategia de Memoria Histórica de las Disidencias Sexuales y de Género ha tenido mucha importancia también, puesto que ha supuesto un antes y un después en el tratamiento de esta memoria en las islas. Las personas LGTBI, que fueron duramente represaliadas a lo largo de la dictadura, merecían un reconocimiento público e institucional de su sufrimiento y resistencia. Y a estas líneas de actuación se añade el trabajo de la mano con los colectivos y entidades para construir la hoja de ruta del trabajo en diversidad.

Para formar parte de todo ello y darle forma, es vital el desarrollo de la Ley de igualdad social y no discriminación por razón de identidad de género, expresión de género y características sexuales.

En el área de juventud, se ha trabajado en formación no convencional, educación social y sostenible, en formación sobre violencia de género entre los jóvenes, en el estudio sobre la realidad de jóvenes inmigrantes, prevención del ciberacoso y la violencia, prevención de violencias estéticas y, en relación con el mundo del empleo, en asesoramiento para que los jóvenes pueden conseguir un primer empleo. También en la salud mental: la salud mental entre los jóvenes, la salud mental en la isla de La Palma también con el sufrimiento por el volcán.

Respecto a cultura y patrimonio cultural, en el ámbito de la cultura y el patrimonio cultural, esta legislatura está suponiendo la transformación de un nuevo modelo de gestión. Podemos afirmar que se está consolidando una gestión más moderna, transparente, accesible y con capacidad para que la dimensión cultural deje de ser solo parte del vacío discurso político y se coloque como el elemento troncal de las estrategias para el desarrollo social y económico de las islas. La transformación de las herramientas de gestión, la cogobernanza y coordinación con todos los ámbitos institucionales, la concurrencia competitiva con las convocatorias de ayudas públicas, el aumento presupuestario en un momento de incertidumbre, las políticas activas de desarrollo local, el fomento de la accesibilidad, la descentralización de los bienes culturales o el posicionamiento exterior de Canarias como un ejemplo del nuevo modelo de gestión cultural están situando a los sectores culturales e industrias creativas canarias en un proceso de expansión que debemos, con la búsqueda de un amplio consenso político, seguir potenciando en los próximos años.

Podemos ser ejemplo de desarrollo sostenible, de nuevas economías e innovación. Estamos en situación de situarnos como viveros de creatividad.

El sector audiovisual es un claro ejemplo de cómo diversificar nuestro modelo económico, nuestro modelo productivo y crear empleo joven y cualificado. Las músicas tradicionales, las urbanas, la gestión del patrimonio cultural, las artes visuales o las artes escénicas deben ser también una oportunidad y, para ello, debemos evitar el pensamiento a corto plazo. Evitemos pensar en pequeño y pensemos de una vez que si queremos transformar nuestro modelo productivo y evitar las altas dependencias de los monocultivos tenemos que apostar todavía más por los sectores que aporten innovación cultural.

La ley de patrimonio cultural de Canarias, en desarrollo, debemos seguir avanzando en los proyectos de investigación con la Dirección General de Patrimonio Cultural.

Se está haciendo un esfuerzo inversor muy importante en la rehabilitación y protección del patrimonio histórico, del patrimonio cultural a través del Instituto Canario de Cultura.

Programas como el de Pueblos Creativos se han impulsado, fomentando la mancomunidad municipal en el ámbito rural para incorporar la cultura a sus políticas de bienestar; proyectos culturales barriales; el programa, con Educación, PROA+; los canales audiovisuales de la Biblioteca de Canarias. Y este Gobierno está empeñado en implementar acciones que permitan salirnos del evento aislado, de la política escaparate para generar un ecosistema cultural sostenible. Un ejemplo es la ejecución y desarrollo de la ley de lectura y bibliotecas, aprobada en la pasada legislatura, aprobándose la plataforma digital de biblioteca canaria, impulsándose las biblioguaguas, incrementando fondos bibliográficos, ediciones, potenciando la nueva creación literaria.

En la ley de memoria histórica, se está completando el catálogo de vestigios franquistas. Es incomprensible que en nuestras calles, no muy lejos de este salón de plenos, tengamos a estas alturas una escultura de un dictador genocida y que un alcalde como el de Santa Cruz de Tenerife siga buscando excusas y resquicios legales para no cumplir con la ley y, lo que es más importante, no cumplir con la reparación moral de las víctimas. Santa Cruz de Tenerife no puede seguir siendo una anomalía democrática dentro de las ciudades importantes del Estado español. Animo a la Viceconsejería de Cultura a seguir adelante con todo este trabajo, porque se trata de recuperar valores democráticos en nuestra sociedad.

La cultura y el patrimonio cultural deben ser una de las dimensiones y parte fundamental de nuestro desarrollo comunitario. Por tanto, trabajar en esa dirección, renovar la confianza y el apoyo a este Gobierno, que va a continuar cumpliendo su hoja de ruta, atendiendo a las necesidades de la sociedad canaria, garantizando los servicios públicos, que son los derechos de la mayoría social, mejorando las condiciones de vida y trabajo... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede tiempo adicional) -muchas gracias-, anteponiendo siempre los intereses generales, en definitiva, liderando una sociedad convencida de que juntos y unidas somos más fuertes, y superaremos las crisis actuales y las venideras, siempre mirando hacia un futuro mejor porque confiamos en nuestras capacidades como pueblo.

Y antes de terminar, y seguramente en el tiempo de réplica, que usaré un poco, explicaré algunos de los planteamientos que a lo largo de la legislatura y en el último año hemos ido teniendo como grupo parlamentario, respecto a asuntos como el REA, el Plan Forrajero o la ley de cadena alimentaria, las grandes superficies, la Radiotelevisión Canaria, la inmigración, el turismo, el reto demográfico y algunas otras cuestiones más, como la muerte digna o aprobar el catálogo de prestaciones y servicios sociales, la trata de explotación sexual, el fin de la prostitución y de la trata de personas o la mutilación genital, etcétera, porque creo que son señas de identidad de este Gobierno unas, retos que nos quedan por conseguir otros, pero que estamos convencidos de que a lo largo de lo que resta de legislatura este Gobierno, que se comprometió en un principio con un pacto firmado por cuatro organizaciones tan dispares como éramos el Partido Socialista, Nueva Canarias, Sí Podemos Canarias o la Agrupación Socialista Gomera y que ha tenido que afrontar estas cinco grandes crisis en este momento y las sigue afrontando ahora, y ahora es el momento de la verdad en muchas de ellas porque la vacunación ya nos va permitiendo ver la luz en el asunto de la pandemia... Pero la erupción del volcán de La Palma trae consigo ahora la reconstrucción de la isla; la guerra de Ucrania, aún se nos sigue generando incertidumbre e inseguridad, que, por tanto, las consecuencias que pueda tener sobre la economía y sobre la vida de la sociedad canaria son aún impredecibles de momento; que la inmigración, con las relaciones de buena vecindad, vamos a ver si prospera y el diálogo y el consenso continúan y no la aceptación de los chantajes por parte del Gobierno de Marruecos; y que de alguna manera seamos capaces de afrontar el gran reto de la humanidad, que es el de la lucha contra el cambio climático, que es el que a más larga distancia y con gobiernos que empleen la inteligencia colectiva para afrontarla y disponer de medios, podemos seguramente afrontarlo con éxito en los próximos años. Poniendo las bases, para ello estamos, tenga nuestra confianza y nuestro apoyo, y de alguna manera sentimos tenerle que manifestar el disenso con el Sáhara, pero creemos que su Gobierno no ha actuado de manera correcta, nuestro Gobierno a nivel de Estado, su presidente y nuestro presidente, de todos, no ha actuado a nivel de Estado con la altura de miras que era necesaria en estos momentos.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Marrero.

Turno para el Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera. Tiene la palabra el señor Curbelo.

Adelante, señor Curbelo, tiene la palabra.

El señor CURBELO CURBELO: Muchas gracias, señor presidente del Parlamento. Señor presidente del Gobierno, miembros del Gobierno, portavoces, señorías, muy buenos días a todos y a todas.

Yo no quería, pero... bueno (ante un comentario desde los escaños).

Quiero, en nombre de mi grupo parlamentario, en primer lugar, expresar mi ánimo y solidaridad a todas las familias de canarios que, durante este tiempo de pandemia, han perdido a sus seres queridos. Que son muchos, señorías: 1618 personas que han fallecido durante la pandemia.

En segundo lugar, quiero expresar, en nombre de mi grupo también, la solidaridad con el pueblo ucraniano y la voluntad inequívoca de mi grupo parlamentario de acoger a los refugiados de este país; del mismo modo que denunciar públicamente hoy en esta Cámara la violación de los derechos humanos y el genocidio que está haciendo Putin con ese pueblo hermano.

En tercer lugar, quiero expresar también un principio, que es el que los ciudadanos canarios me han otorgado a mí y a mis compañeros diputados, del mismo modo que a ustedes: yo estoy aquí, entre otras cosas, en primer lugar, para defender los intereses de los canarios y de las canarias y para opinar, debatir y acordar todo aquello que pueda tener interés para los ciudadanos canarios, pero lo primero, los ciudadanos canarios.

Y, en cuarto lugar, señor presidente del Gobierno, miembros y compañeros del Gobierno, quiero hacer una petición, que lógicamente es redundar sobre lo que ya hemos dicho, y es trabajar de una forma constante y denodada durante el próximo año y pico que queda de legislatura, para trabajar por las personas que lo están pasando peor en Canarias, es decir, para trabajar por los parados, por los pobres, por los que no tienen vivienda, por los dependientes, por los enfermos, porque creo que, a pesar de tener un panorama muy complicado en el ámbito internacional, inclusive en nuestro país desde el punto de vista de la crisis económica y de la inflación que estamos viviendo, tenemos que hacer un esfuerzo precisamente con esas personas, aún mayor del que ya estamos haciendo.

Y quiero empezar, señorías, citando también las Meditaciones del Quijote, cuando Ortega y Gasset dijo aquello de "yo soy yo y mi circunstancia y, si no la salvo a ella, no me salvo yo". Digo todo esto, entre otras cosas, porque quiero llamar las cosas por su nombre, valga la redundancia. A este Gobierno, si quieren ser mínimamente justos, no se le puede juzgar sin las circunstancias a las que ha tenido que hacer frente, que son muchas, y sin ninguna duda totalmente excepcionales. No ha existido en la historia de Canarias un tiempo peor con un mejor Gobierno, guste o no guste, porque es así, y no ha existido Gobierno que haya tenido que enfrentar mayor número de calamidades como las que ha afrontado este Gobierno. Y terminará con fortaleza, a pesar de los augurios de los partidos de la oposición, que, por cierto, daban muy poco tiempo a este Gobierno -digo poco tiempo de vida-, pero ya saben ustedes cómo son las cosas, no hace falta ni reiterar que este pacto, como ya lo señaló el presidente del Gobierno, y de forma también inequívoca por mi parte, va a llegar a final de legislatura. No se obstinen con esas cosas, piensen en otras.

He escuchado que estamos ante un pacto que es papel mojado, incluso han pedido que lo abandone. Señorías, les adelanto que me siento libre y me siento firme y sin ningún perjuicio para seguir apoyando a este Gobierno y a trabajar por Canarias. (Aplausos).

Hemos vivido, mejor dicho, seguimos viviendo, los tiempos más extraordinarios que yo recuerde desde que tengo memoria y solo la ayuda y la comprensión de la Unión Europea, la solidaridad de España y el trabajo de este Gobierno es lo que ha evitado que Canarias quebrara como sociedad y como proyecto de futuro. En menos de tres años hemos tenido que enfrentarnos a lo que, en términos sociales y económicos, se podían llamar eventos de extinción, crisis que, por su gravedad, podrían fácilmente habernos destruido como sociedad, y no ha sido así.

Hemos vivido una pandemia mundial cuyo primer caso se produjo en España y ocurrió precisamente en Canarias, en la isla de La Gomera, y hemos padecido el derrumbe del sector turístico, que ha caído nada más y nada menos que el 20 % del PIB el año 2020, que suponen 10 000 millones de euros, del que vive, indudablemente, de ese turismo del que vive Canarias, que arrastró tras de sí el comercio, la restauración y el resto de servicios.

Hemos soportado, además, una segunda recesión económica y la parálisis del transporte aéreo y marítimo, que para las islas son los pulmones con los que respira, y hemos asistido a una demostración de fuerza brutal de la naturaleza con la erupción del volcán de La Palma, una erupción, por cierto, en la que se ha podido comprobar la capacidad de organización, información y prevención de nuestras administraciones públicas, que han tenido un comportamiento ejemplar.

Si los partidos de la oposición tienen el propósito de que nos unamos para hacer cosas juntos, que lo vengo reiterando desde hace mucho tiempo y ahora se hace más necesario que nunca, que nunca, les adelanto que encontrarán en mi grupo parlamentario -y seguro con... lo ha expresado el presidente del Gobierno- la plena predisposición para hacerlo. Ahora bien, que no sea un mensaje para quedar bien, porque habitualmente en política gastamos mucho tiempo en mensajes para quedar bien con los que nos escuchan, pero no para trabajar conjuntamente. Así que ese es mi mensaje. Porque a diferencia de lo sucedido, digo, en el año 2008, señorías, lo que está haciendo este Gobierno, tendrán que reconocer que esta crisis que hemos atravesado ha sido superada con la solidaridad, con los créditos, con el compromiso público que ha inyectado enormes cantidades de dinero para mantener el estado del bienestar y para ayudar también a la supervivencia del sector privado. Y ha sido una respuesta socialdemócrata y keynesiana de Europa la que ha impedido el castigo de las clases medias.

Hoy ya sabemos que hay dos puertas para salir de la pobreza, aun cuando estemos inmersos en ella. Una, que se aplicó por la derecha en el año 2008, marcada por el egoísmo del austericidio y los recortes, y la de la izquierda, del año 2020, marcada por la solidaridad y el refuerzo de las políticas de bienestar, que es donde se ha consumido buena parte de los recursos.

Por tanto, señorías, Canarias ha iniciado su recuperación y tenemos un camino largo que recorrer ante una realidad cambiante. Decir que Canarias no tiene problemas sería estar ciego, como afirmar que este Gobierno no se merece el apoyo unánime de esta Cámara por haber afrontado con entereza los peores momentos de la historia de la democracia de esta comunidad autónoma. Y eso no me impide reconocer que tenemos que reforzar y mejorar las listas de espera sanitaria, la pobreza y la exclusión social, el empleo juvenil, proteger a nuestros mayores y a nuestros universitarios. No me impide ni nos debe impedir a nosotros, a ninguno, de modo alguno, trabajar en esa dirección. Pero, a pesar de todas las dificultades, hemos logrado que este año se empiece a recuperar el empleo; a pesar de todo, hemos logrado salvar las estructuras del sector turístico; hemos ayudado a mantener el tejido empresarial del ocio, la restauración y el comercio, y este año estamos dando los primeros pasos fuera de la UCI en la que esta sociedad ha estado durante dos años, sufriendo los efectos de una enfermedad terrible y una crisis brutal.

El trabajo de los profesionales de la salud pública desde el comienzo de la pandemia del coronavirus hasta hoy es absolutamente ejemplar, lo ha sido desde los primeros momentos de desconcierto en los que aún se desconocía la forma de funcionar del virus y su capacidad letal. La información y la atención que se ha dado a la ciudadanía ha sido permanente. La organización de la campaña de vacunación con la que se terminó doblegando al coronavirus ha sido un éxito, tenemos que decirlo, a pesar de que tenemos que tener cuidado también con esa nueva variante de ómicron.

Y todo esto, señorías, no ha sido fruto de la improvisación o la suerte, al menos entiendan que ha sido el resultado de dos factores. Uno, una sociedad responsable que ha colaborado de forma mayoritaria con las autoridades, con los cabildos, con los ayuntamientos, y la planificación y el trabajo liderado por el Gobierno, con el apoyo inestimable de muchas instituciones dependientes de la propia autonomía, desde el Servicio Canario de la Salud, el Instituto Tecnológico de Canarias, el Involcan, los científicos, protección civil y el voluntariado, todas las fuerzas de seguridad -local, del Estado-, a todas las empresas canarias, la radiotelevisión pública, que debe ser pública e independiente, el Instituto Canario de Igualdad, Promotur, Hecansa y otras tantas que han contribuido para que eso sea posible. Eso debería hacernos sentir a todos sinceramente, estimados diputados, debería hacernos sentir orgullosos.

Fue un acierto la incorporación a una Unión Europea solidaria, que se ha preocupado y que se ocupa de los suyos, que toma las medidas necesarias para que todos los ciudadanos de esta Europa común sean ayudados. Y que formamos parte de un Estado que también ha sido sensible -con algún matiz que introduciré en mi debate- con un archipiélago situado muy lejos del continente y ha tenido especiales consideraciones tanto de fondos destinados a la COVID como los orientados a salvar el sector económico, los distintos sectores productivos. Recuerden el año 2020 donde se inyectaron para la sanidad, señor presidente del Gobierno, 560 millones de euros y el 2021, 630 millones de euros, además de los 1144 millones de euros vinculados a los apoyos a las empresas, además de los 36,3, consejera, del IBI turístico.

En este debate se ha sacado el asunto de la inmigración también como un arma arrojadiza contra el pacto de las flores. Yo, desde luego, la acumulación de personas en condiciones de penuria que se produjo en algún momento en el ámbito de alguna de las islas no lo compartimos, porque el Estado, en un primer momento, no estuvo a la altura de lo que se esperaba de un país humanitario, pero aprendimos rápidamente a dar respuesta a otra situación inesperada y excepcional, se tomaron decisiones provisionales que funcionaron, como la de los hoteles, como señalaba el presidente, y la realidad hoy, señorías, es que de los miles de inmigrantes que han llegado a las islas apenas quedan unos pocos. El Gobierno de España finalmente hizo lo que tenía que hacer y también lo que tocaba decir para evitar el efecto llamada hacia Canarias, algo que de forma irresponsable -tengo que decirlo- algunos estaban favoreciendo desde nuestras propias islas.

Este es el único punto en el que coincidimos todos: la deplorable falta de solidaridad que han mostrado las distintas comunidades autónomas del país con Canarias en el tema de los MENA, en el tema de los menores no acompañados. Me uno incondicionalmente a las palabras del presidente del Gobierno cuando ofreció Canarias para acoger solidariamente a ciudadanos ucranianos, como ya dije, que huyen de la guerra y cuando le ha recordado al propio Gobierno de España que también hay que tener solidaridad con los MENA africanos, a los que Canarias está atendiendo en la más absoluta de las soledades. Todos, que yo sepa, todos o casi todos, salvo rara excepción, están todavía en Canarias. Usted, señor presidente, deberá plantear una vez más la gravedad de este problema en otros términos que hasta ahora no se han utilizado, y pasan por las modificaciones legislativas, si no hubiera solidaridad, porque parece que no la va a haber.

Sepa usted, señor presidente, que no compartimos el egoísmo insolidario de la mayoría de las comunidades autónomas. O somos un Estado, concernidos, por lo tanto, por los problemas de España, que son de todos, o somos otra cosa, y ya va siendo hora de que se aclaren, porque la situación de Canarias con los menores no acompañados ni es justa ni se puede tolerar por mucho más tiempo.

La inmigración tiene mucho que ver con las relaciones con nuestro continente vecino, con África, y hace apenas unos días nos enteramos por la prensa del cambio de postura del Gobierno de España respecto a Marruecos. Y sobre esto, señorías, mi grupo tiene que decir algunas cosas.

En primer lugar, para la Agrupación Socialista Gomera y para el grupo parlamentario nuestro, lo importante y en primer lugar son los canarios. La política de Estado es verdad que la tiene que hacer el Congreso y el Senado y el Gobierno del España; ahora bien, señorías, consideramos que se ha producido una evidente quiebra del diálogo y el respeto institucional. El Gobierno de España no puede tomar decisiones tan importantes para el futuro de Canarias sin informar y ser informado de lo que se piensa en las instituciones que representan a los canarios y al Estado. Así que de las formas, mal.

En segundo lugar, mi grupo parlamentario no está en contra de una reflexión o consideración de la posición de España en el conflicto que enfrenta al pueblo saharaui y al Reino de Marruecos, no está en contra, no lo estamos, señorías, y quienes sostienen que se deben seguir defendiendo siempre y a pies juntillas los postulados de hace cuarenta años no se han enterado de que el mundo está cambiando vertiginosamente frente a nuestros ojos, a nuestro alrededor. Pero, ojo, la solución definitiva se tiene que acordar en el marco de Naciones Unidas, respetando el derecho internacional y de mutuo acuerdo entre las partes, entre Marruecos y el pueblo saharaui.

Tenemos que trabajar por la buena relación de vecindad con los países de nuestro entorno geográfico, no solo Marruecos, sino todos los demás. A ver si nos enteramos de que en ese continente tenemos que crecer, todavía no nos ha llegado a nuestra memoria que es el continente que tenemos al lado y es en el que tenemos que crecer para todo, económicamente y para todo. Pero tenemos que convencernos, porque lo hacemos muy poco.

Señorías, le reconozco al anterior Ejecutivo logros como la exención del IGTE, la reforma del REF y la aprobación de nuestro Estatuto de Autonomía, que, además, aprobamos todos, pero los déficits estructurales, ojo, los déficits estructurales quedaron sin resolver. Pero quedaron sin resolver antes y se están resolviendo ahora con dificultades. Nos preocupa el desigual reparto de la riqueza en las islas, nos alarma el número de jóvenes que no encuentran empleo y la permanente tasa de paro superior a la media nacional y nos parece inaceptable la enorme cantidad de pobreza que existe en el archipiélago.

Los partidos que formamos el pacto queríamos dar respuesta a estas anomalías canarias a través del fortalecimiento del estado del bienestar, reforzando servicios como sanidad, educación y derechos sociales. Ahora se dice por los partidos de la oposición que hay más pobreza, que la cantidad de personas al borde de la exclusión social es mayor y que el pacto no ha cumplido sus objetivos. No, señorías, no es verdad. El milagro es que, habiendo pasado lo que ha pasado en estos últimos años, en los dos últimos años -no veinte ni treinta, dos últimos años-, el milagro es que a través de las ayudas y la solidaridad nuestra comunidad autónoma no haya quebrado y hayamos sido capaces de ayudar a mantener con vida a los trabajadores del sector turístico y pymes y autónomos. Lo hemos hecho en la medida de lo posible.

Haber llegado hasta hoy con la estructura de nuestro bienestar funcionando es un logro que muy pocos podrían haber alcanzado. Porque, vamos ver, señorías, ¿qué se puede hacer cuando se desploma el turismo por causas totalmente externas, aislamiento provocado por la pandemia?, ¿alguien de los aquí presentes tiene una solución mágica para recuperar el 20 % del PIB en tan poco tiempo? Es una comunidad autónoma, señorías, en que, lamentablemente -digo lamentablemente porque este es un tema histórico-, dependemos del exterior en todo o en casi todo y ahora con la inflación y la crisis, todavía peor. La respuesta es que no, señorías, no existe manera humana de afrontar una crisis mundial que afectó al transporte y al comercio en todo el planeta. Lo que se hizo en Canarias, gracias al Estado y la Unión Europea, fue atender primero la salud de las personas, salvando vidas y ayudar más tarde a la supervivencia de nuestro tejido económico para sostenerlo con vida durante el periodo que duró la parálisis. Se realizó y se reforzó con ocho mil nuevos efectivos los servicios de salud y la educación; se reorganizaron los servicios de ciudadanía y de cuidados intensivos para afrontar la demanda por causa COVID; se crearon equipos que trasladaban las estrategias e instrucciones a las autoridades sanitarias y se informó a la población, casi en tiempo real, de la evolución de la pandemia, y se organizó la logística de la vacunación. Y, una vez más, señorías, el personal sanitario estuvo a la altura de lo que necesitaban las islas. Seamos rigurosos, señorías: se hizo lo mejor posible y se hizo bien.

Aunque quedan muchas cosas por hacer. Se han invertido millones ya también en alguna isla como en La Palma, aunque quedan, insisto, cosas por hacer. La Consejería de Obras Públicas, a través de Visocan, ha comprobado, ha comprado y entregado del orden de cien viviendas y ha puesto a disposición las mismas a quienes las necesitaban. Y se ha creado una oficina del Gobierno para atender y realizar las solicitudes correspondientes de ayuda. Digo esto porque en este asunto, en la recuperación de la isla de La Palma, entre otras cosas -lo hemos escuchado al presidente del Gobierno del Estado, de Canarias-, es un tema de país. La recuperación no es un tema de un partido político, es un tema de todos. Por tanto, siempre, desde el primer momento recuerden que reclamaba la unidad, y lo vuelvo a hacer hoy, para el tiempo que queda de legislatura. Sé que ahora el interés político puede despertar y suscitar conflictividad, pero no lo hagamos: La Palma necesita unidad antes, ahora y después.

A pesar de la lentitud y la burocracia de la Administración pública, estoy convencido de que en un periodo de pocos meses la isla de La Palma va a recuperar las infraestructuras perdidas, que se recuperarán las zonas de cultivo del plátano que resultaron afectadas y que nadie se va a quedar viviendo en la calle por haber perdido su vivienda.

Y estamos ante un proyecto, como decía, de recuperación de país. Lo expuesto, sinceramente, por la oposición en esta Cámara, cuando afirma que en estos años no se ha entregado ninguna vivienda, vamos a tener un poco de memoria histórica. En fin, hay un plan de vivienda, hay una estrategia, se han hecho ya, están en proceso... Vamos a dejarlo ahí, a dejarlo ahí.

¿Cómo está hoy Canarias después de estos dos años? Pues, miren, señorías, en pie, está en pie, que es bastante, no es poco, y está empezando a recuperar el empleo, como demuestran las cifras oficiales.

Pero este no sería un debate sobre la realidad si no pusiéramos sobre la mesa los nuevos escenarios a los que nos estamos enfrentando. Cuando parecía que el mundo había superado la pandemia y que empezaba a regresar la normalidad, de nuevo nos amenazan las peores noticias. La invasión de Ucrania por parte de fuerzas rusas que ha puesto al mundo entero en otro nuevo escenario de crispación y de crisis, y eso está afectando lógicamente a Canarias. Pero esta recuperación se ha tropezado con una nueva adversidad: primero, el alza del índice de precios al consumo, que afectaba a Europa y que reduce la capacidad adquisitiva de los ciudadanos, y más tarde, después, el alza de los combustibles, que ha disparado los precios de la energía y el transporte y que, a su vez, contribuye al aumento del IPC. Inclusive, ya los efectos de la guerra agravan todo lo anterior, pues nos llevan, inclusive, en algún momento, espero y deseamos que no sea así, al desabastecimiento.

Es suicida que las islas Canarias sigan hablando de esto, sigan cautivas de la importación del combustible de derivados fósiles cuando tenemos una reserva infinita y gratuita de energías renovables y limpias, unas energías que nos pueden otorgar una soberanía energética, señor consejero, que se demuestra vital en momentos de crisis internacionales como la que estamos viviendo ahora con esta amenaza. Apostemos por la transición energética de una forma real. Tiene ahora recursos importantes, de 476 millones de euros, para hacerlo. Vamos a apostar por el vehículo eléctrico. Tenemos una oportunidad histórica que no la podemos desaprovechar. Hasta aquí no había sido así, pero ahora tenemos luz frente a eso. Es un modelo coherente con nuestra economía de servicios y de turismo, es una apuesta por el medio ambiente y crea un sistema eficiente que nos ahorrará una parte importante de la factura energética, que tanta relevancia está teniendo hoy para las familias en nuestra comunidad autónoma y en nuestro país, y en los países del entorno comunitario. A pesar de ello, ningún otro Gobierno lo ha convertido en una prioridad y ha sido precisamente este, que además se enfrenta a todas las adversidades y desastres que ha tenido, y ha tenido la voluntad y el compromiso de sacar adelante la ley de lucha contra el cambio climático.

Hay analistas que advierten de que nos vamos a poner en una inflación de doble dígito en muy poco tiempo. Superaremos el 7,4 y el 6,8 de nuestra comunidad autónoma, y eso significa, señor presidente, el empobrecimiento de los trabajadores de nuestro país y, muy especialmente, de Canarias, que padece los salarios más bajos del Estado. Además, tenemos en las islas un elevado número de pensiones no contributivas que se encuentran al borde de la supervivencia y donde la pérdida de capacidad adquisitiva puede tener efectos terribles.

Las reservas actuales en el sector turístico nos hablan de una ocupación alta, pero todos los expertos avisan de que esto puede cambiar radicalmente. El incremento de los costes del combustible ya está encareciendo todos los transportes: el aéreo, el marítimo, el terrestre. De ahí la necesidad de reducir las tasas aeroportuarias y portuarias. Que, por cierto, alguien mencionó los trenes o esa apuesta por el transporte guiado. Hablemos también del transporte sostenible. Es importante recuperar el Convenio de Carreteras, pero no es bueno y deseable que construyamos carreteras en todos los lados, debemos ser sostenibles también con la ocupación de nuestro medio. Del mismo modo que debemos ser sostenibles desde el punto de vista del crecimiento demográfico. Por tanto, los expertos avisan de que hay que cambiar radicalmente. El incremento de los costes nos va a llevar, de los costes, insisto, en la energía, nos va a llevar a problemas.

Y todo eso se agrava con la crisis energética, que afecta aún más a todos los sectores económicos. El turismo cae, señorías, si cae, que no ha caído todavía, pero, si cae, caerá nuestro PIB y otra vez nos enfrentamos al fantasma del desempleo y la pobreza que afectará a nuestras familias. De ahí la clave de la estrategia de ámbito nacional que se está planteando en esta semana en cooperación con Europa, señor presidente del Gobierno. En estos momentos ya estamos sufriendo el impacto de los precios de los combustibles y la cesta de la compra, pero los próximos meses pueden ser mucho peores, especialmente en las islas no capitalinas, recuerden que sufrimos la doble insularidad y los dobles costes, La Gomera, El Hierro y La Palma especialmente.

Por tanto, Canarias, señorías, lo que nadie dice es que lleva décadas teniendo una de las peores medias salariales del país, lo que nadie dice es que hemos construido una Canarias en la que la riqueza que produce no se reparte bien, lo que se calla porque conviene es que esta tierra ha tenido desde hace muchísimo tiempo una tasa de paro por encima de la media española y escandalosamente por encima de la europea. A pesar de todo eso, se ha mejorado.

Los pobres no nacieron hace dos años, aunque muchos los hayan descubierto hace poco. A pesar de las dificultades extraordinarias que ha tenido que afrontar el Gobierno, se ha hecho un esfuerzo para atender las necesidades de las personas más vulnerables. Primero era mantener los servicios esenciales del estado del bienestar, la sanidad y la educación, donde se volcó un esfuerzo extraordinario, ha dado resultados; y lo segundo era dotar de medios materiales y humanos un servicio de derechos sociales que nunca había sido una prioridad para ningún Gobierno. Tenemos que reconocerlo.

¿Ha sido suficiente? No. Por supuesto que no. La prestación canaria de inserción se ha duplicado, hoy son 10 336 familias las que se acogen, la mayor cifra de la historia, pero no es bastante, no es bastante, aunque sumemos el ingreso mínimo vital, que no ha alcanzado tampoco los objetivos previstos. Pero esto se está poniendo en marcha para vincularlo a la renta ciudadana.

Hemos luchado con uñas y dientes para mantener una respiración asistida a nuestro tejido empresarial, para que los ERTE salven puestos de trabajo en el sector turístico, peleado para conseguir subvenciones y ayudas para todos los sectores afectados.

Y todo eso se logró, señorías, se logró y son hechos constatables, ejecutados con criterio y planificación, y, señor portavoz, con criterio y planificación. Ustedes, si les preguntáramos qué habrían hecho, seguramente no lo habrían cambiado o habrían hecho menos o nada.

Quiero felicitar al grupo que integra la Consejería de Turismo, Industria y Comercio, y a Yaiza Castilla, su consejera, que ha impulsado un plan para realizar la restauración de la hostelería, el ocio, el turismo activo, con más de cuatro con seis millones de euros. Ha subvencionado el IBI del año 2021 a más de novecientas treinta empresas, hoteles y establecimientos hoteleros, con una inversión de 3,6 millones de euros. Tres convocatorias para incentivar la conectividad. Se amplió el seguro de asistencia en viaje, que ayer señalaba el presidente del Gobierno que efectivamente era novedoso en Europa, en el año 2020. Se pusieron en marcha bonos turísticos, se impulsó el turismo en islas verdes, los planes sostenibles turísticos en destino y en materia de infraestructuras se han llevado a cabo decenas y decenas de infraestructuras para mejorar la calidad en el destino turístico.

En el sector industrial, se han movilizado más de dieciocho millones de euros para la modernización y la diversificación industrial, más de ochenta proyectos beneficiados de inversión pública y privada, apoyo a la gestión de los polígonos industriales, la elaboración de planes de áreas industriales en cada una de las islas y se aprobó -lo sabe el señor presidente del Gobierno- la semana pasada en el Consejo de Gobierno la Estrategia de Desarrollo Industrial de Canarias para 2022-2027.

Lo propio en el sector comercial. Se han llevado a cabo más de 26 actuaciones en mejora y modernización de zonas comerciales, zonas comerciales abiertas, se ha impulsado el comercio rural en las islas, se ha movido o promovido el comercio digital a través de la plataforma Consume Canarias. Aunque la mejor medida que recibirán nuestros comerciantes es la que usted va a anunciar el jueves de esta semana, señor presidente del Gobierno, es decir, darles libertad para que puedan desarrollar su negocio, aunque todavía en la calle se lleve la mascarilla. Esa es la más importante.

Mayor compromiso, quiero hacerlo aquí, con las universidades canarias. Señor presidente del Gobierno, señor consejero de Transición Ecológica, si el recibo de la luz de la Universidad de La Laguna, por poner un ejemplo, que tenía un coste de 500 000 euros, se ha multiplicado por tres, haga un convenio y póngale la energía solar pasado mañana, porque se ahorra un millón de euros, un coste de un millón y medio. Y lo propio ocurre con la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Ayudemos a nuestra universidad porque están pasando por dificultades, igual que cualquier colectivo. Posibilitemos la reducción de su consumo energético, dado que se ha triplicado en esta crisis, a través del plan de autosuficiencia energética para edificios. Esto es posible, como le digo.

Alcancemos un pacto para impulsar la I+D+i en Canarias con carácter plurianual. La mano tendida, hagámoslo, hagámoslo, y hagámoslo ya, que podemos hacerlo. Un pacto donde nos entendamos todos para que las universidades sepan que desde la política se trabaja desde la unidad, desde la cooperación, con la coherencia necesaria.

Y tenemos que apostar indudablemente también por la educación de 0 a 3 años, para lograr un mayor número de plazas públicas, señorías.

Además de disponer de los mejores servicios esenciales, debemos seguir trabajando para fortalecer la administración de justicia, la oferta cultural que aporta riqueza y empleo a nuestra comunidad autónoma, el deporte, con la destacada constitución la... canaria del deporte, las políticas activas de juventud y afrontar el compromiso de igualdad efectiva entre hombres y mujeres y el respeto a la diversidad.

Señorías, voy acabando.

Ojalá Bruselas pueda poner en marcha para atender esta crisis un programa de ayudas como el que destinó, de 1,5 millones de euros, a la lucha contra el efecto de la pandemia a nivel mundial. No va a ser posible, señorías, porque el conflicto bélico de Ucrania está haciendo que los países, los veintisiete miembros de la Unión Europea, gasten recursos en defensa y en armamento. Todo esto no se dice de una forma abierta.

Las islas Canarias dependen de las importaciones. El año pasado nos gastamos más de quince mil millones fuera de las islas y exportamos solamente 2800 millones de euros. Ese déficit de la balanza comercial de más de doce mil millones es lo que pagamos precisamente con ese sector económico capital, especial, que tiene Canarias, y extraordinario, que es el turismo, la venta de los servicios públicos.

Vivimos una realidad desquiciada en donde los escenarios son volubles y los cambios son constantes, pero soy de los que piensa que hay que esperar lo mejor, pero tenemos que prepararnos para lo peor. No voy a describir en torno a esta realidad lo que pienso.

En un escenario de inflación nos toca trabajar y bajar los impuestos... No toca bajar los impuestos de forma generalizada, y en la oposición deben saberlo, señorías, y en la oposición deben saberlo, dada su incidencia en la prestación de los servicios públicos. Ayer lo decía el presidente del Gobierno: recuerdo cuando, siendo presidente del Gobierno, el señor Rivero nos pidió a las corporaciones locales que subiéramos el IGIC hasta el 7 % para atender los servicios esenciales. Ahora no se deben tocar, entre otras cosas, por dos razones: primero, porque los servicios esenciales dislocan la economía interna con la que se está atendiendo a los servicios esenciales -la sanidad, la educación y los servicios sociales-, y además en más de ciento cincuenta millones; y además trastoca la economía de las corporaciones públicas, de cabildos y ayuntamientos, que tienen dificultades y tienen que prestar los servicios a la ciudadanía. Pero además, aunque quisiéramos hacerlo, no va a tener repercusión en el consumidor. No va a tener repercusión en el consumidor, porque los problemas tenemos que referenciarlos y resolverlos en el mercado.

Pero creo que es imprescindible que nuestro Gobierno, señor presidente del Gobierno, disponga de un paquete de medidas en el plan nacional de actuaciones con motivo de esta crisis. Es imprescindible, especialmente para Canarias, y de acuerdo con los gobiernos autonómicos, que ya ha tenido la interlocución suya y del vicepresidente del Gobierno con el Gobierno de España; y digo especialmente para Canarias, y de acuerdo con los gobiernos autonómicos, porque tenemos que afrontar los sobrecostes que afectan a sectores estratégicos como el transporte de mercancías, el turismo, además de la agricultura, apostando por la diversificación económica y la soberanía alimentaria, a la industria y a la ganadería, que son esenciales y estratégicos para los canarios.

Pero tenemos que tomar decisiones, tenemos que hacerlo ya, no podemos esperar más tiempo. Efectivamente, estas decisiones deben emanar, que para eso hemos esperado hasta los acuerdos de los países miembros de la Unión Europea, tal como se ha anunciado en el Consejo Europeo del día 24 y 25 de esta misma semana, y se alcanzarán acuerdos que atiendan singularidades canarias y que vayan en el camino del refuerzo de una parte de Europa, del Posei, para proteger nuestras producciones y modelar también lo que significa nuestro Régimen Especial de Abastecimiento, para tener la certeza de que no entramos en contradicción excesiva con nuestras producciones locales. La prórroga hasta el año 2023 de la flexibilidad en la regla de gastos y la intervención del mercado eléctrico y otros mercados desde el seno de la Unión Europea.

Pero ¿en qué debe consistir esa intervención, señor presidente del Gobierno? En desligar, es urgente, urgente para todas las familias, desligar el precio del gas y el coste de la energía en el mercado. Se están pagando recibos de la luz absolutamente abusivos. Una familia o una pareja que tenga una pensión no contributiva y tenga que pagar la luz y comprar la leche, el pan y el aceite no llega a final de mes. Por tanto, tenemos que tomar la decisión cuanto antes, porque hay que tomarla aquí, aunque otros piensen que hay que adoptarla en otro lugar. Ya España redujo el IVA en el año 2021 con un impacto en las cuentas públicas importante, pero no repercutió en los consumidores. Lo sabemos, por eso hay que actuar aquí.

Además, la Unión Europea debe articular un fondo anticrisis para atender la realidad de los Estados miembro como consecuencia de la guerra y, particularmente, de aquellas regiones con mayor impacto y singularidades como Canarias, para atender las ayudas directas al transporte de todos los sectores afectados; el apoyo al sector agrícola y ganadero, como decía antes, incrementando el Posei adicional y mejorando las cantidades que son bonificadas por el AIEM para reducir el precio del pienso y los forrajes; subvencionando directamente el gasto del combustible del sector pesquero y también -si fuera posible, creo que es difícil, lo llevamos intentando hace mucho tiempo- para aumentar las cuotas de captura; actualizar las ayudas del REA del sector industrial, de forma que compensen los nuevos costes adicionales y abaratar los costes de los productos básicos de la cesta de la compra; además de esa propuesta de pacto de rentas.

Creo que si fuéramos verdaderamente responsables, independientemente de todo lo que tenemos que hacer ahora, si fuéramos, señorías, todos verdaderamente responsables, este debate tendría que concluir en unidad. Es decir, yo sé que eso es pedir mucho y sobre todo sabiendo que tenemos unas elecciones, o tiene esta comunidad autónoma unas elecciones... Sí, digo el año que viene, porque algunos con esas invitaciones se estarían frotando las manos para decir "vamos a ver si esto se produce antes". Digo que, si fuéramos verdaderamente responsables -también es bueno ironizar de cuando en cuando (risas del orador)-, digo que si fuéramos responsables verdaderamente, este debate tendría que concluir en la unidad. Deberíamos ponernos todos de acuerdo, del lado del Gobierno de todos los canarios, para afrontar un año que puede ser incluso peor que los que ya hemos pasado, puede ser inclusive peor que los que ya hemos pasado.

Vamos a hacerlo, de verdad, por una vez, aunque nos equivoquemos, pero que sea para unirnos en determinadas políticas que tenemos que hacer en el futuro próximo, antes decía algunas de ellas, en las universitarias, y podemos hacer las otras, las medidas para salir de la crisis, pero no haciendo lo contrario de lo que necesitan ser precisamente medidas adecuadas para atender la crisis.

E insisto, este no es el momento tampoco, fíjense en lo que les voy a decir, ni siquiera es el momento para hacer política, señorías, es el momento para hacer milagros.

Muchas gracias.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Curbelo.

Turno para el señor presidente... (La señora Espino Ramírez solicita la palabra).

Sí, perdone, señor presidente, un minuto. (Rumores en la sala).

Señora Espino, dígame.

¡Silencio, señorías, por favor!

La señora ESPINO RAMÍREZ (desde su escaño): Gracias, presidente.

Según el artículo 83, por alusiones que impliquen juicios de valor o inexactitudes sobre una persona o conducta de un miembro de la Cámara, que se puede contestar esas alusiones en la misma sesión o en la siguiente, me gustaría pedir un minuto por lo que dijo ayer el presidente del Gobierno acerca de que Ciudadanos...

El señor PRESIDENTE: Perdón, perdón, señora Espino. ¿Quiere usted intervenir por el artículo 83, por una intervención del día de ayer?

La señora ESPINO RAMÍREZ (desde su escaño): Sí, del señor Torres.

En el artículo 83.2 se especifica que las alusiones se podrán contestar en la misma sesión o en la siguiente y hoy es la siguiente, señor presidente.

El señor PRESIDENTE: Sí. Señor presidente, a su escaño, por favor.

Señora Espino, la realidad es que por tradición y por usos parlamentarios ese turno que usted me pide se suele solicitar en el mismo momento en el que se producen. Entre otras cosas porque, como bien ha leído usted, ese turno se concede a juicio de la Presidencia y la inmediatez es importante para que la Presidencia pueda valorar si efectivamente esas manifestaciones o afirmaciones merecen o no el turno y, como comprenderá, veinticuatro horas más tarde a la Presidencia le resulta imposible. Por tanto, no tiene la palabra.

Señor presidente.

(Rumores en la sala).

Silencio, señorías. Silencio, señorías, por favor.

El señor presidente tiene la palabra.

El señor PRESIDENTE DE CANARIAS (Torres Pérez): Muchas gracias, presidente.

Comienzo en esta segunda jornada del debate de la nacionalidad respondiendo a los grupos que apoyan al Gobierno. Y empiezo, aunque iré individualmente, agradeciendo el tono y las intervenciones de todos, el apoyo al Gobierno de Canarias y sus creo que reflexiones y afirmaciones rigurosas con distintos aspectos, quedándome con alguna de las frases últimas del señor Curbelo. Es verdad que, como bien decía Ortega y Gasset, somos lo que somos y nuestras circunstancias o, como se le atribuye a Felipe II, no mandábamos las naves a luchar contra tantos elementos. Pero también tengo que decir que, si bien casi hay que pedir milagros, también creo que ante cualquier adversidad lo importante es que estemos unidos. Y lo más relevante es que, igual que pido a la oposición unos ejercicios de unión con respecto a lo que es la acción del Gobierno, también el Gobierno lo realiza siendo cuatro fuerzas políticas, que tenemos lógicamente diferencias -si no, no seríamos fuerzas políticas distintas-, pero que apartamos aquellas para caminar en lo que hoy creo que más nos compete, y es responder, resolver, dar cuenta de la situación actual ante la realidad que viven las canarias y canarios.

Es verdad que si este debate de la nacionalidad hubiese ocurrido hace mes y poco hubiese sido seguramente otro, algunos aspectos que hoy han tenido una especial relevancia. La invasión de Ucrania, sin ninguna duda, hizo que se cambiara también las intervenciones de todos, incluida la mía, como también la carta enviada por el presidente Sánchez, que conocimos el pasado viernes. Ambos aspectos han entrado con fuerza en el debate de la nacionalidad y, por tanto, también estamos respondiendo ayer y hoy a ambas circunstancias.

Pero es verdad, como decía la portavoz Nayra Alemán, del Partido Socialista, que quizás la respuesta a la inmediatez nos hace apartarnos de cómo estábamos hace un año. Daba datos de vacunación y recuerdo que hace un año, en este mes, no teníamos los 1144 millones de euros, que simbolizan lo importante que son los acuerdos europeos, porque mañana hay un Consejo Europeo fundamental para medidas con respecto a lo que es el encarecimiento energético. Y, por tanto, si no se hubiese dado aquel Consejo de Gobierno, que duró varios días y se culminó con éxito especialmente para los Estados miembros que más sufrían la crisis económica... Mañana y pasado tenemos otro Consejo Europeo importantísimo, cuyas medidas irán luego a los consejos de ministros de los países y consejos de gobierno de las comunidades para arbitrar mecanismos de contención ante el encarecimiento de las materias primas y de la energía en el conjunto de Europa.

Decir que ha habido intervenciones sobre inmigración que comparto, y ayer lo decía. La directiva europea no se aplica exclusivamente a los países europeos, y no se aplicó ni para Siria ni para Afganistán ni para la diáspora africana, y creo que en estos momentos, donde todos hemos intervenido, los grupos del Gobierno también, en apoyo y solidaridad al pueblo ucraniano, y eso es absolutamente indiscutible, también Europa tiene que pensar que habrá más diásporas en el futuro, como las ha habido en el pasado, y espero que se aprenda de este drama que se está viviendo para que la respuesta a quienes sufren también de conflictos bélicos en África o en otros puntos de Europa, tengan idéntica respuesta en el futuro. Hasta ahora se ha fracasado en conseguir esta activación de la directiva europea, que ahora se hace con Ucrania, pero espero que esto en el futuro se pueda corregir.

Yo creo que ha habido un esfuerzo evidente en los pilares básicos del estado del bienestar: educación, sanidad, derechos sociales... Más de dos mil millones por vez primera en educación; en sanidad pública, 3500 millones de euros; en dependencia tenemos más recursos; en discapacidad tenemos también más presupuesto; en el plan concertado para los ayuntamientos, también tenemos más partidas presupuestarias que se transfieren para que los ayuntamientos hagan frente a lo que es una responsabilidad propia, que es la atención a los servicios sociales. Es decir, este Gobierno, y los datos están también ahí, y agradezco las intervenciones, con ese muro de contención.

Hemos hablado también de la sanidad y hemos hablado también de lo importante que es responder a la sanidad mental. Ayer debí decir que en el año actual, en el año 2022, vamos a abrir unidades de salud mental en Gran Canaria y en Tenerife, en el Hospital Juan Carlos I, en el HUC, para dar respuesta también a las personas que tienen trastornos de personalidad, porque se agrava también en los momentos de crisis. Igual que ha ocurrido con la desgracia de La Palma, porque es así, era necesaria una atención psicológica. Exactamente igual cuando hay menos resistencia mental ante las dificultades para llegar a fin de mes o para responder ante las adversidades que uno no espera en la vida.

Junto a ello, creo que, en la intervención también de la portavoz del Grupo Socialista, apostar por la economía, por el turismo o por las infraestructuras también es indiscutible y creo que a nadie debe molestar -sinceramente lo digo- que tengamos ahora mayores parámetros de inversión en esas áreas, mayor apoyo en esas áreas que son estructurantes para la economía, y que han conseguido, por todos esos esfuerzos también, que podamos tener hoy mayor generación de empleo, mayores empleados, menos desempleo.

Y, sí, comparto la reflexión de que en ocasiones esto puede ser una estrategia, haya gobiernos que ante una dificultad miren hacia otros y culpen a otros y digan que es culpa de otros lo que en el fondo es responsabilidad del Gobierno propio, porque eso es desentenderse de lo que es la responsabilidad de cada uno. Estratégicamente puede funcionar. Yo estoy convencido de que eso empeora la vida de la gente a la que nosotros gestionamos, en cualquier administración, lo tengo claro (palmoteos), lo tengo claro, y además es vulnerar la voluntad de los votantes. A nosotros nos han votado en Canarias los votantes de esta comunidad y en el conjunto del país han votado a otros gobiernos y en los ayuntamientos a otros y en los cabildos a otros y, por tanto, cada uno tiene que responder de su responsabilidad, y no es responder de su responsabilidad culpar a otros gobiernos de lo que uno no hace.

Y, sí, este es el Gobierno de la transformación energética, de la Agenda 2030, de la emergencia climática, de la ley canaria contra el cambio climático. Eso ya ahora es urgencia. Y lo decía también Luis Campos, ha habido cabildos como el de Gran Canaria y otros que han apostado por ello sin ambages, desde hace tiempo, y ahora resulta que mañana, en el Consejo Europeo, los países de Europa van a pedir agilización y la entrada de las energías renovables, porque hay que depender menos del gas o del petróleo.

Sobre los asuntos epidemiológicos -y acabo con el Grupo Socialista-, hay quien ha criticado que por qué se aprueba mañana en el Consejo de Gobierno suspender las restricciones cuando tenemos más casos positivos. Ómicron tiene unas características específicas. El último informe epidemiológico -y mañana habrá uno actualizado- concluye, del 17 de marzo, que las camas en Canarias han descendido un 18 %, las UCI en Canarias han descendido un 12 %. Por tanto, son razones técnicas las que, dentro de lo que son las competencias del Gobierno de Canarias, asumimos suspendiendo las restricciones. Activamos las mismas si es preciso, esperemos que no tengamos que hacerlo.

Sobre Nueva Canarias y el portavoz Luis Campos, decir que tiene razón. Nunca hemos tenido tantas circunstancias adversas. Ha hecho usted un análisis, también riguroso, sobre lo que ocurre en Ucrania, con su matiz humanitario, social y económico, y ha tenido una apasionada intervención sobre el Sáhara, que esperaba porque sé de su compromiso individual y también de su organización política.

Dije ayer que aquí hay distintos grupos políticos, desde la reciente democracia recuperada ha habido posiciones distintas, matizadas que están en los programas electorales y, por tanto, ustedes han tenido una visión determinada, otros grupos hablan de la República Árabe Saharaui Democrática, otros hablan de autodeterminación, otros no dicen nada en sus programas electorales, incluso hay partidos políticos que lo han ido cambiando con el paso de los años. Como secretario general del PSOE de Canarias, me tengo que remitir a mi programa electoral; como diputado aquí, en el Parlamento, me tengo que reflejar en lo que voto en el Parlamento, y voté esa PNL en el año 2021 que hoy mantengo absolutamente en todos sus términos (palmoteos); como miembro del Gobierno de cuatro fuerzas políticas, igual; también respeto absoluto por las cuatro fuerzas políticas y también por mí, y no puede ser de otro modo, a lo que hemos firmado como pacto de progreso en todo lo que es ese documento.

Sobre la carta, que no le resto trascendencia ni relevancia, que la tiene, vuelvo a repetir lo que dije, que es lo que me obliga, lo que yo traslado, y es que, con respecto a Marruecos -también lo ha dicho usted-, las buenas relaciones con este país que es frontera son buenas para Canarias. Hay cerca de un millón de marroquíes en España, muchos de ellos en Canarias; hay más de diecisiete mil empresas españolas que trabajan con Marruecos, de estas muchas, miles son de Canarias; hay unas setecientas empresas que están allí radicadas, cerca de cincuenta son canarias; y tenemos un convenio entre Estados que, entre otras razones, obliga a que haya un mayor control, mejor posible, con respecto a los flujos migratorios y también a la responsabilidad de la soberanía de los Estados y también de Canarias. Y en este caso, reconociendo, reconociendo que es política exterior una competencia del Gobierno de España y, por tanto, igual que nosotros exigimos respeto a nuestras competencias y es exigido por otros idéntica reciprocidad, también tengo que decir con rotundidad que esto se tiene que explicar. Que el presidente del Gobierno de España lo va a explicar el 30 de marzo, que lo hará esta tarde el ministro de Exteriores y que también, y lo he pedido, lo tienen que explicar en Canarias, lo tienen que explicar en Canarias.

Y creo, diciendo eso, vuelvo a repetir lo que dije ayer: después de un conflicto de casi cincuenta años es que ninguna propuesta que se haga, incluida esa carta, a día de hoy tiene ninguna posibilidad de recorrido si no es aceptada por las partes, que sea una propuesta que sea justa, duradera y aceptada por las partes, lo que significa que ninguna propuesta que haga el Frente Polisario tiene recorrido si no la acepta el Reino de Marruecos y ninguna propuesta que haga el Reino de Marruecos tiene recorrido si no la acepta el Frente Polisario. Y lo ideal, lo ideal, sería, y sé que estoy tocando mucho sentimiento, porque tenemos también criterios particulares, que se solucione el conflicto. No va a ser fácil, cincuenta años lo evidencian, no va a ser fácil.

Y, por tanto, eso que dije ayer lo vuelvo a decir hoy: habrá resoluciones y haré lo mismo que hice en el año 2021 con mi voto en este Parlamento.

Sobre La Palma, indudablemente la unidad es clave; sobre la inmigración, ya lo he trasladado; igualmente sobre lo que es la apuesta por las energías limpias.

Y ha dicho usted algo importante: el Convenio de Carreteras tenemos que terminar de resolverlo. Hay 300 millones que se han resuelto, tenemos que acabarlo. Nuestro compromiso es poner un punto final, porque, si no se consigue el acuerdo, iremos a la justicia, y nosotros creemos que sentándonos con el Gobierno de España llegaremos a una resolución del cien por cien de este problema.

Termina usted con un mensaje de esperanza, creo que es muy importante, en el que toca también... Me sonreía porque uno de los nombres que usted decía es, había sido compañero de corporación, amigo íntimo, Víctor Batista, pero hizo usted una relación de personas que son importantes y que en el fondo, mientras le escuchaba -quizás esto es una deformación profesional-, decía qué pena que no entren en los diseños curriculares de los centros educativos, porque sería importantísimo que los canarios y canarias que están en las aulas, los niños y niñas, los adolescentes, los jóvenes conozcan quiénes son nuestros referentes culturales, que no están en esos libros porque en ocasiones los que están son otros de otros lugares del país.

Con respecto a la intervención de Podemos, de Manolo Marrero, ha dicho usted algo que creo que es importante, y es la respuesta coordinada a las dificultades y a los problemas, respuestas coordinadas de las administraciones. En ocasiones se piden cuestiones que chocan entre una y otra y estamos en un momento en donde las adversidades son tan altas pero que tienen un punto en común. El problema energético que estamos sufriendo en Canarias lo está sufriendo también Extremadura, Asturias, lo está sufriendo también Valencia. El desabastecimiento, incluso con mayor gravedad, es un mal que en estos momentos tenemos por la huelga de transportes, que esperemos que pronto pueda acabar, en el conjunto de este país, como lo tuvo también Francia no hace mucho. Estamos ante una situación que no afecta en exclusiva a Canarias. Lo que suma Canarias, por sus circunstancias, su propia realidad, a un problema que tenemos que darle una respuesta coordinada, desde Europa, desde el Gobierno central y desde las comunidades autónomas.

Ha expresado usted también un desacuerdo con un socio de gobierno, que tiene que explicarlo en el seno de ese pacto, igual que lo hará, lo tendrá que hacer el presidente Sánchez con quienes lo han apoyado en la legislatura, aclarar todas las circunstancias de su carta.

Sí, creemos que es importante que se impulse la ciencia, lo hemos visto con La Palma, el vulcanismo, la apuesta por la biodiversidad y -absolutamente de acuerdo con usted- la defensa de los servicios básicos esenciales. Ayer daba yo un dato: en el año 2021 hemos hecho más operaciones en los hospitales propios que antes de la pandemia. Por tanto, estamos haciendo una apuesta clara, firme, que creo que es invertir para el futuro, a través de esos hospitales de la sanidad pública, que quedará para el servicio a los canarios y canarias.

Y, sobre la ley de memoria histórica y el catálogo, no hay que hacer otra cosa que aplicarla. Aquí no se tiene una sensación equivocada por ningún... no se debe tener por ningún representante municipal que queremos ir a favor de unos y frente a otros, cuando lo que tenemos que hacer es retirar todos los vestigios de la dictadura, pero sin ninguna duda, porque el que duda entonces crea una sensación de que "esto déjalo aquí", cuando resulta que son emblemas que todos hemos decidido democráticamente que deben desaparecer. Son otros, no los que estamos aquí, los que quieren que se queden, por lo que representan, y ninguno de los setenta diputados quiere que permanezcan esos vestigios del franquismo y de la dictadura, del totalitarismo y de la aniquilación, a través de la fuerza del pensamiento libre de los españoles y de los canarios y canarias, como emblemas de una época que tenemos que sepultar, sobre todo para que no se vuelva a repetir.

Y con respecto a la intervención de la Agrupación Socialista Gomera, que ha comenzado también, como todos, hablando de la solidaridad con Ucrania, decir que, es verdad, yo creo sinceramente, con todos los defectos que hayamos podido tener, lo digo como presidente de un mayor o mejor... perdón, un mejor Gobierno, y no porque esté yo en ese Gobierno, ante las adversidades que el que hemos tenido. Y nos van a juzgar los canarios y canarias. Y no sé qué va a pasar en abril, en mayo o en junio, el deseo de todos es que hoy, si es posible, acabe la invasión. Con la restauración del orden internacional tendrá que volver la economía a unos parámetros normalizados. Siempre que ha habido un conflicto bélico, siempre, siempre, año 1972, cuando ha habido también un problema grave con carburantes, estoy hablando también de esos años antes de la muerte del dictador y luego la reciente democracia, hubo luego una crisis relevante en lo económico. Y, diciendo eso, hemos tenido que enfrentarnos a muchas adversidades y tenemos una más, una nueva, una que igual es la más grave de todas, y que lo que deseamos es que primero acabe para que acabe el exterminio de un pueblo inocente, a la que también haremos frente, este Gobierno. Que los recursos deben ser extraordinarios.

Ha hecho usted una reflexión sobre un conflicto en el Sáhara, que también queda en las actas, y, por tanto, creo que también hay que analizar con rigor cómo se puede salir de una situación enquistada.

Y, sí, la apuesta por los servicios públicos es absoluta por parte de este Gobierno. Miren, mientras intervenía el señor Curbelo... Que, por cierto, sí, apoyamos el transporte guiado, puede ser también, como usted ha dicho, sostenible, y hay propuestas para las estructuras ferroviarias que están en los presupuestos del Gobierno de Canarias, porque así lo impulsaron los cabildos de las islas más pobladas desde el año, si no me equivoco, desde el año 2009-2010, con presupuestos ya firmes y con proyectos que han ido caminando, y pueden ser también, por qué no. Hay además proyectos al respecto que sean sostenibles.

Pero, fíjense, nadie duda, porque tampoco se ha afirmado lo contrario, no se puede, que no hemos multiplicado por cinco los beneficiarios de la prestación canaria de inserción y del ingreso mínimo vital. Y vuelvo aquí a traer los datos de la pobreza: 27,9 era el porcentaje de pobreza en el año 2018; 29,1 en el año 2021. Y, por tanto, es evidente que ha habido una contención y que, en otros años anteriores, con una apuesta determinada para luchar contra la pobreza, los datos debieron ser otros.

Y también -y lo digo para acabar-, Canarias está más preparada. Canarias sale de dos años durísimos y remonta económicamente. Pero ante lo que tenemos en frente, en lo que tenemos que tomar medidas determinadas, está más preparada, porque hay más gente trabajando, hay menos gente, como digo, en el desempleo, hay más afiliados a la Seguridad Social y hay recursos públicos para responder ante el avatar que tenemos ahora enfrente, que es esta crisis económica producida por la invasión de Ucrania. Y, cuando uno está más preparado ante cualquier eventualidad, puede responder mejor. ¿Qué hubiera pasado si esto nos hubiese cogido en los peores meses de la pandemia? ¿Qué hubiese pasado si esta invasión de Ucrania hubiese ocurrido cuando estábamos confinados? ¿Qué hubiera pasado si hubiésemos tenido 300 000 parados y no 205 000 como tenemos ahora? ¿Qué hubiese ocurrido si hubiésemos tenido menos prestaciones para las familias más vulnerables? Indudablemente, Canarias lo tendría peor. Ese es el mensaje. Estamos más preparados ante las circunstancias adversas.

Y termino agradeciendo a las cuatro fuerzas del Gobierno de Canarias, que no lo hemos tenido fácil, pero también quiero que sepan que no lo vamos a tener fácil en los próximos meses. Pero el compromiso de unión, de poner por delante la defensa de los canarios sobre las diferencias y caminar para acabar la legislatura... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede tiempo adicional) con estabilidad política, que creo que también eso es, en estos momentos, fundamental, es clave para la mejor respuesta ante las circunstancias presentes.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, muchas gracias, señor presidente.

Turno de réplica para los grupos.

Tiene la palabra el Grupo Parlamentario Socialista. Señora Alemán.

La señora ALEMÁN OJEDA: Gracias, presidente, muchas gracias... (Rumores en la sala).

El señor PRESIDENTE: Perdón, perdona...

Sí, señorías, silencio.

Adelante, adelante.

La señora ALEMÁN OJEDA: Gracias, presidente.

No pensaba usar este segundo turno, pero creo que hay cosas importantes que dejar claras en esta segunda oportunidad que nos da este debate de la nacionalidad.

La realpolitik es el consenso, es el diálogo, es el acuerdo y el respeto a los derechos humanos y no nos van a dar lecciones a los socialistas, que además somos un partido internacionalista que ha hecho mucho más por África o por América Latina que otros que ven más la micropolítica o el nacionalismo más localista (aplausos y palmoteos en los escaños). Y claro, claro que defendemos la democracia, por supuesto, defendemos la democracia en todas las partes, en todas las partes, no miremos solo para una de ellas. Solución política justa, duradera, aceptada por las partes, como lo dijo también el presidente Clavijo en el debate del estado de la nacionalidad del año 2017, y de ahí no nos hemos movido.

Insisto, como en mi primera intervención, contextualicemos, contextualicemos. Tiento y tino, le decían al presidente de Canarias en la última reunión del Plan Reactiva. Vamos a esperar esas explicaciones que nos merecemos. No nos vamos a precipitar.

Sigo pensando que la normalización de las relaciones con Marruecos va a beneficiar a Canarias y un efecto inmediato será que muera menos gente en el océano, atravesándolo para llegar a Europa.

Y, señor Campos, le pido el mismo compromiso que tiene con el Sáhara con Canarias y, sobre todo, con las canarias. Ni una sola mujer entre sus referentes canarios, mujeres que también hacemos Canarias, no colabore usted en la invisibilización. Sabandeños, Gofiones, Viera y Clavijo, Pérez Galdós, Alexis Ravelo, y yo le digo: Joaquina de Viera y Clavijo, poetisa, Francisca Espínola Bethencourt, pintora, Dolores Millares, pianista, Ignacia de Lara Henríquez, escritora y política, Mercedes Pinto, escritora y activista... Podría estar los siete minutos y medio que me quedan nombrándole mujeres canarias que han hecho mucho más que otros que se dan golpes en el pecho en esta tierra.

Hablamos de responder, resolver y dar cuenta de la realidad que viven los canarios y las canarias, como decía el presidente, hablamos de la importancia... -yo no los voy a calificar ni como gallinero ni como hooligans, yo respeto las bancadas del resto de fuerzas políticas, ni siquiera voy a caricaturizar de manera sancochera las intervenciones de ninguno de los que me han precedido en el uso de la palabra, ni hoy ni ayer-; decía, responder, resolver y dar cuenta de la realidad que viven los canarios y las canarias.

Importancia de los acuerdos europeos, fundamentales los acuerdos en esos consejos de Europa. Yo creo que la política, más que nunca, nos ha salvado.

Y, señor presidente, me alegra enormemente la sensibilidad de este Gobierno al respecto de la salud mental, algo que ha estado, y aún está, en muchas ocasiones estigmatizado. Normalizar la salud mental y darle cobertura sanitaria nos va a hacer mejores, nos va a preparar mucho mejor para lo que esté por venir.

Y confío en que todas estas circunstancias ajenas que nos están generando tantos efectos colaterales en Canarias se resuelvan lo antes posible.

Sé que preocupa al Gobierno de Canarias esa huelga en el transporte, que ya se están tomando medidas por parte de la consejería con el sector del transporte en Canarias, que ya estuvo tocado por el cero turístico, pero que jamás ha estado solo.

Pero debemos prepararnos para el futuro: vehículos eléctricos, vehículos sin conductor, aceite doméstico que se transforma en biocombustible, drones que hacen repartos logísticos... Debemos prepararnos para el futuro, debemos ser resilientes, pero sobre todo debemos actualizarnos. Así que preparémonos.

Gracias. (Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, muchas gracias, señora Alemán.

Señor Campos.

El señor CAMPOS JIMÉNEZ: Gracias, señor presidente. Señor presidente del Gobierno.

Coincido creo que en el 90 % o 99 % casi de su intervención en esta réplica, en los temas principales.

Obviamente, sí, vamos a seguir manteniendo... Yo no voy a entrar ahora ya en un debate sobre el tema del Sáhara, creo que nuestra posición quedó claramente planteada, usted ha defendido la suya. Solamente un único matiz. Somos conscientes, como decía antes. Lo que aquí se está cuestionando no es la necesidad de restablecer relaciones, lo que se está cuestionando no es sobre la base de que cualquier acuerdo que se haga tendrá que ser con el consenso de las distintas partes; lo que se está cuestionando es que España ya tomó parte. Eso es lo que nosotros cuestionamos. Pero, digo, no voy a extenderme, porque evidentemente creo que ya quedó claro en mi primera intervención y porque creo que además hay grandes retos a los que también hice alusión en mi primera intervención, preocupándome claramente por los canarios y por las canarias. Porque preocuparse por los principales problemas de esta tierra, fundamentalmente que tienen rostro de mujer, hablar de la sanidad, de la necesidad de la educación, del empleo, yo creo que es un claro ejemplo de esa preocupación de nuestra organización.

Por cierto, sí que nombré a referentes mujeres en mi intervención, entre otras a Andrea Abreu o Sara Socas, ambas en mi intervención. Ojalá hubieran sido muchas más, probablemente, al menos tuve la oportunidad de nombrar referentes de esta tierra. No voy a entrar en si tenía que haber nombrado a tres mujeres más o dos hombres menos, no voy a entrar en eso. Ojalá cada vez más mujeres sean protagonistas del futuro de esta tierra, porque creo que como pocas, como pocos, son los que de verdad, durante muchísimo tiempo, en las circunstancias más terribles... Y se lo dice alguien que además viene del sureste, en donde cuando finalmente ellos y ellas iban a los tomateros, cuando se acababa la jornada, él se iba al bar y ella volvía a la casa a atender a la familia, a atender a sus hijos y a preparar lo del día siguiente para al final volver a acompañar a su marido. Soy consciente del papel que han jugado.

Pero no voy a entrar en esa cuestión, cada uno evidentemente..., y soy capaz por supuesto de encajar, de la manera en que nosotros trasladamos nuestra posición, entiendo que el resto plantee sus posicionamientos y soy profundamente respetuoso con ellos.

Creo que con respecto al Sáhara quedó clara en mi primera intervención.

Pero yo quiero centrarme ahora en tres elementos que son fundamentales en esta última parte. Tres elementos que son esenciales, dos de ellos ya los nombré en mi primera intervención y de uno dije, cuando estaba hablando, que quizás no me iba a dar tiempo suficiente para hablar de ese proyecto de país futuro.

El primero, y es un llamamiento que hago al conjunto de los que aquí estamos y es un llamamiento que hago al conjunto de la sociedad canaria, es seguir manteniendo la unidad. Da igual que tengamos diferencias, claro que vamos a tener diferencias, las tenemos entre los que formamos pacto de gobierno, absolutamente legítimas, es más, nos enriquecen, pero seguir manteniendo la unidad.

Yo le he escuchado muchas veces, señor Barragán, cuando dice, bueno, aunque a veces no nos cojan la mano, seguiremos perseverando. Yo le pido que siga perseverando, porque es imprescindible, es imprescindible el papel de cada uno de los partidos, seamos más numerosos o menos, porque a veces también hacemos caso a lo que nos plantean. Y a veces, aunque a veces no se reconozca del todo, al final nos obligan también a tomar iniciativas, aunque no se reconozca. Por tanto, creo que es fundamental el papel de la unidad de esta Cámara, de la sociedad canaria, ante los grandes retos que vienen.

Segundo elemento que para nosotros también es importante. Decía el presidente algo, cuando hablaba un poco de esos grandes referentes en materia cultural, en materia de nuestra historia, que debieran estar en el ámbito educativo. Creo que es una oportunidad que, además, la ley estatal nos brinda a todos, y la ley estatal establece la posibilidad de que las comunidades autónomas puedan desarrollar hasta un cuarenta por ciento de contenidos propios. Y creo que ese es uno de los grandes retos que desde el ámbito de Canarias tenemos que ser capaces de desarrollar, contenidos educativos autocentrados desde nuestra mirada. Es verdad que durante mucho tiempo y obviamente son las calificaciones "periferia, regiones ultraperiféricas, espacio atlántico", es decir, muchísimas denominaciones, y a veces nos olvidamos de que tenemos nuestro propio espacio, que estamos en un lugar concreto y que debemos ser protagonistas de nuestra propia historia, y en el ámbito educativo ese elemento es esencial.

Y una última cuestión para nosotros que es muy relevante, que tiene mucho que ver cuando hablamos del proyecto de futuro de Canarias -lo decía ayer también el portavoz del Grupo Nacionalista Canario-. Se ha hablado en esta Cámara y, de hecho, ya hay una propuesta consensuada para un estudio, una comisión de estudio, y hablo del modelo demográfico en esta tierra. Miren, incluso haciéndolo excepcionalmente bien en todas las áreas, un territorio que en veinte años ha crecido en más de quinientas mil personas, e intentamos compararnos con otro territorio, por ejemplo, como el País Vasco, infinitamente con mejores parámetros en todos los ámbitos, en esos mismos veinte años solo creció en 100 000 personas, nos da también la dimensión de lo difícil que va a ser corregir muchos de nuestros indicadores, casi imposible. Por muchos empleos que generemos, por mucho esfuerzo para combatir la pobreza, por mucha inversión que hagamos en el ámbito educativo, en el ámbito sanitario, seguimos incorporando una cantidad importante de población que demanda todos esos servicios.

El modelo demográfico debe ser uno de los grandes elementos, cuando hablaba de proyecto de país, a colocar en el gran debate político, que tenemos que hacerlo con mucha serenidad, sin posiciones ya prefijadas, no desde aquí no cabe nadie y no reduciéndolo exclusivamente a la llegada de personas, que también, habría que buscar la fórmula, sino también al modelo productivo, porque no es razonable ni creíble que intentemos convencer a algunos de que aquí dos millones ciento y pico mil son muchos y dentro de unos cuatro, cinco, diez años dos millones y medio será insostenible mientras abogamos por que ahora, ojalá, bueno, poco a poco, digamos, nuestro sector turístico vaya avanzando y recuperemos cifras a lo mejor en las que nos movíamos hace poco, que eran 16 millones y luego 18 y luego 25 y luego... No sería coherente. Por tanto, el modelo demográfico debe estar trabajado desde todos esos múltiples aspectos.

Y un último, y es donde ya sí quiero cerrar, mire, nosotros tenemos, dentro de unos días vamos a celebrar el V Congreso Nacional de Nueva Canarias. Ahí vamos a reafirmar nuestras posiciones, nuestros principios, nuestros equipos. Muchas de las cuestiones que hemos abordado aquí se trasladarán allí. Otros acaban de celebrar sus congresos a nivel nacional, canario, están en el espacio insular, en el espacio local. Yo les digo algunas de las grandes claves que nosotros vamos a abordar en ese congreso, algunas las hemos planteado ya, están obviamente en nuestro discurso; hablo de ese modelo demográfico, la apuesta por el cambio climático, la soberanía energética, la soberanía alimentaria, como elementos esenciales, una política de derechos humanos claramente definida en el ámbito de las políticas migratorias, la necesidad de tener esa política propia, seguir avanzando en la lucha contra la pobreza, en ese gran colchón social en todos los ámbitos, en la apuesta por nuestra cultura, por supuesto papel central va a tener el pueblo saharaui en un momento como este también. Pero yo les pediría que, con independencia de las posiciones en cada uno de estos ámbitos, incluso algunas no compartiéndolas, hay un elemento que nosotros vamos a abordar con especial fuerza en ese congreso nacional que vamos a celebrar en breve, desde una visión canarista, progresista, pero me da igual que sea desde una visión con un enfoque mucho más estatal, me da exactamente lo mismo, más de izquierda o derecha, les pediría un posicionamiento común sobre un elemento que tenemos que trabajar de manera unida. Tenemos que ser capaces de convencer al conjunto de la sociedad canaria de que algo que sí que no podemos permitirnos, porque nuestra sociedad nunca, nunca, fue así, es permitir que los que día a día trabajan para enfrentarnos, sobre todo para enfrentar a los pobres contra los más pobres, la base de su existencia simplemente es el discurso del odio contra el otro y contra todos, de manera muy especial contra aquellos que tenemos singularidades, como las que tenemos, independientemente de que seamos nacionalistas o no, en la defensa de nuestro fuero, de nuestros derechos, lo cuestionan absolutamente todo... Por tanto, la lucha clara, decidida, el mensaje inequívoco al conjunto de la sociedad canaria de freno, de no permitirnos, de no tolerar que ese odio llegue a nuestras tierras.

A día de hoy ni una sola de las instituciones canarias tiene a un representante de la extrema derecha en sus filas, en sus instituciones y esperemos que con el trabajo conjunto podamos hacer que eso siga siendo así.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Campos.

Turno para el Grupo Parlamentario Sí Podemos Canarias. Señor Marrero.

Adelante, tiene la palabra.

El señor MARRERO MORALES: En primer lugar, agradecer, señor presidente, su compromiso con la transformación de nuestra sociedad hacia metas más igualitarias, que es comúnmente compartido por el conjunto del Gobierno, y no solo con el presente sino también con el futuro; y también su alusión en la respuesta que daba mirando hacia el pasado, en el sentido de atender a las víctimas del franquismo, a los valores democráticos y, de manera especial, a la necesidad de dar respuesta a esa exigencia de verdad, de justicia y de reparación.

En el día de mañana, con las resoluciones, vamos a plantear diversas resoluciones que significan darle continuidad al programa de gobierno, profundizar aún más y, ante los nuevos retos que han ido surgiendo, buscar también nuevas soluciones y salidas a la situación.

Así pues, en universidades, cultura y deportes vamos a plantear cuestiones sobre patrimonio y catálogo de vestigios franquistas, por ejemplo, para que se siga impulsando; o el 1,5 % en el presupuesto de cultura, artes escénicas, tejido audiovisual, la continuidad de la ley de bibliotecas o el programa Europa Creativa; o darle cumplimiento a la ley canaria de educación, que sigue siendo un reto pendiente de este Gobierno en estos momentos; o hablar sobre la importancia del deporte y de la inclusividad con las personas trans e intersexuales.

En derechos sociales, queremos seguir planteando avances sobre el plan canario de personas mayores, el IRPF para 2022, el plan de discapacidad, el Plan Corresponsables, los datos y el lenguaje en el Istac, el impulso a leyes como la de juventud, infancia, violencia de género o la mejora de la dependencia.

En sanidad, queremos hablar de algo importante, que es, por ejemplo, la salud mental, que es importante atenderla; la interrupción voluntaria del embarazo en el conjunto de la sanidad pública en todas las islas; las escuelas infantiles en los hospitales; las urgencias hospitalarias u otras; la desprivatización y la recuperación para lo público de determinados servicios; y el pacto estatal de atención sanitaria para instar a que se avance en él.

Y en cuestiones como la transición ecológica queremos poner coto a los beneficios caídos del cielo de las eléctricas e impulsar una empresa pública de energía; que se desista de proyectos como las jaulas marinas en Lanzarote; o el centro de excelencia universitaria que antes le planteaba; la creación de la agencia canaria de agua y energía, que compartimos; las maretas y aljibes en Fuerteventura y Lanzarote; o algo tan importante como es el ciclo integral del agua en las islas, que se termine de cerrar.

En obras públicas, queremos apostar por la movilidad ciclista, la ley de vivienda canaria, carriles bus-VAO, como por ejemplo el de Adeje-aeropuerto del sur, que es necesario, el sistema viario de mejoras, etcétera.

Queremos también que sigamos avanzando en la lucha contra el fraude fiscal y la política fiscal progresiva; en el empleo estable y de calidad, basado en el diálogo, en mucho diálogo entre las partes y en los acuerdos; en la inserción laboral a colectivos vulnerables; o en asuntos como también la cadena alimentaria, el Plan Forrajero, la pesca ilegal o la mesa del REA. Son cuestiones, todas ellas, que nos preocupan y que creemos que son perfectibles todas ellas y podemos mejorar a lo largo de lo que nos queda de legislatura, así como en la diversificación de la oferta turística o en inversiones en I+D+i.

Lo mismo nos pasa con gobernación, justicia y seguridad, con el tema de la reconstrucción de La Palma. Creemos que es importante esa unidad y esa coordinación entre todos los grupos. Seguir profundizando y mejorando en el autogobierno y en la cogobernanza, que creemos que ha sido importante en esta legislatura la participación de los distintos sectores.

Queremos perfeccionar más aún el REF. Estamos descontentos en parte con él, lo seguimos defendiendo pero queremos que se perfeccione para que sea útil para el empleo estable en las islas; así como la Reserva de Inversiones para Canarias; o la consideración y la defensa ante Europa de nuestra condición de región ultraperiférica y el mantenimiento de nuestros derechos recogidos en el tratado de la Unión Europea.

Nos preocupa la regularización del personal de las administraciones públicas. Sabemos que es una preocupación general del propio Gobierno y que se le intente seguir buscando las salidas más adecuadas para que, de alguna manera, no haya fraude en el empleo de alguna forma y se queden estables aquellas personas que son un capital acumulado para las administraciones.

Lo mismo nos pasa con adelantar o anticipar o ir avanzando ya en los programas Next Generation, que nos parece fundamental utilizar todos esos fondos para aprovechar esta oportunidad, posiblemente única en estos tiempos, para avanzar en la sociedad canaria.

O nos siguen preocupando asuntos, ya antes lo planteaba también, como el asunto de menores no acompañados, que sigue siendo algo que está sin solucionar definitivamente en este país y en el resto de la Unión Europea tampoco, pero en general, con respecto a la inmigración, centramos este aspecto ahí.

Hay una ley que se aprobó, y de la cual yo fui ponente en la legislatura pasada, sobre menores robados, que tenemos que desarrollarla a la par que la ley de memoria histórica. Parece que se va muriendo la gente, no se consigue encontrar y hay mucha gente que busca unos a sus hijos e hijas y otros a sus padres o madres, y tenemos que facilitar ese encuentro.

Así como hacer algo más allá con la memoria histórica, en el sentido, por ejemplo, de las víctimas del holocausto de Canarias o las víctimas del franquismo en Canarias. Creemos que es necesario que haya un reconocimiento por parte de este Gobierno y por parte de las instituciones canarias a las víctimas que murieron en los campos de concentración europeos en la II Guerra Mundial o a las víctimas que en Canarias también sufrieron cárcel, persecución, muerte incluso, en la larga dictadura.

Y, finalmente, nos reafirmamos respecto a las resoluciones en lo que significa la cuestión del Sáhara. Es decir, consideramos que la PNL que aprobamos es un punto de partida, en el que nos unimos las distintas fuerzas que estamos en este Parlamento, nosotros así lo defendemos, y creemos que marca diferencias respecto a las políticas del Estado y de la Unión Europea. Por tanto, esas exigencias de cumplimiento del derecho de autodeterminación y el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas no es que sean de hace cuarenta años solo, de cuarenta y siete años que llevan, es que han sido aprobadas hasta en los años últimos por parte de la Organización de Naciones Unidas. Por tanto, consideramos que es fundamental ese asunto.

Antes, con la finalidad de que también se introdujeran posibles enmiendas de otros grupos, nombraba algo de lo que en esta ocasión pensaba hacer uso, como es el asunto de la mutilación genital femenina, porque consideramos que es necesario que se avance en eso en nuestra sociedad y no se siga permitiendo este tipo de lacras.

Trabajar sobre cuestiones como la radiotelevisión canaria, nos parece importante darle un impulso, darle un impulso. Se ha construido y se está construyendo una Televisión Canaria mucho más rigurosa, pero consideramos que tenemos que seguir avanzando en ese mandato marco en los próximos meses para ultimar el proceso.

Respecto a la cuestión del reto demográfico, nos parece fundamental, ya que existe una descompensación en las distintas islas de población y, por tanto, es algo que tenemos que asumir y ver qué medidas se adoptan al respecto.

Y, respecto a leyes futuras que antes nombraba, tenemos, por un lado, la ley de renta de ciudadanía, que esperemos que en este Parlamento se acelere el procedimiento; pero también las de infancia y familia, la de juventud, la de violencia de género.

Y seguir trabajando por el ejercicio del derecho al aborto en la sanidad pública en toda la sanidad pública de Canarias.

Del mismo modo, creemos que se debe crear el observatorio de la muerte digna en Canarias; terminar de aprobar ese catálogo de prestaciones sociales que tenemos y servicios sociales.

Seguimos reafirmando nuestro compromiso con la lucha contra la trata y la explotación sexual y con el fin de la prostitución y la trata de personas.

Al igual que seguimos abundando en la igualdad laboral. Esa brecha laboral se tiene que ir cerrando cada vez más, que es brecha salarial también y que al final se convierte en brecha social.

Y abogar por la igualdad real. En nuestro trabajo como legisladores y legisladoras tenemos que seguir teniendo en cuenta mejorar la vida de la gente y primar lo que nos une antes que lo que nos diferencia. Es decir, por encima de los planteamientos que tenga cada uno en los procesos electorales, de nuestro contrato electoral con la sociedad, seguro que tenemos mucho más en común que muchas más cuestiones que nos diferencian. Y, por tanto, tenemos que abogar por solucionar en primer lugar los problemas de la gente y abogar por lo común, cada uno desde su perspectiva, cada uno defendiendo el planteamiento que tiene... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede un tiempo adicional) apostamos, vamos a seguir apostando realmente por lo que significa, por lo que significa la unidad, la unidad para salir de estas crisis.

Es decir, tenemos mucha tarea por delante. Gobernar en tiempos de bonanza es relativamente fácil, gobernar en tiempos de crisis y de muchas crisis conjuntas es complejo, pero es un reto interesante a abordar. Estamos convencidos de que la solvencia, la responsabilidad y la eficacia con que este Gobierno va a seguir afrontando nuevos retos desde la unidad, que seguimos reclamando, y el apoyo de la sociedad canaria para salir juntos van a tener éxito.

Por tanto, simplemente plantearles que deseamos paz, deseamos a todos salud, alegría y larga vida.

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Marrero.

Turno para el Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera. Señor Curbelo.

El señor CURBELO CURBELO: Muchas gracias, presidente. Señorías.

En estos diez minutos de gracia voy a hacer algunas reflexiones que creo de interés.

Miren, gobernar es complejo porque entraña en sí una gran vocación y una gran responsabilidad, pero gobernar en épocas de crisis todavía mucho más. Y les voy a hacer una reflexión... Siempre... (Comentarios desde los escaños. El señor diputado se retira la mascarilla). Es que ya a veces la llevo hasta a la cama, la mascarilla. (Risas en la sala).

Decía que gobernar exige a las personas una gran responsabilidad y una gran vocación y a veces tenemos la tentación los partidos políticos de incorporar muchas cuotas y muchas cosas y después fallamos en algo. Por eso quiero yo saludar a mi diputada Melodie y a mi diputado Jesús, o a nuestros diputados del grupo parlamentario, por el trabajo que hacen cada día, que lo hacen con responsabilidad y también lo hacen con vocación.

Los partidos políticos habitualmente se estresan en exceso y por eso es difícil llegar al acuerdo. Cuatro años de legislatura desde luego para este Gobierno son muy pocos, porque la adversidad y las calamidades que ha tenido son tantas... Es que yo las cuento desde 2019, desde julio de 2019 en que tomó posesión el Gobierno. Y, miren, yo con el Gobierno tengo cercanía, tengo proximidad, le aplico rigor a las cosas, soy exigente, pero también quiero ser consecuente con las dificultades que ha habido. Por tanto, digo todo esto porque a veces la política, en los cuatro años en los que gobernamos, nos estresamos en exceso. Y voy a hacer una reflexión que me parece de interés en este momento, además de agradecer, presidente, las respuestas que nos ha dado.

Miren, cuatro años son muy pocos para planificar. En esta comunidad autónoma, como somos, como vivimos en islas, tiene que planificar cada isla y cada isla planifica en función del plan insular de ordenación del territorio de cada cual. Y digo todo esto porque hay islas que tienen 10 000 habitantes, otras como La Gomera, 21 000 habitantes y otras tienen 950 000. Y, ojo, los que tienen 950 000, o las islas que tienen 950 000 habitantes, si la planificación no la prevén con rigor para hacer sostenible el crecimiento demográfico y usar adecuadamente el territorio de forma sostenible, crecen de una forma que después llega a ser descontrolado. Por tanto, el debate de unas reflexiones acerca del crecimiento, de los límites al crecimiento, se tiene que hacer, nos guste o no, ¡se tiene que hacer! Yo recuerdo visitar una isla que tenía 5000 habitantes en origen y, desde el punto de vista del crecimiento turístico, el puerto era para llegar grandes cruceros. Turistas y turistas que en nuestra comunidad autónoma son la savia de la vida económica y, por tanto, tenemos que contar con ellos sí o sí, pero tiene que haber planificación, no podemos crecer de forma desmedida. Por tanto, esta reflexión tenemos que hacerla y coordinar, alguien la tiene que hacer, lógicamente debe ser el área respectiva del Gobierno para planificar con ayuntamientos y cabildos esta realidad, porque además hay un desequilibrio absolutamente desmedido.

El reparto de la riqueza en Canarias no está equilibrado. El sur y los municipios turísticos, a quienes les profeso mi afecto por la dinamización económica, siguen creciendo. Yo, cuando vengo de La Gomera hacia Santa Cruz, siempre enfrente me encuentro una cola muy larga. Por eso antes decía la necesidad de hablar de algún tipo de transporte y que ocupe lo menos posible la superficie del territorio, que es escaso, que tenemos. Pero, bueno, esta reflexión me parece que es de interés.

En segundo lugar, en este país, estimado presidente del Gobierno, nadie quiere hacer, nadie quiere hacer ni afrontar la reforma en la Administración pública y tenemos una Administración pública que es un problema para la respuesta a la ciudadanía. Prueba de ello es que, cuando tuvimos que hacer el reparto para nuestras pequeñas empresas y autónomos de los 1144 millones de euros, tuvimos que hacerlo de forma extraordinaria con las cámaras de comercio. Bienvenidas sean las cámaras de comercio, que hicieron una labor impresionante, pero la Administración pública...

Yo, que enfermó el secretario del Cabildo de La Gomera -gracias, estimado Julio-, para buscar a alguien que se ocupara de la secretaría, tuve que sobrevolar toda Canarias para ver cómo lo podía hacer. Estas cosas, que tienen importancia en el debate del estado de la nacionalidad, habitualmente las pasamos de puntillas y alguien lo tiene que hacer. Yo sé que, desde el punto de vista político, los partidos políticos, como son millones y millones de funcionarios -yo soy también funcionario, afortunadamente jubilado ya-, como son tantos, nadie le quiere poner el cascabel al gato, pero un día hay que hacerlo, nos guste o no.

En segundo lugar, creo que los ayuntamientos, tenemos que establecer cooperación con ellos, me parece razonable que lo hagamos, estimada consejera de asuntos sociales, porque ellos son los que van a... lo han hecho ya, pero son ahora los que tienen que afrontar frente a la ciudadanía o junto a la ciudadanía el atendimiento de los problemas más acuciantes desde el punto de vista social, independientemente de la tarea del Gobierno, ¡faltaría más! Por eso es conveniente que haya un acercamiento para atender esa realidad.

Del mismo modo que hoy quiero recordar que es un alivio extraordinario, presidente del Gobierno y consejero económico, el Fondo de Desarrollo de Canarias, recuerden el Fondo de Desarrollo de Canarias, que yo lo quise antes, lo quiero ahora y lo quiero pasado mañana, pero mucha gente no lo quería, y ese fondo se distribuyó no solo pensando, no solo pensando en el criterio demográfico o los criterios habituales de reparto, sino tendiendo también una mano a las islas no capitalinas. Y ahora debemos hacer un esfuerzo para que las islas no capitalinas que tienen serias dificultades del combustible. Recuerden que consignamos recursos para atender las necesidades de las islas no capitalinas en el sobrecoste de la doble insularidad, pues no era posible porque es que, claro, la competencia, el tribunal de la competencia, lo impide. Alguna cosa tenemos que hacer, alguna cosa tenemos que hacer.

Del mismo modo que tenemos que hacer centros, centros sociosanitarios, porque en estas islas solo quedan, en la inmensa mayoría de la población, el 22 % es mayor de 65 años.

Por tanto, todas estas reflexiones, que me parecen interesantes, tenemos que ponerlas en valor.

Y lo que no podemos, de ninguna de las maneras, dejar pasar desapercibido es la transición energética, estimado Valbuena. La transición energética, del mismo modo que la digital, son fundamentales para la sociedad del futuro y tenemos las herramientas en nuestras manos. Sé que se están dando pasos importantes, en La Gomera vamos camino, en esa dirección, con los parques eólicos, con la energía solar fotovoltaica. Que, por cierto, decía la representante del Partido Socialista, del convenio con el ITC vinculado a estas energías, que había sido... Fíjense si se equivoca que viene desde la época de Clavijo. Hay que estar al día en las cosas también. Digo todo esto para no errar, porque da igual de dónde venga o cómo viene, lo importante es que se haga, lo importante es que la transición energética llegue.

Desde el punto de vista de la sanidad -me alegra, presidente-, ustedes no se pueden imaginar -la mayoría sí, no todos- lo que supone, y sobre todo después de la pandemia, el problema de la salud mental en el ámbito sanitario. Debemos hacer un esfuerzo especial. Del mismo modo que debemos hacer un esfuerzo especial porque incumplimos el 5 % en materia de educación vinculado al PIB.

En La Palma, vuelvo a reiterar lo mismo, necesitamos unidad. La reconstrucción de la isla de La Palma no es una reconstrucción cualquiera, lleva muchos medios, lleva también tiempo. Creo que se han dado pasos importantes, pero requiere unidad, porque esa es la reconstrucción donde nos vamos a ver todos, en el espejo como país. Es una reconstrucción de país, no es una reconstrucción ni del Partido Socialista, que también, es una reconstrucción de todos.

Y, miren, yo creo que es importante que termine diciendo que esta crisis, por favor, la crisis que no la paguen nunca, como de hecho ha ocurrido hasta aquí, que no la paguen nunca esta crisis producto de la guerra y de la inflación, que no la paguen los más débiles, que no la paguen las empresas más débiles, a las que tenemos que intentar echar una mano, presidente... (se produce el corte del sonido por el sistema automático de cómputo del tiempo y la Presidencia le concede tiempo adicional) con las propuestas que,efectivamente, el Gobierno está trabajando en ellas y que estoy seguro de que las hará públicas a la mayor brevedad. Por eso yo creo que es interesante que todos sumemos y también es importante que los distintos grupos de la oposición, algunos lo han expresado ya y yo he dicho en tono irónico que ojalá sea para que de verdad se produzca. Pero es que necesitamos unidad, en este momento de crisis económica y social la unidad es fundamental y yo creo que el Gobierno y el presidente del Gobierno también necesitan apoyo en este camino.

Así que muchas gracias por las respuestas que se han dado, ánimos para afrontar los retos próximos, que no son pocos, y que lógicamente... Lo que sí le pido es que ya no haga ninguna, no se aventure a leer el futuro, dejémoslo quieto...

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Curbelo.

Turno de cierre para el señor presidente.

Adelante.

El señor PRESIDENTE DE CANARIAS (Torres Pérez): Gracias, presidente.

Cierro ya, con este turno de réplica a los grupos que apoyan al Gobierno, esta parte del debate de la nacionalidad, que continúa esta tarde con el trabajo de los grupos y mañana con las propuestas de resolución.

Y quiero decir que, con los últimos datos oficiales -sabremos la próxima semana los del mes de marzo-, en febrero del año 2021 había 283 000 personas en el paro, ahora hay 205 000; había, en el año 2021, 768 000 personas afiliadas a la Seguridad Social, en febrero del 2022 habían aumentado a 823 000. Estamos hablando de unas sesenta mil personas más en la Seguridad Social, estamos hablando de 30 000 personas menos desempleadas, y esto lo tenemos que mantener o mejorar.

Junto a ello, también, ahí están los índices de pobreza, con un estudio que incluye el año 2020 y 2021, también el 2022, lo que llevamos. Hay que reconocer que con 20 puntos de PIB que perdió Canarias, con cero turístico, con 4 millones de turistas, si no me equivoco, que llegaron en el año 2020, 4,3, y en el 2021 se elevaron a 7-8 millones, cuando habíamos tenido cada año entre 15 y 16 millones de turistas, a pesar de eso, lamentando que aumentó la pobreza un punto, fue de las comunidades donde menos creció la pobreza. Y tenemos que conseguir que la Agenda 2030 se cumpla y que esos parámetros también mejoren.

Sabemos que no va a ser fácil por la coyuntura que tenemos en Ucrania. Del mismo modo que creo que no habría duda de que, tal y como venía Canarias desde el mes de septiembre-octubre, sin estos acontecimientos de los que hemos tenido conocimiento recientemente, la evolución hubiese seguido caminando de manera ascendente, pero hay que enfrentarse a las circunstancias que aparecen.

Antes decía lo importante que es la Unión Europea y, fíjense, en aquella reunión que hubo en el año 2020 se suspendieron las reglas fiscales del año 2021, algo que hemos vuelto a pedir, que ha sido fundamental para mantener los servicios públicos en todas las administraciones de nuestro país, junto a otras medidas de inyección para las empresas, para los sectores afectados. Mañana empieza un importante Consejo Europeo en el que se van a tomar decisiones relevantes. Acabamos de saber que la Comisión Europea va a proponer mañana, a través de los medios de comunicación nos lo trasladan, hasta seis puntos, poner un tope al precio del gas, compensar los costes de producción de las empresas que generan electricidad con combustión fósil, que se ponga un precio máximo a las empresas que operan en el sector mayorista, que se garanticen los precios reducidos para los sectores vulnerables y que se reduzcan los beneficios de los que ahora están ganando más, y esto vaya a los consumidores con el asunto energético. Estas medidas mañana irán al Consejo Europeo y, junto a ello, el Gobierno central y las comunidades tomarán también sus decisiones. Ya lo decíamos ayer, ya lo exponíamos al Gobierno de España y al resto de las comunidades, mutualizar la deuda, que aumenten las subvenciones a los transportistas, que utilicemos el Posei adicional, que haya un fondo, como hubo un fondo COVID, un fondo Ucrania para las comunidades, para mantener, como hicimos en el año 2021, los servicios públicos, que se ayude al transporte para Canarias por ser territorio alejado, fragmentado y extrapeninsular o que también se toquen las tasas portuarias o aeroportuarias, entre otras.

Y, junto a ello -y ya para terminar, señorías-, decir que, reconociendo el momento difícil, también hay que valorar algunas cuestiones que, quizás, el paso del tiempo hace que desaparezcan de nuestra retina o de nuestra memoria.

Hace un año no podíamos estar todos aquí, en este salón de plenos. Se nos permitió hablar desde la tribuna sin la mascarilla. Ya la mascarilla, pronto, cuando lo decida el Gobierno de España, dejará de utilizarse en los espacios del interior. Hace justo un año, un 5 % de la población estaba inmunizado y eran los que tenían más de 16 años; hoy está inmunizado un 84 % y son los que tienen más de 5 años. Es decir, que entonces apenas teníamos un baluarte de defensa del virus como era la vacuna, introducida en nuestra comunidad, hoy somos mucho más resistentes porque se ha hecho un magnífico trabajo. Hace un año eran los meses de los toques de queda, de las restricciones duras que tomaba el Gobierno de Canarias, de los aforos limitados, de la suspensión de los actos, de las medidas difíciles, de las exigencias de los empresarios y de los autónomos, del cierre de las empresas. Hace un año era el momento en el que alcanzábamos cerca de trescientos mil desempleados. Y, por tanto, reconociendo que este momento es muy difícil, también lo han sido los que hemos tenido en el inmediato pasado.

Yo creo que este debate de la nacionalidad, que creo que ha estado a la altura de lo que es el Parlamento de Canarias, tanto los partidos de la oposición como los partidos del Gobierno... Se enfrenta, como Parlamento, a otro año complicado y difícil, pero han sido así también los anteriores.

Decir que hoy Canarias está más preparada es reconocer las cosas, como estamos, ante las adversidades. La toma de decisiones la haremos de manera conjunta, deben funcionar. Hay gran parte de la población que está en estos momentos pidiendo que se tomen medidas ante el encarecimiento de las materias primas, los carburantes y la situación social y económica producida por un conflicto bélico en el seno de Europa, del viejo continente, pero también, diciendo eso, tengamos memoria, recordemos lo mal que se ha pasado, los avances que se han dado y que esto sea también fortaleza para enfrentarnos a los momentos duros que tenemos por delante.

Lo he dicho en más de una ocasión: es muy sencillo gobernar en tiempos fáciles, es mucho más complicado en momentos duros, y, diciendo eso, nos han tocado momentos duros. Que cuando los momentos sean buenos aprendamos de este momento y cambiemos las cosas, para que no se reproduzca una desigualdad económica en nuestra tierra. Corrijamos, que no es ir contra ningún Gobierno anterior, porque han estado muchas organizaciones políticas en esos gobiernos de esta comunidad, pero que aprendamos que estas crisis actuales, como lo aprendió Europa, diciendo que no podía volver a atacar con sus medidas económicas a los sectores más desfavorecidos de la sociedad europea, española y canaria, sirvan para que en el inmediato futuro, cuando las cosas vengan con otro color, cuando la esperanza sea ya una evidencia, cuando se acabe la zozobra y los miedos que hoy existen, porque sí que hay miedo, demos la vuelta a la Canarias que tenemos hoy.

Nuestra responsabilidad desde el primer momento de la legislatura hasta el último día será entregar una Canarias mejor que la que recogimos. Eso es lo que tiene que hacer cualquier Gobierno que se precie y esa va a ser nuestra voluntad y nuestro esfuerzo. Creemos que lo podemos conseguir. No sabemos con quiénes nos tenemos que enfrentar, ahora a una situación económica difícil, pero que no quede duda de que este Gobierno hará todo lo posible para entregar una Canarias mejor que la que cogimos y exigiremos, estemos o no en el Gobierno, que el futuro Gobierno de Canarias haga también lo mismo, que entregue cuando acabe una Canarias mejor que la que recoja cuando este Gobierno acabe, porque eso será beneficio no para el Gobierno presente ni futuro, sino será un beneficio para la sociedad canaria, y eso es lo que nos debe mover como interés general a quienes estamos en la cosa pública.

Muchas gracias.

(Aplausos).

El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor presidente.

Finalizamos... (Prosiguen los aplausos), finalizamos aquí el debate, que no el pleno. Suspendemos la sesión hasta mañana a las nueve de la mañana.

Recordarles a los grupos parlamentarios que el plazo para la presentación a la Mesa de las propuestas de resolución vence a las catorce treinta.

Muchas gracias.

(Se suspende la sesión a las trece horas y tres minutos).